Sesión # 8 La Formación Integral y La Pastoral

[Evangelina M. de Terrazas]

Amados hermanos y hermanas en Cristo: ¡Paz en sus corazones!
Un saludo cariñoso y fraterno, y ruego al Señor por todos ustedes. Hemos estado en un tiempo fuerte de oración pro-vida, y hasta hoy he podido responder. El Señor escuche nuestras oraciones y tenga misericordia de todos sus hijos.

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Sesión # 8 La Formación Integral en la Pastoral del niño y del adolescente.

Ejercicio:
Considerando la formación doctrinal que se debe impartir en esta etapa de la vida y la exigencia natural del adolescente de recibir esta educación de un formador (padre de familia, maestro, catequista) coherente. Responde el siguiente cuestionario...

1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?
R.- Sí, comprendo que la Iglesia necesita auténticos Apóstoles dispuesto a vencer el mal a fuerza del bien, y que es apremiante la formación, para quienes tenemos la misión de educar a la niñez y la juventud, sobre todo como padres, abuelos y familiares, de los cuales debemos ser los primeros formadores.
Aunque llevamos una formación permanente, siento yo la premura de profundizar más y más, en el conocimiento de mi fe Católica, para salir al combate diario del espíritu. Cuando uno contempla los enemigos que debe uno enfrentar, no hay formación que alcance para atajar los problemas sociales, morales y espirituales, que se adecuen a estos tiempos que estamos viviendo; desgraciadamente siento que nos sobrepasan. Mientras más me formo, más siento la necesidad de formarme.
Pero eso, más que desanimarme, me impulsa a buscar los cauces de formación que se van relacionando con las necesidades que voy contemplando.
Esto me lleva a algo más que una Formación integral: humana, Intelectual, Espiritual, Pastoral familiar, social y Bíblica. Me lleva a la formación de los tres Ministerios: Profético, Sacerdotal y Real. A la vivencia personal, para poder transmitir con autoridad lo que he experimentado, y poder dar cuentas de mi fe a los formandos. Es tan grande el compromiso con Dios y con mis hermanos, que no puedo dar cualquier cosa, debo dar razones concretas de fe, y transmitir lo que ha vivido el corazón y está cierto de ello.

Cuanta urgencia siento en formar corazones misericordiosos que opten por Amar hasta el extremo como Jesús nos amó, y sean capaces de la abnegación, para enfrentar y vencer los ofrecimientos del mundo y con dificultad, caminar hacia la santidad de vida.
Más la fortaleza que necesito para llevar a cabo este proyecto de santidad, la encuentro en la frecuencia de los Sacramentos y en mi oración personal diaria con mi amado Jesucristo, Señor nuestro y dador de vida. Cuánto necesito orar y hacer sacrificios, para que abra esos corazoncitos tan sedientos de su amor.

En definitiva, una sólida, equilibrada y auténtica Acción Pastoral que desarrolle armoniosamente los Tres Ministerios, dará como fruto, una verdadera coherencia entre fe y vida, entre lo que se predica y lo que se hace, entre lo que se celebra y se ama, y en consecuencia, iluminará, sazonará y fecundará la historia de los hombres para que puedan llegar a formar parte viva, consciente y responsable del Reino de Dios.


2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?
R.- Sí, yo creo, ya que he recibido una formación doctrinal sistemática y coherente, en que han destacado nuestras razones para creer, y que ofrecen el tesoro de la fe cristiana que nos ha sido transmitida por medio de la Tradición y el Magisterio.
Sí, me esfuerzo en ser testimonio de vida, porque he recibido una formación eclesial, que ayuda a los bautizados a descubrir su propia identidad cristiana y a amar a la Iglesia como a una Madre, que cuida de sus hijos y vela por su educación para la vida. Por eso, mi comportamiento nace de mis convicciones de fe, y vivencias de mi corazón, porque yo amo a mi Madre, la Santa Iglesia.

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las fuerzas del mal, no prevalecerán contra ella?
R.- Estoy consciente de que Cristo, fundó su Iglesia sobre justos y pecadores, y no idealizo a los hijos de la Iglesia; los respeto como consagrados a Dios, y porque son seres humanos expuestos al error; sólo Dios puede juzgarlos y ellos darán cuenta de sus propios actos. La Iglesia es Santa por los méritos de quien la fundó, y no por méritos nuestros; es santa, porque su destino depende más de los designios del Padre, que de la iniciativa de los hombres. Por tanto, todos estamos expuestos a la debilidad.
Por esa razón, procuro cubrir las espaldas del hermano con la comprensión. Cuando constato algún defecto, veo la necesidad imperiosa y constante de ofrecer mis oraciones y sacrificios por ellos y por la santidad en su ministerio. En caso que fuese de gravedad, demasiado evidente, y fuera yo testigo de ello; haría con sinceridad lo que tuviera que hacer de acuerdo al Evangelio, para no caer en omisión. El mal se vence a fuerza del bien, y por eso, creo que las fuerzas del mal no prevalecerán contra la Iglesia, porque Cristo mismo lo ha dicho en Su Palabra, y Cristo es la Verdad absoluta.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?
R.- Sí, conozco gran parte, y algunas Patrísticas; las estudiamos, profundizamos y transmitimos. Cada documento nuevo me llega en directo, y después de leerlo, lo guardo para el momento en que me sea necesario. Creo que para vivir convencido de mi propia fe y amarla, es necesario antes conocerla; estoy cierta que si estoy convencida de ella, puedo convencer y contagiar a los demás el entusiasmo por este gran tesoro tan hermoso, que sólo nuestra Iglesia puede brindarnos para esclarecer los dogmas y criterios de fe.

