De nuevo la voz de los inicios de la Iglesia

[Orpam Saretnoc Laverz]

Hoy oímos la voz de los primeros siglos de la Iglesia en el Discurso a Diogneto
Dios, que en el pasado nos mostró la impotencia de nuestra naturaleza para alcanzar la vida, y en el presente nos muestra al Salvador que está en grado de salvar a todos, quiere que nosotros –por estas dos pruebas- nos fiemos de su bondad, y lo tengamos como nuestro conductor, padre, maestro, consejero, médico; nuestra luz, nuestra mente, nuestro honor y gloria, nuestra fuerza, nuestra vida y seguridad.
Amigos, amigas foreros, tenía copiado esto que me llamó la atención y como alguno de vosotros me dijo que este discurso era una fuente estupenda de vida cristiana, por eso he querido citároslo a vosotros.
No sé ahí donde tu estás, cómo estás, pero en algunos lugares la atmósfera está cargada o por la guerra, o por la temperatura.
Pensaba yo que ¡ojalá! nosotros estuviéramos llenos de Dios, de forma que fuéramos para los otros lo que Diogneto nos dice aquí, hoy, que es Dios.
Os lo deseo, ¡buenas tardes! Orpam Saretnoc Laverz