No estoy seguro de qué hacer...

[catolico_anonimo]

Hola a todos,

Enfrento en estos momentos el momento más difícil de mi vida. Esto trasciende de lo religioso y moral a lo sicológico. Tal vez para algunos exagero, pero quien estuviera en mis zapatos, y en mi mente, sabría de qué se trata todo esto en realidad.

Llevo 7 años y medio de casado con mi esposa, a quien le llevo 7 años en edad. Estoy en los mid-30s, y ella en los late-20s. Tenemos 2 hijas, una de 7 y otra de 3. Hermosas, preciosas, inteligentes, de un corazón increible, y sobre todo sentimentales, en especial la mayor.

Mi matrimonio siempre fue un matrimonio fuera de lo normal. Y a lo que me refiero con esto es que las cosas que se daban en nuestro matrimonio eran cosas que francamente caian en lo absurdo muchas veces. La inmensa mayoria de las situaciones que desembocaban en lo absurdo eran por actitudes de ella. Era muy inmadura, tenia actitudes muy dependientes, muy prejuiciadas, muy celosas y muy impulsivas. Y esto era asi desde el noviazgo. Yo sabia que ella no me convenia; mi subconciente me decia que ella no era mi tipo. Sin embargo continué con el noviazgo. Quizás porque ya estaba en los late-20s y la sociedad te presiona a que te cases pronto.

Espere de ella como esposa muchas cosas que ella no me dió. Esperé de ella mucho, como mujer, como esposa, como madre, como amiga, etc. Y no me daba casi nada. Definitivamente NO estaba preparada para el matrimonio. Y no es que yo sí lo estuviera, pero la diferencia en madurez era evidente. Y a eso se le suma que en su casa la educación que obtuvo fue muy muy distinta a la mía, especialmente en lo religioso. Yo siempre esperaba en ella mucha mas religiosidad, y nunca la obtuve.

Peleabamos mucho, ella era muy mal hablada, al cabo que yo resolvi con hablarle mal igualmente (ERROR!) Me salía con actitudes ridículas, con peleas, discusiones, rebascadas, etc. y yo, en un mecanismo de defensa que tengo (que ahora considero que es muy ineficaz y perjudicial) resolvia en hacerle lo mismo, no como venganza, sino para que ella viera como uno se siente cuando lo tratan así y arreglara su actitud. Esto no tuvo resultados. Muchas veces veia que esto era increible, era un mal sueño, porque de ella veia cosas increibles, en el sentido de que era increible ver actitudes en ella que uno no se espera en una relacion seria y madura. Se comportaba como una niña muchas veces, manipuladora, dependiente, muy vaga, y queria las cosas faciles. Para las cosas que queria, manipulaba mucho, hacia lo imposible hasta conseguirlo, asi sea si se gastaba mucho dinero, o se cambiaban planes, o se alteraban las cosas normales de una vida normal. Y si no lo conseguia se las arreglaba para obtener algo, aunque sea algo para no quedarse derrotada. Y para dar era dificil. Uno le pedia y poco me concedia. Yo cedí mucho, mucho mucho. Cedí por amor, cedí por madurez, cedí por aquello de que en la casa de uno manda la mujer (no soy machista, creo en la cortesía y en la igualdad de toma de decisiones en la casa). Cedí por la educación que mis padres me dieron, cedí mucho. Y ella nunca vió ese ceder mío.

Y confieso que yo no era un santo, pero jamás hice cosas trascendentalmente malas. Yo me volví vago igual que ella, mal hablado, mal humorado, y peleaba mucho con ella. El prejuicio se sembró profundo en mí al ver sus cosas, y eso dió lugar a muchas actitudes entre ambos tambien.

