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PREGUNTAS QUE HACEN LA GENTE SOBRE LA BIBLIA

 
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Pablo Jose
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Registrado: 13 May 2007
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Ubicación: Ciudad de Guatemala

MensajePublicado: Sab Ago 02, 2008 12:23 am    Asunto: PREGUNTAS QUE HACEN LA GENTE SOBRE LA BIBLIA
Tema: PREGUNTAS QUE HACEN LA GENTE SOBRE LA BIBLIA
Responder citando

Fuente: http://www.paracatequistas.com/recu.htm#uno


PARTE I

¿Quién hizo la división de la Biblia en capítulos y versículos?

Los textos originales (hebreos, arameos y griegos) tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, no estaban divididos en capítulos y versículos; los textos se leían de modo continuo. Con el tiempo, se introdujo tanto en los textos originales como en las versiones latinas, ciertas divisiones: éstas eran extrañas, variadas, complicadas, y ninguna de ellas era universalmente reconocida. Esta situación duró hasta el siglo doce.

En 1206, en la Universidad de París, el profesor y más tarde cardenal Esteban Langton, dividió toda la Biblia en capítulos más o menos iguales. Su sistema de división se impuso por su claridad. En 1226, dicha división era adoptada por la edición parisiense de la Vulgata.

Sin embargo, todavía no se daba la división en versículos. En 1240, Hugo de Saint Cher dividió cada capítulo de Langton en siete subdivisiones, marcadas al margen (a-b-c-d-e-f-g). Tal cosa duró trescientos años.

En 1555, el impresor Roberto Estienne (precedido por Jacques Lefebvre en 1509), indicó los "versículos" al margen. En 1565, Teodoro de Beze introdujo la indicación de los versículos dentro del texto mismo.
A pesar de "ciertos inconvenientes" que hubiera querido hacer desaparecer el papa Sixto V en 1590, la división en "capítulos-versículos" de "Langton-Estienne", fue reconocida oficialmente por Clemente VIII, su segundo sucesor (1592-1605).
¿De dónde vienen las palabras "Génesis" y "Biblia"?

La palabra GENESIS, viene del latín eclesiástico "genesis", que a su vez es trascripción del griego. En griego, esta palabra significa "nacimiento, origen, creación". El primer libro de la Biblia es designado por los judíos a partir de su primera palabra: BERESHIT, es decir, "al comienzo" o "en el principio". La traducción de Los Setenta, prefirió dar a este libro un título que indicara sumariamente el contenido. Este libro, por lo tanto, habla de la creación del mundo y de los orígenes del pueblo elegido. El término griego "génesis", era el adecuado. El mismo pasó a la versión latina de la Vulgata y a todas las versiones modernas.
La palabra BIBLIA, viene del latín "biblia", que es un femenino singular. Este término latino se deriva a su vez del griego: "ta biblia", un neutro plural que quiere decir "los libros". Los griegos parecen haber escogido este vocablo por la ciudad de Byblos, de donde les venía aquello sobre lo cual escribían. La Biblia es el conjunto de libros inspirados tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento.

¿Por qué la Biblia ha sido escrita en una manera tan difícil de comprender?

La Palabra de Dios, inaccesible en ella misma, se ha encarnado en un lenguaje humano: la Biblia. La Biblia está escrita en lenguaje humano: es por lo tanto más fácil que intentar captar "el lenguaje divino" que el Padre habla a su Hijo, y que nadie puede penetrar fuera del Espíritu Santo. Pero el lenguaje humano de la Biblia, por ser humano así contenga un mensaje eterno y universal, está marcado por una civilización y una época. La época nos retrotrae a tres mil años antes de nosotros, y la civilización nos lleva a miles de kilómetros de nuestro propio sitio, al Oriente Medio. Es una dificultad, pero una dificultad a medida humana. Una dificultad que irá disminuyendo a medida que vayamos familiarizándonos con la mentalidad bíblica. En la actualidad se aprende la Biblia como una "segunda lengua" en materia de religión; pero se puede esperar que un día todos la poseyéramos como una "lengua materna", que necesitáramos profundizar, ciertamente, pero que nos fuera siempre fácil y como innata en nosotros.

¿Qué es un escritor sagrado?

Leyendo las introducciones de nuestra Biblia, o consultando ciertos volúmenes de iniciación bíblica, habremos seguramente encontrado expresiones tales como: "el escritor sagrado", "el hagiógrafo", o "el autor bíblico". Estas expresiones designan siempre el hombre (no siempre identificado), que bajo la acción de Dios (pero a veces sin él saberlo), escribió el texto de uno (o de parte de uno) de los libros de la Biblia. Este "escritor sagrado" o ,,autor bíblico", ha sido un instrumento del cual Dios se ha valido para hablarnos en nuestro propio lenguaje humano.
Esta comparación, o concepto de instrumento, para hacernos entender qué es un autor bíblico, tiene mucho de verdad y ha sido empleado en la Biblia misma, en los Padres de la Iglesia y en las Encíclicas modernas. De la misma manera que cuando escribo no es la pluma sola la que escribe sino que soy yo mismo, así no es solamente Isaías, Esdras o Mateo quienes escriben, sino Dios a través de ellos. Al leer las páginas de la Biblia, es a Dios a quien yo escucho hablar "por la boca de sus santos profetas" (Le. 1, 70).

Pero sería equivocado concebir el autor bíblico como una vulgar herramienta entre las manos de Dios. El escritor sagrado no es "una máquina de escribir". Es un ser vivo y personal, con modo propio de pensar, expresar y escribir. Dios, al servirse de él, no lo destruye sino que lo respeta integralmente en su personalidad e incluso en sus límites y en sus deficiencias. No permitirá sin embargo, que esos elementos desnaturalicen su pensamiento divino hasta el punto de enseñar el error. Pero Dios dejará aflorar en todas sus obras escritas, todos los otros rasgos posibles del instrumento humano, libre y consciente, del cual se sirve respetando su manera de ser y de pensar, y su modo de expresar aquello que le viene de Dios.

¿Como podemos saber que la Biblia no contiene errores?

