Tema 3.2: Los aspectos del ente

[acmargalef]

[Raul A. del Campo]

Los trascendentes son atributos de Dios, el hombre los posee por participación, por lo que cada hombre y cada grupo tendrá diferentes grados. Todo intercambio humano puede ser enriquecedor y debe aprovecharse el intercambio humano y/o cultural, pero no se pueden priorizar ya que la fuente de toda trascendencia es Dios y a El hay que abrirse primero para llenarse, y luego poder intercambiar con todas las personas y culturas, en el amor y el respeto.

[Flora Valenzuela Miranda]

El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos.
¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?
Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

El hombre es limitado por naturaleza, a cada uno de nosotros él nos dio diversos dones y capacidades las cuáles podemos poner en práctica. Considero que sí, siempre debemos de estar abiertos a nuevos conocimientos ya que sólo se nos presenta un aspecto distinto de la realidad, nos ofrece una nueva perspectiva del todo. Nuestras opiniones ( trascendentales) nos muestran solo una parte de la realidad y a veces nosotros no alcanzamos a comprender la otra parte. Aunque en la actualidad debemos de tener mucho cuidado a lo que otras personas o culturas nos ofrecen, y siempre preguntarnos si lo novedoso que nos presentan fue guiado por el Espíritu Santo o tratan de alejarnos de Dios.

[Gabriela Derbez de Mooler]

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos. ¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje? Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.
La percepción que el ser humano tiene de la realidad esta limitada a los propios límites que el ser humano tiene. No, nos es posible mirar desde todos los ángulos, estar en todos los momentos, percibir de manera total y absoluta. Además de los límites puestos por nuestra corporalidad, tenemos también los límites que una razón limitada nos confiere.
Desde ese punto de vista es bueno abrirse a otros puntos de vista que otras culturas y personas nos ofrecen, pero para no caer en un relativismo es necesario tener siempre como referencia, al Único, Verdadero, Bueno y Bello. Si lo que los demás nos aportan son parte de esto, son puntos de vista válidos que amplían nuestro conocimiento. Si lo que aportan no tiene referencia a Ël debemos desecharlo pues no es verdadero, no nos aporta nada al conocimiento de la realidad.
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gabriela D. de Moller

[Luly]

El hombre debe preguntarse, si realmente quiere llegar a Dios, porque esa es la forma de trascender, es muy enriquecedor conocer otras culturas y pensamientos, asi como conocer perfectamente nuestra realidad de hijos de Dios para no confundirnos con "otras realidades" lo importante creo es no perder de vista nuestra relaciòn con Dios, debemos siempre saber que es nuestro fin último.
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Lourdes Reyes

[Elsa Yolanda]

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos.
¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?
Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

R.-Necesitamos otras perspectivas o nociones tan universales y análogas como ente pero un un significado peculiar que desvelen otros aspectos del todo. A cada uno de nosotros nos ha dado talentos y aprendemos unos de otros. Jesucristo dijo que venia por todos y cada uno de nosotros.
Pablo habla con Pedro sobre la evangelización de los gentiles y los no cincuncidados. Todos somos uno en igual dignidad ontológica y diferentes circunstancias
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Sé en quién he créido y estoy convencido

[Profe Toño]

"En todo pensamiento o doctrina hay realidades". Me parece que deberíamos aprender a pensar, no en "absoluto", como si mi pensamiento fuera lo único real; sino sabiendo que no puedo conocer todo lo que existe, pero cada quien puede tener un conocimiento real (verdadero) de lo que sucede... aunque su perspectiva sea diferente a la mía.

En la actualidad (y en todo tiempo y lugar) se da con frecuencia que al plantear un tema, alguien discrepa y al empezar a discutir critica a la persona con quien está debatiendo, se enoja y ataca y todo esto sin pensar que la otra persona puede tener algún error, pero también puede tener algún acierto. Me gusta mucho el modo como se discute cuando se utilizan términos como "mi opinión...", "mi punto de vista...", etc. No poseo el conocimiento universal y por tanto es absurdo pensar que todo lo que no coincida exactamente con mi pensamiento es falso.

Por otro lado, hay muchas personas que manejan falazmente los argumentos sobre todo en temas relacionados con principios; debemos aprender a descubrir, desvelar y corregir estos argumentos y predicar "la verdad" que es avalada por la lógica del pensamiento.
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Imponer es controlar, conquistar es formar, amar es vivir

[Alicia Podestá]

El ente, significa la esencia o naturaleza de cualquier cosa, en cuanto que no le repugna la existencia: y claro es que la esencia de una cosa se predica esencialmente de la misma, puesto que ningún predicado es más esencial que la misma esencia.
La existencia actual solamente a Dios conviene de una manera necesaria, inmutable y con independencia de otros seres, y por consiguiente sólo respecto de Dios tiene razón de predicado esencial; de manera que en Dios el acto de existir es tan esencial, por lo menos, a su naturaleza y concepto, como la omnipotencia, la inteligencia y otros predicados semejantes, sin los cuales no se concibe la esencia o naturaleza de Dios.

El concepto común de ente, conviene y se puede predicar de Dios y de las criaturas, de la sustancia y del accidente, pero no significa la misma razón objetiva en cada uno de estos sujetos, como acontece cuando se predica el género lógico, por ejemplo, la animalidad del hombre y del perro; sino que la cosa significada por la palabra ente, cuando se refiere a Dios, significa la plenitud del ser.

La percepción que el ser humano tiene de la realidad esta limitada.
No podemos hacer una mirada total y absoluta.
Son los limites que nos pone nuestra realidad corporal, y nuestra razón.
por ello es necesario abrirse a otras culturas, para poder enriquecer nuestro conocimiento de la realidad
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Me gustaria opinar y asesorar.

[Albert]

Estimado P. Alfonso:

¡Paz y bien!

