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Berusha Asiduo
Registrado: 30 Ene 2006 Mensajes: 190 Ubicación: Monterrey, NL, Mexico
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Publicado:
Lun Feb 06, 2006 5:17 am Asunto:
Un milagrito en el microondas
Tema: Un milagrito en el microondas |
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El día de ayer sábado 4 de febrero, recibí una llamada. Era mi vecina. Con euforia me decía: "¿supiste lo que dijo el Papa el día de hoy? Dijo que laváramos con agua y jabón el plato del microondas y que aparecería la imagen de Cristo. Y vale como indulgencia. Me lo informó mi hermana que vive en Querétaro! Yo lo estoy haciendo y está apareciendo Cristo crucificado"
... quedé tan sorprendida de tal hecho que sólo le pude decir, "vecina, no necesitamos tales cosas para creer..." y por respeto me aguanté la risa y luego de una tranquila conversación colgamos.
¿Qué pasa? No es la primera vez que sé de personas que necesitan tener tales "señales". Esto me hace recordar a ciertos grupos católicos, que durante retiros espirituales hacen ciertas dinámicas donde "aparece" Jesús crucificado o una gran luz, etc.
¿Qué opinan? Si alguno de ustedes realiza en su comunidad tales dinámicas, explíquenme el objetivo por favor.
Al respecto leí en www.reinadelcielo.org:
Turistas espirituales
Rezando en la Catedral de mi ciudad, puedo ver a los turistas que se acercan desde muchos lugares, cámara fotográfica en mano, admirando vitrales, imágenes, techos, pisos, paredes. En fin, ven todo, menos al Dios Presente en el Sagrario. Caminan mirando hacia arriba y hacia los costados como si estuviesen en un museo, hablando entre ellos, comentando sobre tal pieza de arte o tal tesoro histórico. Qué triste es para Dios que estos turistas lo visiten en Su Casa, y ni siquiera lo saluden, o se den cuenta de Su Presencia. No se detienen ni durante la celebración de la Eucaristía. Esto es verdadero turismo, gente que visita una iglesia igual que las ruinas de un templo azteca o griego ¡Están tan cerca de Dios, y no lo notan!
Sin embargo hoy me quiero referir a otra clase de turismo, el turismo espiritual. Hablo de aquellas personas que andan por el mundo tratando una y otra vez de presenciar un milagro, una prueba evidente de la existencia de Dios. Van a un lugar y a otro, desde Lourdes a Fátima, desde Medjugorje a Guadalupe, una y otra vez, buscando e implorando encontrar ese milagro que los reconforte, que fortalezca su fe. No me refiero a quienes acuden a esos santos lugares a pedir o agradecer, sino a quienes buscan presenciar una manifestación de Dios allí. En resumidas cuentas, un milagro.
¿Está mal eso? Los milagros son una de las principales herramientas que Dios utiliza para llamarnos. Si analizamos con atención los cuatro Evangelios, veremos que la mayor parte de los relatos se refieren a milagros hechos por Jesús, y sólo reflejan una parte de los que El hizo. El milagro es la alteración del orden natural que Dios realiza en algún momento, perceptible por los sentidos o la razón, con el objetivo de llamar a nuestra alma a reconocer Su Existencia y Su Amor. Y el milagro sigue siendo el principal medio que Dios tiene para llamarnos, aún en nuestros tiempos. Milagros que no aparecen en los periódicos, ni necesitan ser probados científicamente, pero que las almas reconocen y aprovechan para sustentar un camino de conversión duradera. El milagro es un llamado personal, íntimo, que a veces se comparte con otros, y otras veces no.
Las vidas de los santos que son elevados a los altares cada año reflejan muchos milagros, baste leer las crónicas y los estudios hechos en los procesos canónicos para verificarlo. Y en las apariciones de Maria en tantos lugares del mundo, a lo largo de los siglos, se advirtieron y se siguen advirtiendo multiplicidad de milagros que son el sustento del crecimiento y sostenimiento de la devoción, de las conversiones. Milagros en hospitales, en pequeñas parroquias de pueblo, en humildes hogares, en ciudades y campos ¡Milagros no faltan!