Es la fe, y ella sola, la que puede darnos tal certeza. En efecto, desde el punto de vista de las realidades verificables por los sentidos y la razón, la Biblia no es más que un conjunto de obras humanas, magníficas sin duda, pero sujetas a error. Este punto de vista es sin embargo parcial y muy incompleto cuando se trata de la Biblia: la fe de la Iglesia, desde sus comienzos, nos enseña que la Biblia expresa, en lenguaje humano, un mensaje de Dios. Y el mensaje de Dios no puede ser otro que "la verdad querida por Dios en orden a nuestra salvación" (Vaticano 11).
La pregunta que se hace un creyente al leer el texto inspirado, no es: "¿será esto verdadero o falso?", su pregunta será más bien: "¿en qué sentido será esto verdadero'?". De tal manera, podrá percibir cómo aquello que puede ser tenido por "falso" cuando se lo lee a la luz de un criterio de orden científico, permanece 4 1 verdadero" cuando se lo lee como expresión de una enseñanza "en orden a la salvación". Una frase como: "el sol se levanta", es una enseñanza falsa en un manual de astronomía, pero expresa una cierta verdad en el lenguaje cotidiano o en un texto poético. Cuando se comprende la Biblia en el sentido previsto por el autor humano y querido por Dios, se ve que ella no enseña otra cosa que la verdad "en orden a la salvación".

PARTE II

¿Es verdad que ciertos libros de la Biblia, tendrían necesidad de un reajuste científico?

Si los libros de la Biblia tuvieran una intención científica, dichos libros tendrían necesidad realmente de un reajuste en ese campo. Los autores bíblicos, por ejemplo, creían que el sol "se levanta" y que "se acuesta"; creían que hay "esclusas en el cielo" para dejar caer la lluvia; que el "firmamento" es una especie de campana de aire colocada sobre las montañas en el horizonte. He aquí, por lo tanto, conceptos populares y primitivos, científicamente falsos.
Pero, ¿será acaso en el campo de lo científico que los libros bíblicos juzgan sobre las cosas, o que quieren darnos una enseñanza? No, ciertamente. "La Escritura, dice el cardenal Baronius, nos enseña cómo se va al cielo, y no cómo va el cielo". Esto quiere decir finalmente, que de ninguna manera los libros bíblicos se pronuncian en materia científica. Ellos se sitúan en el plano de la salvación. "Concebid científicamente el mundo como queráis, parecen decir: de todas maneras es Dios quien lo ha hecho, y es Dios quien lo salva". Los libros bíblicos no tienen necesidad de un reajuste con la ciencia moderna, porque ellos no han pretendido nunca ajustarse con ninguna ciencia antigua.

¿Qué son los "Géneros Literarios", y por qué hay que tenerlos en cuenta en la literatura bíblica?


Todos tenemos que ver con géneros literarios desde nuestra más tierna infancia, sin que nos demos cuenta. Sabemos casi por instinto, que una fábula de La Fontaine no ha de tomarse al pie de la letra como si los animales pudieran hablar entre ellos, sino que todo ello se pone en función de la moraleja o enseñanza moral que se desprende. Sabemos que un manual de física o de química no se expresan de la misma manera ni enfocan los mismos puntos de vista que una pieza de poesía lírica, por ejemplo. No exigiremos la misma precisión histórica, a la tarea escolar que un niño hace en su casa y al grueso volumen escrito por un historiador moderno. Hemos de reconocer que hay diferencia entre una novela, una carta de amistad, y un tratado de filosofía. En la Biblia, los géneros literarios son más difíciles de aprender debido a sus orígenes orientales y antiguos, pero hay que tenerlos en cuenta para comprender la intención real de los textos.

¿Cómo se explica, que hayan dos narraciones de la creación?

Podemos comparar dos periódicos diferentes del mismo día, y encontrar que a propósito de un mismo hecho, uno de los periódicos se atendrá a una presentación rigurosa, precisa y sumaria; mientras que el otro presentará el mismo hecho algo más ilustrado, de modo más imaginativo e incluso novelado. Y que a propósito de la conferencia pronunciada por un personaje público, un periódico hará énfasis en determinados aspectos debido a sus tendencias políticas o a la de sus lectores, mientras que otro periódico hará hincapié en aspectos diferentes de la misma conferencia.
En el antiguo Israel, no existían los periódicos, pero existían las "tradiciones", es decir, modos diversos según los lugares, ambientes y costumbres, de narrar las mismas cosas. Así, había dos maneras de presentar el acto creador de Dios: una manera popular, basada en imágenes y centrada en el hombre, que dio nacimiento a Génesis 2 ("tradición Yavista"); y una manera más rigurosa y sistemática, que se refiere al cosmos entero, y que dio origen a Génesis 1 ("tradición sacerdotal").
Entre Génesis 1 y Génesis 2, hay diferencias en el modo de decir las cosas, pero contradicción ninguna en el fondo mismo de aquello que se cuenta. Ambos capítulos, se complementan y armonizan.

El misterio de la Trinidad Divina, ¿estaba anunciado en el Antiguo Testamento?

El misterio de la Santísima Trinidad, es aquel de tres Personas (Padre, Hijo, y Espíritu Santo), en un mismo y único Dios. La revelación de este misterio, ha sido esbozada, un poco al mismo tiempo, en diversos pasajes del Nuevo Testamento (leer especialmente los discursos de San Juan en los capítulos 13 al 17).

Para el Antiguo Testamento, Dios es Padre. Pero no se piensa todavía en un Dios Padre distinto como persona (pero no como Dios) de Dios Hijo.

Para el Antiguo Testamento, la Palabra de Dios es soberanamente creadora y eficaz; ella procede de su Sabiduría eterna. Pero no se piensa todavía en un Verbo (que es lo mismo que decir: "Palabra") que venga a ser Hijo de Dios Padre, Persona distinta.

Para el Antiguo Testamento, el Soplo de Dios es una realidad creadora y vivificante que empuja a los Profetas y los inspira. Se habla incluso del Espíritu de Dios. Pero no se piensa todavía en una Persona constituida por el Soplo de Amor que intercambian el Padre y el Hijo.

