REFLEXIONES III

[Enzo Diamelio]

Tengo que procurar responder a la invitación que me hace Dios a vivir en su intimidad; pero no basta que responda, es preciso vivir la respuesta con una entrega total y sin reservas.
Solamente aquellos que se dedican a cultivar en su interior la intimidad, son los que saben y conocen por propia experiencia las dulzuras, la íntima paz y serenidad que se apodera de su alma.
Mi vida tiene algo así como un dejo de disgusto, quizás sea la causa del porque no respondo al llamado del Señor para asistir al festín de sus intimidades y disfrutar de su trato amistoso.
Sufro por lo mismo, no sé cual es la motivo, aunque creo que estoy cerca de descubrirlo. Amén
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¡ TU RESURRECCIÓN ES MI ESPERANZA !