Sesión 1 "El adolescente y su mundo"

[Blanca Aurora Hernández H]

Cuestionario

1. Sí las conozco y estoy comprometida plenamente.
2. Intento que así sea, la lucha es constante sobre todo porque el mundo ha proyectado a los jóvenes una imagen deteriorada del adulto en general. En muchos de ellos he descubierto la carencia de una figura que le inspire respeto y confianza y se que mi testimonio de vida debe lograr eso en ellos y a partir de ahí darse la oportunidad de descubrir que hay muchos adultos que están interesados en sus necesidades.
3. Al aceptar esta labor, he aceptado también que cada alumno es un hijo más por quien hay que dar hasta la vida, por lo que también implica ofrecer oración y sacrificio por cada uno de ellos pues la labor no estaría completa sin este aspecto tan importante ya que con mis solas fuerzas no será mucho lo que pueda lograr. Este compromiso va más allá del trato constante, hay que ocuparse de todos los aspectos de sus vidas y el acompañamiento debe ser pleno.
4. Sí estoy consciente de ello. Cada uno de nosotros ha sido creado por amor y ese amor es incondicional, pleno. Esto es algo que reconozco en todas las personas y principalmente en mis destinatarios, sabiendo que están en un proceso de formación que será la base de su futuro. Ellos son el presente del mundo y al conocerlos de manera personal puedo descubrir sus debilidades y ayudarlos a trabajar en ellas.
5. Hoy más que nunca estoy interesada en cada vivencia de mis alumnos pues es, en parte, un reflejo de mi acompañamiento. Se que debo invertir mi vida en estar al pendiente de sus preocupaciones, alegrarme con ellos por cada triunfo e impulsar sus iniciativas pues ello hará que logren tener una buena autoestima que los hará responsables de sus actos.
6. Trato de estar accesible a ellos. He sido sincera con mis tiempos que puedo dedicarles y ellos han entendido que también tengo otras responsabilidades por lo que ha habido un acuerdo implícito. Saben en qué momento puedo estar disponible, pero también saben que cuando se requiere, aún fuera de esos tiempos, pueden contar conmigo. Hemos establecido una red utilizando los medios de comunicación, lo cual nos facilita estar en contante contacto.
7. Es una de las partes que más me cuesta. Mi temperamento me lleva a ser muy seca en ocasiones. Estoy luchando por superar esto y trato de estar siempre alerta para no herir susceptibilidades.
8. Sí. Es algo que me ha costado esfuerzo pero lo he logrado. Creo que una de las cosas más difíciles en el ser humano es lograr el equilibrio y saber ser amable con un alumno aún cuando unos segundos antes otro nos haya sacado de quicio.
9. De ninguna manera. Estoy consciente que aún no están en posibilidades de responsabilizarse y responder al igual que los adultos, pero están en ese proceso y poco a poco irán descubriendo su papel.
10. La formación de adolescentes es algo apasionante, pues nos mantiene, aún cuando seamos ya mayores, en constante actividad física y mental. Esta es una labor personalizada que no implica solo la transmisión de los conocimientos, sino que es necesario descubrir que estamos trabajando con seres humanos capaces de pensar y de sentir y que nuestra tarea como formadores es fundamental en sus vidas. Cuando nos entregamos a esta labor, en cuerpo y alma, podemos estar seguros que los frutos serán buenos y abundantes, pero eso también debe impulsar a estar en constante preparación, a conocer su mundo y todo lo que éste implica, pues tenemos que aprender a hablar su mismo lenguaje.
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Quiero hacer de mi vida un libro, donde esté contenida la Ciencia del amor. (Teresa de Liseux)

[fabiana godfroit]

[gjuarezm]

Hola, lo reenvío con mis datos al final.

Mtra. Mayra, saludos.

[Eduardo Icarte Pinuer]

1. ¿Conozco las exigencias de mi responsabilidad como educador? ¿He comprometido con esto toda mi persona: inteligencia, corazón y voluntad?
R : Conozco las exigencias y responsabilidades, solo con la ayuda de Dios es posible llevarlas adelante
2. ¿Con el testimonio de mis palabras y obras logro que los alumnos respeten la figura de un formador?.
R: Un testimonio dice mas que mucha teoría de palabras, a traves de este testimonio uno se dá a conocer. los alumnos por su parte, respetan a quien conocen y comparten su vivencia.
3. Sinceramente ¿Qué significan para mi los alumnos? ¿Son almas que Dios me ha confiado y por lo tanto el tiempo que les dedico es de calidad, acompaño la preparación profesional con la oración y el sacrificio por ellos?.
R: Los alumnos son almas que Dios a puesto a nuestro cuidado y hay que extremarse al extremo para cumplir cabalmente lo que Dios quiere entregar a estos jovenes a traves de nuestro servicio
4. ¿Soy consciente de la grandeza que cada alumno tiene como imagen de Dios que es, pero también cuento con la debilidad y la tendencia al mal que le envuelve? .
R: Cada alumno es importante, tanto el más inteligente, como al que más le cuesta; tanto el mas destacado, como el más humilde. Así como Dios ha sido paciente con nuestras debilidades, hay que serlo con la tendencia al mal de cada uno.
5. ¿Me interesan verdaderamente sus preocupaciones, triunfos, fracasos, necesidades e iniciativas?.
R: Es fundamental en la educación, hacer ver al alumno que a uno le preocupan sus problemas, inquietudes y realidades propias. Ellos necesitan alguien que los escuche.
6. ¿Soy siempre accesible sin olvidar mi papel de formador? ¿O me sustraigo por comodidad personal o con falsas razones para prestar a los alumnos la atención necesaria?
R: Es una batalla dificil estar siempre accesible, debido a las preocupaciones propias de cada uno. Fundamental en este punto es la oración.
7. ¿Uso siempre la serenidad cuando tengo que dar una negativa? ¿evito cuidadosamente los modos tajantes? ¿Sé explicar las razones de la determinación y motivo siempre al alumno para que libremente la acepte?.
R: Una negativa tiene que ir acompañada de un razonamiento valórico social y cristiano fundamentado en la verdad de Jesucristo para que esta sea libremente aceptada.
8. ¿Se combinar la exigencia firme con la comprensión y cordialidad con que se merecen ser tratados?.
R: Es tarea de cada uno buscar la forma amena y cordial y a su vez firme en valores. No debemos ser aburridos y fomes, contagiar lo que uno quiere comunicar.
9. ¿Desapruebo todo lo que hacen mis alumnos sólo por el hecho de que son más jóvenes que yo?.
R: La experiencia o sabiduría no habitan en quien es mas viejo, sino en quien recurre más a Dios. Desaprobar es menoscabar, achicar , empequeñecer. La juventud es maravillosa y debemos y podemos canalizarla.
10. ¿El texto de apoyo para esta sesión ha aportado una visión cristiana real del adolescente? ¿por qué?.
R:El texto de apoyo nos recuerda que cada joven es imagen de Dios y no solo joven, por lo que debemos amarlos como amamos a Cristo. Respetar su libertad e independencia y no olvidar que solo somos servidores llamados por dios desde el vientre de nuestra madre. y recordar siempre que cada triunfo o avance con ellos es para gloria de Jesucristo y no gloria nuestra.
11. Comentario personal…[/quote].

La responsabilidad del educador para con los jovenes en el mundo actual es de gran tamaño. Una tremenda responsabilidad. Debemos multiplicar los talentos que Dios nos dió en este campo . Para llevar a cabo esta tarea debemos ser concientes de que solos no podemos. Necesitamos a Dios, que mediante la ayuda del Espiritu Santo nos otorge los dones necesarios para llevarla a cabo, y recordar que el testimonio de vida es primordial, ya que si queremos que nuestros jovenes no fumen, no podemos fumar contradiciendo nuestra enseñanza, lo mismo frente a tantas cadenas que nos atan en el mundo de hoy. Cristo mismo es el ejemplo cuando en oración rogaba al Padre que cuidara a su discipulos como El, los habia cuidado. Jesus así transmitió con su ejemplo de vida su enseñanza. Del mismo modo nosotros debemos tratar de imitar ese ejemplo con la ayuda de Dios.

Eduardo Icarte Pinuer

[Ignacio Vidal]

1. En efecto conozco y estoy conciente de mi responsabilidad y al haber aceptado el llamado a ser catequista también acepte el compromiso para entregarme en vida y alma a tan importante ministerio.

2. Trabajo a diario para lograr dicho objetivo

3. En efecto estoy conciente de la gran responsabilidad que ello significa y que cada alma que me es entregada es un alma a la que hay que ayudar a la que hay que salvar a la que hay que ayudarla a reencontrarse con el Creador y por ello mi preocupación es cada día prepararme mas.

4. Así es esta conciencia la he adquirido con el paso del tiempo y desde luego desde que acepte el llamado del señor, pero también me apena las miserias tanto materiales como morales que arrastra el ser humano alejado del plan de Dios y renuente a su palabra. Mi compromiso desde que me encuentro trabajando en mi comunidad, al lado de mi esposa, es precisamente el de concientizarme y concientizar a la comunidad de la grandeza del ser humano y luchar en contra de esas tendencias al mal.