[pepe82]

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos.
¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?
Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

Esto significa, que nuestro conocimiento de la realidad es siempre limitado. El abrirnos a opiniones e ideas de otras personas de nuestra y de otras culturas nos ayudará a ver la realidad desde otros puntos de vista, tal y como en el ejemplo del tren. Conociendo lo que en otros puntos de vista se descubrió, podreamos tener una percepción más completa, aunque aún limitada, de la realidad.
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"Altísimo, Omnipotente, Buen Señor..."

[R Real]

Participación en el foro


1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos. ¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje? Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.
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¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?


R.- Nos revela que somos limitados, y que nuestros semejantes, lo son también. Que LA VERDAD NO ES UNA POSESION, es DIOS.
Y Dios no cabe en nuestro pobre entendimiento,


Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

R.- Si deseamos compartir lo que sabemos de la verdad o la realidad; debemos entender que la óptica de cada persona es una fracción y que puede estar interpretada desde ángulos singulares, dados pór la experiencia de cada quien.
Así como la filosofía ha tenido estadios; así el conocimiento humano es superado constantemente por conceptos cada vez más perfeccionados.
Sin embargo debemos estar atentos; los católicos tenemos un manual irrevocable para aceptar o no lo que la ciencia declare: LOS 10 MANDAMIENTOS, surgidos antes que cualquier anuncio de los "derechos humanos"
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¡Ven Señor Jesús!........

[Mònica de Antillòn]

¡ Venga tu Reino!

Tema 2.3: “Los aspectos del ente”

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos. ¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje? Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.


(P. Alfonso escribiò: “Considerando al ente en acciòn: en relaciòn consigo y con otros: Todo ente es relacional porque està en acto, manifestàndose constantemente; recibiendo y comunicando)

Nos revela de que fuimos creados en “comunión de personas”, en que nos necesitamos unos a otros para vivir, subsistir y sobrevivir.
Juan Pablo II en su Enc, “Fe y Razòn” habla de la necesidad que tenemos de los demàs y de abrirnos a ellos, de lo que nos revelan y enseñan gracias a su experiencia personal… Necesitamos ser humildes para abrirnos a la riqueza que los demàs poseen en su interior o en su cultura..
La riqueza de los “trascendentales” de cada ser humano nos descubre una visiòn màs completa de la realidad.
Hoy en dìa lo podemos ver con la “globalización”… Toda la diversidad que ofrece el mundo, las personas con sus costumbres y sus creencias, nos llevan a experimentar a desear todo aquello que de bueno, verdadero y bello tienen los demàs.
¿No es verdad que todas las criaturas participamos de los trascendentales o de los atributos de Dios? (trasc. Relacional)


Mònica.

JUAN PABLO II NOS DICE AL RESPECTO EN SU ENCÌCLICA “FE Y RAZÒN”:


31. El hombre no ha sido creado para vivir solo. Nace y crece en una familia para insertarse más tarde con su trabajo en la sociedad. Desde el nacimiento, pues, está inmerso en varias tradiciones, de las cuales recibe no sólo el lenguaje y la formación cultural, sino también muchas verdades en las que, casi instintivamente, cree. De todos modos el crecimiento y la maduración personal implican que estas mismas verdades puedan ser puestas en duda y discutidas por medio de la peculiar actividad crítica del pensamiento. Esto no quita que, tras este paso, las mismas verdades sean «recuperadas» sobre la base de la experiencia llevada que se ha tenido o en virtud de un razonamiento sucesivo. A pesar de ello, en la vida de un hombre las verdades simplemente creídas son mucho más numerosas que las adquiridas mediante la constatación personal. En efecto, ¿quién sería capaz de discutir críticamente los innumerables resultados de las ciencias sobre las que se basa la vida moderna? ¿quién podría controlar por su cuenta el flujo de informaciones que día a día se reciben de todas las partes del mundo y que se aceptan en línea de máxima como verdaderas? Finalmente, ¿quién podría reconstruir los procesos de experiencia y de pensamiento por los cuales se han acumulado los tesoros de la sabiduría y de religiosidad de la humanidad? El hombre, ser que busca la verdad, es pues también aquél que vive de creencias.

32. Cada uno, al creer, confía en los conocimientos adquiridos por otras personas. En ello se puede percibir una tensión significativa: por una parte, el conocimiento a través de una creencia parece una forma imperfecta de conocimiento, que debe perfeccionarse progresivamente mediante la evidencia lograda personalmente; por otra, la creencia con frecuencia resulta más rica desde el punto de vista humano que la simple evidencia, porque incluye una relación interpersonal y pone en juego no sólo las posibilidades cognoscitivas, sino también la capacidad más radical de confiar en otras personas, entrando así en una relación más estable e íntima con ellas.

Se ha de destacar que las verdades buscadas en esta relación interpersonal no pertenecen primariamente al orden fáctico o filosófico. Lo que se pretende, más que nada, es la verdad misma de la persona: lo que ella es y lo que manifiesta de su propio interior. En efecto, la perfección del hombre no está en la mera adquisición del conocimiento abstracto de la verdad, sino que consiste también en una relación viva de entrega y fidelidad hacia el otro. En esta fidelidad que sabe darse, el hombre encuentra plena certeza y seguridad. Al mismo tiempo, el conocimiento por creencia, que se funda sobre la confianza interpersonal, está en relación con la verdad: el hombre, creyendo, confía en la verdad que el otro le manifiesta.

33. Se puede ver así que los términos del problema van completándose progresivamente. El hombre, por su naturaleza, busca la verdad. Esta búsqueda no está destinada sólo a la conquista de verdades parciales, factuales o científicas; no busca sólo el verdadero bien para cada una de sus decisiones. Su búsqueda tiende hacia una verdad ulterior que pueda explicar el sentido de la vida; por eso es una búsqueda que no puede encontrar solución si no es en el absoluto 28. Gracias a la capacidad del pensamiento, el hombre puede encontrar y reconocer esta verdad. En cuanto vital y esencial para su existencia, esta verdad se logra no sólo por vía racional, sino también mediante el abandono confiado en otras personas, que pueden garantizar la certeza y la autenticidad de la verdad misma. La capacidad y la opción de confiarse uno mismo y la propia vida a otra persona constituyen ciertamente uno de los actos antropológicamente más significativos y expresivos.