Sin embargo, el riesgo con los turistas espirituales es que quizás ellos ya recibieron un milagro, un regalo de Dios, y sin embargo siguen buscando una y otra vez repetir la experiencia. Tal vez fue la sanación de una enfermedad, o un testimonio de alguien cercano, o un llamado interior innegable. Andan de aquí para allá buscando otro milagro, una confirmación, otra prueba de la Divinidad del Dios invisible a nuestros ojos. Y con tanto andar rodando y rodando, lo único que logran es adormecer sus almas, las narcotizan. Hacen algunas visitas, rezan algunos Rosarios, y creen que ya está, ya cumplieron con Dios ¡Sin trabajo no hay conversión, sin oración no hay conversión!
El milagro es el llamado, la conversión es la respuesta. El alma debe responder con conversión: oración y trabajo por el Reino de Dios. La oración le dirá a la persona cual es la misión, cual es el trabajo que debe hacerse. Algunos tendrán como misión orar, orar por los demás durante horas, días, años. La Oración como trabajo supremo que llega al pie del Trono de Dios. Para otros la tarea será la evangelización, la ayuda a Dios tiene diversas formas que cada uno debe descubrir. Y siempre sostenidos en la oración, ora y labora es el mandato Divino.
Si el alma recibe el llamado de Dios, y como respuesta busca recibir otro llamado, y otro llamado, ¿Qué se supone que debe pensar Dios de tal contestación? En realidad esa alma se transforma en una especia de planta parásita que busca absorber y absorber de lo que otros producen, y en definitiva reclama de Dios algo que no es justo, no es Su Voluntad.
Una de las más maravillosas reacciones del alma humana es la de peregrinar a los lugares donde está Dios, o Su Madre, para buscarlo, para encontrarlo. Es pura inspiración del Espíritu Santo. Pero transformarse en un turista espiritual que busca y rebusca, sin lograr entrar finalmente en un camino de conversión duradera, no es bueno. Como esos turistas que entran a la catedral mirando techos y paredes, sin ver a Quien está allí delante llamándolos realmente. Es una visita vacía, a ciegas, estéril, cuando no se orienta al espíritu, a la verdadera esencia del llamado.
Se busca a Dios, no al milagro. Se busca al Señor de los milagros, no a los milagros del Señor. Se busca el espíritu, Dios decide cómo trabajar el alma entonces. Jesús hace el milagro cuando quiere, con quien quiere, y como quiere. Y en general no lo hace cuando nosotros lo buscamos, sino que nos sorprende en tiempo, circunstancias y lugar ¡Quienes somos nosotros para juzgar Su modo de hacer las cosas!
Qué Dios maravilloso tenemos, que sigue dándonos Sus regalos en la forma de los Santuarios Marianos, o tantas devociones que se han desarrollado en todos los continentes, procesiones y fiestas de la iglesia. Tantos motivos para recibir la caricia de Dios. Seamos dignos receptores de esas Gracias, devolvamos amor con amor. Trabajemos para el Reino, respondiendo al amoroso llamado de un Dios que no deja de buscarnos, de golpear la puerta de nuestro corazón con insistentes caricias y Palabras de aliento.
Un gran abrazo.
¡Amigos fuertes en Cristo! _________________ "Aunque tuviera toda la ciencia en mis manos, si no tengo amor, nada soy" (S. Pablo)
><>Berusha<><
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CarlosR26† Veterano
Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 3941 Ubicación: MEXICO, Jal.