5. Por supuesto y soy participes de ellas en la medida en que me hacen sabedor de ellas

6. Totalmente estoy abierto y siempre dispuesto a sus necesidades con un rol más bien de mediador.

7. ¿Uso siempre la serenidad cuando tengo que dar una negativa? ¿evito cuidadosamente los modos tajantes? ¿Sé explicar las razones de la determinación y motivo siempre al alumno para que libremente la acepte?
R.- Me ha costado trabajo y considero que estoy en el camino de adquirir totalmente la serenidad necesaria para saber decir no y sus porques y lo que siempre he buscado es el dialogo abierto sincero, de amigos y no solo en la catequesis sino también en mi vida diaria familiar, social y laboral en que me desenvuelvo.

8. Si, además la considero la base de mi relación con mis catequizandos

9. No de ninguna manera

10. Por supuesto y viene a reforzar y además que no solamente el adolescente sino el hombre en si existe gracias a la creación libre y amorosa de Dios (Gen1,26-27).

11. En primer lugar les doy las gracias a ustedes por permitirme participar en tan importante foro y le doy las Gracias a Dios por haberlo encontrado pues lo considero necesario para desarrollar la labor que tengo encomendad como padre de dos adolescentes y en mi comunidad. Mi esposa y un servidor somos catequistas en nuestra comunidad y participamos en la catequesis de niños, adolescentes y papas pues también pertenecemos al Apostolado para la Consagración de la Familia, de ahí la imperiosa necesidad de prepararnos cada día más. Y que mejor con foros tan interesantes como el que ustedes brindan. Estaré atento y con gusto participare en su desarrollo pues que importante resulta que en nuestra actualidad en nuestro momento encaucemos a nuestros hijos a nuestros jóvenes que serán el futuro de nuestro país. De nuestro mundo. GRACIAS.
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A QUIEN IRE SI TU TIENES PALABRAS DE VIDA ETERNA. SEÑOR

[arturo paezu ugalde]

[mammamia]

1.si,me comprometo todo lo que puedo.
2.si,ese es mi principal cometido que tengan también un modelo a seguir y que les inculque respeto y valores.
3.Los veo como hijos a los que tienes que querer y asi darles lo mejor y orientarles hacia lo mejor, que es Cristo y el amor de Cristo en sus vidas.
4.si,pero trato de siempre ver el lado positivo y asi sacar lo mejor que hay en ellos.
5.si,porque ya yo formo parte de sus vidas y soy también parte de sus triunfos y fracasos.
6.Siempre trato de ser cercano pero manteniendo una cierta distancia para que cada uno ocupe su sitio.
7.Uno no siempre acierta con todos, pero trato de hacerlo con cierta tranquilidad y paz, teniendo en cuenta las necesidades de cada uno.
8.Si,siempre ha de haber amabilidad entre ambas partes, eso es fundamental para que también surja el cariño.
9.No, más bien los tengo más en cuenta porque están en una etapa crítica y evolutiva ,requiriendo asi más atención.
10.Porque ya no los veo con los ojos de un ser humano sino con los ojos de Cristo,y me crea una mayor responsabilidad,ya que he de alimentar también su espiritu.
11.Me ha ayudado a ver la parte sobrenatural que Dios nos concede y permite darnos ,para nosotros poder entregarlo asi mismo a los jóvenes, a los que están a nuestro cargo, y para ser instrumento y vehiculo entre Dios y ellos asi como lo fue Jesucristo.
Ana Henriquez
caromio1112000@hotmail.com

[susana josefina]

LAs exigencias de mi responsabilidad como educador las conozco desde el antes de ejercer esta profesión, ya que, dese el primer día de estudio mis profesores- tutores, se encagaron de recordarlo deuna forma constante. Hoy en día considero, que sí he logrado asumir mi rol y he proyectado una imagen de respeto y equilibrio en mi relación con los educancdos que he atendido.
Por los niños que a mi cargo estan desde disfrazarme de arbolito (me vi cuchí!), pintarme el rosto, cruzar quebradas, soportar insultos y amenazas, así como, enfrentar la ley; durante mis años de servicios... los niños, son seres increibles que merecen toda la atencion posible.
Cuando se es un verdadero maestro uno se preocupa en todo momento por su educando, se trata de ser accesible en todo lo posible sin dejar a un lado la discipñina del aula, cuando es necesario decir "NO", hay que hacerlo sin termor y con aplomo.
Con respecto al desaprobar todo lo que hacen mis estudiantes por solo ser más jovenes que yo,creo, que es una pregunta que habla de egoismos y envidias, una vez fui joven, aun me considero joven y siempre y cuando este dentro de lo permitido se puede aprovar y en algunos casos orientar..
En mi particular esperaba más del texo de apoyo... es sumamente simple....
Para dar cierre a mi participacion.. la palabra ALUMNO es "alejado de la luz", ¿Hasta cuando estaremos alejando de la luz a nuestros niños y jovenes etiquetandolos? es tiempo de superar a Comenio y darle el lugar justo a quien lo merece, sugiero, en proximas oportunidades sustituir esa palabra en los cuestinarios del foro... Susana[color=brown][/color]

[macu]

Cuestionario:

1. ¿Conozco las exigencias de mi responsabilidad como educador? ¿He comprometido con esto toda mi persona: inteligencia, corazón y voluntad?

Para mi sin duda. es una gran responsabilidad que requiere tiempo y dedicación en un trabajo permanente donde cada día me debo replantear lineas de acción a seguir.
Siento que sí que estoy comprometido de menera total con mi vida como testimonio. con mis cosas buenas y las que me toca trabajar día a día.


2. ¿Con el testimonio de mis palabras y obras logro que los alumnos respeten la figura de un formador?

A veces me cuesta el trabajo e el aula ya que son muchos los alumnos y hay días en que no se quieren quedar cayados, pero nunca me han faltado el respeto, todo lo contrario siempre me saludan amablemente y festejan cuando me ven. Para mí es muy importante establecer relaciones de empettía sin traspasar el limite como docente.

3. Sinceramente ¿Qué significan para mi los alumnos? ¿Son almas que Dios me ha confiado y por lo tanto el tiempo que les dedico es de calidad, acompaño la preparación profesional con la oración y el sacrificio por ellos?

Realmente esta es una pregunta que me he hecho. y creo que por algo estoy acá y que mi humilde labor es la de acompañar a los chicos en sus opciones de vida, en los momentos dificiles y siemmpre que lo necesiten.

4. ¿Soy consciente de la grandeza que cada alumno tiene como imagen de Dios que es, pero también cuento con la debilidad y la tendencia al mal que le envuelve?

Las tentaciones son muchas, el pecado esta a la orden del día, a un adolescnte está descubriendo un mundo nuevo, y esto trae angustias miedos y a veces frustación, cuando no demasiada fantacia en lo superfluo, sin embargo creo en esta grandeza del hombre de poder elegir lo que quiere para su vida. y la de seguir con el proyecto del creador.

5. ¿Me interesan verdaderamente sus preocupaciones, triunfos, fracasos, necesidades e iniciativas?

Me apasiona mucho ver como respónden ante los problemas, cuando los hacen suyos y como aparece la solidadridad como lo central en todo dilema, la unión y la alegría que transmiten me gusta pensar en lo lindo que es que cada uno elabore un proyecto personal y pueda llevarlo a cabo de la mejopr manera, con alegría y compromiso.

6. ¿Soy siempre accesible sin olvidar mi papel de formador? ¿O me sustraigo por comodidad personal o con falsas razones para prestar a los alumnos la atención necesaria?

A veces siento algunos pendientes pero en general trato de ser lo mas accecible que puedo. sin perder el lugar.

7. ¿Uso siempre la serenidad cuando tengo que dar una negativa? ¿evito cuidadosamente los modos tajantes? ¿Sé explicar las razones de la determinación y motivo siempre al alumno para que libremente la acepte?

A veces pierdo un poco la calma cuando veo actitudes que no me gustan
mucho. trato de buscar consenso pero reconozco que es algo que todavía me cuesta.

8. ¿Se combinar la exigencia firme con la comprensión y cordialidad con que se merecen ser tratados?

A veces bajo un poco la exigencia.

9. ¿Desapruebo todo lo que hacen mis alumnos sólo por el hecho de que son más jóvenes que yo?

No al contrario siento que surgen ideas muy interesantes en cada uno. propuestas muy acertadas.
10. ¿El texto de apoyo para esta sesión ha aportado una visión cristiana real del adolescente? ¿por qué?

Sí sin duda ya que trata sobre la concepcion del adolescente, como persona de Dios en un proceso de formación constante hacia la realización en el proyecto de nuestro creador, siguiendo el camino de Jesús. La entrega hacia los demás y la vida en comunidad buscando el bién común.

11. Comentario personal…

Muy bueno estas preguntas me hicierón reflexionar sobre como soy con mis alumnos y me han dejado pensando sobre algunas cuestiones a trabajar en la relación con ellos.

[Claudia Maria Figueroa A.]

