Foros de discusión de Catholic.net :: Ver tema - Tratado de purgatorio, de Santa Catalina de Génova
Foros de discusión
El lugar de encuentro de los católicos en la red
Ir a Catholic.net


Importante: Estos foros fueron cerrados en julio de 2009, y se conservan únicamente como banco de datos de todas las participaciones, si usted quiere participar en los nuevos foros solo de click aquí.


Tratado de purgatorio, de Santa Catalina de Génova
Ir a página Anterior  1, 2
 
Publicar nuevo tema   Este tema está cerrado y no puede editar mensajes o responder    Foros de discusión -> Vida y escritos de los Santos
Ver tema anterior :: Ver tema siguiente  
Autor Mensaje
Leandro del Santo Rosario
Moderador
Moderador


Registrado: 24 Mar 2006
Mensajes: 3567
Ubicación: Buenos Aires, Argentina.

MensajePublicado: Mar Abr 24, 2007 2:40 pm    Asunto:
Tema: Tratado de purgatorio, de Santa Catalina de Génova
Responder citando

CAPÍTULO XVI.

Veo a las almas que sufren los dolores del Purgatorio tener ante sus ojos dos trabajos de Dios:

Primero, ellas se ven sufriendo dolor de buena gana, y cuando consideran sus propios desiertos y reconocen cómo han afligido a Dios, les parece que Él les ha tenido una gran misericordia, porque si Su bondad no hubiera templado la justicia con la misericordia, satisfaciendo la misma con la preciosa sangre de Jesucristo, un pecado merecería mil infiernos perpetuos. Y por consiguiente las almas sufren el dolor de buena gana, y no lo dejarían por nada, sabiendo que ellas lo merecen totalmente y que esto ha sido bien ordenado, y no se quejan de Dios, sino aceptan su voluntad.

El segundo trabajo que ven es la felicidad que sienten cuando contemplan la ordenanza de Dios y el amor y misericordia con que Él trabaja en el alma.

En un instante Dios imprime estas dos visiones en sus mentes, y porque ellas están en la gracia son conscientes de estas visiones y las entienden como son, en la medida de su capacidad. Así una gran felicidad se les concede que nunca les falta; más bien crece cuando tienen a Dios más cerca. Estas almas no ven estas imágenes en sí mismas sino en Dios, en Quien están mucho más interesadas que en los dolores que sufren, y de Quien tienen mucho tan gran beneficio que pierde toda comparación con sus dolores. Cada destello que pueden tenerse de Dios cualquier dolor o alegría que un hombre puede sentir es excedido. Sin embargo, aunque excede el dolor y la alegría de estas almas, no los disminuye en absoluto.
_________________

+ Si rezas el rosario diario o tienes el firme propósito de comenzar esta práctica de vida de santidad, únete al grupo en el Facebook: http://www.facebook.com/group.php?gid=65358051689 +++ A.M.D.G.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Visitar sitio web del autor MSN Messenger
Luis E Melgar
Asiduo


Registrado: 26 Jun 2006
Mensajes: 420
Ubicación: El Salvador

MensajePublicado: Dom Abr 29, 2007 4:27 pm    Asunto:
Tema: Tratado de purgatorio, de Santa Catalina de Génova
Responder citando

Leandro del Santo Rosario escribió:
y pensar que la mayoría tendrá que vérselas allí, y durante muuuchos años!


no se si estoy equivocado, pero no se puede hablar de TIEMPO en el plano espiritual, donde el tiempo y el espacio no deberían jugar papel alguno.

me equivoco?

quiza sería mas claro decir, que nos mantendremos en ese estado hasta que nos hallamos purificado completamente.

solo una aclaracion de redaccion para saber si he entendido bien el dogma.

Smile

Saludos
_________________
θεου εστιν καθολικο
Teos eimi kazolikó
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
Leandro del Santo Rosario
Moderador
Moderador


Registrado: 24 Mar 2006
Mensajes: 3567
Ubicación: Buenos Aires, Argentina.

MensajePublicado: Dom Jul 15, 2007 8:30 pm    Asunto:
Tema: Tratado de purgatorio, de Santa Catalina de Génova
Responder citando

CAPÍTULO XVII.

Esta forma de purgación que yo veo en las almas en el Purgatorio, las siento en mi propia mente. En los últimos dos años he sentido la mayoría; todos los días las veo y siento más claramente. Veo mi alma dentro de este cuerpo como en un purgatorio, formada como es el verdadero Purgatorio, pero tan medido que el cuerpo puede soportarlo y no puede morirse.

Veo a mi espíritu extrañado de todas las cosas, incluso de las cosas espirituales, que pueden alimentarlo como la alegría, deleite y consuelo, y sin poder para disfrutar algo, espiritual o temporal, por voluntad o mente o memoria, que me permita decir que una cosa me contenta más que otra.