No se ha de olvidar que también la razón necesita ser sostenida en su búsqueda por un diálogo confiado y una amistad sincera. El clima de sospecha y de desconfianza, que a veces rodea la investigación especulativa, olvida la enseñanza de los filósofos antiguos, quienes consideraban la amistad como uno de los contextos más adecuados para el buen filosofar.

70. El tema de la relación con las culturas merece una reflexión específica, aunque no pueda ser exhaustiva, debido a sus implicaciones en el campo filosófico y teológico. El proceso de encuentro y confrontación con las culturas es una experiencia que la Iglesia ha vivido desde los comienzos de la predicación del Evangelio. El mandato de Cristo a los discípulos de ir a todas partes «hasta los confines de la tierra» (Hch, 1, 8) para transmitir la verdad por Él revelada, permitió a la comunidad cristiana verificar bien pronto la universalidad del anuncio y los obstáculos derivados de la diversidad de las culturas. Un pasaje de la Carta de san Pablo a los cristianos de Éfeso ofrece una valiosa ayuda para comprender cómo la comunidad primitiva afrontó este problema. Escribe el Apóstol: «Mas ahora, en Cristo Jesús, vosotros, los que en otro tiempo estabais lejos, habéis llegado a estar cerca por la sangre de Cristo. Porque él es nuestra paz: el que de los dos pueblos hizo uno, derribando el muro que los separaba» (Ef 2, 13-14).


A la luz de este texto nuestra reflexión considera también la transformación que se dio en los Gentiles cuando llegaron a la fe. Ante la riqueza de la salvación realizada por Cristo, caen las barreras que separan las diversas culturas. La promesa de Dios en Cristo llega a ser, ahora, una oferta universal, no ya limitada a un pueblo concreto, con su lengua y costumbres, sino extendida a todos como un patrimonio del que cada uno puede libremente participar. Desde lugares y tradiciones diferentes todos están llamados en Cristo a participar en la unidad de la familia de los hijos de Dios. Cristo permite a los dos pueblos llegar a ser «uno». Aquellos que eran «los alejados» se hicieron «los cercanos» gracias a la novedad realizada por el misterio pascual. Jesús derriba los muros de la división y realiza la unificación de forma original y suprema mediante la participación en su misterio. Esta unidad es tan profunda que la Iglesia puede decir con san Pablo: «Ya no sois extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y familiares de Dios» (Ef 2, 19).


En una expresión tan simple está descrita una gran verdad: el encuentro de la fe con las diversas culturas de hecho ha dado vida a una realidad nueva. Las culturas, cuando están profundamente enraizadas en lo humano, llevan consigo el testimonio de la apertura típica del hombre a lo universal y a la trascendencia. Por ello, ofrecen modos diversos de acercamiento a la verdad, que son de indudable utilidad para el hombre, al que sugieren valores capaces de hacer cada vez más humana su existencia 94. Como, además, las culturas evocan los valores de las tradiciones antiguas, llevan consigo -aunque de manera implícita, pero no por ello menos real- la referencia a la manifestación de Dios en la naturaleza, como se ha visto antes hablando de los textos sapienciales y de las enseñanzas de san Pablo.

71. Las culturas, estando en estrecha relación con los hombres y con su historia, comparten el dinamismo propio del tiempo humano. Se aprecian, en consecuencia, transformaciones y progresos debidos a los encuentros entre los hombres y a los intercambios recíprocos de sus modelos de vida. Las culturas se alimentan de la comunicación de valores, y su vitalidad y subsistencia proceden de su capacidad de permanecer abiertas a la acogida de lo nuevo. ¿Cuál es la explicación de este dinamismo? Cada hombre está inmerso en una cultura, de ella depende y sobrella influye. Él es al mismo tiempo hijo y padre de la cultura a la que pertenece. En cada expresión de su vida, lleva consigo algo que lo diferencia del resto de la creación: su constante apertura al misterio y su inagotable deseo de conocer. En consecuencia, toda cultura lleva impresa y deja entrever la tensión hacia una plenitud. Se puede decir, pues, que la cultura tiene en sí misma la posibilidad de acoger la revelación divina.

[manuelantoniocalixhollman]

El hombre,como miembro de una especie,se encuentra limitado dada su condición de ser finito,en su limitación sus posibilidades de crecimiento psicológico,tecnológico y aún espiritual,necesitan interactuar con individuos de otras culturas para elevar su condición de creatura de Dios.
En esos otros individuos encontramos caracteristicas del Creador diferentes a las nuestras,que vistas en el contexto del respeto por los valores de otros,enriquecen nuestra experiencia y nuestra vida.
Debemos relacionarnos con amor y respeto profundo a esos hijos e hijas de Dios,viendo en ellos el amor de nuestro Padre celestial,que no hace acepción de personas.