Les comparto, una fracción de este hermoso documento:
La voz del Papa: San Agustín: «Ante la tumba de san Agustín, quisiera volver a entregar espiritualmente a la Iglesia y al mundo mi primera encíclica, que contiene precisamente este mensaje central del Evangelio: “Deus caritas est”, Dios es amor. Este es el mensaje que san Agustín sigue repitiendo a toda la Iglesia: el amor es el alma de la vida de la Iglesia y de su acción pastoral.

«Sólo quien vive la experiencia personal del amor del Señor es capaz de ejercer la tarea de guiar y de acompañar a los demás por el camino del seguimiento de Cristo. Os repito esta verdad como obispo de Roma, mientras, con una alegría siempre renovada, la acojo junto a vosotros como cristiano. Servir a Cristo es ante todo una cuestión de amor». (Homilía en la concelebración Eucarística en Pavía, Domingo 22).

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¿Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?
R.- Sí, los acepto con humildad y obediencia. Nunca he tenido dificultad para aceptar los mensajes doctrinales del Evangelio y enseñanzas de la Iglesia. Basta reconocer la autoridad moral, la autenticidad y la Verdad de quienes proceden, para aceptarlos.

Gracias a Dios, nuestra Iglesia tiene un tesoro incalculable que tanto nos enriquecen; un patrimonio universal que nos orienta y nos aclara todo aquello que por criterio humano, somos incapaces de comprender.
Sí, me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo. Por eso, soy fiel y me adhiero totalmente en obediencia al Magisterio de la Iglesia, y a las verdades de fe que la Iglesia proclama, ya que son personas sinceras, entendidas en la materia e iluminadas por el Espíritu Santo. En cuanto a mi fe, no me son importantes las opiniones e ideas personales y novedosas de quienes predican otras doctrinas, y menos aún, de quienes no están adheridos a la Iglesia y no son obedientes al Papa.
Sí, creo en la infalibilidad del Papa, y por eso sigo el magisterio de la Iglesia.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿Es para mí el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?
R.- Vaya que sí. Soy muy celosa de mi fe, y defiendo la Verdad del Evangelio con mi propia vida. No faltará por ahí algún despistado hermanito separado que no permite hablar, cuanto y menos escuchar cuando uno rebate sus herejías. Pero que importante es tener una formación y estudio apologético, como también sobre las Santas Escrituras para tener argumentos válidos y de peso, para echar abajo sus doctrinas que están fuera de la Verdad.

Sí, es vivo para el mundo. El cuerpo de Cristo es la Iglesia y la cabeza es Cristo mismo, quien participa dignamente en la Eucaristía; porque cada vez que celebramos el memorial de la muerte y resurrección de su hijo, se lleva a cabo la obra de redención para todo el mundo. Y la Iglesia será siempre viva, porque las fuerzas del mal, no prevalecerán contra ella.

7. ¿Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?
R.- Sí, creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia, según las promesas de Cristo: (Mt 25,31-46; Mt 24,30-31).
Sí, estoy conciente del compromiso tan grande que tenemos los seglares dentro de la Iglesia. Esta responsabilidad exige a nosotros formadores y padres de familia, estar muy atentos para que nuestros hijos y formandos, reciban una catequesis verdaderamente católica, completa y sin ambigüedades. Para esto, es necesario conocer con precisión la fe, y esforzarnos por vivirla con autenticidad, ya que si estamos convencidos de nuestra fe, podemos convencer y contagiar a los demás del entusiasmo por este tesoro.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que se encuentran alejados de ella, a los que no creen, a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?
R.- Creo que el testimonio de vida, será el reflejo de lo que uno ha visto y oído en su relación con Jesucristo en la oración y en los Sacramentos, ya que ser cristiano, comporta ser luz, testigo y apóstol de Jesucristo; ya que por nuestro bautismo hemos sido injertados en Cristo que es la luz del mundo.

A veces, he sentido gran impotencia y dolor, al sentir el rechazo de los hermanos separados o de los que no creen en Cristo, cuando hablo sobre mis creencias. A veces, no es suficiente el testimonio de vida, sobre todo, cuando ellos no están abiertos al diálogo y se sienten propietarios de la verdad. Es cuando el silencio abarca toda palabra, cuando una mirada de ternura, derrota al hermano separado o no creyente, cuando un gesto de bondad, echa abajo sus teorías que exponen con agresividad en contra nuestra, y cuando caen en su propia incoherencia entre su trato ofensivo y sus palabras extraídas de memoria de su Biblia cristiana.

Pero como hemos recibido la luz de Cristo, estamos llamados a difundirla a nuestro alrededor. No puedo esconder la luz de Cristo y de su doctrina, tengo que difundirla con mi vida y con mi actividad apostólica. Pero para ello necesito conocer con profundidad la doctrina católica, y ser capaz de exponerla y defenderla con motivos convincentes. Siento un gran gozo al expresar en todo lugar mi adhesión a la Iglesia y al Papa, y mi amor fiel a nuestra Madre Santísima. Somos una pequeñísima columna que sostiene con nuestras oraciones y sacrificios, a nuestro Santo Padre y la Iglesia.

9. Algún comentario...
En estos días que ha sido despenalizado y aceptado el aborto, y que me ha llegado la suficiente información sobre la insinceridad de los motivos en que se basaron para aceptarlo; he pedido perdón a Dios por tanta aberración, mi corazón se ha desgarrado, por tanto que se está ofendiendo a Dios.