La teoría de la evolución, contradice las afirmaciones de la Biblia, a propósito de los orígenes del hombre?

Cuando Génesis 2,8 dice que "Yahveh Dios moldeó el hombre del barro de la tierra', quiere afirmar en forma poética y según una imagen usual de la época, que el hombre depende totalmente de Dios en su existencia, como un puñado de arcilla depende del alfarero que la labora, en el sentido que indica Isaías 29,16 y 45,9. La Biblia está interesada aquí primeramente, en las relaciones de dependencia que en sentido vertical relaciona con Dios al hombre.
La ciencia por su parte, se interroga sobre los orígenes del hombre, que sobre el plano horizontal le relaciona con los otros seres visibles que han podido darle nacimiento. Afirmar que el cuerpo humano haya salido de formas animales anteriores, no entraña la negación de la acción divina. El libro que actualmente puedo yo tener en la mano, viene, siguiendo una evolución, de la pulpa de papel de la cual ha sido elaborado; y siguiendo más atrás todavía, de los árboles que se convirtieron en esa pulpa para papel. Por lo tanto, el creyente puede afirmar igualmente que este libro es una creatura de Dios: las dos afirmaciones se sitúan en planos diferentes. Ocurre lo mismo entre el evolucionismo y las afirmaciones bíblicas, cuando hacen referencia a los orígenes del hombre.
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Pablo Jose
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MensajePublicado: Sab Ago 02, 2008 12:29 am    Asunto:
Tema: PREGUNTAS QUE HACEN LA GENTE SOBRE LA BIBLIA
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PARTE III

¿Adán y Eva, son meramente símbolos, o son personajes históricos?
Lo que la Palabra de Dios nos enseña formal y explícitamente, en los primeros capítulos de la Biblia, es: que la humanidad toda entera, varón y mujer, ha sido querida y creada feliz por el Señor; pero que desde el principio, por un acto de orgullo, la humanidad se apartó de Dios, arrojándose ella misma, por lo mismo, en el sufrimiento y el mal. La narración supone la existencia de un primer hombre varón y de una primera mujer, de los que el género humano sacaría su origen.
El autor humano de Génesis 1-2, da a esta primera pareja nombres simbólicos: "Adán", a causa de la palabra "tierra", que se dice "adama" en hebreo; es decir, sacado de la tierra, según Génesis 2,7. Y "Eva", a causa de la palabra "viviente", que se decía "hawa" en hebreo antiguo; es decir, madre de todos los vivientes, según Génesis 3,20. Estos nombres son simbólicos; pero el que la humanidad haya tenido un principio y haya sido alcanzada por un mal profundo, es un hecho histórico.

¿En qué país vivían Adán y Eva?, ¿qué lenguaje hablaban?, ¿fueron ellos condenados para siempre?

Perfectamente se podría decir que nadie puede responder tales cuestiones, y terminar allí el tema. Pero vale la pena sacar algunos elementos positivos de cada una de estas preguntas.
No sabemos ciertamente dónde vivían los primeros hombres; y las hipótesis "científicas" que a veces se leen, son conjeturas, cuando no fantasías. La Palabra de Dios nos afirma sin embargo, que sería en la felicidad absoluta que la humanidad se hubiera desarrollado si el pecado no hubiera venido a introducir el desequilibrio en nosotros. Esto es lo esencial.
El lenguaje es el signo de un ser inteligente. Tampoco podemos decir a ciencia cierta qué lenguaje utilizarían los primeros hombres. Sabemos sin embargo, que los hombres primeros tenían una inteligencia suficiente como para ser moralmente responsables de sus actos. Esto, también, nos es suficiente.

No nos pertenece juzgar sobre la suerte eterna de nada ni de nadie. El pecado personal de aquellos que la Biblia denomina Adán y Eva, arrastró a la humanidad hacia el mal. Pero todo pecado puede encontrar misericordia. Ciertas tradiciones consideran a Adán y a Eva como santos.

¿Qué dice la Biblia referente a las primeras parejas después de Adán y Eva?

Precisamente, la Biblia no dice nada sobre este tema. La Biblia no es un tratado de ciencia o de historia. No pretende decir todo sobre todas las cosas, y deja a las ciencias naturales explicarse sobre lo que le es propio. Querer saber quiénes fueron las primeras mujeres y cómo se establecieron las primeras uniones conyugales, puede manifestar una legítima curiosidad (curiosidad que de seguro nunca podrá ser satisfecha); pero en materia bíblica, es un error de perspectiva. Los primeros capítulos del Génesis, se interesan en el drama del hombre en el universo, y nos revelan un plan de Dios que invita a la esperanza. Las circunstancias concretas de incidentes, e incluso los acontecimientos de la prehistoria, no se sitúan en el campo de sus preocupaciones. Los primeros capítulos del Génesis, no nos entregan una pequeña historia de familia, en la que Adán y Eva ayudan a su hijo Caín a encontrar una mujer, sino que nos entregan la gran historia de una humanidad pecadora en busca de esperanza.

¿La narración de la costilla de Adán, no va en contra de la igualdad del hombre y la mujer?

Felizmente, significa todo lo contrario.
Sacada de lo más íntimo del hombre (simbolizado por su "costilla" que equivale a su "vida"), la mujer tiene la misma naturaleza que él. Sólo, infinitamente por encima de los animales que Adán puede percibir y dominar, ella es una ayuda "que le es ofrecida" (Génesis 2,18; y 2,20). El autor inspirado quiere de tal manera subrayar este aspecto, que pone en la boca de Adán un grito de admiración: "Esto sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne" (2,23), "esta vez, Señor, verdaderamente has acertado; ¡ahora me reconozco en lo que me has dado!". Y en esta nueva relación de igualdad, el hombre y la mujer toman nombres nuevos con una raíz idéntica: ish, "hombre"; e ísha, "mujer".

Desgraciadamente, el pecado vino a destruir este orden natural de las cosas. El autor inspirado, considera como una consecuencia del pecado la dominación del hombre sobre la mujer (Génesis 3,16). Es falso creer que el Creador mismo haya querido poner la mujer en un rango secundario, como lo hacen todavía hoy tantas sociedades.