“ Mi responsabilidad como formador de adolescentes "
DESARROLLO DEL CUESTIONARIO
RESPUESTAS


R1. A medida que he ido creciendo en mi apostolado con los jóvenes he ido conociendo estas exigencias, las he ido reflexionando y asimilándolas esto me ha llevado a comprometerme cada día mas en todos los aspectos de mi persona que están a mi alcance.
Pienso que el crecimiento es constante y las exigencias de acuerdo a los tiempos son nuevas por lo tanto este conocimiento debe ser continuo en mi vida, debe ser dinámico sin quedarme estancada en dichas exigencias.


R2. Este ha sido un reto muy grande para Mí, el hecho de estar al frente de muchos jóvenes hablando de distintos temas en la fe los cuales implican de mi testimonio es para Mí una invitación a actuar de acuerdo a lo que transmito, no puedo dar lo que no tengo. Esto me ayuda a que los jóvenes respeten esa figura de formadora en la fe, pero sobre todo no me gusta transmitir en ellos que el hecho de ser formadora me convierte en un ser perfecto y mas que ellos, todo lo contrario trato de dar mi testimonio de conversión el cual es de un día a la vez.
Que también en mi actuar tengo caídas y muchas cosas de mi persona en las que junto con El Señor aun sigo trabajando. El testimonio es una herramienta muy importante para ganarse ese respeto.

R3. Para mi son personas que Dios coloca en mi camino para que de alguna forma les pueda ayudar y enseñar algo nuevo, y yo también aprender de ellos. Pero ha decir verdad en mi caso muchas veces me pasa que me preparo para enseñarles cosas nuevas pero me olvido de la oración por ellos y el acompañamiento. Es algo en lo que debo trabajar mucho más.

R4. Si soy conciente de esta realidad.

R5. Si me interesan, aunque muchas veces el tiempo y los grandes grupos que se tienen que atender me impiden una atención individual y se olvidan todos estos aspectos. Pero trato de hacer lo mejor en l medida de mis posibilidades.

R.6 Trato de serlo siempre aunque a veces fallo en este sentido.

R. 7. Siempre doy las explicaciones de las decisiones que se toman haciéndolas basadas en la justicia y la objetividad. Trato que la serenidad siempre me acompañe pero no siempre lo puedo lograr.

R.8. Si. En la medida de lo posible siempre lo trato.


R9. No. No desapruebo lo que hacen, se trata de diálogo y escucha para luego actuar tomando las decisiones más convenientes.

Comentario personal…
R10. Leyendo el artículo y contestando las preguntas del cuestionario me encuentro con la gracia de darme cuenta de muchos aspectos que debo trabajar para mejorar mi trabajo. Ha sido una evaluación de mí caminar como formadora en el cual no todo ha sido perfecto pero que Dios siempre pone los medios correctos como este diplomado para mejorar en este apostolado que El me ha confiado no para desistir sino para ser mejor cada día y dar mejores respuestas a las exigencias de los jóvenes.
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CLAUDIA MARIA FIGUEROA ARGEÑAL

[Miriam Gonzalez Rodriguez]

Respuesta al Cuestionario:

® 1- Verdaderamente estoy conciente de la responsabilidad como educadora de la fe, por la cual, siempre estoy buscando la intimidad con Dios para que guié mi inteligencia, encienda el fuego en mi corazón hacia los que se me han encargado y fiel voluntad al querer único de Dios que es la salvación de las almas.

® 2- Sí; El buen ejemplo y la firmeza con caridad desde el principio hasta el fin, es la base primordial de que los alumnos perpetúen el respeto hacia la figura de un formador.

® 3- Los alumnos son los hijos espirituales que Dios a puesto en nuestras manos y por consiguiente hemos de tratarlos de la misma manera que a los hijos propios educándolos espiritualmente, aunque siempre se ha de respetar la voluntad de los hogares propios, en donde en muchas ocasiones es cuesta arriba encaminarlos y es cuando entra el tiempo, la calidad, dedicación y lo mas importante, la oración y el sacrificio por ellos.

® 4- Verdaderamente soy conciente de la grandeza que cada alumno tiene por ser único, pero a la vez, imagen y semejanza a Dios en cuanto a lo espiritual; pero también, y es en esto en lo que día tras día, voy buscando para saber como puedo ayudarlos y encaminarlos para que se superen y se fortalezcan ante la debilidades y tendencias al mar que los envuelven a cada uno en especial en los tiempos actuales.

® 5- Por supuesto que si. No debemos olvidar que son la prolongación de nuestra generación y a la cual Dios me pedirá cuenta.

® 6- Estoy siempre accesible, y siempre teniendo presente desde un principio los compromisos del estado de mi vocación, el respeto y sobre todo la sinceridad a tan gran compromiso, ante todo para con Dios.

® 7- Siempre trato de corregir no tomando como si fuese uno en particular, más bien para que sirva para otro si se encuentra o trata de estar en la misma postura. Pienso en mi persona y doy la dirección de hacerles saber que Dios les da la libertad de escoger lo bueno o lo malo.

® 8- No se trata de combinar la exigencia firme con la comprensión y cordialidad, mas bien es educándolos en que deben respetar unas normas las cuales cordialmente se ganaran o merecerán ser tratados. En esto debemos tener en cuanta que ellos actuaran libremente conforme a la educación impartida en sus propios hogares y que hoy en día es donde más hay que trabajar y prepararnos para ayudarlos y ayudarnos a nosotros mismos.
® 9- No. Solo corrijo y oriento, pues no me olvido que también fui joven.

® 10- En definitivamente sí. Nos confirma que Dios nos ha creado, que somos para El y la imagen de un Dios caído no es un impedimento para buscar y cumplir su mandato.

10. Comentario personal…
En lo personal, es una oportunidad que Dios me ha puesto en el momento para poder adquirir mayor conocimiento del adolescente. Aunque trato con ellos, mi especialidad son los niños de primera comunión. Quiero dejar saber que lo que se siembra en la niñez es lo que lo sostendrá en la adolescencia junto con la integración de formar a los padres para que se pueda completar una mejor generación como Dios en principio quería, y a pesar de todo Dios nos quiere hasta el final.

[arturo paezu ugalde]

[julio-h]

Cuestionario:

1. ¿Conozco las exigencias de mi responsabilidad como educador? ¿He comprometido con esto toda mi persona: inteligencia, corazón y voluntad?

Siento que si conozco mi responsabilidad como educador la cual he cifrado siempre como una expresión de fe por medio de la cual cada una(o) de mis muchachos logre observar en alguna medida el rostro de Cristo que los valora que los ayuda a ser mas integrales mas personas cada día.

2. ¿Con el testimonio de mis palabras y obras logro que los alumnos respeten la figura de un formador?

Claro que si los jóvenes de hoy están cansados del mucho hablar y de promesas incumplidas están anhelando tener testimonio no solo que se hable de Jesús y de su Iglesia sino que seamos Jesús e Iglesia esperan que cada formador y formadora tengan sentimientos de Jesús que se entrega, escucha, ayuda y es amigo.

3. Sinceramente ¿Qué significan para mi los alumnos? ¿Son almas que Dios me ha confiado y por lo tanto el tiempo que les dedico es de calidad, acompaño la preparación profesional con la oración y el sacrificio por ellos?

Para los que somos educadores y en especial de educación religiosa es primordial el papel que juegan los y las estudiantes dentro del proceso enseñanza y aprendizaje, el tiempo a trabajar es en definitiva de calidad lo lectivo en mi caso es de 40 minutos por lección por lo cual se deben de generar experiencias extracurriculares que nos permita profundizar en el encuentro con Jesucristo Vivo de los y las jóvenes de los colegios donde laboro.

4. ¿Soy consciente de la grandeza que cada alumno tiene como imagen de Dios que es, pero también cuento con la debilidad y la tendencia al mal que le envuelve?

Cada persona es única e irrepetible son el emblema del alma del Padre hecho carne en esta tierra la dignidad como esa condición dada por Dios que nos hace imagen y semejanza es lo que mueve mi hacer y considero que el de muchas mas pero como seres perfectibles existe en nosotros una tendencia a vivir en ausencia del bien mas cuando la oración es asidua y la acción eucarística es pan de cada día toda tendencia es manejable y superable

5. ¿Me interesan verdaderamente sus preocupaciones, triunfos, fracasos, necesidades e iniciativas?

Claro que si para mi cada estudiante debe superar por mucho el maestro es nuestro deber conducirlos por la senda del bien y del triunfo y más aun al encuentro con Jesucristo siempre vivo, por medio de la escucha y la ayuda constante.

6. ¿Soy siempre accesible sin olvidar mi papel de formador? ¿O me sustraigo por comodidad personal o con falsas razones para prestar a los alumnos la atención necesaria?

Creo que la mayoría del tiempo soy accesible por soy humano con humanas situaciones y es por ello que no podemos decir que siempre se esta dispuesto, pero siempre por muy mal que se este debe de haber un trato respetuoso.

7. ¿Uso siempre la serenidad cuando tengo que dar una negativa? ¿evito cuidadosamente los modos tajantes? ¿Sé explicar las razones de la determinación y motivo siempre al alumno para que libremente la acepte?

Por lo menos para ser sincero se intenta ya que por naturaleza soy de temperamento fuerte es ante esto que la oración ha servido de medio de crecimiento y de contrapeso en mi vida para llegar al autodominio y asumir de una forma conciente e rol de hijos de Dios que los otros juegan en mi.