[Alan Josué Saldaña García]

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos.
¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?
Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

El ser humano no es perfecto como nos dice el P. Alfonso sólo Dios es perfecto y conoce todo nuestro alrededor con perfección porque el es el creador de todo lo que nos rodea, por lo tanto el hombre siempre tendrá limitaciones no veremos igual un campo que otra persona y no porque sea diferente a cada ojo humano, ¡no! si no porque cada quien observa con atención diferente, uno le presta atención a los detalles y lo que lo rodea, otro nomás lo mira momentáneamente lo esencial y no se fija talvez de los animalitos o plantas que lo componen hecha un vistazo rápido. Así cada uno tendrá una descripción verdadera del mismo ligar pero una más detallada que otras. Así pues debemos cada quien abrirnos a los puntos de vista de otras culturas y d otras personas que nos ofrecen, porque eso enriquece a la sociedad, en América por ejemplo talvez los países sean más parecidos entre sí mientras que en Europa a pesar de ser un continente muy pequeño son riquisisisimos en cultura cada país más pequeño que sea es de lenguaje, costumbres, ideales, forma de vida y de comportamiento distintos pero eso no los hace diferentes o de otra raza, porque hay que a aclarar somos Humanos esa es nuestra raza y especie, somos iguales la historia nos lo dice si la repasamos todos en algún momento de la historia estuvimos relacionados, fuimos una misma sociedad, país o provenimos de esta. con el paso del tiempo nos hemos estado dividiendo por las diferencias o para adaptarnos a un medio de pensamiento más compatible con nosotros y así nacieron los países actuales y que surgen y seguirán surgiendo en el futuro, por ello debemos aceptar los demás ideales nos enriquecen y talvez estros vean nuestros errores o más allá de lo que nosotros solo vemos espontáneamente porque nunca podremos saber de todo seremos expertos en una o docenas de materias, especialidades u oficios pero nunca en los mieles y talvez millones de cosas interesantes que nos rodean por eso si aceptamos lo que otros miran más detalladamente completaremos o que no vimos y seremos una sociedad más útil, buena y hermana. El Santo Padre Benedicto XVI lo ha dicho una y otra vez que debemos ser hermanos y aceptar las culturas e ideales del mundo lo dijo en su visita a Brasil hace unos días y anteayer en el Vaticano por esto paso un pequeño fragmento de los que ha dicho a lo largo de sus dos años de pontificado y esto es sobre los inmigrantes que al igual que los demás nos ofrecen ideales y propuestas culturales que nos enriquecen.



Cada país posee una cultura propia. Su conciencia histórica no es la misma que la del país vecino ni la de ningún otro. No obstante, sería falso negar que, incluso así, un gran número de naciones comparten, aunque sólo sea parcialmente, una riqueza común. La religión vuelve a suponer un ejemplo claro. Una buena cantidad de países latinoamericanos, europeos, e incluso asiáticos, participan en mayor o menor medida de una fe ya cristiana, ya musulmana, ya hindú. Las manifestaciones culturales convertidas en obras artísticas (esculturas, pinturas, arquitectura, literatura, etc.), evidencian la sintonía, la proximidad, en al menos un rasgo, aunque éste esencialísimo, del todo cultural.



En gran medida, la religión, como elemento constitutivo e imprescindible de una cultura, cuando no fundante, anima la visión que determinará la cerrazón o apertura en el proceso de integración de los inmigrantes y la reciprocidad por parte de los ciudadanos del país que los recibe. Nos encontramos así ante una pluralidad bien diversificada de posturas en torno al fenómeno de la integración del migrante, y la aceptación del mismo, en nuestra actualidad. Un fenómeno que se ha ido acentuando y tomando carices distintos tanto por parte de las masas que se movilizan como de los habitantes de los lugares hacia los cuales se desplazan y establecen.



Concientes de que la presencia de extranjeros, sobre todo en los países desarrollados o que gozan de un esperanzador futuro económico o pacífico, está constituyendo y va a seguir significando un fenómeno de la máxima importancia social, conviene buscar un encauce que distense el encuentro que supone. Es este encuentro el que plasma un planteamiento peculiar en torno al tema de la aceptación o integración mutua. Un “problema” que parece encontrar solución en las respuestas que ofrece la religión, que aporta la fe. Partimos de la obviedad tocante a la diversidad de credos. No es la religión en su conjunto, por el mero hecho de ser religión, quien puede establecer cauces válidos aunque esto se desearía.

una disponibilidad activa a las propuestas de participación para construir juntos una comunidad integrada que sea “casa común” de todos”. Actitud que puede entenderse como un deseo de conocer la historia nacional o aprender la lengua, por ejemplo; aceptación y valoración que no deben significar comulgar con falsos valores que más bien son vicios disfrazados de virtudes y que suelen presentarse como progresos de sociedades modernizadas. Tampoco debe entenderse esta inculturación como una renuncia al pasado, a la cultura en la que se nació y desarrolló el migrante; no se debe entender como la pérdida de los verdaderos y universales valores depositados en la cultura patria a favor de una malentendida homogeneización. Valorar lo nuevo no significa renunciar a lo que de bueno hay en lo propio. Dígase lo mismo para los que les reciben: ¡cuánta riqueza produce el abrirse a conocer lo que valioso y bello ofrecen otras culturas! Por eso es necesario llevar a cabo acciones legislativas, jurídicas y sociales para facilitar dicha integración.





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[RosaMa.]

Tema 3.2: Los aspectos del ente

No hay que olvidar que el hombre siempre anda en busca de la verdad y es por esto que no debe cerrarse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas ofrecen.
Existe un riesgo importante cuando la persona no se encuentra formada o educada, puede ser presa de algunas idelogias negativas.
Cuando el hombre esta formado, sobre todo espiritualmnente tiene sus criterios en Cristo.
El genero humano vive un periodo nuevo de cambios profundos y acelerados. provoca que el hombre con su inteligencia y actividad creadora.
Recaen luego sobre el hombre, sobre sus juicios y deseos individuales y colectivos , sobre sus modos de pensar y sobre su comportamiento para con las realidades.
Algunas culturas nos muestran una realidad propuesta de multiples maneras, sin embargo ante la actual evolución del mundo son muchos los que se plantean las cuestiones más fundamentales ¿que es el hombre , que hay despues de la vida temporal? esto n os revela que necesitamos otras perspectivas o nociones tan universales y análogicas como ser, pero con un significado que devele otros aspectos de todo.

Saludos.
RosaMa.

[federicorodriguezderivera]

Una gran lección se nos da sólo con la premisa para participar en el foro: "el hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos". Humildad, humildad y humildad.