San Pablo mismo dice que la mujer ha sido sacada del hombre; ¿cómo se puede decir entonces, que la "costilla de Adán" no es más que un símbolo?

En 1 Cor. 1 1, 8-16, San Pablo no tiene la intención de dar una interpretación oficial y definitiva de Génesis 2, 20-21. El quiere simplemente ordenar a las mujeres de Corinto que lleven el velo en la Iglesia. Algunas de entre ellas no querían aceptar esta costumbre.

Para justificar su actitud, San Pablo trae argumentos extraños que desorientan nuestra manera de razonar: la naturaleza, ha velado a las mujeres (versículos 14 y 15); los ángeles, podrían confundirse en razón de sus cabezas descubiertas, signo social de su emancipación (versículo 10); en sí, esto es lo que dice la Escritura. Pero aquí San Pablo maneja la Escritura según el método de los Rabinos, sus antiguos maestros, que gustaban de jugar con las palabras de un texto. Sin mencionar para nada la costilla, se sirve de la puesta en escena bíblica deduciendo que la mujer debe someterse al hombre, y por consiguiente, llevar el velo. Corrigiendo de antemano una mal interpretación posible, se pone a continuación a insistir sobre la igualdad del hombre y de la mujer (versículos 1 1 y 12). Luego, corta por lo sano la discusión diciendo que poco importan los argumentos, porque "tal no es la costumbre" (versículo 16). No podemos, pues, encontrar aquí un apoyo a la interpretación "realista" del episodio de la costilla.

Qué es el árbol de la vida?

Sin el pecado, la humanidad se encontraría en un estado de felicidad perfecta que la Biblia expresa concretamente mediante la imagen de un "jardín", en el cual "Adán y Eva" podían disfrutar del "fruto" de todos los "árboles", salvo aquel al cual sólo Dios tenía acceso. Entre esos "árboles", había uno que confería la vida inmortal: era "el árbol de la vida". No hay por qué imaginarse dicho árbol, ni clasificarlo de acuerdo con los manuales de botánica, ni conocer el color de su follaje ni el espesor de su corteza. La "planta de la vida", era un símbolo muy conocido y muy extendido en todo el Oriente Medio, para significar el "privilegio de la inmortalidad". Cuando se dice que el "árbol de la vida" estaba en medio del "jardín" y que el hombre podía "comer" de su "fruto", el autor bíblico quiere decir que el hombre, habría podido gozar de una vida terrestre inmortal. Y cuando, después de su caída, se dice que Dios puso un ángel para impedir que el hombre pudiera acercarse al árbol de la vida, el autor bíblico quiere decir mediante este símbolo, que el privilegio de la inmortalidad ha sido retirado para el hombre. Pero Cristo se lo devuelve centuplicado (Apocalipsis 22, 1-2).

En Génesis 2, 3, ¡Satanás hace su aparición sin haber sido creado! ¡Adán y Eva cometen el mal sin saber que lo es! ¡Los dos no se dan cuenta de que están desnudos, sino después de que han pecado! Todo esto, ¿no es algo extraño?

La creación de los ángeles, no se menciona en Génesis 1-2, pero la tradición bíblica la afirma en otra parte junto con la existencia de los ángeles caídos (Job 1-2). Los autores de Génesis 1-2 han concentrado manifiestamente toda su atención sobre el mundo visible. De todas maneras, Génesis 3,1 no identifica la serpiente con Satanás. Eso lo hará solamente Sabiduría 2,24. Para el Génesis, la serpiente recuerda los cultos idolátricos y todos los rechazos del Dios verdadero.
"Adán y Eva" sabían, incluso antes de "comer del fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal", discernir entre el bien y el mal: de otra manera, su acción no comportaría ninguna responsabilidad moral. Aquello que desean, es poder determinar por ellos mismos lo que es bien y lo que es mal. El árbol indica aquí el privilegio que sólo Dios puede tener de "conocer" el orden moral (en el sentido de "ser plenamente el maestro" del mismo). Después de su pecado, Adán y Eva no constatan que están desnudos, pero se encuentran avergonzados: lo cual señala el autor para indicar la división que entre ellos acaba de introducirse, como consecuencia de su rechazo de Dios.

¿Ha creado Dios el mal y el sufrimiento?

"Dios no ha hecho la muerte... El ha creado todo para que todo subsista, y las criaturas del mundo son buenas... Sí, Dios ha creado incorruptible al hombre; El se hizo una imagen de su propia naturaleza; por envidia del Diablo entró la muerte en el mundo" (Sabiduría 1, 13-14 y 2, 23-24). Aquí, el autor al hablar de "muerte", entiende a la vez la muerte física (con los sufrimientos que la preparan) y la muerte espiritual (con el pecado que es la causa): las dos están íntimamente ligadas entre sí.

Nada de lo que Dios ha hecho puede ser malo o dañino. El pecado y sus consecuencias son una desviación del universo creado, causado por un rechazo libre del hombre a reconocer su dependencia de Dios. El mal no es una creación que viene de lo alto, sino una desviación venida de abajo.
De resto, el pecado "original", de donde nos vienen mal y sufrimiento, es un Misterio en donde sólo la fe nos puede ayudar para seguir aceptando la bondad de Dios creador y la libertad del hombre pecador: "el hombre es mucho más inconcebible sin este Misterio, de lo que este Misterio resulta inconcebible al hombre" (Pascal, Pensamientos 434).

PARTE IV

¿Dónde se encuentra la localización exacta del paraíso terrenal?