8. ¿Se combinar la exigencia firme con la comprensión y cordialidad con que se merecen ser tratados?

Si por la escucha como base de una sana relación.

9. ¿Desapruebo todo lo que hacen mis alumnos sólo por el hecho de que son más jóvenes que yo?

Jamás, intento desarrollar la empatia sin perder de vista mi rol formador.

10. ¿El texto de apoyo para esta sesión ha aportado una visión cristiana real del adolescente? ¿por qué?

Si porque habla desde el norte de la dignidad y la valoración de la vida.

11. Comentario personal…

El buscar entender las diferentes culturas juveniles me parece una experiencia maravillosa pues los jóvenes están deseosos de ser escuchados y valorados por un espacio como este donde podemos discutir son básicos para el desarrollo de nuestras sociedades.

[Mayra Novelo]

José Miguel escribió...

[Mayra Novelo]

Solo pido no escribir en mayúsculas se dificulta la lectura.

Muchas gracias!!
En CRisto, Mayra
_________________
“Te amo, Dios mío, y mi único deseo es amarte hasta el último suspiro de mi vida. Te amo, Dios mío infinitamente amable, y prefiero morir amándote a vivir sin amarte. Te amo, Señor, y la única gracia que te pido es amarte eternamente... ”
(Cura de Ars)

[mariaclaverias]

CURSO : El ADOLECENTE Y SU MUNDO
TEMA: MI RESPONSABILIDAD COMO FORMADOR DE ADOLESCENTES.
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CUESTIONARIO:

1. ¿CONOZCO LAS EXIGENCIAS DE MI RESPONSABILIDAD COMO EDUCADOR? ¿HE COMPROMETIDO CON ESTO TODA MI PERSONA: INTELIGENCIA, CORAZÓN Y VOLUNTAD?

CONOZCO SI, PERO NO HABÍA SIDO MUY RESPONSABLE ANTE ELLO. DESPUÉS DE LEER EL TEXTO DE APOYO, QUIERO TOTALMENTE COMPROMETER TODA MI PERSONA INCLUYENDO MI INTELIGENCIA, CORAZÓN Y VOLUNTAD.

2. ¿CON EL TESTIMONIO DE MIS PALABRAS Y OBRAS LOGRO QUE LOS ALUMNOS RESPETEN LA FIGURA DE UN FORMADOR?

SI, TRATO EN LO POSIBLE DE SER COHERENTE CON LO QUE DIGO Y HAGO Y ASÍ LOGRO QUE MIS ALUMNOS ME RESPETEN. EN REALIDAD ME HE DADO CUENTA QUE LOS JÓVENES SON HECHOS A LA BUENA, SOLO NECESITAN UN POCO DE COMPRENSIÓN Y CARIÑO.

3. SINCERAMENTE ¿QUÉ SIGNIFICAN PARA MI LOS ALUMNOS? ¿SON ALMAS QUE DIOS ME HA CONFIADO Y POR LO TANTO EL TIEMPO QUE LES DEDICO ES DE CALIDAD, ACOMPAÑO LA PREPARACIÓN PROFESIONAL CON LA ORACIÓN Y EL SACRIFICIO POR ELLOS?

BIEN ELLOS SON LA CARTA DE PRESENTACIÓN DE LO QUE SERÁ UN MUNDO FUTURO. SON UN MATERIAL HUMANO QUE EN UN FUTURO CERCANO SERÁN QUIENES FORMEN UNA FAMILIA, COMUNIDAD O SOCIEDAD DE ACUERDO A SUS CREENCIAS Y FORMACIÓN Y NOSOTROS SEREMOS LOS PRINCIPALES PROTAGONISTAS DE EL RESULTADO DE ESA FORMACIÓN POR ESO CUIDO MUCHO QUE EL TIEMPO QUE LES DEDICO SEA DE CALIDAD Y QUE ELLOS RECONOZCAN QUE DIOS DEBE ESTAR SIEMPRE ENTRE NOSOTROS PARA LLEVAR UNA VIDA DE BIEN.

4. ¿SOY CONSCIENTE DE LA GRANDEZA QUE CADA ALUMNO TIENE COMO IMAGEN DE DIOS QUE ES, PERO TAMBIÉN CUENTO CON LA DEBILIDAD Y LA TENDENCIA AL MAL QUE LE ENVUELVE?

LA VERDAD ES QUE A VECES PIERDO LA CONCIENCIA DE ELLO CUANDO EL ALUMNO PASA EL LÍMITE Y PIENSO QUE NO ESTÁ HECHO A IMAGEN DE DIOS, PERO LUEGO REFLEXIONO; Y SI, CON EL TEXTO DE APOYO ME HE PODIDO DAR CUENTA DE QUE ELLOS SON IMAGEN DE DIOS Y QUIZÁS HASTA UNA PRUEBA QUE EL NOS DA PARA MEDIR NUESTRO AMOR Y PACIENCIA A LOS DEMÁS.

5. ¿ME INTERESAN VERDADERAMENTE SUS PREOCUPACIONES, TRIUNFOS, FRACASOS, NECESIDADES E INICIATIVAS?


SI, Y ES ASÍ QUE A VECES, LUEGO DE PASAR NO GRATOS MOMENTOS EN CLASE ME ACERCO A ELLOS PARA SABER SI TIENEN ALGÚN PROBLEMA Y LOGRO AYUDARLOS AUNQUE SEA EN FORMA MORAL.

6. ¿SOY SIEMPRE ACCESIBLE SIN OLVIDAR MI PAPEL DE FORMADOR?¿O ME SUSTRAIGO POR COMODIDAD PERSONAL O CON FALSAS RAZONES PARA PRESTAR A LOS ALUMNOS LA ATENCIÓN NECESARIA?

LA MAYORÍA DE LAS VECES LES SIGO LA CORRIENTE HASTA UN LÍMITE ACEPTABLE Y LUEGO LES RECUERDO QUE ELLOS TIENEN QUE APRENDER DE MI COMO YO DE ELLOS, Y QUE NO PODRÍA SER SIEMPRE COMO ELLOS PORQUE NOS FALTARÍA UN FORMADOR, Y NO PUEDO SER SIEMPRE UN FORMADOR SIN ELASTICIDAD PORQUE QUIERO IDENTIFICARME BIEN CON ELLOS PARA LOGRAR SU CONFIANZA Y VEAN EN MI UNA AMIGA.

7. ¿USO SIEMPRE LA SERENIDAD CUANDO TENGO QUE DAR UNA NEGATIVA? ¿EVITO CUIDADOSAMENTE LOS MODOS TAJANTES?¿SÉ EXPLICAR LAS RAZONES DE LA DETERMINACIÓN Y MOTIVO SIEMPRE AL ALUMNO PARA QUE LIBREMENTE LA ACEPTE?

CASI SIEMPRE EVITO LOS MODOS TAJANTES EXPLICÁNDOLES UN PORQUE RAZONABLE Y AL FINAL LOGRO QUE ACEPTEN LO QUE DIGO DE FORMA NO ENOJADA

8. ¿SE COMBINAR LA EXIGENCIA FIRME CON LA COMPRENSIÓN Y CORDIALIDAD CON QUE SE MERECEN SER TRATADOS?

SI RESPETO MUCHO A TODOS Y DE HECHO TAMBIÉN A LOS ADOLESCENTES PARA LOGRAR UN RESPETO MUTUO, PERO AHORA SE MEJOR QUE ELLOS SON IMAGEN DE DIOS GRACIAS A ESTE MARAVILLOSO CURSO.

9. ¿DESAPRUEBO TODO LO QUE HACEN MIS ALUMNOS SÓLO POR EL HECHO DE QUE SON MÁS JÓVENES QUE YO?

DE NINGUNA MANERA, CUANDO LO HACEN MAL LES CORRIJO CON MUCHO CARIÑO Y CUANDO HACEN ALGO MUY BUENO LOS APLAUDO Y FELICITO PORQUE YO TAMBIÉN APRENDO MUCHO DE ELLOS Y NO ME AVERGÜENZO DE HACERLO SABER PÚBLICAMENTE EN CLASE. LES REPITO QUE TODOS ESTAMOS EN PROCESO DE APRENDIZAJE TODOS LOS DÍAS DE NUESTRA VIDA
.
10. ¿EL TEXTO DE APOYO PARA ESTA SESIÓN HA APORTADO UNA VISIÓN CRISTIANA REAL DEL ADOLESCENTE? ¿POR QUÉ?

SI, PORQUE LO QUE HE VENIDO HACIENDO HASTA AHORA LO HACIA DE MODO SENTIMENTAL Y NATO, SIN SABER QUE ESTABA CASI EN EL CAMINO CORRECTO, PERO TAMBIÉN ESTE CURSO ME ESTA ENSEÑANDO MUCHAS COSAS Y QUE DEBO SER MEJOR CADA DÍA. LO QUE MÁS ME IMPACTO ES SABER QUE LOS JÓVENES ESTÁN HECHOS A IMAGEN DE DIOS AUNQUE A VECES NOS CUESTA ACEPTARLO. JAMÁS OLVIDARE QUE EN LOS JÓVENES TAMBIÉN ESTA DIOS.