Puedo contemplar hacia donde se están conduciendo a nuestros jóvenes por los intereses intrínsecos de ciertas personas, y las consecuencias amorales que puede conllevar esta cultura de muerte.
Mi mente se elevaba y veía los hogares desintegrados, los niños y jóvenes arrastrados por el relativismo de los adultos, la inocencia original inexistente. Cuánto dolor de muerte, cuánto dolor del alma…

Comencé a sentir la angustia de que algo tenía que hacer, no podía quedarme de brazos cruzados, y comprendí fuertemente la necesidad de la formación, del conocimiento de la Doctrina Social de la Iglesia. De luchar pro-vida hasta mis límites, y a veces es tan poco. Nos hemos sumergido en la oración de reparación, y para rogar por los Niños No Nacidos. Por esas madres jovencitas que optan por el aborto.

Veía a esas jovencitas y niñas, y la necesidad de formar sus almas, sembrar en ellos la semilla del amor, de principios, de valores Cristianos; formar una conciencia recta y una voluntad firme. Ahí es cuando digo que la formación queda chica, no es suficiente. Hace falta mucho estudio y formación para poder conducir a estas criaturitas hacia Dios.

En verdad, qué fuerte es esto. Cuánta impotencia se experimenta. Y lo más lamentable es que en estos tiempos, son tan pocos los padres que en verdad dedican su vida a amar y formar a sus hijos. Cómo echar abajo la educación de los jóvenes que han aprendido por imitación de sus padres. Cómo sembrar en ellos el deseo de la vida, de Dios, si llegando a casa se encuentra con contradicción y confusión?

Cuánto debe uno orar por ellos, cuánto pedirle a Dios que los conduzca hacia donde puedan darles un remanso de paz. El devolverles el sentido de la vida, de una vida digna de hijos de Dios.
Pero Dios hace recobrar la esperanza, al permitirnos contemplar a otros jóvenes de la JUFRA, que están luchando por todos estos ideales. Bendito sea Dios.

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Reciban todo mi amor en Cristo y Dios los bendiga en los Corazones Misericordiosos de Jesús y María.
Evangelina
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En Jesús y María
Evangelina


"JÉZU, UFAM TOBIE"

¡Por su Dolorosa Pasión,
ten misericordia de nosotros
y del mundo entero!

[bettygodoy]

Ejercicio

Considerando la formación doctrinal que se debe impartir en esta etapa de la vida y la exigencia natural del adolescente de recibir esta educación de un formador (padre de familia, maestro, catequista) coherente. Responde el siguiente cuestionario...


1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?

Si.la preparación es muy importante, debes tener conocimiento para poder rebatir a los demás en sus posibles dudas de fé.

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?

Todos los días pido a Dios y María Santísima que acreciente mi fe y me de la sabiduría para poder transmitirla y nunca ser motivo de escándalo.

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?

Durante 2000años la Iglesia ha sido atacada y ha prevalecido y tengo la firme confiaza que así será a través del tiempo.Como humanos todos tenemos errores, pero el bien tiene que triunfar en contra del mal.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?

No,he leído la encíclica de Dios es Amor de su Santidad, y me intereso en cualquier noticia o documento que publican de el, pero es todo.

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?

La Iglesia formada por Cristo en la tierra, está libre de error, somos nosotros como humanos que nos equivocamos.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?

Estoy completamente convencida que Cristo murió para salvarnos, pero quiso quedarse entre nosotros,vive en cada uno si nosotros así lo queremos, y si defiendo sus enseñanzas y procuro transmitirlas.


7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia.Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?

El Papa es el representante de Cristo en la tierra,por eso es importante pedir por el para que el Espíritu Santo lo ilumine en tan difícil tarea. Nuestra labor como catequista es muy importante porque en los niños vamos a sembrar la semilla del amor a Cristo.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?

Es mi objetivo y lucha de todos los días.

9. Algún comentario... para el segundo y tercero.

[tatianatapia]

Hola hermanos, por error puse Benedicto VII en mi aportación de esta sesión, en lugar de Benedicto XVI, desgraciadamente no reviso mis aportaciones una vez hechas con el temor de retardar su envío y por lo alejado que queda de mi comunidad un internet. Así que aprovecho una vez a la semana para hacerlo, espero disculpen, que no fué por ignorancia sino por las prisas, sin embargo espero ser más cuidadosa. Gracias.

[Blanca Aurora Hernández H]

Sesión 8
Ejercicio

Considerando la formación doctrinal que se debe impartir en esta etapa de la vida y la exigencia natural del adolescente de recibir esta educación de un formador (padre de familia, maestro, catequista) coherente. Responde el siguiente cuestionario...


1. Indiscutiblemente que los tiempos modernos nos comprometen a los formadores a contar con un conocimiento más a fondo sobre nuestra fe, pues las nuevas generaciones están acostumbradas a que todo hecho sea comprobable, de ahí nace la necesidad de que los formadores sepamos aclarar sus dudas y podamos contar con las herramientas necesarias para poder convencerlos de que cuanto les transmitimos es una realidad. Desde el Concilio Vaticano II, la apertura de la Iglesia hacia los laicos ha sido trascendental y cada vez tenemos más acceso a medios de formación que nos ayudan a contar con los conocimientos necesarios para atender las necesidades de los adolescentes en lo que a materia de fe se refiere. De manera personal estoy cursando la licenciatura en Ciencias Religiosas, lo cual me ha abierto un enorme abanico de posibilidades para conocer más mi fe.