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Publicado:
Lun Feb 06, 2006 5:29 am Asunto:
Tema: Un milagrito en el microondas |
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Pero realmente dijo el Papa tal cosa ¿? o donde lo escucho _________________ Amar es decir al otro: "Tu no moriras"
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Jose Fernando Ortiz Constante
Registrado: 16 Ene 2006 Mensajes: 696 Ubicación: Bogotá, Colombia
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Publicado:
Lun Feb 06, 2006 1:34 pm Asunto:
Re: Un milagrito en el microondas
Tema: Un milagrito en el microondas |
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Berusha escribió: | El día de ayer sábado 4 de febrero, recibí una llamada. Era mi vecina. Con euforia me decía: "¿supiste lo que dijo el Papa el día de hoy? Dijo que laváramos con agua y jabón el plato del microondas y que aparecería la imagen de Cristo. Y vale como indulgencia. Me lo informó mi hermana que vive en Querétaro! Yo lo estoy haciendo y está apareciendo Cristo crucificado"
... quedé tan sorprendida de tal hecho que sólo le pude decir, "vecina, no necesitamos tales cosas para creer..." y por respeto me aguanté la risa y luego de una tranquila conversación colgamos.
¿Qué pasa? No es la primera vez que sé de personas que necesitan tener tales "señales". Esto me hace recordar a ciertos grupos católicos, que durante retiros espirituales hacen ciertas dinámicas donde "aparece" Jesús crucificado o una gran luz, etc.
¿Qué opinan? Si alguno de ustedes realiza en su comunidad tales dinámicas, explíquenme el objetivo por favor.
Al respecto leí en www.reinadelcielo.org:
Turistas espirituales
Rezando en la Catedral de mi ciudad, puedo ver a los turistas que se acercan desde muchos lugares, cámara fotográfica en mano, admirando vitrales, imágenes, techos, pisos, paredes. En fin, ven todo, menos al Dios Presente en el Sagrario. Caminan mirando hacia arriba y hacia los costados como si estuviesen en un museo, hablando entre ellos, comentando sobre tal pieza de arte o tal tesoro histórico. Qué triste es para Dios que estos turistas lo visiten en Su Casa, y ni siquiera lo saluden, o se den cuenta de Su Presencia. No se detienen ni durante la celebración de la Eucaristía. Esto es verdadero turismo, gente que visita una iglesia igual que las ruinas de un templo azteca o griego ¡Están tan cerca de Dios, y no lo notan!
Sin embargo hoy me quiero referir a otra clase de turismo, el turismo espiritual. Hablo de aquellas personas que andan por el mundo tratando una y otra vez de presenciar un milagro, una prueba evidente de la existencia de Dios. Van a un lugar y a otro, desde Lourdes a Fátima, desde Medjugorje a Guadalupe, una y otra vez, buscando e implorando encontrar ese milagro que los reconforte, que fortalezca su fe. No me refiero a quienes acuden a esos santos lugares a pedir o agradecer, sino a quienes buscan presenciar una manifestación de Dios allí. En resumidas cuentas, un milagro.
¿Está mal eso? Los milagros son una de las principales herramientas que Dios utiliza para llamarnos. Si analizamos con atención los cuatro Evangelios, veremos que la mayor parte de los relatos se refieren a milagros hechos por Jesús, y sólo reflejan una parte de los que El hizo. El milagro es la alteración del orden natural que Dios realiza en algún momento, perceptible por los sentidos o la razón, con el objetivo de llamar a nuestra alma a reconocer Su Existencia y Su Amor. Y el milagro sigue siendo el principal medio que Dios tiene para llamarnos, aún en nuestros tiempos. Milagros que no aparecen en los periódicos, ni necesitan ser probados científicamente, pero que las almas reconocen y aprovechan para sustentar un camino de conversión duradera. El milagro es un llamado personal, íntimo, que a veces se comparte con otros, y otras veces no.