11. COMENTARIO PERSONAL…

ES LA PRIMERA VEZ QUE PARTICIPO EN UN CURSO POR INTERNET, ME CONSIDERO BENDECIDA POR APRENDER DE TODOS LOS QUE COMENTAN EN EL FORO Y OJALA ESTE CURSO NOS HAGA MEJORES CADA DÍA PARA QUE EL MUNDO PUEDA CAMBIAR PARA BIEN.
QUE DIOS LOS BENDIGA

[Mayra Novelo]

1.- Reconozco éstas exigencias y procuro prepararme constantemente para estar a la áltura, antes de clases, charlas o comunicaciones encomendarme al E.S. para que sea Él quien me ilumine. Mi compromiso es un ejercicio diario de inteligencia, corazón y voluntad.

2- Si, logro ese respeto a la figura del formador y es tambien una lucha constante por permanecer.

3.-definitivamente la formación de mis alumnos y sus personas son mi preocupación, la preparación me ayuda a darles calidad y la oración a llevarles verdad. Sinceramente soy mejor preparandome que ofreciendo sacrificios, aunque a veces la preparación encierre alguno.

4.-Si, y es asombroso como el amor de N.Señor, nos envuelve a los alumnos y educadores con más fuerza cuanto más debiles somos.

5.-si, no solo me interesan sino que busco formas creativas de conocerlos mejor y de que ellos mismos se descubran, se conozcan a sí mismos y trabajen en sus necesidades e iniciativas.

6.-Intento estar para ellos, aunque realmente me gustaría tener más tiempo.

7.-me esfuerzo por hacerlo de la mejor manera posible y doy explicaciones sinceras y opciones para encontrar nuevas vias o modos de ver las cosas.

8.-Si, me gusta exigir en la medida que me exijo a mí misma, pero en la proporción adecuada a cada alumno.

9.-Claro que no, incluso muchas de sus actividades me entuciasman, me asombran y me enseñan.

10 y 11.-El texto de apoyo aporta una visión cristiana más completa del adolescente y una amplia vision de la responsabilidad que tenemos con ellos y con DIOS, los formadores y catequistas.
Porque mi compromiso, además de conocer al adolescente en toda su dimención, espiritual, fisica y psicológica, es guiarlos, darles mapas gráficos, religiosos, de valores etc, que ellos sean capaces de seguir y descubrir segun sus capacidades y necesidades personales, por tanto debo tratar a cada uno de manera personalizada intentando llevarlos a que creen su proyecto de vida, donde sea capaz de fundamentar en Dios su plenitud de vida, y se concientice de ser por elección propia ejemplo transformador del católico moderno, activo y comprometido que necesitamos hoy. Y con todo esto se que el curso es una herramienta ideal para iniciar logros.

Lic. Amira Peña
La Piedad Michoacán
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“Te amo, Dios mío, y mi único deseo es amarte hasta el último suspiro de mi vida. Te amo, Dios mío infinitamente amable, y prefiero morir amándote a vivir sin amarte. Te amo, Señor, y la única gracia que te pido es amarte eternamente... ”
(Cura de Ars)

[Mayra Novelo]

Reny Escribió:

[Cristina]

[Cristina]

Me olvidé de poner mi nombre completo:
Cristina Berg
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"Sacratísimo Corazón Eucarístico de Jesús, en Vos confio"
www.inmaculadamadre-salta.org

[Rosa Altamirano]

1.- Definitivamente si, a lo largo de mi experiencia como catequista, hija y hermana mayor de 5 hermanos me he podido dar cuenta de cuanto podemos influir positiva o negativamente en un niño o un adolescente, desde una simple palabra o comentario hasta una acción concreta. Soy conciente de mi vocación como educadora y esa conciencia me lleva al compromiso y a luchar para cumplirlo a cabalidad a pesar de los errores.


2.- Es mi compromiso y trato de cumplirlo cada día.

3.- Definitivamente los veo como almas que Dios me ha confiado, le dedico tiempo y preparación a cada encuentro aunque a veces no ha faltado la improvisación que aunque muchas veces funciona no es el mejor recurso de un formador, lo que si creo que me falta es hacer mas sacrificios para que la evangelización sea mas efectiva y trato de concientisarme que en mi juicio personal Dios me preguntara que hice con las almas que puso a mi cargo.

4.- Si, es lo lógico ya que somos seres humanos y tenemos esa tendencia al mal que es la concupiscencia muy bien explicada por Pablo en su carta a los Romanos.

5.- Si, ya que todo eso influye en su desarrollo y formación y uno como catequista profesor o padre tiene que volverse cómplice y amigo para poder guiarlos, ya que de ese acompañamiento dependerá mucho su futuro y realización a nivel humano y religioso.

6.- Me considero una persona accesible pero creo que a veces me involucro demasiado en los problemas de los demás y pienso que no debería se así.

7.-Trato siempre de conservar la serenidad en los encuentros con los catequizandos, trato de evitar los modos tajantes ya que cuando uno trata de imponer algo con los jóvenes todo sale al revés, apelo al razonamiento para que de una manera libre vayan aceptando las cosas que se tratan.

8.- Es algo en lo que trabajo.

9.- No

10.- Creo que ha aportado una visión cristiana real de el hombre en general, mas que de el adolescente asentándonos en nuestra real creación a imagen de Dios, describiendo (como bien lo explica ahí) que por mas espiritual que sea el hombre tiene una dimensión corporal.

* Lo que puedo decir al respecto es que estudiar e interactuar es la mejor manera de formarse y enriquecerse, así que agradezco grandemente la oportunidad que nos brindan de desarrollarnos y tratar un tema tan importante como es la educación de los adolescentes.

[Chuyita]

1. Si estoy conciente de la gran responsabilidad que implica servirle al Señor como catequista o educador en la fe y trato de hacerlo de la mejor manera, preparándome para poder llevar acabo este servicio.

2.Se que lo más importante es el testimonio, y me esfuerzo en ser coherente con lo que digo y con lo que hago.

3. Si estoy convencida de que son almas que Dios ha puesto a mi cuidado, por lo mismo, en ocasiones me siento temerosa de no estar cumpliendo correctament la misión que el Señor me ha confiado y se que necesito esforzarme y prepararme y sobre todo haciendo mucha oración y acudiendo continuamente a los sacramentos.

4. Soy conciente de eso y palpo el deseo que tienen los niños y jóvenes de sentir ese inmenso amor de Dios, desgraciadamente en la comunidad donde me ha tocado servirle al Señor, hemos encontrado bastantes obstáculos.

5. Sí me interesan, por eso el interés en prepararme mejor y poder ayudarlos más.

6. Trato de ser accesible y que mi comportamiento sirva de ejemplo a los niños.

7. Sí y trato siempre de explicar las razones y motivos de la decisiones que se toman, para que no haya dudas o malas interpretaciones.

8. Creo que sí, y trato de cumplirlo siempre.

9. No, de verdad que a veces son ellos los que me dan grandes enseñanzas.

10. Sí, me ha ayudado a tener presente lo valiosos y únicos que somos al ser creados con tanto amor y a la vez entender esa lucha interna, debido a la misma libertad que Dios nos ha regalado, al tener que escoger entre el bien y el mal, y como es en la etapa de la adolescencia cuando esta lucha es más grande.

11. Esta lectura me ha ayudado a profundizar más en el conocimiento de los adolescentes y entender que debo prepararme contínuamente para poder servir a Dios como él espera que yo lo haga.
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María de Jesús Santamaría Velázquez

[Mónica Díaz]

1. Definitivamente el educador debe primero conocerse a sí mismo para poder dar lo que tiene adentro tanto de conocimiento como de experiencia y la responsabilidad es primero con uno para poder dar a los demás. Si no hay ese compromiso y ese conocimiento personal no se puede volcar la enseñanza a los demás.

2. Es un aspecto fundamental en la educación de un formador ya que si nos quedamos únicamente en palabras y sin obras no lograremos nada de nuestros educandos, más bien les haremos un inmenso mal. Debemos predicar con el ejemplo.

3. En mi caso de catequista los chicos que vienen a formarse son almas que Dios ha puesto en mi camino para que yo siembre en ellos el conocimiento y el amor de Dios y que a través de mi persona como instrumento de Dios, puedan ellos llegar a conocerlo y amarlo y vivir su cercanía. Para ello es fundamental la oración y la preparación a conciencia, los jóvenes mejor que nadie, sienten cuando uno ha preparado y sienten la presencia de Dios si uno ha rezado por ellos y les ha puesto en sus manos. La catequesis es un hermoso sacrificio y dedicación que nos enseña de ambos lados, nosotros aprendemos mucho de los jóvenes y ellos a su vez reciben de nosotros nuestras experiencias de la vivencia con Dios.

4. Es uno de los puntos más cruciales que hay que tomar en cuenta ya que muchas veces nos dejamos llevar únicamente por la tendencia a lo malo y dejamos de ver lo bueno y noble que hay en ellos como Hijos predilectos de Dios, es lo que siempre debemos tener en cuenta y no olvidarnos especialmente en los momentos difíciles.

