Luis-Carlos Veterano
Registrado: 24 Oct 2005 Mensajes: 1311
|
Publicado:
Lun Ago 07, 2006 12:03 pm Asunto:
Tema: "El señor de la guerra", contra el tráfico de arma |
|
|
http://iglesia.libertaddigital.com/articulo.php/1276231967
El señor de la guerra explora una consecuencia poco conocida del final de la Guerra Fría, esto es: la enorme cantidad de armas que de repente quedaron disponibles en los antiguos estados soviéticos para ser vendidas a los países en desarrollo, sobre todo africanos, y las inmensas sumas de dinero amasadas por los traficantes de armas que las vendieron. Sólo en Ucrania, entre 1982 y 1992 se robaron más de treinta y dos mil millones de dólares en armas.
La tesis final del argumento es que los Estados que están detrás de la venta ilegal de armas son Estados Unidos, Francia, China, Rusia e Inglaterra, curiosamente los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Independientemente de la verdad de esos asertos, probablemente ciertos, la película sufre de los tics típicos del cine "de compromiso": por una lado, el mal está en el sistema, y la gente se contagia de él, es víctima de él. Por otro lado, el mundo se divide entre malos y buenos.
La pega, pues, es que la película está diseñada muy didácticamente, de forma que se notan demasiado las intenciones del director en cada recurso dramático y por tanto resulta un tanto tramposa y previsible. Los personajes son un poco planos, y Niccol prefiere poner el énfasis en la perspectiva política del asunto que en su compleja dimensión personal, presentada de forma algo esquemática. En definitiva, un film más interesante que bueno, que viene a decir que si tan delincuente es el que da como el que recibe, el genocida Charles Taylor (ex-Presidente de Liberia, que en el film lleva el nombre de André Baptiste) tiene el mismo rango moral que el presidente de los Estados Unidos. Suena a discutible. _________________ -“Voy a destruir su Iglesia” “Je detruirai votre eglise!” (Napoleon).
- No, no podrá. ¡Ni siquiera nosotros hemos podido hacerlo!”- (respuesta del cardenal Consalvi).
 |
|