Las vidas de los santos que son elevados a los altares cada año reflejan muchos milagros, baste leer las crónicas y los estudios hechos en los procesos canónicos para verificarlo. Y en las apariciones de Maria en tantos lugares del mundo, a lo largo de los siglos, se advirtieron y se siguen advirtiendo multiplicidad de milagros que son el sustento del crecimiento y sostenimiento de la devoción, de las conversiones. Milagros en hospitales, en pequeñas parroquias de pueblo, en humildes hogares, en ciudades y campos ¡Milagros no faltan!
Sin embargo, el riesgo con los turistas espirituales es que quizás ellos ya recibieron un milagro, un regalo de Dios, y sin embargo siguen buscando una y otra vez repetir la experiencia. Tal vez fue la sanación de una enfermedad, o un testimonio de alguien cercano, o un llamado interior innegable. Andan de aquí para allá buscando otro milagro, una confirmación, otra prueba de la Divinidad del Dios invisible a nuestros ojos. Y con tanto andar rodando y rodando, lo único que logran es adormecer sus almas, las narcotizan. Hacen algunas visitas, rezan algunos Rosarios, y creen que ya está, ya cumplieron con Dios ¡Sin trabajo no hay conversión, sin oración no hay conversión!
El milagro es el llamado, la conversión es la respuesta. El alma debe responder con conversión: oración y trabajo por el Reino de Dios. La oración le dirá a la persona cual es la misión, cual es el trabajo que debe hacerse. Algunos tendrán como misión orar, orar por los demás durante horas, días, años. La Oración como trabajo supremo que llega al pie del Trono de Dios. Para otros la tarea será la evangelización, la ayuda a Dios tiene diversas formas que cada uno debe descubrir. Y siempre sostenidos en la oración, ora y labora es el mandato Divino.
Si el alma recibe el llamado de Dios, y como respuesta busca recibir otro llamado, y otro llamado, ¿Qué se supone que debe pensar Dios de tal contestación? En realidad esa alma se transforma en una especia de planta parásita que busca absorber y absorber de lo que otros producen, y en definitiva reclama de Dios algo que no es justo, no es Su Voluntad.
Una de las más maravillosas reacciones del alma humana es la de peregrinar a los lugares donde está Dios, o Su Madre, para buscarlo, para encontrarlo. Es pura inspiración del Espíritu Santo. Pero transformarse en un turista espiritual que busca y rebusca, sin lograr entrar finalmente en un camino de conversión duradera, no es bueno. Como esos turistas que entran a la catedral mirando techos y paredes, sin ver a Quien está allí delante llamándolos realmente. Es una visita vacía, a ciegas, estéril, cuando no se orienta al espíritu, a la verdadera esencia del llamado.
Se busca a Dios, no al milagro. Se busca al Señor de los milagros, no a los milagros del Señor. Se busca el espíritu, Dios decide cómo trabajar el alma entonces. Jesús hace el milagro cuando quiere, con quien quiere, y como quiere. Y en general no lo hace cuando nosotros lo buscamos, sino que nos sorprende en tiempo, circunstancias y lugar ¡Quienes somos nosotros para juzgar Su modo de hacer las cosas!
Qué Dios maravilloso tenemos, que sigue dándonos Sus regalos en la forma de los Santuarios Marianos, o tantas devociones que se han desarrollado en todos los continentes, procesiones y fiestas de la iglesia. Tantos motivos para recibir la caricia de Dios. Seamos dignos receptores de esas Gracias, devolvamos amor con amor. Trabajemos para el Reino, respondiendo al amoroso llamado de un Dios que no deja de buscarnos, de golpear la puerta de nuestro corazón con insistentes caricias y Palabras de aliento.
Un gran abrazo.
¡Amigos fuertes en Cristo! |
Purificar la copa de nuestra mente, lavar las suciedades de nuestro corazón! No sería esto lo mejor?
Con aprecio: _________________ I de Juan 1,1-4
Nosotros, Señor, te vemos y escuchamos.....
IGLESIA_MADRE UNIVERSAL.....
MUJER revestida de sol....