¿Qué dice el hombre contemporaneo? No que "todo es relativo" o que "mi verdad es objeto de mi particular observación". Su relativismo no es pasivo, es "activo". Podría decir: "yo construyo mi propia realidad".

¿Y eso qué significa sino que se ha renunciado al conocimiento? Es como el mal alumno que no sabe quien es Cristobal Colón y tiene que rellenar el folio del examen. Puede optar por "poner lo poco que sepa", "escribir lo que ha oido, aunque haya oido mal", pero también puede optar por la genialidad de inventar un cuento. ¿Qué me importa saber quien es ese personaje?, construyámosle. ¿Qué me importa lo que son las cosas? redefinámoslas.

Corrijamos la naturaleza con la voluntad y definamos sólo real esa construcción. Embarquémonos en nuestro propio submarino, encerrémonos en nuestra propia cueva. ¿No son reales los pensamientos? ¿lo que concebimos, fuera de nosotros qué importa que lo nieguen otros?

Ese es un mundo de autistas, de personas "incomunicables", de "imposible diálogo". Y que como no puede sobrevivir por sí sólo, acaba redefiniendo a los demás como "pensamientos de nuestro propio ser, o del ser colectivo del que formamos parte y que YO soy su intérprete legítimo". Y como los demás seres son realmente libres y no se pliegan a mi pensamiento, acabo "ejerciendo la coacción"; empleando la fuerza y tiranizando a los que no se doblegan a mi voluntad soberana.

¿Eso es racional? ¿es posible entablar el diálogo con ellos? ¿Están mirando desde la ventana del tren de la vida el paisaje? No

Ciertamente son de los que se fueron al cuarto de baño, se encerraron en una habitación sin cristales, apagaron la luz y rompieron todo enlace con la realidad.

Desde ese "retrete" es desde el que nos quieren adoctrinar y enseñar cómo funciona el mundo.
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federico rodríguez de rivera

[Eleuterio]

Hola.

Soy Eleuterio Fernández Guzmán, y respondo desde Torrent (Valencia), España.


Mi comentario-respuesta al tema 3.2 titulado "Los aspectos del ente”

Se plantea lo siguiente:

El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos. ¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje? Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.


COMENTARIO-RESPUESTA


Es evidente que el hombre es, esencialmente, limitado y en esa limitación no puede, ni es capaz de tener un conocimiento total y absoluto de todo lo que le rodea ni, siquiera, de él mismo. Pretender otra cosa es desconocer la realidad y, lo que es peor, pensar y pretender que puede conocerlo todo y ser, por así decirlo, como Dios.

En cuanto a la condición humana esto nos indica, con claridad meridana, que se hace necesario un reconocimiento de nuestra humildad y, en verdad, lo poco que somos frente a Dios, Padre y Creador nuestro. Todo aquello que somos, cada trascendente de las cosas que podemos alcanzar a conocer, a entender, a aprehender, nos ha de servir para saber que, con relación a los demás, somos, sólo, otras personas, posibilidades con las que relacionarse, alguien importante por lo que somos y por la dignidad que nos corresponde como hijos de Dios pero, al fin y al cabo, otros más (pero no menos)

En cuanto al hecho de abrirse, teniendo en cuenta el reconocimiento que hacemos de nuestras exactas limitaciones, a otros puntos de vista que “otras culturas y personas nos ofrecen” tengo que decir que Martín Gelabert Ballester, Teólogo dominico español, en su libro titulado “Teología dialógica. Ante la fe desafiada” dice, sobre el comportamiento que tenemos que llevar a cabo en este especial caso, cosas mucho más acertadas que yo soy capaz de decirlo. Por lo tanto, me adhiero totalmente de acuerdo con lo que dice.



Esto es, lo que sigue:

“La apertura, acogida, colaboración, encuentro con esotro supone mantener mi identidad y la del otro. Dicho de otra manera: si el cristianismo deja de plantear problema al diálogo interreligioso, ya no hay aportación específica del cristianismo a este diálogo”.

O lo que es lo mismo, que el reconocimiento de nuestra posición, nos ha de hacer ver que es necesaria esa relación con el otro.

Además, dice, que “Paradójicamente, la profundización en la propia identidad, permite abrirse tanto mejor a los otros y comprenderles positivamente”.

O lo que es lo mismo, que es necesario el diálogo pero cuánto mayor sea nuestra preparación y conocimiento sobre nuestra fe, mejor podremos “situarnos”, fijarnos en el sitio, que nos corresponde y no “acomodarnos”, es decir, dejar que nos convenzan fácilmente los otros, por muy legitimados que estén para defender sus ideas.

Como resumen, digo que es totalmente obvio que, por nuestras propias características, somos limitados y, por eso, ha de aumentar nuestro conocimiento de la sabiduría de Dios y de su omnipotencia.






Que Dios nos bendiga a todos

[federicorodriguezderivera]

Estaba con mi "visión crítica de la modernidad" y había descuidado la visión positiva del "diálogo". Y Eleuterio tiene toda la razón:

Abrirse a los demás es una actitud natural de aquel que sabe que sólo no puede nada... si bien tampoco puede mucho acompañado si en su compañía no está Dios, porque la verdadera sabiduría no es "sólo conocer el camino a Dios" sino conocerlo por haberlo recorrido, por haber llegado a la meta. Porque mapas tenemos todos, pero llegar a la cima sólo lo hacen quienes se ponen en camino con la voluntad.

Es un ejemplo de que para nosotros "verdad y bien" son diferentes entre sí si bien se identifican con el ser. La verdad sólo no nos salva, es necesario el bien, el obrar. Pero "la soledad" no es la condición natural del hombre, sino la compañía. Nadie sube solo al cielo. Y todos los que Dios puso en nuestro camino no están por azar sino por providencia. ¿Qué menos que interesarnos por ellos?
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federico rodríguez de rivera

[teresin]

El hombre por naturaleza tiene limitaciones, las cuales hay que trabajar para madurar, si nos abrimos a otros puntos de vista podremos encontrar cosas nuevas donde no sabíamos que existía, muchas veces el saber diferentes puntos de vista nos ayuda a resolver problemas ya que nosotros estamos concentrados en un solo camino y las opiniones nos ayudan a abrir el panorama y entender un poco más de lo que nosotros sabíamos o entendíamos.