Pasaron los años, y mis ilusiones que tenia de una familia feliz, aunque no perfecta (no esperaba que fuera perfecta) se esfumaron, o mas bien se redujeron a una resignación. Mi esposa y yo viviamos una relación fatalista, mediocre, donde llegamos a considerar lo que no era suficientemente correcto como algo aceptable y no exigiamos más de nosotros mismos ni de nuestras vidas. Eramos "felices", pero yo sabia que no completamente felices, sino feliz en la mediocridad. Teniamos buenos momentos, buenos recuerdos de vacaciones, etc. Pero todo envuelto en un cascarón de una vida matrimonial mediocre. Yo estaba muy frustrado, hubiese querido que las cosas fueran distintas, pero acepté lo que era inaceptable, quizás porque me habia cansado de tratar de arreglar las cosas y hacer que ella viera las cosas correctas, no porque yo tuviera la razon en las cosas, sino porque las cosas correctas son así. Nos queriamos, habia amor, pero dentro de mí sentía que a ella no la queria como yo sé que puedo amar. Eramos más diferentes que iguales. Teniamos cosas en común, nos preocupabamos mucho por nuestras hijas, y nuestros padres siempre estaban envueltos con nosotros y nuestras hijas. Sin embargo, eso no quitaba la mediocridad que habia que arreglar; ¿o habia que arreglar algo en realidad? ¿Me estoy cogiendo las cosas muy a pecho? Yo soy conocido por ser así tambien.

Viviamos en esa mediocridad transparente, oculta, no evidente. Gran parte de esto fue porque YO me rendí, me rendí en mis peticiones de diálogo matrimonial que ella no entendia su importancia, me rendí en mi espera de que fuera una mejor mujer y madre, me rendí en ver en ella una madurez y cambio en sus actitudes. Lo veia todo como que peleabamos y arreglabamos, y me dormí en esa tibiez. Aunque siempre pensaba: "no estamos bien, necesitamos arreglar esta mediocridad y conformidad".

Sin embargo, cuando pensaba que a pesar que las cosas entre ella y yo eran mediocres, tambien pensaba que eramos felices dentro de todo. ¿Me engañaba a mí mismo pensar de este modo? ¿Era yo ingenuo? Es posible.

Mientras, a ella yo le daba la confianza de salir inofensivamente con sus amigas a comer, y le demostraba a ella que yo confiaba en ella, más también le demostraba a ella lo injusta que era ella conmigo cuando yo le pedía salir con mis amigos a un par de cervezas --algo que yo si lo hacia 3 veces al AÑO era MUCHO!-- ella no me lo concedia sin antes ponerme una pelea de dos horas, con todo y mis permisos sin reproches a sus salidas, que pasaban de mas de 10 veces al año.

Le demostré que yo sí confiaba en ella y la dejaba salir.

Y en varias de sus salidas me fue infiel.

Esto sucedió hace un poco mas de un año.

Al finalizar el año pasado ella intentó suicidarse.

Y ahí comenzó todo un drama trágico, sicologicamente extenuante para sus padres y mis padres, y nuestras familias respectivamente. Pero en especial y perticularmente extenuante y trágico para mí, quien era la persona mas cerca a ella.

Las navidades pasadas fueron las peores navidades de mi vida, y de su vida. Las pasó en un hospital siquiatrico con depresion mayor. Yo por mi lado creia que se trataba de una depresion a causa de que nuestro matrimonio no era feliz. Pero tambien surgieron muchas cosas que contestaron muchas preguntas que tenia sobre ella. En terminos clinicos mi esposa sufre de personalidad limítrofe. Y si buscan lo que esto significa y los rasgos de comportamiento de esta condición se darán cuenta que comprueba lo que ya he explicado hasta ahora sobre su forma de ser y sus actitudes y comportamientos. Incluso un doctor la llegó a diagnosticar como bipolar. Pero despues de todo, dentro del campo de la sicologia y siquiatria, los diagnosticos nunca son concluyentes, menos despues de solamente pasar varios dias en evaluar a la persona.

Las semanas pasaron en esta pesadilla terrible. Fue increíble. Tuvo 7 hospitalizaciones, alrededor de 5 intentos suicidas, ataques de ira, ansiedad, nerviosismo, panico. Realmente un trastorno, una crisis. Pero a todo esto, aunque los doctores me decian muchas cosas que hacian sentido, habian algunas que simplemente no encajaban, y es ahi cuando me sospechaba algo adicional a simplemente una manifestacion de algo sicologico como lo que ella manifestaba. Porque jamas la habia visto de este modo, y como la conocia bastante bien, sabia que algo más estaba pasando, y esto no era meramente un caso sicologico o siquiatrico.