2. Creo, pero aumenta mi fe. Es una plegaria que siempre elevo ante Jesús Sacramentado, pues considero que la mi fe dista mucho de ser plena como es la voluntad del Padre. Sin embargo los dogmas son incuestionables para mí, y si en algún momento existe algún criterio de la Iglesia que no me sea claro, busco ayuda para entenderlo y así asimilarlo plenamente. Mi ideal es llegar a ser un testimonio viviente de fe, sueño con irradiar a Cristo, aunque también me encuentro aún muy distante de ese ideal.

3. La naturaleza humana prevalece en la persona y la concupiscencia nos lleva a cometer errores, muchas de las veces involuntarios o por ignorancia. Eso no implica que no haya personas que quizá cometamos errores con conocimiento de causa. Sin embargo, no me corresponde a mí juzgar, considero que mi papel en esos casos es el de orar por mis hermanos para que el Espíritu Santo pueda iluminarnos y si además de mi oración puedo hacer algo para ayudarles a descubrir y enmendar sus errores, actúo; aunque en muchas ocasiones se haga realidad el dicho de: por andar de redentor salí crucificado. Tengo plena confianza de que el enemigo ha sido vencido por Cristo y aún cuando continúa esforzándose por ganar batallas, la victoria ya está dada.

4. Llegar a conocer todo el magisterio de la Iglesia implica dedicar mucho tiempo, del cual no tengo mucho. Pero sí busco leer e investigar sobre los documentos que hablan acerca de mi servicio específico. También me ayuda mucho Internet, pues se puede tener acceso a todos los discursos de los obispos a través de la CEM. Además de otros sitios que nos mantienen al día en este aspecto y al menos sé dónde buscar y encontrar luces para mi vida y para compartir con los demás. Otro medio que me ayuda siempre es estar atenta a la voz de mi Arzobispo y del Obispo, pues está muy al contexto de lo que acontece en nuestra región

5. Sí. Todo fiel cristiano está llamado a creer que la Iglesia es la depositaria de la fe y que es el Espíritu Santo quien la guía e ilumina a sus pastores para poder descubrir lo que Dios quiere dar a conocer a sus hijos. Creer lo contrario sería sumamente peligroso pues entonces estaríamos cometiendo los errores de tantos hermanos que se han separado de la Iglesia por sacar sus propias conclusiones a la luz de “su entendimiento”. El magisterio de la Iglesia es la interpretación de la voluntad de Dios hacia sus hijos y sin él, no tendríamos las luces suficientes para continuar nuestro caminar como pueblo de Dios.

6. Al creer fielmente en la enseñanza del Magisterio de la Iglesia, es mi propia conciencia quien me dicta seguirlo, vivirlo, transmitirlo y defenderlo. Claro que eso no implica entablar discusiones que ataquen o lastimen a quienes no lo entienden así. Mi deber es vivir estas enseñanzas con fidelidad y hacerlas parte de mi vida, sin que ello me de armas para el ataque, sino más bien para el convencimiento.

7. Esa es nuestra fe y nuestra esperanza, de lo contrario, como dice San Pablo: “si Cristo no resucitó vana sería nuestra fe”. El Credo es nuestra profesión de fe y este contiene toda la verdad sobre ella. Creerlo y expresarlo me compromete a vivirlo y a transmitirlo a los demás, es por ello mi empeño en ser mejor persona y mejor cristiana, pues en la medida en que practique la obediencia a Dios y a la Iglesia, podré ser “sal de la tierra y luz del mundo”, para ayudar a aquellos que no han descubierto las delicias del amor de Dios y la luz del Espíritu Santo, a encontrarlas y a vivir felices con la fe y la esperanza de que Cristo nos ha salvado para que seamos sus colaboradores en este mundo y alcanzar con Él la gloria eterna. Cada uno de los Sumos Pontífices han dado su contribución a la Iglesia y sus testimonio de vida son dignos de reconocerse como una invitación a la vida de santidad. Trato, aunque en muchas ocasiones se me pasa y solo lo hago un día, elevar mis oraciones por sus intenciones y pedir al Señor porque lo llene de Su santo Espíritu para que nos conduzca por caminos seguros. Me falta mucho para pagar con creces todo lo que el Papa hace por nosotros. Hoy reitero mi intención de orar más por él

8. Es algo que siempre procuro y lucho contra aquellos obstáculos que me lo impiden, sobre todo en el terreno profesional donde a las empresas ahora poco les importa el bienestar de sus empleados. El puesto que desempeño se presta para buscar el bien de los demás, aunque existen muchos impedimentos externos para lograrlo y esto acarrea problemas personales con los superiores, pero siempre me anima el saber que Cristo hizo eso y mucho más por mí y que seguirlo implica renuncia, soledad y persecución pero que vale la pena si es por el bien de los demás. He procurado que mis hijos asimilen la fe en esta Iglesia a la que pertenecemos y que ellos mismos sean los mensajeros hacia sus cónyuges para que juntos busquen el bienestar de su familia y de aquellos que los rodean. Mi labor con los adolescentes y jóvenes se basa en mi testimonio de fe pues de lo contrario no me escucharían y carecería del valor moral necesario para enseñarles. Esta es una tarea inacabable pues cada día hay algo que mejorar en mi vida y algo que hacer por los demás.

