II DOMINGO T Ordinario

[zaqueo]

II DOMINGO DEL TIEMPO DE ADVIENTO


10 DE DICIEMBRE DE 2006.



*PRIMERA LECTURA. BARUC 5, 1-9: Dios mostrará su esplendor.

*SALMO 25: R/ El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres.
Cuando el Señor cambió la suerte de Sión,
Nos parecía soñar:
La boca se nos llenaba de risas,
La lengua de cantares.

*SEGUNDA LECTURA: San Pablo a los FILIPENSES 1, 4-6. 8-11: Que lleguéis al día de Cristo limpios e irreprensibles.

*LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN S. LUCAS 3, 1-6.

-EVANGELIO: En el año quince del reinado del Emperador Tiberio, siendo Poncio Pilato gobernador de Judea, y Herodes virrey de Galilea, y su hermano Felipe virrey de Iturrea y Traconítide, y Lisario virrey de Abilense, bajo el sumo sacerdote de Anás y Caifás, vino la palabra de Dios sobre Juan, hijo de Zacarías, en el desierto. Y recorrió toda la comarca del Jordán, predicando un bautismo de conversión para perdón de los pecados, como está escrito en el libro de los oráculos del profeta Isaías: “Una voz grita en el desierto: Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos; elévense los valles, desciendan los montes y colinas; que lo torcido se enderece, lo escabrosos se iguale. Y todos verán la salvación de Dios”.

*COMENTARIO: Por haber dejado los caminos que llevan al señor, un buen día descubrimos, en muchos casos, que apenas sabemos cómo ponernos en relación con Dios, ni siquiera cómo pronunciar una palabra de oración. Nos encontramos en un desierto donde ni vemos ni oímos nada relacionado con la Buena Noticia que nos trae como anticipo el profeta Juan. Y el desierto va creciendo y va creciendo aún más las distancias con Dios.

Pero Dios es capaz de abrirnos caminos en el desierto y en el mar, y de llegar a nosotros a través de los aires, pero Él desea que colaboremos libremente en estos días de Navidad y nos acerquemos al Belén para ver al Niño-Dios que viene a salvarnos y liberarnos del pecado y la muerte. ¿Encontraremos el camino? Hay tanto frío y tan poco calor que necesitaremos mucha fe para emprender la marcha. Necesitaremos de una estrella para no perdernos. ¡Tantas cosas nos impide salir a su “encuentro”! Pero un ángel (nuestra estrella personal) nos quiere ayudar y nos recuerda unos caminos seguros para no quedarnos atrapados por otros caminos creados por nuestra cultura alejada de los únicos que nos conducen a la Vida.
Uno de los caminos es el de la oración que nos permite conversar con Dios, de descubrir su proyecto de amor sobre el mundo. Entra en nuestro corazón y hace morada en él. Un segundo camino es ver en el hombre al prójimo a quien debemos ayudar y amar. Y ver en él el rostro de Jesús. Y un tercer camino seria el allanar los caminos para desterrar para siempre las injusticias y desigualdades.


*PETICIÓN Y ACCIÓN DE GRACIAS: Jesús, qué bien cumple su misión Juan el bautista, preparando los caminos para tu encuentro con la gente. Se consideraba sólo la voz que grita en el desierto. Pero era toda una vida de austeridad, de testimonio, de invitación –con la palabra y la vida- a la conversión. Acogemos sus palabras: así veremos la salvación que nos trae.


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quien jamás se desnuda por temor a la verdad, nada sabrá del amor.