Fue entonces que varios meses despues de su primer intento suicida (hace poco mas de 6 meses) ella me confesó que me habia sido infiel, que lo habia hecho supuestamente dos veces, y varios detalles adicionales. Mi primera reacción fue de alegria (increíble, verdad?) porque veia que esa era la causa de toda esta hecatombe de hospitalizaciones e intentos suicidas. Pero poco a poco el hecho de su infidelidad fue reclamando precio en mi mente, espiritu, mis sentimientos, mi estado de animo y mi sicologia.

Hoy vivo en una montaña rusa, porque a veces me siento relajado, pero poco a poco vuelvo a sentirme mal. Las imagenes, aunque imaginadas, de su acto con otro hombre no las puedo sacar de mi mente. Mi hombría quedó herida permanentemente. Pienso en todo lo que sufrí por ella, en las veces que me dije a mi mismo que ella no me convenia, en la mediocridad en la que deje que nuestro matrimonio se sumergiera, en las cosas que ella me hacia, en sus celos, en sus cuestionamientos sobre mi fidelidad hacia ella, en sacarme en cara novias anteriores o compañeras de trabajo, y NUNCA le fui infiel. Lo mas que pude haberle sido infiel fue de mente, y quizás un poco de corazon por desear otras mujeres, ya que me tenia muy frustrado, pero NUNCA toque a nadie ni me tocaron. Era bastante sensato como para no rebasar esa linea que sabia iba a tener resultados nefastos y consecuencias con ella, mis hijas, sus padres, mis padres, etc. Sufrí mucho con ella, y me dí cuenta que sí fui ingenuo en pensar el año pasado que ella y yo estabamos bien en nuestro matrimonio a pesar de las cosas que pasaban.

Y mas aun me dí cuenta que a ella realmente no la amaba como sé que puedo amar. He tenido otros amores, y sé cuando yo amo de verdad. Yo nunca sentí, perdurablemente, ese amor que he experimentado en el pasado. La quiero mucho, DEFINITIVAMENTE. No quiero que le pase nada a ella. Quiero que esté bien siempre, y que se cuide siempre. Pero no estoy seguro que la ame, que la ame con amor de esposo y amor de enamorado. Siempre pienso que si hay algo entre querer y amar, mis sentimientos deben estar ahí, porque la quiero mas que querer, pero no siento, o no estoy 100% seguro, de amarla. Y sé que no se trata de no saber si la amo o no, por lo que me hizo, sino porque me doy cuenta echando un vistazo hacia atrás que ella no era la mujer que realmente era para mí, y me casé con ella simplemente por casarme. Recuerdo que estaba inseguro cuando me casé con ella.

Ahora no sé que hacer. La quiero perdonar. Ella le pidió perdon a Dios y sé que Dios la ha perdonado. Ella se ha pedido perdón a ella misma, y creo que ella se siente mas o menos perdonada a sí misma. Me pidió perdón y yo la he perdonado, pero nadie me puede exigir que lo olvide, porque no se trata de algo asi de sencillo, señores. Esto abarca lo sicologico. Yo la perdono, pero el trauma y la herida a mi corazon y a mi hombria (no digo esto por ser machista, la hombria es algo natural y debe ser aceptado al igual que existe un orgullo feminista que es natural y debe ser aceptado; lo malo son los extremos en ambas cosas). Yo pienso que Dios debe comprender esto. Él sabe que yo la quiero pedonar de todo conrazon, aun con mi coraje, con mi ira, con mi tristeza, con mi herida, con mi inestabilidad emocional, con mis principios. Pero también ël sabe que soy humano y que olvidar no es fácil. Quizás el perdón perfecto es el que perdona y olvida, pero no creo que yo falte si la perdono aunque no olvide, porque vuelvo y digo, no olvido porque no me dé la gana y no quiera olvidar, sino porque un impacto de esta naturaleza como lo es la infidelidad no se olvida por muuuuucho tiempo. Le he dicho esto a ella, y le añado que lo más importante para ella es que me lo confesó.