"En Génesis 2, 8-14, se encuentra la descripción y la localización del paraíso terrenal... Sería muy largo, por no decir imposible, pasar revista a las diversas interpretaciones de estos versículos: baste recordar que en su interpretación algunos han transferido el paraíso terrenal, del Lejano Oriente (Coppens), al Polo Norte (Warren-Gruhn), e incluso más allá de la tierra (Ungnad)......
"No es del todo improbable, que el hombre en un estado de civilización muy primitivo, haya vivido en un jardín de delicias. Es necesario, sin embargo, enfatizar que el autor sagrado, y todavía mucho más la Tradición católica, consideran este jardín como un paraíso. Es claro que un jardín como tal, no es más que un modesto factor de felicidad, y que es más fácil considerarlo, en acuerdo con la Tradición, como la suma de todos los elementos capaces de hacer feliz al hombre, y mirarlo como un símbolo por lo tanto". (Galbiati-Piazza, Mieux comprendre la Biblie, p. 147).
Recordemos una vez más, que esta interpretación simbólica de ciertos elementos de los primeros capítulos del libro del Génesis, lejos de empobrecer la Biblia, nos conducen más bien a las riquezas doctrinales que las imágenes empleadas han intentado expresar y hacernos comprender.

¿Es verdad que antes de la caída del pecado original, la serpiente caminaba erecta?


No seamos simplistas y no nos dejemos inducir en error por las pinturas y las imágenes que representan la serpiente erecta antes de la caída. Sólo una interpretación demasiado literal de Génesis 3,14 puede caer en tal opinión.
Es el autor inspirado quien bajo la acción de Dios escogió representar al tentador bajo el símbolo de una serpiente. ¿Para qué? Para condenar las religiones idolátricas existentes en su medio, que tenían a la serpiente como una divinidad de la fecundidad y de la inteligencia.
El autor inspirado, mata dos pájaros con la misma piedra. Por una parte, a ese Satanás que desde el principio se hizo mentiroso y homicida (cfr. Juan 8,44), para hacer entrar la muerte en el mundo (cfr. Sabiduría 2,24), Dios lo aplasta y lo hace morder el polvo. Y por otra, esas religiones que adorando las serpientes se hacen suplentes de Satanás, no merecen más que desdén y desprecio.

"Yo pondré hostilidad entre ti y la mujer, entre tu linaje y el suyo. El te aplastará la cabeza y tu acecharás su talón" (Gén. 3, 15).
¿Qué quiere decir aquí, la palabra "linaje"?

"Linaje", quiere decir "descendencia". Esta última palabra es la usada en numerosas traducciones. La Biblia de Jerusalén, por el contrario, prefirió el término masculino en vez del término "descendencia", para evitar el decir a continuación de la siguiente manera: "Ella te aplastará la cabeza…". No se sabría entonces si se trata de la mujer misma, o de su descendencia.
En resumen, el texto afirma que la humanidad (los hijos de la mujer) vencerá un día totalmente el mal y el sufrimiento (los hijos de la serpiente). Como esta victoria de la humanidad será efectuada por un hombre en particular (el Mesías), los judíos dieron a este texto un sentido mesiánico, y la versión de Los Setenta, traducción griega de las Escrituras hecha en el siglo tercero antes de Cristo, traduce así: "Aquel, te aplastará la cabeza La Vulgata, versión latina debida a San Jerónimo, dice en cambio:
"Aquella y quiere así subrayar el papel de la madre del
Mesías.

¿Con quién se caso Caín?

La única mujer que había era Eva, su madre.
He aquí uno de los típicos problemas ajenos a la intención de los autores bíblicos. Cuando el autor nos habla de Adán y Eva, lo que quiere expresarnos es que el mal apareció desde los orígenes de la raza humana. Cuando nos muestra a Caín asesinando a su hermano Abel, nos quiere mostrar cómo el rechazo de Dios se propaga bajo la forma del odio entre los hombres; la perspectiva del autor se aleja del problema de la propagación de la raza humana. Dice simplemente, que "Caín conoció a su mujer" (Génesis 4,17), sin precisar quién era ella. Es necesario suponer la presencia de varios hombres y varias mujeres sobre la tierra, cuando Caín vivía: de otra manera ¿por qué habría de temer que lo matara el primero que le encontrase (Génesis 4,14)?
¿Cómo se propagó la raza humana en sus inicios? La Biblia no lo dice, y tampoco se interesa en ello. Hay que suponer uniones entre parientes próximos. Caín, bien parece ser un personaje más tardío, cuya historia se vinculó a los orígenes de la humanidad por razones teológicas.

Es verdad que el arca de Noé ha sido descubierta?

Según Génesis 8,4 "el arca se detuvo sobre los montes de Ararat". La Biblia acepta aquí probablemente un emplazamiento legendario, sin querer pronunciarse sobre su autenticidad. De todas maneras, la indicación no es muy precisa, puesto que el Ararat (Urartu) es una vasta región montañosa que corresponde más o menos al país de Armenia, o según otros, al Kurdistán.
En esta región, hay un macizo que lleva actualmente el nombre de "Ararat": está situado en Turquía, y su cima más alta llega a los 5.000 metros, aproximadamente. Evidentemente, la leyenda del país ha fijado aquí el lugar del arca. Hasta el año 1840, se enseñaba incluso la viña de Noé a los peregrinos, en un pueblito vecino.
Anteriormente nadie había escalado con éxito la cumbre del Ararat (Dios no lo permitía, decían los lugareños), hasta que en 1829 lo logró el viajero alemán Johann von Parrot: ¡no encontró nada! ¡En 1876, Lord Bryce excavó la montaña y encontró un trozo de leño! Markov en 1888, y Lynch en 1893, no tuvieron semejante suerte! Algunos americanos intentaron de nuevo en 1949, y algunos franceses en 1952. Pero todas estas personas son más bien buenos alpinistas, que exegetas. El arca de Noé puede muy bien ser simbólica, y no hay necesidad de encontrarla para comprender el asunto, y para transmitir el mensaje de salvación y esperanza que su imagen encierra.

Cuando el diluvio, ¿toda la tierra fue cubierta por el agua?