9. Una de las armas más poderosas, además de la oración, para mi apostolado, ha sido el Magisterio de la Iglesia y las Sagradas Escrituras, pues a través de ello he podido comprender y aclarar muchas dudas que surgen a causa de la ignorancia y de la transmisión de la fe con conceptos equivocados o por tradicionalismos. Sin embargo, a las nuevas generaciones les es un poco difícil recurrir a estos medios de evangelización pues están muy influenciados a tener las cosas ya digeridas y sin el mínimo esfuerzo y el estudio y análisis es algo tedioso para ellos. Sin embargo, la misma Iglesia nos proporciona medios didácticos para poder acercarlos al Magisterio de la Iglesia. Poniendo en juego los conocimientos que poseemos, la creatividad y acompañados del Espíritu Santo, será posible formar a los adolescentes y jóvenes de una manera integral y que descubran los grandes beneficios de ser católicos practicantes convencidos y no solo tradicionalistas.
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Quiero hacer de mi vida un libro, donde esté contenida la Ciencia del amor. (Teresa de Liseux)

[Nagely]

Ejercicio

Considerando la formación doctrinal que se debe impartir en esta etapa de la vida y la exigencia natural del adolescente de recibir esta educación de un formador (padre de familia, maestro, catequista) coherente. Responde el siguiente cuestionario...


1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?

R: sí, y si procuro formarme en el conocimiento de mi fe, pues se que es importante conocer para transmitir y conocer para amar, y no podría dar algo si no tengo preparación

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?

R: si, creo firmemente y de manera segura en los dogmas y criterios de la iglesia, pues se que eso solo puede venir de Dios, que lo ha revelado o la Iglesia que fue inspirada por Dios

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?

R: Sí, todos los que pertenecemos a la iglesia, y aunque no perteneciéramos estamos expuestos a equivocarnos y no debemos juzgar si esto pasa, sino corregir.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?

R: Solo algunos, no todos

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?

R: Sí, confió en la Iglesia, trato de aceptar las cosas con humildad.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?

R: Sí, defiendo las enseñanzas de la Iglesia, y claro que para mí la iglesia es el cuerpo de Cristo, por medio de la Iglesia Jesús se sigue haciendo presente.

7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?

R: si

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?

R: Si, trato de dar un buen ejemplo y un buen testimonio para que la gente que no se ha acercado vea que es posible ser , pensar y actuar de manera distinta.

[MARIA TERESA BARRIGA SOTO]

Considerando la formación doctrinal que se debe impartir en esta etapa de la vida y la exigencia natural del adolescente de recibir esta educación de un formador (padre de familia, maestro, catequista) coherente. Responde el siguiente cuestionario...

1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?
Si, lo hago porque se la necesidad que hay de formadores que tengan un conocimiento sólido y den testimonio con su vida.

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?
Si creo en todos ellos y de las cosas que más me preocupan es el testimonio que yo pueda dar, por eso soy muy cuidadosa en ser coherente.

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?
si, considero que en todos se hace presente nuestra humanidad y el pecado que nos marca y nos hace pecar.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?
Procuro estar al día, y conocer los escritos de la Iglesia.

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?
Si me doy cuenta del peligro que se corre en la actualidad si no estamos apegados al magisterio de la Iglesia, por lo que para mi, la guía es la Iglesia.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?
Si, las defiendo y se que es la presencia de Cristo en la tierra.

7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?
Si estoy conciente del compromiso como seglares y bgautizados, pido por la iglesia, el papa y sus necesidades, y confío en que todos estaremos reunidos en torno a Cristo.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?
Si lo hago. El comentario convence, pero el testimonio arrastra.

9. Algún comentario...
Considero que es muy importante en la actualidad ser una persona de oración, acción y testimonio...

[mary de plata]

1.Sí, definitivamente, pienso que personalmente he tomado conciencia de que me falta mucho para conocer realmente mi fe católica, por lo que trato de seguir formándome día a día, leyendo, participando de foros como éste, asistiendo a los cursos que imparten en mi parroquia, escuchando la radio católica y viendo de cerca los acontecimientos que se suscitan día a día en nuestra iglesia.

2. Creo realmente en todos los dogmas y criterios de la Iglesia, ya que en ese creer en que se basa nuestra fe católica. Trato de que mis comportamientos sean el ejemplo fiel de una vida cristiana en cualquier lugar o circunstancia en que me encuentre para no tener que ser motivo de crítica por mi testimonio de vida y en coherencia con el evangelio.

3.Tengo que admitir que la mayoría de las veces me cuesta aceptar los errores de mis hermanos en Cristo, ya que tiendo a juzgar siempre los comportamientos ajenos, pero al mismo tiempo, trato siempre de buscar a Dios en mis acciones y es ahí donde encuentro que todos tenemos derecho a equivocarnos y de igual forma ser perdonados. Cuando veo que hay defectos, sigo creyendo que Dios está siempre con nosotros y por algo lo ha permitido.

4. Tengo que aceptar que desconozco mucho del magisterio de la Iglesia, de los documentos como encíclicas, discursos y orientaciones papales y obispales, me falta por conocer bastante pero estoy consciente de mis fallas, así que estoy tratando de crear ese espacio en mi vida para aprender y conocer mejor mi Iglesia y su magisterio.

5.Todo lo que está inspirado en el Espíritu Santo es divino, los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas que de él salen son realmente inspiración divina y las acepto porque creo, esa es mi fe, en la que he sido educada y sigo creciendo día a día y por la cual apunto al que está libre de errores. El relativismo es una simple corriente, la cual siguen muchos por comodidad, no se puede ni llamar teoría, ya que toda teoría pienso yo debe ser sustentada en una práctica o realidad.