Interiormente me encuentro como si estuviera sitiada. Todas las cosas por las cuales la vida espiritual o corporal es refrescada han sido, poco a poco, tomadas de mi interior, que sabe que se han ido. Pero tan odiosas y detestables son estas cosas, como son conocidas por el espíritu, que se han ido para nunca más volver. Esto es debido al instinto del espíritu a librarse de cualquier cosa que impida su perfección; así de duro es él para cumplir su propósito de guiarse a cualquier lugar menos ser lanzado al Infierno. Por consiguiente alguna vez priva al hombre interno de todo aquello en lo que puede alimentarse, sitiándolo tan hábilmente que no permite el menor átomo de paso de imperfección inadvertido.

En cuanto a mi exterior, éste también, desde que el espíritu no responde a él, está tan sitiado que no encuentra nada que lo refresque en la tierra si sigue su instinto humano. Ningún consuelo le queda excepto Dios que hace todo esto por amor y muy misericordiosamente en la satisfacción de Su justicia. Percibir esto da a mi naturaleza exterior gran paz y felicidad, pero felicidad que nada disminuye mi dolor ni debilita el sitio. Ya ningún dolor podría infligirse en mi vida tan grande que yo deseara escapar de la ordenanza divina. No dejo mi prisión ni la busco: ¡permito a Dios hacer lo necesario! Mi felicidad es que Dios se satisfaga, ni yo podría sufrir un peor dolor que el de huir fuera de la ordenanza de Dios, así de justo lo veo y así de misericordioso.

Todas estas cosas de las que he hablado son lo que yo veo, pero no puedo encontrar las palabras para decir tanto cuanto podría del tema. Ni yo puedo decir exactamente lo que he contado del trabajo hecho en mí debidamente, qué he sentido espiritualmente. Sin embargo lo he contado.

La prisión en que parezco estar es este mundo, mis cadenas el cuerpo, y es mi alma iluminada por la gracia que sabe la gravedad de sujetarse o mantenerse lejos impedida de seguir su fin. Esto da gran dolor a mi alma pero por su bien. Por la gracia de Dios recibe una cierta dignidad que la hace ir hacia Dios; no, más bien Él le permite compartir Su bondad para que se vuelva uno con Él. Y como que es imposible que Dios sufra dolor, esta inmunidad ocurre a las almas que se acercan a Él también; cuanto más se acercan a Él, más comparten de lo que es Suyo.

Por consiguiente estar en este camino, como es, causa el alma un dolor insufrible. El dolor y las trabas la arrebatan de su primer estado natural que por la gracia se revela a ella, y encontrándose privada de lo que puede recibir, sufre un dolor más grande según la medida de su estima por Dios. Cuanto más el alma conoce a Dios, más lo estima y más pura se vuelve, y así los estorbos hacia Él le parecen más terribles que nunca, sobre todo porque el alma que está desembarazada y totalmente recogida en Dios lo conoce como Él es de verdad.

Como el hombre que permitiría que le maten antes de ofender a Dios siente la muerte y su dolor, pero se da por la luz de Dios un celo que le hace valorar el honor divino antes que la muerte corporal, para el alma que sabe la ordenanza de Dios la valora sobre todos los posibles tormentos internos y exteriores, aunque puedan ser terribles, porque esto es un trabajo de Dios que supera todo lo que pueda ser sentido o imaginado. Es más, cuando Dios ocupa un alma, aunque sea en un grado pequeño, la mantiene totalmente ocupada en Su Majestad para que nada más cuente para ella. Así pierde todo lo que le es propio, y no puede por sí misma ver ni hablar sin conocer pérdida o dolor. Pero, como ya he dicho claramente, sabe todo en un instante cuando deja esta vida.

Finalmente y como conclusión, debemos entender que Dios es mejor y más grande causa que todo lo que el hombre ha de perder, y que el Purgatorio lo que hace es limpiarnos.
_________________

+ Si rezas el rosario diario o tienes el firme propósito de comenzar esta práctica de vida de santidad, únete al grupo en el Facebook: http://www.facebook.com/group.php?gid=65358051689 +++ A.M.D.G.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Visitar sitio web del autor MSN Messenger
Mostrar mensajes de anteriores:   
Publicar nuevo tema   Este tema está cerrado y no puede editar mensajes o responder    Foros de discusión -> Vida y escritos de los Santos Todas las horas son GMT
Ir a página Anterior  1, 2
Página 2 de 2

 
Cambiar a:  
Puede publicar nuevos temas en este foro
No puede responder a temas en este foro
No puede editar sus mensajes en este foro
No puede borrar sus mensajes en este foro
No puede votar en encuestas en este foro


Powered by phpBB © 2001, 2007 phpBB Group
© 2007 Catholic.net Inc. - Todos los derechos reservados