Está claro que los autores de Génesis 6-9, presentan el diluvio como un hecho universal: todos los hombres (6,7), toda carne (6,17), todo aliento de vida (7,22), debe perecer. Hay que comprender sin embargo estas expresiones dentro de los límites impuestos por la época y los autores. En aquel tiempo, la expresión "toda la tierra", no podía obviamente significar "todo el globo terráqueo". No había entonces ninguna noción de nuestro mundo actual, y la expresión designaba al mundo para ellos conocido. ¿Quiere esto decir, que todos los hombres (y todos los animales) de aquel mundo conocido entonces, perecieron? El texto no es claro, y la mayoría de especialistas modernos opinan que no. Parece más bien que la narración del diluvio se enraíza en "la memoria de una o varias inundaciones desastrosas del valle del Tigris y el Eufrates, que la tradición magnífica a las dimensiones de un cataclismo universal" (Biblia de Jerusalén). La intención de los autores inspirados es la de darnos un mensaje o enseñanza sobre la malicia de los hombres, la justicia y la misericordia de Dios, así como el poder de la Gracia para renovar el mundo y crear una nueva humanidad a partir de un pequeño resto de elegidos.

¿Es verdad que el Arco Iris es signo de que Dios no enviará otro diluvio sobre la tierra?

El Arco Iris es ante todo un fenómeno natural. Visible a contraluz, resulta de la composición de la luz solar a través de las gotitas de agua suspensas en el aire cuando una nube se precipita en lluvia. Como el Arco Iris ofrece todos los colores del espectro, y presenta un signo de paz y de alegría en un paisaje momentáneamente triste, los hombres de todos los tiempos v lugares lo admiran: "es magnífico en su esplendor........ forma en el cielo un círculo de gloria". (Eclesiástico 43, 11-12). El autor de la narración del diluvio en la tradición sacerdotal, ha escogido el Arco Iris como signo de la alianza que Dios quiere establecer con el universo entero. El texto parece querer compendiar v repetir la creación a partir del diluvio (cfr. Génesis 9, 12-17). En un modo poético de presentar una doctrina más profunda: Dios no quiere la destrucción sino la salvación del mundo. Se creía en aquel entonces, que Dios tenía un arco para lanzar sus dardos de fuego (las descargas eléctricas), y así, colocándolo sobre las nubes, mostraba su deseo de paz.
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MensajePublicado: Sab Ago 02, 2008 12:32 am    Asunto:
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PARTE V

Las ruinas de la Torre de Babel que se ven con frecuencia en fotografías, ¿son auténticas?

Las frecuentes fotografías que se pueden ver, son construcciones del mismo género que la Torre de Babel, pero no son la Torre misma. ¿Qué hay que entender por construcción del mismo género?
Ciertas religiones de Mesopotamia tenían por costumbre erigir torres (llamadas "zlggurats"); dichas torres eran muy altas (de ahí la expresión: "su cúspide llegue al cielo"-, expresión de imagen, igual que hacernos nosotros hoy día cuando a un edificio lo llamamos "rascacielo"); estas edificaciones servían principalmente como lugares de culto, pero al mismo tiempo constituían un centro político, cultural y económico. Los arqueólogos han descubierto muchas de estas torres, sobre todo en Irak. Las mismas que observamos fotografiadas
La Torre de Babel no fue construida con la finalidad de escapar a otro diluvio universal. Tampoco fue una muestra de odio en contra del Señor. Simplemente evoca el "centro cultural" de la ciudad de Babilonla ("Babel" en hebreo) cuyo Imperio había pretendido dar la unidad a los hombres. La Biblia dice que Dios partió y dividió esta civilización, porque sólo El puede dar la unidad a los hombres, incapaces de salvarse por sí mismos.

Cuando la Biblia nos habla de la confusión de Babel, ¿qué quiere enseñarnos sobre la diversidad de las lenguas?

Esta narración del Génesis sobre la Torre de Babel y sus consecuencias, no es un "Tratado sobre la formación y evolución de las lenguas en el mundo". La prueba está en que anteriormente dejó asentado que los hijos de Jafet, que vivieron antes de lo de la Torre de Babel, se habían dispersado "cada uno según su lengua" (Génesis 10,5). Por lo tanto, la diversidad de lenguas no puede atribuirse a Babel solamente.
La narración bíblica de la Torre de Babel quiere mostrarnos principalmente que los hombres no logran entenderse a causa del pecado que los divide. El problema de las lenguas, no es más que fenómeno secundario de la falta de una unidad mucho más profunda. La diversidad de lenguas sería una riqueza, si no hubiéramos caído en el pecado. El autor de Génesis li, 1-9, traza sobre esta lección principal, el bosquejo de lo que él cree fue el origen de la diversidad de las lenguas, según los dichos de su tiempo.
La unión de los hombres, rota por el pecado, será sólo restaurada por Cristo Salvador. El milagro de las lenguas el día de Pentecostés (Hechos de los Apóstoles 2, 5-12), será el primer signo externo de esta reunificación de los hombres.

¿Es verdad que Abraham no era más que un pagano?


Abraham, ciertamente, venía de una civilización idólatra y politeísta. En Ur, su país natal, y en Harán, país a donde había ido como emigrante junto con su padre (Génesis 1 1, 27-32), se adoraba al dios Sin, es decir, la luna. Se entiende bien que un pueblo de nómadas como el de Abraham, haya adoptado la luna como su 4 1 providencia": ella ilumina sin quemar y permite así desplazarse durante la noche.
Cuando decide dejar a su gente para dirigirse hacia Canaán, Abraham abandona al mismo tiempo toda la multitud de dioses de su país natal. De ahora en adelante, su culto se dirige a un Dios que lo acompaña en sus desplazamientos de nómada. Comprende que El es quien dirige su vida; en las circunstancias de su migración, sabe leer Su voluntad; tiene confianza en que ese Dios todopoderoso, hará para él y para sus descendientes después de él, grandes cosas. Abraham conoció, pues, una transformación religiosa que conduciría a Israel más adelante, a no adorar más que un Dios sólo, y a reconocerlo como el Dios Unico.

¿Tenía Abraham plena conciencia de ser el padre de un pueblo elegido?