5. Si no trato de conocerlos y de saber sus inquietudes y su vida, no puedo llegar a ellos con el consejo oportuno y mis charlas quedarían en el vacío. En cambio cuando llego a conocerlos mejor, todos los ejemplos que empleo o los consejos que doy, se que les llega no sólo les suena vacíos o lejanos, por ello es indispensable conocerlos primero para poder dar lo que necesitan. Hay que poner amor en todo lo que hacemos es la clave para llegar a ellos con verdadero interés.

6. Nunca debemos olvidar nuestro papel y nuestra dirección ya que los chicos más que nadie necesitan ver en nosotros esas personas que les pueden guiar, no únicamente sus amigos, que por supuesto debemos tratar también de ser, pero no olvidar que somos los que dirigimos este barco que es la formación de ellos.


7. Esta es una de las partes más difíciles de la formación con jóvenes, el mantener la calma ya que muchas veces nos sacan de nuestras casillas y eso es muy negativo en la formación. Debemos siempre tener la paciencia y mantenernos firmes pero no violentos. Ellos aceptan las propuestas si se les da las razones para hacerlo y está ahí donde debemos encontrar la mejor forma de llegar a ellos, con ejemplos, material suficiente, historias, etc que les anime a seguir o a aceptar lo que se les está tratando de enseñar. Hay que hacer interesante nuestras charlas o clases y siempre diferentes no rutinarias ya que eso les aburre mucho.

8. Es importantísimo ser firme en nuestra posición sin llegar a ser violento, como dije anteriormente, ya que estamos formando a jóvenes que luego serán adultos vacilantes si no nos ven a nosotros firmes, de nosotros aprenden, por ello es importante prepararse bien y a conciencia investigar sobre los temas que vamos a tratar. Y pensar que Dios cuenta con nuestro trabajo de formadores y El nos dará el apoyo que necesitamos para transmitir mejor lo que El quiere que sepan, es lo bueno contamos con el Mejor Amigo.

9. Definitivamente no, nunca debemos pensar que por ser jóvenes no tienen que darnos mucho a nosotros, ellos nos enseñan todo el tiempo y es por eso que hay que buscar siempre en ellos los positivo que tienen y lo mucho que nos puede enseñar. Dar valor a cada uno individualmente no en masa es importante. Y está en nosotros sacar todo eso de positivo que tienen y su fuerza encauzarla para el bien.

10. Ha sido un elemento importante para reflexionar sobre la posición del hombre y principalmente el rol de los jóvenes en el mundo. Tomando en consideración primero que somos hijos de Dios y como tal su dignidad, pero a la vez tomar en cuenta que tenemos por el pecado, esa inclinación hacia lo fácil y lo negativo, por lo cual la formación es indispensable para rescatar esos valores humanos y sobrenaturales para darle a la persona su verdadero valor.

11. Comentario personal…

La adolescencia es uno de las etapas más hermosas de nuestra vida pero hay que saberla encausar, hay que aprovechar todas esas inquietudes, esa vitalidad, esas ansias de saber que tienen los jóvenes para llenarlos de lo bueno que hay en este mundo y de lo que Dios quiere para ellos. Un joven en nuestras manos es una piedra preciosa que la tenemos que moldear para que llegue a ser una hermosa joya que brille con su luz propia cuando llegue a ser adulto. Está en nuestra manos hacerlo y por ello la gran responsabilidad que tenemos y que hay que lograr hacerlo con la ayuda grande que tenemos. Orar, formarse y predicar con el ejemplo que sean nuestras consignas[/b]
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La paciencia todo lo alcanza, quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta
~~Santa Teresa de Jesús~~

[ana Iglesias]

1. Sí las conozco. Es una dfícil tarea la que hoy día tenemos los educadores, pero creo que con entusiasmo, trabajo y, sobre todo, creatividad, podemos hacer una gran labor educativa y enriquecernos mutuamente docentes y discentes.
2. No sé si lo lograré pero, desde luego, empleo un gran esfuerzo y tiempo todos los días para conseguirlo.
3. Los alumnos son para mi un gran potencial al que hay que estimular día a día con el fin de que saquen lo mejor de ellos tanto en lo personal como en lo social, familiar y moral.
4. Por supuesto. Es por eso que día a día debemos trabajar el fortalecimiento de su espíritu y de su mente.
5. Me interesan mucho pues de ello depende que alcancen una adecuada madurez personal y si conviertan en hombres y mujeres de bien.
6. Siempre trato de ser accesible pues como formador es mi deber y obligación atender todas sus inquietudes, miedos, alegrías, preocupaciones,... y tratar de ayudarles dentro de mis posibilidades.
7. Trato de conseguirlo aunque a veces la saturación de trabajo hace que cometa errores que siempre trato de corregir. Saber disculparse es muy importante.
8. Creo que sí puesto que los propios alumnos me lo han hecho saber en muchas ocasiones.
9. Nunca pues siempre se puede aprender de ellos.
10. Sí, porque para que una persona llegue a conocerse debe antes haber profundizado en lo más hondo de su ser y, ¿cómo mejor se puede conseguir sino mediante la propia fé?

[Yolanda Lomelín]

Respuestas:

1.-Si, Creo que el ser maestro te da la gran oportunidad de estar día a día cerca de los adolescentes y ser un modelo para ellos por lo que esto implica una gran responsabilidad, que requiere todo tu “SER” espiritual, emocional, corporal etc.

2.-Si, creo que la mayoría de las veces, aunque en ocasiones no es fácil, yo creo que lo más importante para que esto suceda es el mostrarnos íntegros, honestos, sin máscaras, porque los alumnos perciben cuando no estamos hablando de corazón y obviamente se pierde el respeto.

3.-Para mí, mis alumnos son una oportunidad de vida que me da Dios todos los días, para dar un buen ejemplo de vida, para acompañarlos, para ser alguien que puede “tratar” de entenderlos y acompañarlos en su proceso de “crecer”. En los personal soy mamá de 3 hijos una de 17, uno de 15 y otro de 10, y creo que el hecho de ser maestra me ha ayudado enormemente en mi rol de madre, ya que estoy cerca del ambiente en que mis hijos se desenvuelven, dándome la oportunidad de entender la presión social a la que se someten.

4.-Si, veo la grandeza de Dios en cada alumno, mis hijos, en cada ser humano, y me hace sentir un ser privilegiado por darme esta tarea de educador y formador, y hay veces que me siento tan impotente ante la incongruencia de los padres y los adultos en general, ya que no predicamos con el ejemplo y los adolescentes se confunden ante estas situaciones, haciéndolos más vulnerables a las tentaciones y a no poder tomar decisiones acertivas.

5.-Si, creo que Dios me dio el don de que los alumnos confían en mí, y trato de darme la oportunidad en clase por ejemplo si se que un alumno fue a una competencia, preguntar que tal le fue, o si sé que le fue mal en algo trato de buscarlo y decirle que cuenta conmigo, etc. Tomo en serio sus preocupaciones aunque en ocasiones para mi adulto parecieran algo sin importancia trato de ubicarme en su edad y darme cuenta de lo que esta sintiendo, aunque no siempre es fácil.

6.-Trato siempre de acompañar a los alumnos y dedicarles el tiempo que requieren, aunque en ocasiones las clases o el tiempo no me lo permite, desgraciadamente cuando esto sucede el alumno que te necesita en “ese” momento que no puedes, después quizás ya no quiera hablar.

7.-Si trato de explicarle las razones por las cuales se esta tomando esta determinación y trato de hacerlo conciente de esto para que lo acepte sin enojo.

8.-Si, creo que es algo que a lo largo de los años como maestra he aprendido, y lo primero que hago es hacerles notar que todo lo que hacemos implica una responsabilidad por lo que hay reglas que se deben cumplir y que esto no tiene porque ser una guerra entre ellos y yo, que debemos de cumplir con nuestras responsabilidades de una manera cordial.

9.-No, para nada, al contrario trato de entender los motivos por los cuales hicieron algo y lo platicamos para que ellos tengan un aprendizaje de sus acciones y de asumir responsablemente las consecuencias de sus actos, de hecho trato de recordar cuando yo era adolescente y todas las cosas que hice bien o mal pero que finalmente hubo gente cerca de mí que me ayudo a aprender de mis actos, por lo que trato de ser esa persona para ayudarlos.

10.-Si, realmente me hizo recapacitar en lo importante que somos como seres humanos hijos de Dios, y lo importante que es para los adolescentes el poder tener un aprendizaje académico sino también desde un aspecto espiritual y emocional para llegar a ser un ser humano integro en todos aspectos.

11.- Comentario personal: Para mí la lectura me hizo recapacitar en lo importante que es mi rol como educador y de la gran responsabilidad que se me ha dado con esto, de alguna manera me siento con un gran reto delante de mí y por otro lado me siento muy especial de poder ser un instrumento de Dios para dar ejemplo a los adolescentes. Gracias por esta oportunidad.

