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SE PUEDE ENCONTRAR EL AMOR EXTRAVIADO?

 
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Autor Mensaje
de la mancha
Esporádico


Registrado: 06 Mar 2008
Mensajes: 59

MensajePublicado: Mie Ago 20, 2008 9:50 am    Asunto: SE PUEDE ENCONTRAR EL AMOR EXTRAVIADO?
Tema: SE PUEDE ENCONTRAR EL AMOR EXTRAVIADO?
Responder citando

Una de las satisfacciones que me ofrecía mi trabajo en el laboratorio de industrias químicas, era sencillamente, que a veces las relaciones profesionales que mantenía con la clase médica en un principio, se convertían con el tiempo en relaciones amistosas.
Y así me ocurrió con Maribel. Una vallisoletana recién licenciada en medicina, que consiguió una plaza interina de medicina general en el Centro de Salud de un pueblo madrileño.
La visitaba por motivos profesionales todos los meses. Nos reuníamos a comer en un restaurante situado a la falda de un castillo y de este modo, día a día, generamos una buena amistad.
Cuando llegó mi jubilación, nos veíamos con menos frecuencia pero seguíamos manteniendo un contacto frecuente. Ahora, Maribel tiene treinta y ocho años de edad y lleva diez de matrimonio.
Hace unos días me llamó por teléfono para tomar un café y charlar. La encontré un tanto triste.
Me comentó que está pasando el momento más negro de su vida. Que existe en la relación con Rafael, su marido, ciertas desavenencias de un tiempo a esta parte, que le hacen pensar que su amor se está perdiendo y solo queda un afecto sensible hacia él, entre otros motivos, por ser el padre de sus dos hijos.
No llega a entender, como puede apagarse en tan solo diez años de convivencia, esos gestos de ternura envueltos en los pequeños detalles del día a día o ese fuego que encendía un bello amor con ardientes llamas de ilusión y que hoy parecen extinguirse, sencillamente, porque sufre la decepción de una entrega que no tiene respuesta.
Y le angustia, que ese desorden que se viene manifestando en su vida de pareja, no esté amenazado por la discordia, el espíritu de dominio, los celos y otros pequeños conflictos, que puedan conducirles, tristemente, a una posible ruptura, si no son superados por el amor y la comprensión.
Sin embargo también piensa en sus hijos, ciertamente el don más preciado del matrimonio y que debe contribuir a alimentar el amor entre los padres. Y siente, que el futuro de los pequeños, por imperativos ajenos a ellos, les hagan olvidar su obligación de educadores y responsables, para darles todo el cariño posible, que les haga vivir en un mundo feliz, que por supuesto necesitan y se merecen.
En este punto, cuando las lágrimas de Maribel ahogan el tono de su voz y el silencio irrumpe en nuestra conversación, confieso que me siento desarmado, impotente, sin saber que decir ante el dolor de mi amiga y temo que al pronunciar alguna palabra, no se vuelva ridícula o inútil, porque en realidad solo una madre sabe consolar, como decía Dios en el libro de Isaías “quiero consolaros como consuela una madre.
No obstante, hojeando la Biblia, intento llevar a su alma ensombrecida, las palabras de Jesús en el Evangelio de Mateo (19,6.8.10.11) cuando manifiesta, que en toda la vida de los casados, su Ley será la fidelidad, la comprensión, el cariño y el sacrificio por el otro. Sin este espíritu cristiano, esta Ley vendrá a ser como una esclavitud o una cadena difícil de soportar.
Pienso, le digo a Maribel, que amar, es la más difícil de las asignaturas que hemos de aprobar. Ni se aprende con texto alguno, ni se transmite de maestro a alumno, sino que se aprende a costa de experiencia. Exige además, un aprendizaje que dura la vida entera. Y si este arte de amar, es el más grande y más difícil que puede practicar una pareja ¿cómo es posible que reflexionemos sobre él tan poco, que no sepamos distinguir entre lo que es amor y lo que es el afecto sensible hacia el otro?
Está claro que la vida de casados, es hermosa, pero no fácil. Es apasionada pero no acaramelada. Es alegre pero a veces se convierte en una cuesta arriba que apenas podemos subir.
Por todo esto, es cierto, que existen en el matrimonio, momentos de angustia y desaliento, en los que pensamos que algo se ha muerto dentro de nosotros mismos. Si, éste es un gran riesgo. Pero me parece a mí, que precisamente es ahí, donde se muestra el verdadero amor y el coraje para seguir adelante.
Lo fácil y cómodo sería cerrar los ojos y huir y lo difícil y a la vez humano, es seguir, intentando recordar donde se ha podido extraviar el amor para ir a buscarlo.
Apurando la taza de café, Maribel con los versos del poeta, dejó en el aire dos preguntas que parecían clausurar nuestra conversación. ¿Porqué el amor nos hace tan dichosos y su privación desdichados? ¿Porqué la ausencia de la persona amada, nos hace sufrir más de lo que su presencia nos hacía gozar?
Como dijo el poeta, la verdad es que los hombres descubrimos lo que vale el amor, cuando nos falta.