[Félix Fernando Baños Lópe]

[
1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos.
¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?
Que todos nuestros conocimientos sólo reflejan una parte de la realidad, por lo que es necesario seguir aprendiendo siempre. Mientras más sepamos, mejor comprensión tendremos de lo real, aunque jamás será suficiente.
Pero, por otra parte, eso muestra cómo necesitamos de los demás para conocer mejor lo que ya conocemos. La diversa perspectiva de la realidad -que ellos tienen- hará más completa nuestra visión.

Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.
Por supuesto que sí. Tal cosa es una verdadera necesidad intelectual.

[Dolores Torrado]

Pienso que el hombre es limitado en su capacidad de conocer y que siempre podrá conocer más y es importante que se lo proponga. El único que conoce todo es Dios.
Es bueno abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad, a otras culturas y a otras personas pero sin perder de vista lo que es correcto. Actualmente la investigación en el comienzo de la vida humana ha llevado a plantear si todo lo técnicamente posible es moralmente bueno y debería aprovarse. Esta investigación ha llevado a la muerte a muchos inocentes con el pretexto de la cura de enfermedades,o de crear un niño a parejas estériles.

[roca]

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos. ¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje? Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

El hombre no puede conocer todo lo que existe, y lo que conoce, no puede conocerlo en su totalidad. Somos limitados en cuanto a conocimiento se trata, nuestra inteligencia no puede abarcar todas las propiedades de la realidad, solo podemos conocer algunas y siempre desde nuestra óptica, estudio o punto de vista.
Todos los seres humanos somos y estamos limitados en nuestro pensamiento y lenguaje, no poseemos la verdad absoluta; nos falta sabiduría para conocerlo todo.
Ante esta realidad no podemos tener una mente cerrada al conocimiento que otras personas nos pueden aportar, da igual que estén más o menos preparadas intelectualmente, que vivan en el primer mundo o en el tercero, siempre habrá cosas que desconozcamos, que nos impresionarán cuando las veamos y que nosotros somos incapaces de hacer o comprender.
Por eso hay que tratar de mirar a los que son diferentes de nosotros, no solo por las apariencias sino por lo que son y por lo que pueden aportar a otros pueblos y culturas.

[María Sonnia Peñares de R]

Hola con todos los amigos del forum. Respecto a la pregunta me parece que es enriquecedor para uno, abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad, diversos de los propios. Y señalo algunas condiciones o puntos a tomar en cuenta.
Primero, tener una actitud de escucha, de observación y análisis para poder escrutar esa otra opinión, tratando de dejar de lado los propios prejuicios y encasillamientos que siempre hay (es necesario conocerlos) y luego de una reflexión serena señalar lo que es verdadero, según las propias opciones y elecciones de vida que hayamos hecho.
Segundo, tratar de comprender el porqué nuestro interlocutor piensa de esa forma, qué busca, qué motivos tiene. Así, aunque uno no esté de acuerdo con él, no se rechaza a la persona ni se la desvaloriza por pensar diferente.
Tercero, estar dispuesto a cuestionar nuestras propias opiniones y permitirnos una crisis que nos lleve a un cambio. No podemos madurar, avanzar, si nos aferramos a lo que somos en determinado momento, como si ya hubiéramos alcanzado la verdad absoluta. Estar abierto al cambio es estar abierto al crecimiento.
Por último, tener bien claro que "abrirse" no es necesariamente aceptar.
Hasta pronto.
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Sonia de Rebaza

[zaira yocelyn landamolina]

Primero que nada pido una disculpa`por no haber podido contestar antes.
El hombre no puede ser perfecto pues solo Dios nuestro señor es perfecto
solo que la humanidad se a perdido he intenta ser quien no es pues no es capaz de conocerse asi mismo como persona y cree que es perfecto y que puede superarlo todo,olvidando a un Dios que si es perfecto pues creo que el ser humano primero necesita saber quien es para que todo vuelva a su lugar pues no somos capaces de saberlo todo.
Bueno que Dios los bendiga

[marta aguirre]

Muchas gracias Mónica por publicar lo escrito por Pablo II, es importante conocer la universalidad del ser y apoyarnos los unos a los otros para conocer, aunque sea en una minima parte la inmensa grandeza de los trascendentes reflejados en la Trinidad Santa. Marta Aguirre quote="Mònica de Antillòn"]¡ Venga tu Reino!

Tema 2.3: “Los aspectos del ente”

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos. ¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje? Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.


(P. Alfonso escribiò: “Considerando al ente en acciòn: en relaciòn consigo y con otros: Todo ente es relacional porque està en acto, manifestàndose constantemente; recibiendo y comunicando)

Nos revela de que fuimos creados en “comunión de personas”, en que nos necesitamos unos a otros para vivir, subsistir y sobrevivir.
Juan Pablo II en su Enc, “Fe y Razòn” habla de la necesidad que tenemos de los demàs y de abrirnos a ellos, de lo que nos revelan y enseñan gracias a su experiencia personal… Necesitamos ser humildes para abrirnos a la riqueza que los demàs poseen en su interior o en su cultura..
La riqueza de los “trascendentales” de cada ser humano nos descubre una visiòn màs completa de la realidad.
Hoy en dìa lo podemos ver con la “globalización”… Toda la diversidad que ofrece el mundo, las personas con sus costumbres y sus creencias, nos llevan a experimentar a desear todo aquello que de bueno, verdadero y bello tienen los demàs.
¿No es verdad que todas las criaturas participamos de los trascendentales o de los atributos de Dios? (trasc. Relacional)


Mònica.