Dios....en/con.... nosotros. |
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María Esther Veterano
Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 2105
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Publicado:
Lun Feb 06, 2006 1:54 pm Asunto:
Tema: Un milagrito en el microondas |
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Apreciada en Cristo, Berusha:
Infortunadamente conozco a muchos hermanos católicos - y cristianos - que buscan, como lo anotaste en tu post, más los milagros del Señor que al Señor de los Milagros.
En varios grupos de Oración he visto cómo el rezo del Rosario se hace como una antesala o invocación a alguna manifestación extraordinaria: la danza del sol, la lluvia de escarcha o el percibir un fuerte olor a rosas, son percibidos como signos inequívocos de la presencia de Dios, de Nuestra Señora o de los Ángeles y Santos... Y si no hay manifestación los asistentes se marchan desolados...¡cuánta falta de Fe!
Esta inclinacdión tan generalizada a apoyar la Fe en signos externos me recuerda al buen apóstol Tomás luego de la Resurrección de Cristo. ¿Te imaginas la vergüenza del Apóstol cuando el Señor lo invitó a meter su mano en el Cosado y el dedo en las llagas de Sus Manos? ¡Cuánto dolor y arrepentimiento habrá sentido cuando Cristo le dijo: "Tomás, ¿porque has visto has creido? ¡Dichosos los que creen sin haber visto!"!
No podemos esperar percibir a Dios con nuestros sentidos. Más bien debemos aspirar a creer en Él, a sabernos amados, asistidos, perdonados y acompañados, sin apoyo en manifestaciones externas.
Mi hija María Antonia, de seis añitos, le dio una lección a una vecina inclinada a buscar tales manifestaciones. La buena señora hablaba de "apariciones" en ventanas húmedas, en árboles añosos y hasta en posillos de chocolate La niña jugaba aparentemente ajena a los comentarios de la señora. De pronto se paró frente a ella y le dijo: "¿Sabes que yo veo a Diosito todos los domingos y algunos días entre semana?". La mujer cambió de semblante y, muy interesada, le preguntó cómo lo lograba. La niña, entonces, se sentó sonriente y le dijo:"Pues voy a Misa... ¿Sabías que Jesús está presente en la Hostia consagrada? Cada vez que el curita Lo eleva yo le digo que lo amo, le pido que me cuide y, como Dios es silencioso, me responde siempre que si".
Mi hija me pide, con alguna frecuencia, que la leve a la Capilla de Adoración y se arrodilla en silencio frente a Dios. Ella sabe que Cristo está presente bajo la apariencia de Pan y lo cree. Lo ve, realmente, con sus ojos corporales... ella sabe que estar frente al Santísimo Sacramento es como un anticipo de la Visión Beatífica y trata, por todos los medios, de encontrase con "Diosito" cada vez que quiere hablar con Él. Gracias a Dios vivimos muy cerca a la Parroquia.
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Berusha Asiduo
Registrado: 30 Ene 2006 Mensajes: 190 Ubicación: Monterrey, NL, Mexico
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Publicado:
Mie Feb 08, 2006 9:04 pm Asunto:
micro
Tema: Un milagrito en el microondas |
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Han visto los noticieros??? esto fue en verdad común...  _________________ "Aunque tuviera toda la ciencia en mis manos, si no tengo amor, nada soy" (S. Pablo)
><>Berusha<><
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CRUZADO_XXI Moderador

Registrado: 24 Nov 2005 Mensajes: 5906 Ubicación: En algun lugar de Mexico.
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Publicado:
Jue Feb 09, 2006 1:21 am Asunto:
Tema: Un milagrito en el microondas |
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berusha:
tu tambien eres de Monterrey???? que buena onda, y si lo peor es que salio en las noticias y ahora a ver que pasa.
voy a ir a U2!!!!!!!!!!!!!!!!!!! _________________ LAS PAGINAS DE CRUZADO:
http://www.antisupersticion.com.mx y http://www.diadelparrillero.com.mx
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EduaRod Veterano
Registrado: 21 Ene 2006 Mensajes: 3275
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Publicado:
Jue Feb 09, 2006 11:40 pm Asunto:
Tema: Un milagrito en el microondas |
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Berusha escribió: |
No me refiero a quienes acuden a esos santos lugares a pedir o agradecer, sino a quienes buscan presenciar una manifestación de Dios allí. En resumidas cuentas, un milagro.