José Guillermo García Olivas
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enrique_ellena
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Registrado: 13 Dic 2007
Mensajes: 395
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MensajePublicado: Mie Ago 20, 2008 2:21 pm    Asunto:
Tema: SE PUEDE ENCONTRAR EL AMOR EXTRAVIADO?
Responder citando

Hola José Guillermo: Me encanto tu comentario hay fibra de poeta en el y suena hermoso cuando las palabras se hilvanan con tanta suavidad, encierran melodía en ellas. Pero debo decirte que disiento en el contenido, especialmente en las definiciones que sacas como conclusión de tu aporte y con mucha alegría y amor te cuento como lo veo desde mi tranquila vida de jubilado.

El amor amigo mío es un tesoro y cuando lo encuentras debes saber conservarlo, es ahí donde están los valores, la sabiduría y la inteligencia. El amor necesita ser cuidado conservado y enriquecido cada día, en ello esta su longevidad y su hermosura. Cuando transformamos el amor en un habito y nos servimos de el para controlar al otro, para someterlo o hacer nuestros antojos ejerciendo el egoísmo, la soberbia, estamos haciendo exactamente lo contrario, estamos matando el amor, estamos destruyendo todo lo que el nos tenia reservando, estamos renunciando a la felicidad y caminando en nuestra soberbia hacia el abismo.

Es ahí, cuando surgen los lamentos y las lagrimas, es este el momento donde ciegos a nuestros errores seguimos acusando y juzgando, cuando en realidad deberíamos pensar ¿en que me he equivocado? Rectificar, cambiar, pedir perdón y comenzar poniendo el doble de lo que debería haber puesto en un principio. La soledad, las lagrimas, la desazón, no resuelven el problema, son el resultado de nuestros meritos equivocados, el premio a la falta de inteligencia para saber que el amor se expresa con amor, con generosidad, con tolerancia, entrega y pensado en la necesidad del otro. Lo que mata el amor es el egoísmo, la soberbia, la falta de respeto, la violencia, la monotonía, con ello llega el hastió , el aburrimiento, la violencia y la insatisfacción, que traen a cuesta el fracaso y el pensar que todo esta terminado, vemos nuestra obra como la obra del otro y somos incapaces de resolver el problema, el egoísmo nos ha hecho perder la capacidad de revisar y reconocernos.

Tu amiga Maribel necesita mas que las palabras del evangelio, necesita revisar su vida y saber donde se rompió el tesoro, que fue lo que se hizo mal y por donde hay que empezar para restablecer una vida matrimonial de enamorados si es que todavía esta a tiempo y comenzar a corregir y dialogar, este es el primer concepto de por que se llega al frío del silencio, la falta de dialogo fecundo, inteligente, respetuoso, con disponibilidad para acordar, a conceder a planificar inclusive la felicidad antes de que se marchite el amor.

El matrimonio es el amor expresado de a dos en uno salo carne, un solo corazón y una misma necesidad, con ello caminaremos unidos hacia el mismo proyecto y viviremos una misma alegría y una misma necesidad. Si en el matrimonio cada uno hace la vida a su manera el matrimonio ha dejado de existir. Uno solo, deber ser la meta, uno solo deber ser la manera de actuar y es ahí donde dos se hacen uno, en la generosidad, en el esfuerzo, en la alegría, en una vida de a dos, con un solo fin. Alimenta el amor y podrás verlo crecer. Santa Teresita de Jesús decía, “el amor saca amor” y San Agustín nos dice “La medida del amor es el amor sin medida” Ese es el amor que sirve cuando solo se mide a través de la felicidad del otro.

¿Porqué el amor nos hace tan dichosos y su privación desdichados?

Si haz comprendido o me he sabido expresar en lo anterior tendrás la respuesta.

¿Por qué la ausencia de la persona amada, nos hace sufrir más de lo que su presencia nos hacía gozar?

La falta de entrega y el no saber valorar lo que pierdes, te coloca de frente a una realidad a la que eres incapaz de responderte. La ausencia es dolor y sobre todo fracaso y los limites de la felicidad cuando lo tuviste fue tu incapacidad para amarlo lo suficiente
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