JUAN PABLO II NOS DICE AL RESPECTO EN SU ENCÌCLICA “FE Y RAZÒN”:


31. El hombre no ha sido creado para vivir solo. Nace y crece en una familia para insertarse más tarde con su trabajo en la sociedad. Desde el nacimiento, pues, está inmerso en varias tradiciones, de las cuales recibe no sólo el lenguaje y la formación cultural, sino también muchas verdades en las que, casi instintivamente, cree. De todos modos el crecimiento y la maduración personal implican que estas mismas verdades puedan ser puestas en duda y discutidas por medio de la peculiar actividad crítica del pensamiento. Esto no quita que, tras este paso, las mismas verdades sean «recuperadas» sobre la base de la experiencia llevada que se ha tenido o en virtud de un razonamiento sucesivo. A pesar de ello, en la vida de un hombre las verdades simplemente creídas son mucho más numerosas que las adquiridas mediante la constatación personal. En efecto, ¿quién sería capaz de discutir críticamente los innumerables resultados de las ciencias sobre las que se basa la vida moderna? ¿quién podría controlar por su cuenta el flujo de informaciones que día a día se reciben de todas las partes del mundo y que se aceptan en línea de máxima como verdaderas? Finalmente, ¿quién podría reconstruir los procesos de experiencia y de pensamiento por los cuales se han acumulado los tesoros de la sabiduría y de religiosidad de la humanidad? El hombre, ser que busca la verdad, es pues también aquél que vive de creencias.

32. Cada uno, al creer, confía en los conocimientos adquiridos por otras personas. En ello se puede percibir una tensión significativa: por una parte, el conocimiento a través de una creencia parece una forma imperfecta de conocimiento, que debe perfeccionarse progresivamente mediante la evidencia lograda personalmente; por otra, la creencia con frecuencia resulta más rica desde el punto de vista humano que la simple evidencia, porque incluye una relación interpersonal y pone en juego no sólo las posibilidades cognoscitivas, sino también la capacidad más radical de confiar en otras personas, entrando así en una relación más estable e íntima con ellas.

Se ha de destacar que las verdades buscadas en esta relación interpersonal no pertenecen primariamente al orden fáctico o filosófico. Lo que se pretende, más que nada, es la verdad misma de la persona: lo que ella es y lo que manifiesta de su propio interior. En efecto, la perfección del hombre no está en la mera adquisición del conocimiento abstracto de la verdad, sino que consiste también en una relación viva de entrega y fidelidad hacia el otro. En esta fidelidad que sabe darse, el hombre encuentra plena certeza y seguridad. Al mismo tiempo, el conocimiento por creencia, que se funda sobre la confianza interpersonal, está en relación con la verdad: el hombre, creyendo, confía en la verdad que el otro le manifiesta.

33. Se puede ver así que los términos del problema van completándose progresivamente. El hombre, por su naturaleza, busca la verdad. Esta búsqueda no está destinada sólo a la conquista de verdades parciales, factuales o científicas; no busca sólo el verdadero bien para cada una de sus decisiones. Su búsqueda tiende hacia una verdad ulterior que pueda explicar el sentido de la vida; por eso es una búsqueda que no puede encontrar solución si no es en el absoluto 28. Gracias a la capacidad del pensamiento, el hombre puede encontrar y reconocer esta verdad. En cuanto vital y esencial para su existencia, esta verdad se logra no sólo por vía racional, sino también mediante el abandono confiado en otras personas, que pueden garantizar la certeza y la autenticidad de la verdad misma. La capacidad y la opción de confiarse uno mismo y la propia vida a otra persona constituyen ciertamente uno de los actos antropológicamente más significativos y expresivos.

No se ha de olvidar que también la razón necesita ser sostenida en su búsqueda por un diálogo confiado y una amistad sincera. El clima de sospecha y de desconfianza, que a veces rodea la investigación especulativa, olvida la enseñanza de los filósofos antiguos, quienes consideraban la amistad como uno de los contextos más adecuados para el buen filosofar.

70. El tema de la relación con las culturas merece una reflexión específica, aunque no pueda ser exhaustiva, debido a sus implicaciones en el campo filosófico y teológico. El proceso de encuentro y confrontación con las culturas es una experiencia que la Iglesia ha vivido desde los comienzos de la predicación del Evangelio. El mandato de Cristo a los discípulos de ir a todas partes «hasta los confines de la tierra» (Hch, 1, para transmitir la verdad por Él revelada, permitió a la comunidad cristiana verificar bien pronto la universalidad del anuncio y los obstáculos derivados de la diversidad de las culturas. Un pasaje de la Carta de san Pablo a los cristianos de Éfeso ofrece una valiosa ayuda para comprender cómo la comunidad primitiva afrontó este problema. Escribe el Apóstol: «Mas ahora, en Cristo Jesús, vosotros, los que en otro tiempo estabais lejos, habéis llegado a estar cerca por la sangre de Cristo. Porque él es nuestra paz: el que de los dos pueblos hizo uno, derribando el muro que los separaba» (Ef 2, 13-14).


A la luz de este texto nuestra reflexión considera también la transformación que se dio en los Gentiles cuando llegaron a la fe. Ante la riqueza de la salvación realizada por Cristo, caen las barreras que separan las diversas culturas. La promesa de Dios en Cristo llega a ser, ahora, una oferta universal, no ya limitada a un pueblo concreto, con su lengua y costumbres, sino extendida a todos como un patrimonio del que cada uno puede libremente participar. Desde lugares y tradiciones diferentes todos están llamados en Cristo a participar en la unidad de la familia de los hijos de Dios. Cristo permite a los dos pueblos llegar a ser «uno». Aquellos que eran «los alejados» se hicieron «los cercanos» gracias a la novedad realizada por el misterio pascual. Jesús derriba los muros de la división y realiza la unificación de forma original y suprema mediante la participación en su misterio. Esta unidad es tan profunda que la Iglesia puede decir con san Pablo: «Ya no sois extranjeros ni forasteros, sino conciudadanos de los santos y familiares de Dios» (Ef 2, 19).