[EDWIN PASTORE]

RESPUESTAS

1. Estoy consciente de mi responsabilidad. Comprendo que emprender una tarea educativa de éste talante: EDUCADOR CATÓLICO, entraña una trascendente responsabilidad fundamentada en el ejemplo, en la predicación y el testimonio. Durísimo porque debo verme a mi mismo y abrirme antes de señalar la paja del ojo ajeno. Mi inteligencia, mi corazón y mi voluntad están comprometidos totalmente por mis hijos a los que intento, formar.
2. Hago todo lo que está a mi alcance para hacerlo. Porque me siento “en vitrina”. Es tan fácil hablar y tan difícil ser coherente. Por las actitudes de ellos, mis alumnos, siento que he ganado su respeto. No obstante, es una lucha diaria.
3. Mis alumnos y alumnas significan para mí las almas que Dios me ha encomendado, el tiempo que les dedico es de calidad, a veces en las prisas olvido prepararme pero busco que el instante en que entramos en contacto sea profundo para ambos. Siento que debo centrarme más en la oración. Para que de mi boca salgan palabras edificantes
4. Si creo que existe esa dualidad, hay un punto de equilibrio frágil que se balancea sujeto al menor viento para descalabrarse. Dar solidez a sus bases esa debe ser mi tarea. Apuntalar lo que Dios ha creado en ellos.
5. Sí me interesan. Siento una profunda recarga espiritual y energética dentro de mí al entrar en contacto con ellos. Su pureza y optimismo me elevan y su alegría me contagia
6. Trato de ser accesible. Para ello debo organizar mejor mi tiempo. No evado, sólo que a veces me siento abrumado de trabajo.
7. Si soy de naturaleza sereno y procuro sostener mi palabra. Trato de no contra argumentar innecesariamente.
8. Si Creo en la exigencia firme, pero soy de naturaleza cordial y ello a veces lo mal interpretan como una opción para evadir responsabilidad porque “yo siempre cederé”, Ampliaré plazos. Recuperaré notas, repetiré exámenes. Sin embargo analizo cada caso e intento descubrir si ha habido negligencia.
9. No nunca, a mi la juventud me enternece y me siento plenamente identificado.
10. Este texto me ha hecho ver la intrínseca conexión entre espíritu y educación. Educar es darse en el espíritu
11. Creo que mis alumnos y mis hijos viven en un mundo que les presiona para la transformación, Sea para bien o mal. La creatividad y las herramientas básicas para la transformación deben transmitirse sobre un pilar de principios bien cimentado. En la Adolescencia es cuando podemos ser un punto de inflexión en la vida de alguien. ¡Que el Señor todo poderoso inspire las tareas de todos nosotros! SER MÁS QUE PARECER Amén.
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LUZ QUE ILUMINA LA OSCURIDAD DEL ALMA

[Odin]

[quote="Mayra Novelo"]Cuestionario:
1. Algo que siempre en mi labor de educador, es el compromiso que he adquirido y las exigencias del mismo, ya que mi vocación de educador nace del reto de formar personas integrales, que lleguen a asumir un compromiso con su sociedad a la luz del mensaje del evangelio, y esto no se puede tomar a la ligera, ya que al ser la persona del joven mi campo de acción, tengo claro que las malas conductas y acciones de mi parte, marcarían en sus vidas una huella negativa, de ahí que mi vida, mis esfuerzos, mis sentires y toda mi voluntad estén en todo momento orientadas a dar lo mejor de mi a los jóvenes con quienes comparto día a día.

2. Cuando inicie mi labor educativa pastoral, (ya hace algunos años), alguien me dijo: - “cuida como te comportas, porque ese puede ser el único Evangelio que lea tu hermano” – debo reconocer que en el momento que escuche estas palabras no entendí la magnitud que estas contenían, pero cada día me convenzo más que como educador, mi testimonio y mis actos dicen más de mí y enseñan más a mis alumnos, que el discurso más grande, es por ello que pongo todos mis esfuerzos para pode ser coherente cada día.

3. Son personas, Hijos de Dios, que buscan ser comprendidos, ser respetados, valorados, que buscan reconocimiento frente a los demás y donde yo como educador y adulto les puedo ayudar a encontrar las respuestas a estos interrogantes que se les presentan, proporcionándoles las herramientas necesarias para que puedan enfrentar la vida con tristezas y alegrías.

4. Los dedos de la mano no son iguales, y mucho menos nuestros jóvenes, ya que cada uno de ellos se ve envuelto en medio de unas condiciones sociales, culturales y familiares muy diferentes que los lleva por esto mismo a afrontar la vida de maneras tan singulares, por tanto como educador tengo presente que cada joven es un mundo diferente y como lo dice Don Bosco en cada joven siempre hay bondad y me basta solo eso que sean jóvenes para amarlos y preocuparme por ellos.

5. Como educadores debemos procurar conocer las pendenciasen las cuales se mueven nuestros jóvenes, sus exigencias, sus conflictos sociales, morales, culturales y de fe; los ambientes en que se desenvuelven, ya que estos están cargados de un sinnúmero de peligros ideológicos y morales. Es necesario conocer su forma de afrontar la vida, sus imaginarios, sus alegrías y tristezas; ya que si desconocemos esto nuestra labor educativa carece de bases suficientes para llegar a ser significativa en sus vidas y esto lo tengo muy presente.

6. Si, es necesario como educador estar siempre abierto al dialogo, con los jóvenes ya que esto me permite llegar a conocerlos más y de esta manera llenarme de las mejores herramientas y recursos para poder interactuar mejor con ellos.

7. Con los jóvenes no se puede chocar, pero tampoco se debe ceder en todo, si queremos formarlos, es por ello que frente a alguna falta por parte de estos procuro llevar a que reconozcan en que han fallado y que consecuencias trae esto.

8. Considero que es necesario exigir amorosamente, de allí la importancia de la asistencia (termino propio de la espiritualidad y pedagogía salesiana) permanente, continua en medio de los jóvenes, por que así estos no verán en mi al profesor regañón, ni al policía vigilante, sino aquel con quien pueden contar y quien estará allí para animar, orientar o corregir.

9. Como ya lo dije, “si pretendo lograr algo significativo con los jóvenes no puedo chocar de frente con ellos”, con sus comportamientos, sino que procuro encontrar en primer lugar que motivan sus acciones y actitudes, para de esta manera poder entablar con ellos un dialogo abierto, que genere compromisos y cambios de actitud.

10. Pienso que como educadores debemos tener una preocupación permanente pos saber a qué le están apuntando nuestros jóvenes, que los motiva, que los lleva a desanimarse y desapasionarse de la vida. Debemos tener la mente y el corazón abiertos, pero sin ser permisivos. Y lo más importante debemos pedir a Dios en nuestras oraciones la sabiduría necesaria y la fuerza del Espíritu santo para poder llegara a los corazones y a la razón de los muchachos, ya que “el encuentro con los jóvenes se constituye en el lugar privilegiado para contemplar la acción de Dios”.

Mario Alejandro Angarita Mendoza.
Bogotá - Colombia.

Que el Señor y el amor maternal de Maria Auxilio de los Cristianos derramen sobre todos mil bendiciones.

[Juan José Hernández]

1.- Si conozco las exigencias de mí responsabilidad como educador, y se que principalmente es evangelizar y predicar la palabra de Dios, entre mis semejantes y estoy comprometido con el Señor, para cumplir cabalmente la misión que me está encomendando.
2.- Estoy conciente que Dios ha conferido en mí facultades divinas, las cuales las utilizo y utilizaré para el bien de todas las Almas, con mí palabra he logrado en mis semejantes, infundarles paz espiritual, amor y respeto por nuestro Señor Jesucristo, y al lograrlo se que me respetan.
3.- Las personas que Dios me ha confiado para salvar sus Almas, y pone en mí camino las veo con amor y respeto, sabedor de sus defectos dominantes, por lo cual pongo y pondré mí mayor esfuerzo en ellas.
4.- Si estoy conciente de la grandesa de cada Alma, y también lo estoy en la debilidad que el mal la envuelve.
5.- Si me interesa todo lo que les acontece, bueno o malo y en lo personal siento una paz espiritual en poderles ayudar y que les sirva de algo.
6.- Siempre seré accesible para escuchar a mis semejantes, en las buenas y en las malas.
7.- La serenidad es un factor importante para saber decir no, en ciertas circunstancias; si evito los modos tajantes en mí predicar; se explicar y llegar al fondo de los problemas de mis semejantes.
8.-Comprendo los problemas de las personas y trato de infundarles paz interior.
9.-No desapruebo a ninguna persona, por ser mayor o menor que yo.
10.- El texto de esta lección, me sirve para conocer las diferentes etapas del adolecente y saber como tratarlos mejor, en su beneficio espiritual.
11.- En términos generales, concidero que este curso, me servirá para entender las etapas de cambio del adolecente, ya sean fisiológicas, psicológicas y espirituales.

Juan José Hernández.
Ciudad de México, Distrito Federal.
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Juan José Hernández Aguilar

[Elena Hanon de Leon]

1. ¿Conozco las exigencias de mi responsabilidad como educador? ¿He comprometido con esto toda mi persona: inteligencia, corazón y voluntad?
Si, entiendo que como educadora católica estoy llamada a ayudar (orientar) al adolescente para que sea capaz de superar las dificultades que suelen acompañar los cambios que experimentan en esta etapa de su vida y guiarlos a que aprendan a administrar bien los talentos recibidos para dar Gloria a Dios.

