Amar a nuestros enemigos..., ¿facil?

[Roberto Sola]

Esto es "la revolución". Cuando odiar al enemigo era preceptivo para los judíos, Jesús ni siquiera dijo "no odies a tus enemigos, tratarles con indiferencia", no, dijo "amar a vuestros enemigos", ¡como si fuera así de fácil!
 
La paciencia tiene un límite, pero se va creando virtud y los cristianos aprendemos a pagar siempre con nuestra moneda, como Jesús nos enseñó, no con la moneda del otro. A veces es duro hacer un favor a quien te da coces, reiteradamente y donde más duele. Y rezamos por esa persona para que no siga haciendo daño. Y reflexionamos:
 
 “Quizás no es capaz de pensar en los demás, pues solo piensa en sí mismo y no es consciente del daño que hace a otras personas con su actitud, quizás llegue a recapacitar, ¿podría hacer algo por ayudarle?”.
 
Y esta persona te pide otro favor, ¡que vas a hacer!, ayudarle, piensas: o es un malvado o un inconsciente. En ambos casos, sigues rezando por él. A la ofensa no se puede reaccionar con violencia, pero sí se debe responder con dignidad, dejando las cosas claras y perdonando.
 
A pesar de eso, a los cristianos se nos odia, se nos ataca desde todos los frentes, tenemos las mejillas rotas de tanto recibir bofetadas y poner la otra cara. Se han acostumbrado a escupir sobre Cristo sin recibir a cambio otro escupitajo. Mahoma no dijo a sus discípulos que perdonen a los que les ofenden y que recen por los que les humillan, y así responden los mahometanos ante las ofensas: con violencia.
 
Los enemigos de la religión se han acostumbrado a ridiculizarla, pero no se dan cuenta que la reacción de los cristianos es diferente a la de otras religiones. Si el que te hace mal es "tu hermano" ¿como vas a devolverle mal por mal? "Todos somos hermanos, hijos de un mismo Padre". Si quien se obstina en el odio a nuestra religión, sintiera un poco de esta verdad, ¡que diferente seria el mundo!, al menos trataría con respeto a sus semejantes, sea cual sea su creencia o ideología. Pero por desgracia no es así, y seguiremos sufriendo estas sistemáticas campañas de calumnias, leyendas negras, desprestigios, persecuciones, representaciones sacrílegas..., seguiremos recibiendo bofetadas, perdonando y rezando.

He incluido este pensamiento en mi web: http://www.catolicodeapie.com
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Jesús nunca defrauda

[Gustavo]

Saludos Robert, aquí está el amor perfecto: amar a los enemigos... Jesús nos levanta la talla con la intensión de que seamos como Él. Esto es lo que necesita el mundo... atrevámonos a ponerlo en práctica, como decía la madre Teresa de Calcuta: "ama hasta que te duela".
Muchos saludos Albert, y gracias por recordarnos este mandato de Jesús a nosotros.
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"No tengan miedo ser santos" Juan Pablo II

[Pepa]

Uf! Ya lo creo que es difícil! A mí por lo menos, me cuesta mucho "amarlos". Por algo Jesús nos lo tuvo que decir expresamente, ¿verdad?
He hechado un vistazo a tu página, Roberto, está muy bien. Seguí adelante y ojalá ayude a muchos.
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No os engañéis: de Dios nadie se burla.

[María Esther]

Apreciados hermanos en Cristo:

Yo era de las que decía "hay que amar a nuestros enemigos" con una seguridad asiombrosa y hasta era capaz de dar "!sabios consejos" a aquellos que tuvieran algún resentimiento... pero no sabía cuán dificil sería ponerlo en práctica.

Dos familiares cercanos - una mujer mayor y un ombre joven - se han dedicado, desde hace algún tiempo a maltratarnos a mis hijas y a mi. Por ejemplo, el hombre (prefiero que no se sepa ni siquiera el parentesco) empujaba groseramente a mi hijita mayor, le daba regalos a los primitos de la niña pero jamás tenía un dealle para con ella; cuando mi esposo y yo estábamos pasando graves dificultades económicas nos perseguía para asegurarnos que nada se solucionaría, que éramos muy "tontos" para salir de esa terrible pobreza; esos son algunos ejemplos de los malos tratos a los que constantemente nos sometía

La mujer es ya anciana y, tal vez por su enfermedad, es muy amargada. Siempre me ha maltratado verbalmente en presencia de familiares y amigos, habla horrores de mi - en mis narices - y maltrata a mis hijas con palabras duras y privándolas de los más mínimos detalles, aunque a los primos de la niña los colme de regalos costosos y muy lindos.

Hace algún tiempo comenzamos a rezar las Oraciones de Santa Brígida, aquellas que se hacen durante doce años. Quien las reza puede ipedir por tres personas en particulay, por su salvación y santificación. Mi hijita, a pesar de haber sufrido abusos y malos tratos de estas personas ¡pidió por ellas! Todos los días reza las oraciones con su papá y con migo y está feliz porque cree, firmemente, que Dios ayudará a estos familiares a "amar a Diosito, a todas las personas y, en especial, a ella misma"...

Me dio una lección inolvidable: la chiquita está preocupada por el estado del alma de estos funestos familiares y, antes que rechazarlos o criticarlos, ¡reza por ellos!!!!

[Profesora]

Querida Maria Esther, a veces nuestros hijos más pequeños son los que nos dan lecciones de AMOR, ¿sera por la inocencia de ellos? yo creo que sí, creo que es la pureza de su alma y de la que a veces nos hace falta aprender a nosotros los mayores.
Debemos de ser puros de alma y de corazón para perdonar y pedir por nuestros enemigos, aunque a veces duele tanto lo que nos hacen, pero ¿quiénes somos nosotros para no perdonar?.


DIOS TE BENDIGA
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A JESUS POR MARIA.

[Tomás Bertrán Mercader]

Amar a nuestros enemigos, sin la gracia de Dios, sólo con nuestras fuerzas, no es que no sea fácil, es imposible. Con la gracia de Dios y Dios contando con nuestro abandono en El, es posible, como Cristo perdonó a sus verdugos "porque no sabían lo que hacían". El perdón a los enemigos es el Amor más parecido al de Dios. Por eso los mártires van derechitos, derechitos al Cielo, sin pasar ni por un instante por el purgatorio. Van porque mueren por odio a la fe y perdonando a sus verdugos-enemigos. Si a mí me matan por Dios, pero yo muero sin perdonar a mis verdugos-enemigos, no soy mártir. Y hasta me puedo condenar.
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NO SOY VETERANO

TODO POR JESUS Y MARIA.