Los textos bíblicos sobre Abraham son el fruto de una larga reflexión. Expresan en narraciones bien manejadas y con expresiones bien encontradas, la toma de conciencia colectiva del pueblo de Israel. Esta toma de conciencia, fue necesariamente

lenta y progresiva. Difícilmente podemos imaginar a Abraham diciéndose que toda una nación va a nacer de él, con un excepcional destino divino, y que dará nacimiento un día al Mesías, quien muerto y resucitado, creará su Iglesia en vistas a la 'Salvación.
Los textos del Antiguo y del Nuevo Testamento, nos dicen en forma más clara lo que Abraham no sabía más que de un modo confuso, e implícitamente, acerca de sí mismo y de su posteridad. Su fe en un Dios que le acompaña; su esperanza de un futuro feliz para sus descendientes; su amor por su Dios, que él sabe fiel; todo esto, encierra en germen el conocimiento de su propio papel en la historia de salvación.

¿Cómo se puede explicar, que Dios haya permitido que Abraham tuviera un hijo con su esclava Agar?

Esta pregunta hace alusión a lo que nos dicen los primeros versículos del Capítulo 16 del Génesis: "La mujer de Abram, Saray, no le había dado un hijo. Pero ella tenía una esclava egipcia llamada Agar, y Saray dijo a Abram: "Mira, Yahvéh me ha hecho estéril. Llégate, pues, te ruego, a mi esclava. Quizá podré tener hijos de ella". Y escuchó Abram la voz de Saray. Así, al cabo de diez años de estar habitando en Canaán, Saray su mujer, tomó a su esclava Agar, la egipcia, y diósela por mujer a su marido Abram. Llegóse, pues, él a Agar, la cual concibió". (Génesis 16, 1-4a). Es de esta unión de Abraham con la esclava de su esposa, que vino a nacer Ismael. Más tarde, Sara, ya fecunda por la gracia de Dios, dio nacimiento a Isaac, sucesor de su padre en las Promesas.
¿Cómo entender la actitud de Abraham? Actitud que por otra parte encontramos de nuevo en el libro del Génesis: en el Capítulo 30, Jacob se une a la esclava de Raquel, Bilha, para tener un hijo; en el mismo capítulo, Lía, otra mujer de Jacob, viendo que ella había cesado de tener hijos, ofrece su esclava Zilpa, a Jacob su esposo, de la cual tuvo dos hijos. ¿Cómo entender tal forma de actuar en los Patriarcas?
Al obrar así, los Patriarcas no hacían otra cosa que conformarse a una costumbre, e incluso a las leyes bien establecidas en su tiempo. No era nada excepcional. En efecto, los sabios han encontrado inscripciones con una antigüedad de hasta 3.500 años por lo menos, en las que parece estipularse que una esposa estéril puede (y algunas veces, debe) dar una esclava a su marido, por mujer. Y los hijos nacidos de esta unión son reconocidos legalmente como hijos de la esposa estéril, igual que si ella los hubiera tenido.

¿Hay materia para nosotros escandalizarnos de todo ello? Sabemos que el matrimonio monógamo es indisoluble para nosotros. Pero, ¿por qué comprendemos nosotros tan claramente esta verdad? Porque Jesús la puso a plena luz, y porque la Iglesia, que es la continuación misma de Jesús, nos lo ha explicado. Esta verdad era también verdadera antes de Jesús, pero los hombres la captaban menos claramente. Esta regla no es fácil de comprender para todos los hombres. Sin Jesús, no se la podría comprender siempre. Y los Patriarcas, no tenían todavía a Jesús: ellos apenas preparaban su venida.

¿cómo puede ser, que en el Antiguo Testamento Dios mismo se comunica directamente a los individuos?

Para ser exactos, la Omnipotencia de Dios le permite hacerse escuchar de los hombres, incluso mediante palabras sonoras que el oído puede captar: lo cual sería ya un milagro. Una palabra de Dios a un personaje del Antiguo Testamento, no es más imposible que las voces que escuchaba Juana de Arco u algunos otros de entre los santos modernos.

Nos equivocaríamos, sin embargo, pensando en un milagro y en palabras sonoras de Dios cada vez que la Biblia dice: "Palabra", "Oráculo" o "Dice Dios". Es una manera de hablar, sumamente oriental y hebraica, la de dramatizar en diálogos exteriores los movimientos íntimos del alma o una acción interior de Dios sobre el corazón del hombre.

Cuando un confesor dice a su dirigido que, a propósito de su vocación, él haga "lo que Dios le diga", nadie lo tomará al pie de la letra, en el sentido de esperar que un diálogo se lleve a cabo. Es así que en la Biblia, la expresión "Dios dijo a fulano...", puede bien designar una palabra real y eficaz; pero, sobre todo, una palabra interior de Dios. Con frecuencia esta expresión tiene también por función, la de introducir una interpretación religiosa de los acontecimientos, basada en la concepción y mentalidad del Israel antiguo.

PARTE VI

La historia de Sodoma y Gomorra, ¿es acaso pura leyenda?

Sodoma y Gomorra hacían parte con Adma, Seboim, y con Soar (o Bela), de una federación de cinco ciudades llamada "Pentápolis". La mayor parte de geógrafos e historiadores, sitúan la Pentápolis hacia el sur del Mar Muerto, en donde el nivel de las aguas habría subido y cubierto las ciudades. El "Djebel Usdum" de la orilla israelí del Mar Muerto, parece haber perpetuado hasta nuestros días el nombre antiguo de "Sodoma". Sin embargo, los arqueólogos no han podido encontrar evidencias.

Sodoma era de una inmoralidad proverbial en toda la región. Su repentina destrucción (por un cataclismo natural, cuya naturaleza ignoramos), fue interpretado como un castigo del cielo, y vino a ser en la tradición bíblica (Deuteronomio 29,22; Jeremías 49,1Cool, el modelo por antonomasia de los castigos divinos. No es, pues, raro, que la leyenda popular haya trabajado bastante este tema, como Génesis 19, 1-29 lo prueba abundantemente. Pero no es que encontremos aquí razones para dudar del fundamento histórico de la destrucción de dichas ciudades; podemos simplemente comprender, que el folklore religioso de Israel encontró aquí una ocasión provechosa, para entregarnos una lección doctrinal: Dios no aprueba el mal.

¿Qué fundamento histórico tiene la transformación de la mujer de Lot, en una estatua de sal? (Génesis 19,26)

Sabemos muy bien cómo ciertos fenómenos extraños de la naturaleza, dan nacimiento frecuentemente, en la Imaginación popular, a explicaciones cuyo carácter legendario es evidente, pero que dejan una profunda lección moral. Encontramos ejemplos típicos en fábulas y otras narraciones, también en nuestros autores modernos.

