Cortesía en eventos

[gabriela miranda mena]

Queridos hermanos en La Trinidad:

Entre los muchos eventos a los que sistimos diariamente, podríamos citar:
La santa misa, conciertos, clases especiales, reuniones, recitales de música, etc.

Y ciertamente hay maneras para retirarnos del lugar, sin causar molestia, mortificación, desagrado, o hacer sentir al exponente, sacerdote, maestro, artista o anfitrion, muy mal.

A veces, cuando todavía no concluye el acto al cual asistimos, sin ninguna consideración, y haciendo un ruido que pareciera que estamos en la calle, o en algún mercado, salimos, dejando con la palabra aún en la boca a quien se dirige a nosotros los oyentes, o si es un músico, cuando todavía no termina de tocar o de cantar, y si es algún concierto con orquesta, sin esperar a que termine el movimiento en el cual estan tocando.



Todo terminara ahí, pero no; es en extremo incivilizado, que cuando alguna persona o personas están dirigiéndose a nosotros de la manera que sea, puede ser cantando, tocando, hablando, rezando, nosotros a nuestra vez nos pongamos a hablar con nuestr@ compañer@ de asiento, ignorando a quien está en ese momento, haciendo uso de la palabra, o interpretando alguna obra o canción; pensemos queridos hermanos que en ese momento, quien se dirige a nosotros está abriendo su alma y su sensibilidad para complacernos, y es una humillación la que cometemos al ignorarl@ para estar en comentarios intracendentes o que al menos no son el momento de tratar, ni siquiera que lo hagamos al oído ( que también es una falta de educación hacerlo ), pues se presta para pensar que estan criticando a alguien o a quien esta al frente.
O algunas veces hacen ruidos que son totalmente impropios como papeles, los tacones ruidosos al entrar ( ya tarde, falta grande de cortesía ), etc. etc.

También, es frecuente que personas que están en el templo, o crucen la pierna ( falta de respeto a Dios N. S. ), o pongan los brazos detráz de la banca en la cual estan sentados, ( como si estubieran en algún parque ), o con las priernas extendidas ( actitud en extremo incorrecta en el templo ), o con el celular prendido, corriendo el riezgo de que suene cuando está la Santa misa , o cualquiera de los otros eventos antes mencionados.
Nuestra actitud en estos casos debe ser de completo silencio, prestando total atención a lo que está ocurriendo, y si por alguna urgencia necesitamos salir o distraernos, que sea lo más discret@ posible, procurando pasar desapercibidos.

Queridos hermanos, procuremos mejorar nuesto comportamiento, pues esto que les menciono, lima muchas asperezas, pues provoca coraje, humillación, y es una falta de caridad hacia nuestros hermanos, ya que con nuestra actitud no los estamos tomando en cuenta como ellos se merecen aparte de que habla muy mal de la educación que tenemos.

Si pensamos que no vamos a poder aguantar la totalidad del evento al cual vamos, pues es mejor no asistir, y de hacerlo, hagámoslo correctamente, y aún cuando a donde asistamos no sea de nuestro agrado, porque no resultó como esperábamos, pues hagamos un esfuerzo, y comportémonos civilizadamente.

Me despido en La Santísima Trinidad
_________________
GABRIELA MIRANDA MENA