6.Sí, defiendo, tal vez a veces con poca valentía, soy un poco discreta en mi actuar, pero desde donde me desempeño, siempre defiendo las enseñanzas y mis creencias católicas. Seguramente, el adjetivo valiente, debe ser el estandarte de todo cristiano auténtico, y, eso es lo que aspiro ser. Para mí el cuerpo de cristo está vivo entre nosotros, nuestra iglesia, no es de muertos, es de vivos y lo puedo decir con plena convicción ya que nos nutrimos con la eucaristía para ser cuerpo vivo de Dios-Padre-Hijo-Espíritu Santo.


7. Si, creo de verdad en un Cristo y una Iglesia triunfantes sobre todo mal que nos aceche. Como la Iglesia somos todos, sacerdotes, religiosos y seglares, el compromiso es de todos por igual para que la palabra de Dios se haga vida entre nosotros hasta el final de nuestros días. Realmente, lo digo con tristeza, mi oración no es tan constante como debería, pero cuando puedo pongo al Papa en mis oraciones porque es nuestro pastor que nos guía y nos conduce hacia el Padre.

8. Sí, procuro siempre que mi vida sea coherente con la Palabra de Dios y ser testimonio ante aquellos que están a mi alrededor. En todos los ámbitos donde me desempeño enseño con mis acciones y mi ejemplo mi firme adhesión a la Iglesia y al Papa.

9. Comentarios…. Hermosa reflexión la de esta sesión # 8, personalmente pienso que en la medida que crezco espiritualmente me siento más comprometida a ser Iglesia. Definitivamente cada cristiano bautizado tiene una misión, en la medida que nos demos cuenta de nuestro compromiso encontraremos nuestra misión y nuestra Iglesia se mantendrá fuerte y firme. No desmayemos en nuestra oración, para poder algún día ver los verdaderos frutos del Espíritu Santo en nuestra Iglesia.



Mary Plata
16-5-07

[Lucita F.H]

1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?
Hoy mas que nunca comprendo y deseo luchar por un apostolado siempre disponible y para estomes fundamental prepararse y conocer mas profundamnete la fe catñolica, hay que buscar diversoso medios, lecturas, dialogo con personas conocedoras de estos temas , quizas no lo hago con frecuencia pero procura estar informada de lo que sucede y de los escritos de la Iglesia.

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?
Si conozco los dogmas y sin duda trato de no ser un mal testimonio para mis hermanos, pero sin duda soy un ser humano y dentro de todo tambien me equivoco, como decia San pablo, a veces "... hago el mal que no quiero y dejo de hacer el bien que quiero", pero me esfuerzo si por ser un buen testimonio.

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?
Prefiero pensar mas que en los defectos de mis hermanos en sus cualidades, que realmente eso es lo esencial. Sin embargo cuando hay errores que bueno afectan a toda la Iglesia confio en que nada podra derribarla y puede salir a siempre con la gracia de Dios adelante y frente a estos errores de quienes actuan se manera equivocada.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?
No dire que conozco todas, pero si me mantengo al tanto de los escritos del Papa, por ejemplo ahora hace poco de su visita a Brasil, por el CELAM.
ademas de las actividades de la diocesis de donde pertenezco.

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?
Yo estoy convencida que no hay nada mejor que vivir convencida y con conviccion en lo que se cree, hay un solo camino CRISTO.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?
Si la he defendido siempre ademas de valentía con mucho respeto y esto me ha traido grandes satisfacciones, buscando las cosas que nos unen como hermanos , respetando su doctrina pero tambien pidiendo respeto para la mía.

7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?
Si creo firmemente en la victoria de Cristo y de la Iglesia que permanece a traves del tiempo, y dando siempre nuevas energias y luces para todos los que vivimos en este mundo. Lo que suelo hacer es cada primer virnes del mes encomendar en mis oraciones ofrecidas al Sagrado corazón de Jesús las intenciones del Papa y necesidades de la Iglesia.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que
se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?
Bueno creo que en mmi labor docente si procuro dar buen testimonio de Dios en mi vida y todo lo que he logrado entregando mi vida en susu manos, incluso los alumnos me dicen como es que hago para tener siempre una sonrisa en el rostro ¿es que acaso no tiene problemas?, yo respondo que si, como todos, pero confio en Dios y porque preocuparme más que El.

9. Algún comentario...
Creo que lo que puedo compartir es que cuanto mas conocemos a Cristo y su Iglesia podemos defenderla con mas amor y fervor, convencidos de que hay una unica Iglesia la que fundo Cristo, sintiendonos como hijos queridos por el Padre que nos ofrece su gracia constantemente a traves de los sacramentos impartidos por la Iglesia.
No caigamos en la mediocridad y el relativismo, sino que cada dia acrcentemos nuestra fe
_________________
Hagamos del mundo una sola Familia

[Lucita F.H]

1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?
Hoy mas que nunca comprendo y deseo luchar por un apostolado siempre disponible y para estomes fundamental prepararse y conocer mas profundamnete la fe catñolica, hay que buscar diversoso medios, lecturas, dialogo con personas conocedoras de estos temas , quizas no lo hago con frecuencia pero procura estar informada de lo que sucede y de los escritos de la Iglesia.

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?
Si conozco los dogmas y sin duda trato de no ser un mal testimonio para mis hermanos, pero sin duda soy un ser humano y dentro de todo tambien me equivoco, como decia San pablo, a veces "... hago el mal que no quiero y dejo de hacer el bien que quiero", pero me esfuerzo si por ser un buen testimonio.