En Israel, al sur del Mar Muerto, extraños fenómenos geológicos han determinado la configuración de bloques que asemejan estatuas de sal, desde hace muchos siglos. Es probable que la tradición popular haya visto en una de esas estatuas, a la misma mujer de Lot. Los libros inspirados integran este dato del folklore, en vistas a la lección moral que conlleva. Esta es, en todo caso, la opinión más extendida entre los exegetas. Pirot-Clamer dice: "No habría que ver aquí la transformación milagrosa de la mujer de Lot, sino la simple utilización, de parte del autor, de una tradición sobre la muerte de aquella, según una leyenda popular... que habría identificado la mujer de Lot en una de esas columnas de sal que se encuentran en los alrededores de Djebel Usdum". La "Biblia de Jerusalén" dice: "Explicación popular de una roca de forma caprichosa, o de un bloque salino". El "Dlctionnaire Encyclopédique de la Bible", habla también en el mismo sentido.

¿Cómo se explica que Jacob haya mentido a su padre ciego, y recibido la bendición divina?

La narración de la astucia de Jacob, ayudado por su madre tramposa, Rebeca, historia que se encuentra en Génesis 27, 1-45, es una página pintoresca y sabrosa, tal como sólo la "tradición Yavista" puede darnos.
Siguiendo a San Agustín, muchos antiguos buscaron por todos los medios encontrar excusa para el engaño perpetrado por Jacob. Ellos veían en Jacob suplantando a Esaú, un símbolo del Nuevo Testamento suplantando al Antiguo; y en los vestidos y la pelambre (el vellocino) con los que se cubre Jacob, un símbolo de nuestros pecados, con los que se recubre Cristo, ya que El cargó con ellos. Es hermoso en el sentido alegórico; pero en el sentido literal, el asunto es otro: Jacob, lha mentido!
No es precisamente por ese asunto, que haya venido a ser el elegido de Dios. Hay que situar esta narración "dentro del cuadro de una moral todavía imperfecta", dice la Biblia de Jerusalén. "La conciencia moral no era entonces exigente en lo que respecta a la lealtad", dice Pirot-Clamer. La mentira ha sido siempre pecado, pero los hombres no han comprendido más que poco a poco, hasta qué punto hay que rechazarla. Puesto, pues, de nuevo en su contexto histórico, este texto no escandaliza. Remarquemos además, que en su redacción definitiva se menciona un cierto temor de Jacob para ir adelante con su mentira (versículo 12).

¿Qué significado preciso hay que darle a la lucha de Jacob con el ángel en Penuel?

A pesar de los esfuerzos desplegados por los exegetas, este texto permanece como uno de los más misteriosos del Antiguo Testamento.

L-'1 texto (Génesis 32, 23-33), en su manera popular Y primitiva, trata de explicar tres cosas: 1) el origen del nombre de "Penuel", que interpreta como queriendo decir "rostro de Dios", y que pone en relación con una aparición que recibe Jacob; 2) el origen del nombre de "Israel", que interpreta como queriendo decir "haber sido fuerte contra Dios", y que pone en relación con una lucha de Jacob; 3) el origen de una antigua prescripción alimenticia, que prohibía a los Judíos comer el nervio ciático de los animales, y que pone en relación con una herida de Jacob.

La aparición, la lucha y la herida de Jacob, se pierden en la noche de los tiempos y se unen a antiquísimas historias populares. Pero, es mucho más importante, útil y enriquecedor, ver lo que estas cosas prefiguraban: el pueblo de Israel va a encontrar a Dios en su ruta, pero al precio de luchas incesantes y no sin profundas heridas, hasta que finalmente pueda adquirir la bendición y llegar a ser un pueblo nuevo. Y, ¿no es esto la historia de cada hombre particular'?

¿Qué -significa la palabra "Éxodo"?

La palabra "Éxodo", viene del griego y significa "salida". En el lenguaje profano, designa una fuga en masa y evoca una realidad más bien triste y penosa: el éxodo de poblaciones provocado por una guerra. Pero en el lenguaje bíblico, evoca la grandiosa liberación israelita de la esclavitud egipcia. A partir del año 1560 antes de nuestra era, los Hebreos, que habían entrado en Egipto a la sombra favorable de las invasiones de los Hycsos, se vieron reducidos a la condición de mano de obra infrahumana; pero he aquí que hacia 1230, Moisés toma la dirección de una rebelión contra el Faraón, logrando liberar su pueblo y llevarlo más allá del Mar Rojo: es este acontecimiento el que recibe el nombre de "salida de Egipto" o "Éxodo". La palabra

"Éxodo", designa también un libro bíblico que celebra la salida de Egipto, y que es el segundo del Pentateuco. El Éxodo, es el símbolo y el anuncio de nuestra liberación de la esclavitud del pecado.

¿Quién era Faraón en Egipto, en el tiempo de Moisés?

La Biblia no proporciona el nombre del Faraón reinante en Egipto cuando está allí Israel ni cuando Moisés lo libera. Sin embargo, un corto versículo (Éxodo 2,23) afirma que hay un cambio de Faraón, en cierto momento de la vida de Moisés: un primer Faraón muere y otro le sucede. ¿Cuáles son estos dos Faraones? El primero tiene que ser un gran constructor, puesto que Israel se ve reducido a la servidumbre para construir las ciudades depósito (Éxodo 1,1l); y el segundo se encuentra en condiciones desfavorables por las que no alcanza a resistir o tener bajo control, las exigencias de Moisés. Para algunos, el primero es Tutmosis III (1475-1450), y el segundo es Amenofis III (14101375). Para otros, más numerosos aún, el primero es Sett I(1315-1290), o Ramsés I (1 290-1234), y el segundo sería, pués, Ramsés II o Merneftá (1234-1215). El problema queda todavía sin una solución definitiva, aunque las preferencias de los historiadores se inclinen hacia Ramsés II y Merneftá.
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