Muchas veces pienso en divorciarme, y hemos hablado de eso. Ella tiene que asumir las consecuencias de sus actos, no puedo hacerme cargo yo de todo. Es hora de que en casa ella se haga responsable de muchas cosas que a lo largo de todo nuestro matrimonio fui yo quien se hizo cargo. Y si esto incluye la separacion o divorcio, ella debe de verlo y enfrentarlo. Sufrí muchas cosas en nuestro matrimonio y pude haberle sido infiel yo y/o haberla dejado, y no lo hice. Pero ya esto es el colmo. Nos hemos puesto de acuerdo en permanecer juntos y lucharlo. Pero al par de dias de hablarlo vuelvo a sentir que esto no va a prosperar. No va a ser igual. Los sentimientos no van a ser los mismos. Hay cosas que ella tiene que cambiar, que ella ya ha cambiado muchas cosas, y eso me consta, pero hay cosas muy fundamentales que aun tiene que cambiar. Ella yo sé que está muy arrepentida, y por eso le tengo compasión y la perdono, pero una cosa es perdonar y otra asumir ciertas consecuencias de sus actos. No puedo yo perdonar y tambien asumir el impacto de sus consecuencias en mi mismo, porque no voy a ser feliz. Y creo que Dios quiere mi felicidad y la de ella. Es posible que el divorcio sea lo mejor, que vivir una vida con reproches, sin ganas, sin amor verdadero, con prejuicios, y sobre todo con traumas y heridas, etc. Alguna solucion a esto debe haber. A veces siento que me vuelvo loco, porque pienso en las nenas, en sus padres, nuestros hermanos, mis padres, que por cierto recientemente a mi padre le diagnosticaron cancer, complicando mi estabilidad emocional.

Eso sí, puedo estar bien inestable, pero jamas pienso en el suicidio. En eso yo por convicción sé que no es la solucion.

En verdad estaria aqui desahogandome en el mismo mensaje, pero en realidad he escrito mucho. Hay muchas cosas que sé que ustedes no entenderian de simplemente leerlas aqui, pero seguiré explicando y desahogandome a medida que pasen los dias. El jueves tendré una cita con el sicologo, a ver qué me dice. Mis emociones y estado sicologico se complica con otros detalles, pero lo desahogaré mas tarde. Por ahora dejo mis palabras aquí.

En fin, esto es un debate entre lo sicológico y lo religioso.

Buenas noches.

PD: Soy católico, aunque existen algunas cosas (poquitas) que no estoy de acuerdo con la Iglesia Católica. Pero de eso puedo elaborar mas tarde.

[*Primavera]

Sí, habla...

Quiero oirte, tengo especial interes en oirte, amigo del alma.

Y... ¿sabes?... te comprendo.

Pero...

No estoy de acuerdo contigo.

Te quiero.

Me voy a comer.

Ya volveré.

Pero, sí, cuenta... cuenta, que quiero saber. Di.
_________________
*Primavera
http://www.Diosjesustehabla.com PRIVADO

http://www.catholicosonline.com

[catolico_anonimo]

No pretendía que todos me entendieran y estuvieran de acuerdo conmigo. Por eso decia que si estuvieran en mis zapatos y mi mente entenderian mejor, pero de todos modos estoy para escuchar a todo el que desee hablarme, y agradezco sus respuestas y opiniones.

En verdad no he contado muchos otros detalles. Tengo muchas cosas que me abruman la mente. Pero a medida que hable, y ustedes pregunten, puedo dar más detalles.

Saludos a todos.

[CarlosR26†]

Como esta ella ¿ya supero su condicion?
_________________
Amar es decir al otro: "Tu no moriras"

[Miguelop]

Hola Catolico_Anonimo, Hermano del Alma, si supieras lo sorprendido que estoy al leer tu caso, ya que lo que cuentas es sorprendentemente identico a lo que me pasa a mi, a excepción de unas tres cositas que te voy a comentar, pero en todo, todo, todo lo demás es igual, pensaría que mi vida se duplicó en tí. En lo que no coincide es en que mi esposa, no intentó suicidarse, en que yo no utilizo la palabra machista, y en que yo no pienso que el divorcio sea la solución.

