La Familia

[Sergio Ceceña]

Había una vez un pintor que quería pintar su obra maestra,
pero no encontraba inspiración, y decidió marcharse por el
mundo para encontrar esa inspiración que le motivara a
pintar ese magnifico y maravilloso cuadro.

Andaba mucho, se fijaba mucho, meditaba mucho, pero no llegaba
esa inspiración.
Viendo que no sacaba nada en claro, pensó en preguntar a la
gente.

Un día encontró a un sacerdote cuando se disponía para la
Santa Misa, se le acercó y le preguntó, qué era para él lo
más importante.
El sacerdote le respondió sin dudar: LA FE.
Desconsolado siguio su camino sin saber cómo podría pintar
esa cosa tan maravillosa.

Otro día, encontró a una novia en el día de su boda, se le
acercó y le preguntó, qué era para ella lo más importante.
La novia le respondió si dudar: EL AMOR.
El pintor se quedó algo preocupado, es precioso el amor, pero
¿cómo puedo pintar el amor?.

Otra vez vio a un soldado que venía de la guerra, se le
acercó y le preguntó, qué era para él lo más importante.
El soldado le respondió: LA PAZ.
El pintor se quedo algo preocupado, es preciosa la paz, pero
¿cómo puedo pintar la paz?.
Desconsolado siguió su camino sin saber cómo podría pintar
esa cosa tan maravillosa.

Se sentó desconsolado sin saber cómo podía pintar esas tres
cosas tan maravillosas.
Pasó un tiempo y descorazonado y desmoralizado por su fracaso
regresó a su casa.
Cuando llegó a ella, estaban esperándole en la puerta, su madre, su mujer
y sus hijos. En esos instantes, vio en su madre LA FE, en su mujer EL AMOR,
y en
sus hijos LA PAZ.
En esos momentos le vino la inspiración y pintó su obra maestra: SU FAMILIA.
_________________


Non nobis Domine, non nobis, sed Nomine tuo da Gloriam