¿Está mal eso? Los milagros son una de las principales herramientas que Dios utiliza para llamarnos. Si analizamos con atención los cuatro Evangelios, veremos que la mayor parte de los relatos se refieren a milagros hechos por Jesús, y sólo reflejan una parte de los que El hizo. El milagro es la alteración del orden natural que Dios realiza en algún momento, perceptible por los sentidos o la razón, con el objetivo de llamar a nuestra alma a reconocer Su Existencia y Su Amor. Y el milagro sigue siendo el principal medio que Dios tiene para llamarnos, aún en nuestros tiempos. Milagros que no aparecen en los periódicos, ni necesitan ser probados científicamente, pero que las almas reconocen y aprovechan para sustentar un camino de conversión duradera. El milagro es un llamado personal, íntimo, que a veces se comparte con otros, y otras veces no.
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Berusha:
Este tema de los milagros es muy especial, pues depende mucho de la disposición del alma y del propósito concreto que se persiga por medio del milagro mismo, el que Dios decida permitir o no esa alteración del orden natural.
Así, tenemos la certeza total de que una petición correctamente expresada será escuchada y se cumplirá sin duda:
Cita: | Díceles: Por vuestra poca fe. Porque yo os aseguro: si tenéis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: "Desplázate de aquí allá", y se desplazará, y nada os será imposible.
Mateo 7, 20 |
Pero también sabemos que Dios puede hacer muchos milagros por iniciativa propia, o por intercesión de María y de los santos, incluso no solicitada, pues conociendo las necesidades de nuestro débil humanidad, en su tierno Amor paterno, pone a nuestro alcance los medios para encontrarlo.
Cita: | Así, en Caná de Galilea, dio Jesús comienzo a sus señales. Y manifestó su gloria, y creyeron en él sus discípulos.
Juan 2, 11 |
Pero por supuesto, está también el caso en que la señal se pide para desafiar a Dios, para exigirle que nos demuestre su poder como condición para creer en Él. Esto en sí mismo es un acto de grave soberbia y se conoce como "Tentar a Dios", pues presupone que si Dios no obedece la orden, será en lo sucesivo ignorado. Así, el pecado de soberbia es doble: pensar que somos amos y no siervos, pues el que así actúa piensa que es el amo que puede mandar y que Dios estará necesitado de su adoración, por lo cual, si existe, se verá forzado a realizar el milagro; y el segundo pecado es el de autosuficiencia, ignorando la necesidad que tenemos de Dios y la imposibilidad que tenemos siquiera de existir si Él no nos sostiene. En estos casos, aún cuando se pudiera preveer una cierta utilidad o propósito para el milagro, en realidad "atamos las manos" a Dios, pues Él, como Padre bueno y amoroso que es, no nos dará aquello que pedimos de esta manera, pues sería darnos un veneno para el alma que en lo sucesivo se engañaría creyendose absolutamente autosuficiente.
Pero lo curioso es que nuestro Padre amoroso no solo se rehusa a proveer lo que con soberbia se le pide, sino que junto con la negativa no deja de proveer lo que en verdad el soberbio necesita para su salvación, por lo que la respuesta le sería de gran provecho... si es que tuviera la humildad de verlo:
Cita: | Entonces le interpelaron algunos escribas y fariseos: Maestro, queremos ver una señal hecha por ti.
Mas él les respondió: ¡Generación malvada y adúltera! Una señal pide, y no se le dará otra señal que la señal del profeta Jonás.