Entremos en materia:

Mira Juan ( te llamo Juan porque se me hace una forma más dulce de llamarte que Católico_Anonimo, espero no te moleste), primero que nada, no te sientas solo en el mundo, yo estoy en la mismísima situación que tú, por eso te llamé hermano al principio. Ten fe en Dios, el todo lo puede, créeme por favor, porque en mi estoy viendo como me está ayudando.

No pienses en el divorcio porque sería una decisión egoista de tu parte, porque si eso crees que te hará feliz, la separación hará infelices a tus hijos. TU elegiste a tu mujer, nadie te obligó, así que TU eres responsable junto con tu esposa de buscar la felicidad tuya y de tu familia, tus hijos no tienen porqué pagar los errores que cometemos los adultos. Piénsalo siempre; al formar una familia, dejas de pensar en ti unicamente y debes de pensar por todos los integrantes empezando por tus hijos. El divorcio es una solución cobarde, una solución fácil, una solución que te va a dar más infelicidad. No se si estás casado por la iglesia, pero si lo estás, tú le prometiste a tu esposa ante DIOS, serle fiel en lo próspero y en lo ADVERSO, en la salud y en la ENFERMEDAD, y AMARLA y RESPETARLA TODOS los días de tu vida. Esto que te recordé, tatúatelo en la mente, porque lo que tu esposa necesita en este momento es que estés con ella en estos momentos de ADVERSIDAD y ENFERMEDAD.

Con respecto al resentimiento que le tienes por lo que te hizo, perdónala con el corazón y no con la mente, recuerda que en la mente tienes todos esos resentimientos y no es acosejable poner a convivir en la mente a los resentimientos con el perdón, porque los primeros se comerán al segundo. Perdona con el corazón para que este gobierne a tu mente y logres vencer a los resentimientos y malos recuerdos. Encomiendate a DIOS todos los días, reza, llora, desahógate en El, pídele su ayuda, y después de un rato de hacer oración, levántate, se fuerte y continua con tu vida, por que la vida es larga y tus hijos te necesitan.

Tienes que a partir de hoy a componer tu vida, ya diste el primer paso al escribir en este foro, no sabes lo mucho que vas a obtener aquí. Antes, cuando yo me sentía igual que tú, me ponía a pensar porqué DIOS, mejor hubiera unido en matrimonio a esos hombres buenos como tú y como yo, con esas mujeres buenas que también sufren, y hubiera unido a esos hombres malos con esas mujeres malas para que entre ellos se acabaran, pero ¿te imaginas que nuevas generaciones saldrían?, en un caso hijos extremadamente bien formados, e hijos extremadamente maleados. Ahora pienso que DIOS nos pone en esta situación porque quiere usarnos como instrumentos de conversión para que juntos como marido y mujer, luchemos juntos para crear nuevas generaciónes que hereden lo mejor de sus padres y eliminar todo lo malo que tenemos, porque si pensamos que nuestras esposas tienen defectos, nosotros no estamos tan limpios también.

Yo te recomiendo que ores mucho, asiste a misa con toda tu familia, dialoguen, dialoguen y dialoguen, ten fe en DIOS y el te ayudará.

Todo esto te lo digo porque a mi alguien también me lo dijo, cuando me encontraba en tu situación ( recuerda que tu vida es idéntica a la mía). Y veme hoy, no te digo que que ya superé todo, pero me siento con una fuerza interior que me dá confianza para enfrentar con alegría y amor lo que la vida me ponga enfrente.

Te voy a ser sincero, a mi casi no me gusta escribir, pero al leer tu caso, me sentí con la responsabilidad de ayudarte, aunque sea con estas letras. y te digo una cosa, yo te puedo ayudar y tú a mi me puedes ayudar. dame tu dirección de e-mail, para que yo te pueda seguir escribiendo y te pueda mandar algunas cosas que pienso te pueden servir.


y recuerda, No estás solo, DIOS siempre te acompañará; y recuerda también que tienes una gran misión en esta vida, que pedes materializar en tus hijos, Lucha, lucha y lucha por lo que amas. Yo te prometo que te tendré presente en mis oraciones como el nuevo hermano que descubrí hoy.

Espero noticias tuyas


Miguel