Siempre estoy Feliz

[debakan_buda]

Un discípulo laico eminente de Buddha, era Hatthaka de Alavi, hijo de un gobernador que conoció a Buddha cuando sorprendido de ver a este monje solitario vestido solamente con manto liviano y que dormía en el duro suelo preguntó al Buddha:

"¿Es feliz?" El Buddha le respondió:
"Si, soy feliz".
"Pero Señor, preguntó Hatthaka, el suelo es duro y el viento está frío, ¿cómo puede ser feliz?"
El Buddha preguntó: "A pesar de vivir en una hermosa casa, tener esposa que le atienda y cómodos muebles y deliciosa comida, ¿es posible que debido a la ira, temor o ambición desmedida un hombre se siente infeliz respondió Hatthaka,
"es bastante posible".
"Bien, dijo el Buddha, yo me he liberado de toda la codicia, ira, temor y ambición, así que ya sea que duerma aquí o en una casa cómoda, siempre estoy feliz.


Las bienventuranzas al bendito sabio de los Sakias

Deba
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Lo que buscas siempre estuvo ante tus ojos

Como una madre que ama a su unico hijo al punto de dar su vida por èl, asi debemos amar a todos los seres.

[Sitibundo]

Estimado Debakan_ Buda
Ciertamente una de las formas de felicidad es la renuncia y a veces se cree que cuanto a más se renuncia más feliz se va a ser o por lo menos se puede ser.
Sin embargo al renunciar a todo va implícito renunciar al amor también, de tal manera que el renunciante puede quedarse solamente consigo mismo y aunque el patrimonio es muy grande e interesante, también es limitado.
Parece más rico y mejor quedarse con muchos seres queridos y estar siempre abierto a los demás.
Saludos.
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Quieren abnegar su Gracia

[debakan_buda]

[Sitibundo]

Estimado Debakan_Buda:
Tú escribiste:
...la renuncia que nos predica el Buddha es la renuncia de la ira, del egocentrismo, de la vanidad, de la avaricia, del goce desmedido de los sentidos, de la ignorancia, mas no nos pide la renuncia de la compasión, ni la renuncia de la caridad, ni la renuncia del amor, ni la renuncia de la bondad, mas bien nos insta a una renuncia de nosotros mismos en pos de los demás.

La renuncia, es un tipo de vocación, los lamas y los anacoretas, tienden a llevarlo al extremo, Pero, también se puede ser un hombre de mundo y renunciar a los vicios que enumeras, con esto se va ganando en espiritualidad, pero la vida común se entrelaza con el interés y las necesidades de los que te rodean, a veces podrás tú sobreponerte, con delicadeza, tacto y persuasión, pero otras muchas tendrás que ceder por amor a tu prójimo.
De manera que el ambiente social no es espiritual sino más bien mundano.
He aquí el momento del conflcto, parecería que tú te inclinas a dar prioridad a las virtudes personales que a la responsabilidad con los demás.
Yo creo que es preferible el amor al prójimo que mi crecimiento espiritual.
¿Tú que opinas?
Gracias por tu respuesta

Un saludo afectuoso y colmo de bendiciones.
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[debakan_buda]

querido amigo

dijo el maestro zen Suzuki, "la iluminacion esta alli donde tu estes", eso se refiere a que si bien es mas dificil seguir el dharma inmerso en la vida social, con los hijos, padres, familia, trabajo, television, etc. La posibilidad de hacer esta siempre presente y no es imposible llevar el dharma como un laico comprometido, ni siquiera es imposible alcanzar beatitud de este modo, pero es evidente que es mas facil cuando no estas inmerso.

¿que opinas tu al respesto?

Deba
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[Sitibundo]

Estimado Debakan_Buda

Siempre llevé la vida de un laíco comprometido inmerso en una sociedad en la que supe acomodarme, o quizás, la propia sociedad supo acomodarme, pero siempre llevé una vida de rectitud y de amor.
Estos principios los inculqué a mis hijos y ahora aunque lejos de mí sé que los practican, me casé con una mujer formidable, mucho mejor que yo. Entre los dos supimos y pudimos rechazar tentaciones que se nos presentaron, pero en fin he llegado a la edad de la jubilación y llego a ella no por que lo quiera sino porque claramente el mundo, me ha superado, los adelantos me asombran y yo no he podido adaptarme a ellos, vivo aislado, en un pequeño "paraíso" que fuimos construyendo mi esposa y yo con muchas ilusiones para cuando fuéramos viejos, ahora estaría en la posición ideal para hacer una vida espiritual intensa, en soledad Dios, la naturaleza y yo. Pero vieras cuanto extraño a la gente, cuanto se me antoja deshacerme de mi paraíso y regresar al smog, al ruido, a la convivencia difícil con el vecino, a volver a hacer los tremendos corajes por haber perdido una partida de ajedrez, en resumen a tener pretextos para justificar mi mal humor, a final de cuentas que estoy en una situación de no saber que hacer.
Gracias por leerme y gracias por abrir el tema de la felicidad que ha venido a tocar, el enigma del último trecho de mi existencia.
Saludos y bendiciones.
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[debakan_buda]

Te comprendo plenamente amigo mio, en la historia del budismo y del catolicismo hemos tenido grandes monjes ermitaños que nos han legado una inmenso caudal de su experiencia mística, de su abandono de si mismos y de la renuncia al mundo, ninguna de ellas fue fácil, ninguna de un día para otro. es difícil el desapego de los seres queridos. por eso creo que la mayoría de los santos nos han enseñado que hay una diferencia entre la compasión entendida como el amor incondicionado y no atado a nada y el amor que experimentamos y que tiene ataduras con los objetos de nuestro amor. al igual que tu soy laico y comprometido, y si bien vivo en la medida de lo posible los compromisos del dharma que es dificil por que requiere de compromiso solido y la verdad es que no somos muy solidos, al menos no siempre. sin embargo tomar una vía de monje de meditacion y contemplación en solitario es algo para lo que no me siento aun preparado, tengo profundo apego a mi esposa y a mi hija. por eso es un consuelo leer al maestro Zusuki y también a otros connotados monjes y maestros que nos dicen que aun en nuestro camino de laicos con todas sus dificultades, la meta es posible.

Deba
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[Sitibundo]

Completamente de acuerdo, muy querido Deba:
Estoy convencido que también hay felicidad en el mundo, ahora que quisiera experimentar con fe y decisión la vida en solitario, no sé si estoy preparado, como tú lo expresabas, para alcanzar la felicidad con una existencia, que renuncie a mis cariños.
Saludos y bendiciones.
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