Porque de la misma manera que Jonás estuvo en el vientre del cetáceo tres días y tres noches, así también el Hijo del hombre estará en el seno de la tierra tres días y tres noches.
Mateo 12, 38-40 |
Por otra parte, incluso para recibir los regalos espontáneos del Señor hay que estar bien dispuestos, pues se puede tentar a Dios, pecando de soberbia, si no se sabe aceptar el regalo entregado por nuestro Padre para nuestro bien:
Cita: | Volvió Yavé a hablar a Ajaz diciendo:
Pide para ti una señal de Yavé tu Dios en lo profundo del seol o en lo más alto.
Dijo Ajaz: No la pediré, no tentaré a Yavé.
Dijo Isaías: Oíd, pues, casa de David: ¿Os parece poco cansar a los hombres, que cansáis también a mi Dios?
Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una doncella está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel.
Isaías 7, 10-14 |
Puede uno confundirse y ver en la postura de Ajaz un acto de fé y humildad, por lo que puede sorprender la respuesta del profeta. Pero en realidad lo que sucede con Ajaz es un acto de incredulidad: como no está convencido de que la señal que pida al profeta será cumplida, prefiere escudarse en una falsa humildad a descubrir que sus temores de que la señal no se produjera fueran ciertos. De ahí la reprensión del profeta que de todas formas anuncia la señal que Dios ha dispuesto, que es el nacimiento de su Hijo, Jesucristo Nuestro Señor.
A estas dos últimas categorías corresponden los "cazadores de milagros" de los que hablas, quienes quieren estar seguros "a su modo", con una señal incontrovertible de la que no sea posible dudar. Pero con su falta de fé y ceguera a reconocer las señales que ya tienen ¿sabrán reconocer una nueva?
A la verdadera fé le bastan los milagros que se han hecho, pero si una situación lo amerita, no duda en recurrir al Señor en ayuda, aceptando con humildad y alegría los designios del Padre, sean a favor del milagro, sean a favor del orden natural. Y por supuesto que, si ante una necesidad que a nosotros mismos nos resulta desconocida, Dios decide mostrarnos el camino por un evento sobrenatural, la verdadera fé no hará sino recibirlo con gozo y alegría, escudriñando en tal evento la voluntad del Señor.
¡Alabado sea Jesucristo! |
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EduaRod Veterano
Registrado: 21 Ene 2006 Mensajes: 3275
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Publicado:
Jue Feb 09, 2006 11:56 pm Asunto:
Tema: Un milagrito en el microondas |
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CRUZADO_XXI escribió: | berusha:
tu tambien eres de Monterrey???? que buena onda, y si lo peor es que salio en las noticias y ahora a ver que pasa.
voy a ir a U2!!!!!!!!!!!!!!!!!!! |
¡Y luego se extrañan de que los hermanos separados piensen cosas raras de nosotros!
¡De verdad que hay que ver lo que el demonio inventa, aprovechándose de la ignorancia del hombre, para alejar a los más que pueda de la auténtica adoración al Padre!  |
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AURORA Invitado
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Publicado:
Lun Feb 13, 2006 3:27 am Asunto:
Tema: Un milagrito en el microondas |
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Berusha Asiduo
Registrado: 30 Ene 2006 Mensajes: 190 Ubicación: Monterrey, NL, Mexico
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Publicado:
Lun Feb 13, 2006 6:51 pm Asunto:
Re: uy
Tema: Un milagrito en el microondas |
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astronomo87 escribió: | yo considero que deberias reducir por lo menos tu docis de sustancias alusinojenas pues para que digas tal estupides tines que haber estado bajo el efecto de las drogas, si sigues con ese consumo podrias morir de sobredosis |
astronomo creo que no entendí tu comentario? a quién te refieres? has leído el tema desde el inicio?
saludos _________________ "Aunque tuviera toda la ciencia en mis manos, si no tengo amor, nada soy" (S. Pablo)
><>Berusha<><
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