En una expresión tan simple está descrita una gran verdad: el encuentro de la fe con las diversas culturas de hecho ha dado vida a una realidad nueva. Las culturas, cuando están profundamente enraizadas en lo humano, llevan consigo el testimonio de la apertura típica del hombre a lo universal y a la trascendencia. Por ello, ofrecen modos diversos de acercamiento a la verdad, que son de indudable utilidad para el hombre, al que sugieren valores capaces de hacer cada vez más humana su existencia 94. Como, además, las culturas evocan los valores de las tradiciones antiguas, llevan consigo -aunque de manera implícita, pero no por ello menos real- la referencia a la manifestación de Dios en la naturaleza, como se ha visto antes hablando de los textos sapienciales y de las enseñanzas de san Pablo.

71. Las culturas, estando en estrecha relación con los hombres y con su historia, comparten el dinamismo propio del tiempo humano. Se aprecian, en consecuencia, transformaciones y progresos debidos a los encuentros entre los hombres y a los intercambios recíprocos de sus modelos de vida. Las culturas se alimentan de la comunicación de valores, y su vitalidad y subsistencia proceden de su capacidad de permanecer abiertas a la acogida de lo nuevo. ¿Cuál es la explicación de este dinamismo? Cada hombre está inmerso en una cultura, de ella depende y sobrella influye. Él es al mismo tiempo hijo y padre de la cultura a la que pertenece. En cada expresión de su vida, lleva consigo algo que lo diferencia del resto de la creación: su constante apertura al misterio y su inagotable deseo de conocer. En consecuencia, toda cultura lleva impresa y deja entrever la tensión hacia una plenitud. Se puede decir, pues, que la cultura tiene en sí misma la posibilidad de acoger la revelación divina.







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con verdad no ofendo ni temo

[federicorodriguezderivera]

Dice Marta, citando a Juan Pablo II:

[Marinela]

Como seres humanos todos tenemos un campo visual o de acción muy reducido. Vemos todo lo que pasa desde nuestro entorno, y con ayuda de las tecnologías actuales nos podemos “transportar” a lugares lejanos y entender vivencias ajenas, que nos “acercan” a culturas diversas.
Como seres limitados debemos abrirnos a otras experiencias, siempre y cuando reflexionemos sobre las propuestas que nos ofrecen o con las que nos encontramos. Lo importante es cuestionarnos, adentrarnos y pensar si estas cosas son buenas de raíz y nos ayudan a nosotros a acercarnos a Dios y a vivir en la verdad verdadera……….
Solos somos limitados……..con Dios lo podemos todo.
Saludos.

[María Cristina Garbarini]

1. El hombre no puede hacer experiencia de todo lo que existe ni conocer una cosa en todos sus aspectos.
¿Qué nos revela este hecho acerca de la condición humana, la limitación de cada persona, de nuestro pensamiento y lenguaje?
Juzgue si, como consecuencia, el hombre debe abrirse a otros puntos de vista sobre la realidad que otras culturas y personas nos ofrecen.

El hombre perfecto en su esencia pero imperfecto en sí mismo, no puede abarcar todos los aspectos del saber. Entonces a mi entender debe abrirse a otras formas de pensar y a otras culturas, para poder enriquecerse, sin dejar de vista los Valores y el Designio de dios.

[olga Beatriz Fernandez]

Toda persona humana es un ente que se relaciona en un dar y recibir. Su riqueza dependerà de "cuanto da ".
Dios es una realidad que se nos da en plenitud,nosotros participamos de su Ser mismo Subsistente.
Considero que el hombre con todos sus lìmites debe abrirse a todo aquello que de:bueno,bello y verdadero puede encontrar en el camino de su vida.
Ya lo decìa Juan Pablo II hablando de otras religiones:" busquemos lo que nos une màs que aquello que nos separa".
La Iglesia,con el tema del Ecumenismo,nos ha enseñado el poder del amor,de la verdad en la bùsqueda de la paz con hermanos de diferentes creencias.
En cuanto a otras culturas,personas y realidades queda saber "discernir" los tiempos y quien sabe debamos hacer como la paràbola del trigo y la cizaña: DEJAR QUE CREZCAN JUNTOS PARA LUEGO QUEDARSE CON EL TRIGO BUENO.

Gracias P.Alonso por todas las verdades que nos hace descubrir!

[marta aguirre]

Quisiera profundizar en el trascendental RELACIONAL, es desde mi punto de vista uno de los mas importantes, despues del amor, y tiene que ver con el mandato de Jesus: Amaras a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo.
Es el trascendental relacional el que nos hace comunicarnos con nuestros semejantes, teniendo en cuenta el mandato de Jesus, el amor al projimo, Todos somos parte inmanente del esse y en el ser nos parecemos a Dios.
Al relacionarnos los unos con los otros cumplimos con el mandamiento del amor que recibimos de Jesús, respetando sus analogias, sus no-entes.
Desde el "big-bang" hasta nuestros dias, el universo ha estado en constante expansión, formando nuevos entes, haciendo que nuevas especies e individuos compartan las múltiples e insospechadas perfecciones del esse.
Mi filosofia de vida es: Caridad, Humildad y Abandono, y recuerdo a un filosofo que dijo "Solo se que no se nada", ¿alguno de nosotros puede aclarar el misterio de la vida? Busquemos trascendentales que nos unan como: Justicia-Amor-Misericordia-Bondad...
gracias por "escucharme" cariños y tambien muchas gracias por vuestros comentarios, aprendemos unos de los otros y aumentamos poco a poco nuestra sabiduria que proviene de Dios. Amén Paz y Bien
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con verdad no ofendo ni temo