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?
Prefiero pensar mas que en los defectos de mis hermanos en sus cualidades, que realmente eso es lo esencial. Sin embargo cuando hay errores que bueno afectan a toda la Iglesia confio en que nada podra derribarla y puede salir a siempre con la gracia de Dios adelante y frente a estos errores de quienes actuan se manera equivocada.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?
No dire que conozco todas, pero si me mantengo al tanto de los escritos del Papa, por ejemplo ahora hace poco de su visita a Brasil, por el CELAM.
ademas de las actividades de la diocesis de donde pertenezco.

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?
Yo estoy convencida que no hay nada mejor que vivir convencida y con conviccion en lo que se cree, hay un solo camino CRISTO.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?
Si la he defendido siempre ademas de valentía con mucho respeto y esto me ha traido grandes satisfacciones, buscando las cosas que nos unen como hermanos , respetando su doctrina pero tambien pidiendo respeto para la mía.

7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?
Si creo firmemente en la victoria de Cristo y de la Iglesia que permanece a traves del tiempo, y dando siempre nuevas energias y luces para todos los que vivimos en este mundo. Lo que suelo hacer es cada primer virnes del mes encomendar en mis oraciones ofrecidas al Sagrado corazón de Jesús las intenciones del Papa y necesidades de la Iglesia.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que
se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?
Bueno creo que en mmi labor docente si procuro dar buen testimonio de Dios en mi vida y todo lo que he logrado entregando mi vida en susu manos, incluso los alumnos me dicen como es que hago para tener siempre una sonrisa en el rostro ¿es que acaso no tiene problemas?, yo respondo que si, como todos, pero confio en Dios y porque preocuparme más que El.

9. Algún comentario...
Creo que lo que puedo compartir es que cuanto mas conocemos a Cristo y su Iglesia podemos defenderla con mas amor y fervor, convencidos de que hay una unica Iglesia la que fundo Cristo, sintiendonos como hijos queridos por el Padre que nos ofrece su gracia constantemente a traves de los sacramentos impartidos por la Iglesia.
No caigamos en la mediocridad y el relativismo, sino que cada dia acrecentemos nuestra fe.

Luz Fernández
Lima-Perú
_________________
Hagamos del mundo una sola Familia

[Anymar]

Ejercicio



1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?

Claro que actualmente la iglesia necesita de gente dispuesta a la lucha por difundir el Evangelio, en estos tiempos en que existe mucho secularismo y procuro formarme en mi fe asistiendo a Escuela de Pastoral, a un crecimiento espiritual del Mov. De Renovación y transcribo homilías http://fraynelson.com/wiki/index.php?title=Portada

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?

Trato en lo mas que puedo dar testimonio de vida sobre lo que la Iglesia y la Palabra de Dios me enseñan.

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?

Trato de no verlos y se que el camino hacia la santidad es muy difícil. Sólo pongo la mirada hacia lo que Jesús vino a enseñarnos, frecuentando los sacramentos, leyendo y asimilando la Palabra de Dios y tengo la firme convicción de que Jesús es el Señor.

4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?

Como he mencionado estoy haciendo el curso en la Escuela de Pastoral en mi país y ahí vamos analizando algunas encíclicas y exhortaciones.

5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del Evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?

Como he dicho, conociendo, estudiando y meditando la Palabra de Dios poco a poco se van aceptando los mensajes del Evangelio, claro que es un camino muy difícil, se me presentan a cada momento pruebas, pero siento que me encuentro muy cerca de una dirección espiritual.

6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?

Como he dicho a veces se me presentan pruebas muy fuertes pues a veces con los hermanos protestantes, porque a veces son hasta de la propia familia, y sus argumentos muchas veces lastiman mi fe. Pero por eso me informo y estudio para defenderla y así tener argumentos para mi y para ellos.

7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?

Si creo en el final de Cristo y de su Iglesia, El tiene caminos preparados para regresarnos a todos hacia El y hacia nuestro Padre celestial y tengo claro el compromiso que tengo con la Iglesia porque por algo El nos ha llamado. Por lo menos rezo un Padre Nuestro por sus intenciones generales.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?

Ya lo he mencionado, en lo que puedo y lo mas que puedo trato de dar testimonio con mi familia y en la comunidad a veces pidiendo discernimiento. Con los que atacan no entro en discusión, mejor hago oración por ellos. Yo creo que lo mejor es el testimonio, debemos ser testigos.

9. Algún comentario...

Muy edificante el cuestionario, pero necesitaríamos alguien que nos diera alguna opinión. Ya tendremos que comentarlo con nuestro Tutor.

[Antonia Esquivel]