2. ¿Con el testimonio de mis palabras y obras logro que los alumnos respeten la figura de un formador?
Trato de dar buen testimonio de vida, pues entiendo que las acciones deben de estar acordes a las enseñanzas. Pues si quiero que respeten la figura del formador debo no solo decirles de que manera actuar sino que vean el ejemplo que yo misma doy como persona católica.

3. Sinceramente ¿Qué significan para mi los alumnos? ¿Son almas que Dios me ha confiado y por lo tanto el tiempo que les dedico es de calidad, acompaño la preparación profesional con la oración y el sacrificio por ellos?
comprendo que los jóvenes con los que trabajo son almas que el Señor me ha confiado y me ha llamado a servirles, a darle lo mejor de mi, a darles amor, a entenderlos y a ver el rostro de Cristo Jesús en cada uno de ellos, a transmitirles todos aquellos conocimientos que Dios en su infinita misericordia me ha revelado. También estoy llamada a acompañarlos en su caminar con mi oración y mi dedicación en cada etapa de su crecimiento.

4. ¿Soy consciente de la grandeza que cada alumno tiene como imagen de Dios que es, pero también cuento con la debilidad y la tendencia al mal que le envuelve?
Si, creo que todos hemos sido creados a imagen de Dios y entiendo que el pecado nos ha dejado en el alma la inclinación al mal, por lo cual somos responsables de ayudarles a orientarse, a encaminarse al camino de la salvación.

5. ¿Me interesan verdaderamente sus preocupaciones, triunfos, fracasos, necesidades e iniciativas?
Si, pues si me considero educadora católica, cristiana, y los considero a estos jóvenes como mis hermanos, debo de sentir que sus caídas son mis caídas, que sus alegrías son mis alegrías y que como hijos de Dios que somos estamos en la obligación de ayudarnos unos a otros a superarnos y a ser las manos de Dios en la tierra.

6. ¿Soy siempre accesible sin olvidar mi papel de formador? ¿O me sustraigo por comodidad personal o con falsas razones para prestar a los alumnos la atención necesaria?
Trato de abrirles mi corazón para que encuentren en mí no solo al formador, sino a la amiga incondicional en la que pueden confiar.

7. ¿Uso siempre la serenidad cuando tengo que dar una negativa? ¿Evito cuidadosamente los modos tajantes? ¿Sé explicar las razones de la determinación y motivo siempre al alumno para que libremente la acepte?
Es duro y a veces difícil, pero trato de hacerles entender con razones el porque de mi negativa. Digo que es difícil pues no todos los jóvenes reciben la negativa del mismo modo, unos son mas receptivos y otros más rebeldes.

8. ¿Se combinar la exigencia firme con la comprensión y cordialidad con que se merecen ser tratados?
Trato de hacerlo, aunque no siempre lo logro.

9. ¿Desapruebo todo lo que hacen mis alumnos sólo por el hecho de que son más jóvenes que yo?
No, pues entiendo que pasan por etapas difíciles de cambio y que debo como adulto comprender y actuar con un poco de paciencia, respeto y sabiduría.

10. ¿El texto de apoyo para esta sesión ha aportado una visión cristiana real del adolescente? ¿Por qué?
Si, porque me deja en claro que como formadores católicos debemos asumir nuestra responsabilidad en apoyar a estos jóvenes a luchar para que desarrollen en su vida la gracia, las virtudes humanas, y los dones que reciben del Señor.

11. Comentario personal…
Siento que al leer y contestar estas preguntas, he reflexionado a profundidad sobre mi responsabilidad, como madre y educadora. Se que tengo mucho que aprender, y como humana mucho que corregir en mí. Pero tengo la confianza y la fe en Dios, que este curso me servirá para comprender más al adolescente y su mundo. Y estar más preparada y abierta a ayudarles a encontrarse a si mismos y lograr la madurez cristiana que ellos necesitan para luchar con la inclinación al mal y adoptar un nuevo corazón que conozca y ame como Cristo.

Elena Hanon de Leon - Nicaragua

[Silvia Ana]

1. ¿Conozco las exigencias de mi responsabilidad como educador? ¿He comprometido con esto toda mi persona: inteligencia, corazón y voluntad?
Como educadora que soy tengo muchas responsabilidades, ya que en mis manos está que yo eduque o bien o mal a las personas que por azar Dios ha querido poner en mis manos. Como educadora tengo que ser muy responsable y firme con mis convicciones y poder así transmitir valores firmes que hagan que los adolescente crezcan en el buen camino en todos los sentidos.
A veces hay que dejar cosas que te rodean y te gustan por el bien de tus alumnos, hijos o catecúmenos, a veces cuesta cuando no ves los frutos deseados y que intentamos sembrar, pero cuando ves que los frutos se dan todo se hace mucho más fácil y todo va más rodado.

2. ¿Con el testimonio de mis palabras y obras logro que los alumnos respeten la figura de un formador?
Eso es algo muy importante, ya que dependiendo de la forma de ser de los educadores así serán los educandos, el niño o adolescente tiende a imitar las figuras de aquellos que les educan y “así seamos así educaremos”. Con los adolescentes hay que ser firmes, pero también hay que saber ganárselos y llevarlos a nuestro terreno.

3. Sinceramente ¿Qué significan para mi los alumnos? ¿Son almas que Dios me ha confiado y por lo tanto el tiempo que les dedico es de calidad, acompaño la preparación profesional con la oración y el sacrificio por ellos?
Para mí los alumnos son algo muy importante que Dios y por supuesto el Sistema Educativo han puesto en mis manos para que les eduque para saber desarrollarse sobre todo como personas en un futuro.
Cuando comienzo un nuevo curso siempre los pongo en las manos de Dios y le digo que me guíe para educar a cada uno como lo necesite. Cada alumno o persona son totalmente diferentes y no todos deben de ser educados por igual, sus necesidades son diferentes y yo, con la ayuda de Dios, intento buscar aquella que se adecue a su forma de aprender.

4. ¿Soy consciente de la grandeza que cada alumno tiene como imagen de Dios que es, pero también cuento con la debilidad y la tendencia al mal que le envuelve?
Por su puesto, cada alumno es imagen de Dios y lo veo cuando estoy con ellos, pero yo soy humana y a veces, gracias a Dios las menos, veo las cosas negativas en vez de las positivas, reconozco que después me arrepiento de ello, porque yo, se supone que estoy educada y ellos no y debo de intentar convertir lo negativo en positivo.

5. ¿Me interesan verdaderamente sus preocupaciones, triunfos, fracasos, necesidades e iniciativas?
Si, porque todo lo que hagan en la vida también será gracias a mi, sus triunfos o fracasos también serán los míos, por lo tanto debo de suplir sus necesidades para que sus fracasos sean los menos posibles, aun que siempre de lo negativo se pueden sacar cosas positivas.

6. ¿Soy siempre accesible sin olvidar mi papel de formador? ¿O me sustraigo por comodidad personal o con falsas razones para prestar a los alumnos la atención necesaria?
Siempre estoy a disposición de los alumnos y sus necesidades, antes que formadora reconozco que intento ser su amiga, ganarme su confianza, incluso a alumnos musulmanes que no entran en mi clase me tratan como si fuese su profesora y me cuentan sus necesidades.

7. ¿Uso siempre la serenidad cuando tengo que dar una negativa? ¿Evito cuidadosamente los modos tajantes? ¿Sé explicar las razones de la determinación y motivo siempre al alumno para que libremente la acepte?
Mi forma de ser a veces es visceral por lo tanto peco de ser impulsiva a la hora de recriminar a los alumnos, también depende de mi ánimo en ese momento, por lo tanto debo de estar siempre en la alerta para que mi ánimo decaiga lo menos posible.
Intento explicarlas para que las entienda, pero lo mas bonito es que a veces yo doy mi brazo a torcer en algunos casos y reconozco ante ellos que yo también se equivocarme.

8. ¿Se combinar la exigencia firme con la comprensión y cordialidad con que se merecen ser tratados?
Siempre lo intento, los educadores no podemos bajar la guardia ni un ápice, ya que hay algunos alumnos que entonces nos pueden perder el respeto como tales y entonces nuestro trabajo será en vano, por lo tanto hay que tener un equilibrio entre las dos realidades.

9. ¿Desapruebo todo lo que hacen mis alumnos sólo por el hecho de que son más jóvenes que yo?
Para nada, de hecho reconozco ante ellos cuando yo también me equivoco, por lo tanto yo también puedo aprender de ellos.
10. Comentario personal…
La labor de educadora es fascinante, gratificante, pero también es dura y como decimos en España llega a “quemar” aquellas personas que hacen su labor o intentamos hacer nuestra labor bien.
Doy gracias a Dios por haberme puesto esta vocación en mi vida y por poder desarrollar en los jóvenes la tarea de poder inculcarles valores y saberes que después les servirán a lo largo de su vida y que siempre recordaran, por lo tanto tengo que ponerme las pilas y hacerlo bien, pera que el recuerdo sea bueno y no malo.