1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica?
Sí y debemos formarnos para alimentarnos y mejorar nuestro testimoni de nuestra fe católica asesorandonos con ustedes (catholic.net) y con el avance de la tecnología otros recursos.
2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? ¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa?
Sí hay que conocerlos, aceptarlos y vivirlos y realmente me esfuerzo en todo que a mí toca para que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa.
3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? ¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella?
Somos seres humanos y todos cometemos errores pequeños y grandes mejor debemos orar los unos por los otros para no buscar o encontrarnos defectos ó bien trabajar con esfuerzo y perseverancia para purificarlos y transformarlos para el bien de todos y en relación a la segunda parte de la pregunta estoy convencida de que las puertas del mal NO prevalecerán en contra de ella porque todos tenemos sed de hayar el amor de Dios.
4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él?
Hago el mejor esfuerzo para concerlas y estudiarlas apoyándome en mi Parroquia o en algún portal o enlaces que estén disponibles para nuestra orientación. Los básicos como el Concilio Vaticano, los Doctos. de Puebla, Santo Domingo, Medellín, etc. si los conozco y los he estado estudiando.
5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? ¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error?
Si porque todos los mensajes docrtinales de los Evangelios están orientados a que formemos una gran familia unidos por el amor a Cristo que nos lleva a Dios con la ayuda de Jesús mismo y la Iglesia que El fundo para orientarnos y porque el magisterio está animado y guiado por el Espíritu Santo y está libre de error.
6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? ¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo?
Si porque Cristo vivo continúa operando en nuestros dias llevando consuelo al que atraviesa por pruebas de dolor y sufrimiento, llevando alegría al que está con El ó que le ha encontrado, paz, amor y felicidad a todos los que nos sentimos y formamos su familia y que queremos continuar con su obra siendo sus ojos, manos,oidos, corazón, etc.
7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? ¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? ¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?
Si pero más que compromiso debe ser un gusto, felicidad y agradecimiento de poner un granito de mi ser para ayudar en algo en su tarea salvífica de todos los días y normalmente encomiendo en mis oraciones diarias (en el rezo de las laudes) a su Santidad Benedicto XVI a los Obispos, Sacerdotes, Religiosos, Religiosas, Misioneros, algunas veces en forma personal por sus necesidades físicas o espirituales de algún hermano consagrado y de todos los que nos piden hagamos una oración por ellos.
8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que
se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan? ¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa?
Trato de hacerlo en todo momento y trato de ser testimonio vivo y coherente de lo que Dios ha hecho en mi vida y familia; a veces mis compañeros de trabajo en la comida me esperan si me retrazo porque dicen que no pueden empezar a comer sin que hayamos hecho la bendición de los alimentos, otros a veces quieren retribuir algún pequeño favor u obra de misericordia pero les digo que no lo hago por la retribución y que mejor ellos hagan lo mismo cuando el Señor les ponga en su camino alguna necesidad igual o parecida en lo que les pude ayudar.
9. Algún comentario...
En cuanto tengamos mayor amor y adhesión a Cristo y a su Iglesia nuestro mundo y sociedades cambiarán porque tendremos el mismo lenguaje : el Amor puro e incondicional, trabajemos juntos por alcanzar este propósito y gracias a Catholic net que continúen con esta tarea evangelizadora para que todos seamos misioneros fieles del Señor.

[ukauka]

Ejercicio

Considerando la formación doctrinal que se debe impartir en esta etapa de la vida y la exigencia natural del adolescente de recibir esta educación de un formador (padre de familia, maestro, catequista) coherente. Responde el siguiente cuestionario...

[b]1. ¿Comprendo que hoy la Iglesia está necesitando apóstoles dispuestos para la lucha? si
Por esto, ¿Procuro formarme mejor en el conocimiento de mi fe católica? [/b]si

2. ¿Creo con una fe viva y operante en todos los dogmas y criterios de la Iglesia? si
¿Me esfuerzo por comportarme de tal modo que la Iglesia jamás sea criticada por mi causa? si

3. ¿Sé disculpar los errores de los hijos de la Iglesia? si
¿Cuándo constato defectos, sigo creyendo que las puertas del mal, no prevalecerán contra ella? realmente lsa iglesia la formamos seres humanos los cuales recibimos el sacramento del bautizo, pero al fin y al cabo somos seres humanos, todos con defectos y el único que tiene derecho y poder de juzgar es Dios. y siempre con Dios venceremos el mal.


4. ¿Conozco el magisterio de la Iglesia, las encíclicas, los discursos y orientaciones del Papa y de los Obispos en comunión con él? no siempre


5. ¿Acepto con humildad los mensajes doctrinales del evangelio y las enseñanzas de la Iglesia? si
¡ Me doy cuenta de lo peligroso que sería caer en el relativismo? ¡Claro!
¿ Sigo el magisterio de la Iglesia confiando en que está libre de error? como mencioné antes somos seres humanos y está en nosotros si es o no libre de error y aún asi, confío en que el magisterio de la Iglesia está dirigido e iluminado por el Espiritu Santo.


6. ¿Defiendo con valentía sus enseñanzas? si
¿ es para mi el Cuerpo de Cristo vivo hoy para el mundo? si

7. ¿ Creo de verdad en el triunfo final de Cristo y de la Iglesia? si
¿Soy consciente del compromiso tan importante que tenemos los seglares dentro de la Iglesia? si
¿ Encomiendo al Papa en mis oraciones y ofrezco algún sacrificio por él?
si.

8. ¿Procuro con mi testimonio, atraer a la Iglesia a los que se encuentran alejados de ella, a los que no creen , a los que la atacan?
Estoy en ese camino, tratando de volver a él, y ya que yo lo logre posrsupuesto que con mi ejemplo me encargaré de que los primeros wue vinieran conmigo as cumplir totalmente con los mandamientos de Dios es mi familia y ya que mis hijos y mi esposo sobre todo me acompañen entonces como familia estoy segura que seremos un gran ejemplo, espero seguirme preparando para lograrlo.
¿Enseño y doy ejemplo en mi familia, trabajo y a la sociedad de mi adhesión a la Iglesia y al Papa? Trasto de hacerlo y cada día que pasa creo que voy mejor.


9. Algún comentario...
La adolecencia en nuestra sociedad es una etapa que como padres de familia o catequistas debemos poner especial atencion y prepararnos de tal manera que esa etapa en los jovenes sea para ellos solo eso una etapa mas y no simbolo de desunión fsamiliar, social y religosa, debemos trabajar y estudiar muchisimo para que nuestros jovenes se sientan entendidos, amados y acompañados y no solorechazados en incomprendidos familiar, social y religiosamente hablando. ¡Dios nos ilumine a ambos!.

Segun yo ya había publicado mi respuesta, bueno espero sirva a esta fecha ....