Foros de discusión de Catholic.net :: Ver tema - Módulo 8: Organización de la vida política
Foros de discusión
El lugar de encuentro de los católicos en la red
Ir a Catholic.net


Importante: Estos foros fueron cerrados en julio de 2009, y se conservan únicamente como banco de datos de todas las participaciones, si usted quiere participar en los nuevos foros solo de click aquí.


Módulo 8: Organización de la vida política
Ir a página 1, 2, 3, 4  Siguiente
 
Este foro está cerrado y no puede publicar, responder o editar temas   Este tema está cerrado y no puede editar mensajes o responder    Foros de discusión -> Curso: Doctrina Social de la Iglesia
Ver tema anterior :: Ver tema siguiente  
Autor Mensaje
acmargalef
Asiduo


Registrado: 27 Sep 2005
Mensajes: 227

MensajePublicado: Lun Mar 02, 2009 7:36 pm    Asunto: Módulo 8: Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Centro de Estudios Cívicos Santo Tomás Moro escribió:
Organización de la vida política


8.1. Lo permanente de la sociedad política
8.2. Elementos del Estado
8.3. Finalidad del Estado
8.4. Limitación del Estado
8.5. Formas de Estado y de Gobierno
8.6. Crítica de la democracia como forma de gobierno
8.7. La participación política
8.8. Doctrina del mal menor
8.9. Comunidad internacional


Tema 8.1. Lo permanente de la sociedad política

Política y político derivan de polis, palabra griega con la que se identificaba a la ciudad-estado, o sea, la pequeña organización o estructura de la comunidad griega. Un grupo humano que convive territorialmente en un mismo espacio físico, no puede mantener su convivencia si no se organiza. Organizarse significa ordenarse en busca de un fin y con unos medios para alcanzarlo.

El fin consiste, simplemente, en satisfacer todas las necesidades comunes que hacen a la convivencia del grupo y de sus miembros, es decir, alcanzar en conjunto todo lo que cada hombre aislado, o en un grupo menor, no podría alcanzar. Para alcanzar ese fin, el medio más importante es la existencia de una jefatura; de una autoridad con poder suficiente para hacer, mandar y prohibir todo lo que interesa al grupo.

Cuando el grupo territorial se organiza, esa organización tiene naturaleza política. La sociedad, como grupo máximo, adquiere una organización política. Surge una sociedad política, destinada a procurar el bien común de la comunidad. En ese marco adquiere orden la convivencia, alcanzan armonía y equilibrio las actividades de todos los hombres y grupos; por eso a la sociedad política se la llama comunidad perfecta.

No significa que haya alcanzado el máximo nivel de progreso humano; perfecta significa que no hay otra que pueda brindar al hombre lo que ella le proporciona: el abastecimiento de todas las necesidades de su vida y de la convivencia. Equivale a comunidad autosuficiente, porque se basta a sí misma; dispone de los medios para alcanzar su fin.

La existencia de una sociedad política en cada pueblo, se ha dado siempre y se dará en el futuro, porque responde a una necesidad de la naturaleza humana. Pero la forma concreta de la organización, de la estructura, de cada sociedad política, es variable. Depende de una decisión libre, reflexiva y consciente de quienes integran un pueblo determinado. En el mundo moderno, la sociedad política típica se conoce como Estado.


Tema 8.2 Elementos del Estado


Podemos definir al Estado como: el órgano de síntesis, planeamiento y conducción de una sociedad territorialmente delimitada, destinado a procurar el bien común.
Suelen mencionarse como datos constitutivos o determinantes del Estado: la población, el territorio, el poder y el gobierno.

* Población: es el elemento humano del Estado; sin hombres no hay Estado. La población de un Estado la integran cuantos conviven en el territorio bajo su jurisdicción. Se reserva el concepto de pueblo, para la parte de la población subordinada jurídicamente al Estado, pues sus miembros poseen la ciudadanía -por haber nacido en el territorio, o por haber optado por ella, habiendo nacido en otro país. También integran la población, quienes viven transitoriamente en el territorio, por distintos motivos, siendo extranjeros.

* Territorio: el Estado es una asociación territorial o espacial, porque requiere el marco físico o geográfico donde conviven sus miembros. El territorio delimita el ámbito espacial donde se ejerce el poder de un Estado.

* Poder: es la fuerza o energía, que debe utilizar el Estado para lograr su fin. No se trata de fuerza física, exclusivamente; más bien, una energía moral, una autoridad, en el sentido de predominancia social que logra acatamiento. La fuerza del poder estatal, proviene del asentimiento comunitario que le da sustento y lo respalda. El poder del Estado es político, porque la actividad que engendra y desarrolla es política.

El poder del Estado puede crecer y disminuir, puede expandirse o retraerse, por múltiples factores. Así, un gobierno de ideología liberal buscará debilitar el poder estatal, para dar mayor libertad a la iniciativa privada. En el otro extremo, una concepción totalitaria incrementará el poder estatal, hasta que todo lo social se esté subordinado. Si es inaceptable un Estado totalitario, tampoco puede aceptarse una limitación del poder estatal, que le impida hacer lo necesario, y quede a merced de algunos intereses particulares o de sector. En este caso, no podrá satisfacer el bien común.

Como ya explicamos, el poder del Estado posee una cualidad especial: la soberanía. Si en un momento determinado el poder del Estado deja de ser supremo en la jurisdicción territorial que le corresponde, y se subordina, de hecho, a otro poder, significa que dicho Estado ha dejado de existir.

* Gobierno: el poder como aptitud o capacidad de acción, es una potencia, que requiere ser puesta en acto. Para ello, hacen faltan hombres que sean titulares del poder y que lo ejerzan, usando aquella capacidad o energía. A quienes ejercen el poder estatal, se los denomina en conjunto, gobierno. El gobierno representa al Estado y actúa en su nombre.

Si el gobierno fuese ejercido, en la variedad de sus funciones, por un sólo hombre o un pequeño grupo, esa concentración podría degenerar en abusos de poder. Por eso, y también para hacer más eficaz la acción gubernativa, desde antiguo se ha procurado distribuir el poder. Desde Montesquieu, se ha generalizado la tendencia a lo que se llama la división de poderes.

En realidad, el poder del Estado siempre es único e indivisible; lo que se divide y separa son los órganos que ejercen el poder y las funciones que se encomiendan a esos órganos. Así surgen las tres ramas o “poderes” en que suelen separarse las funciones del Estado: Legislativa - Ejecutiva - Judicial.

Juan Pablo II considera que:

“Tal ordenamiento refleja una visión realista de la naturaleza social del hombre, la cual exige una legislación adecuada para proteger la libertad de todos. A este respecto, es preferible que un poder esté equilibrado por otros poderes y otras esferas de competencia, que lo mantengan en su justo límite.” (CA, 44)


Tema 8.3 Finalidad del Estado


La finalidad del Estado es el bien común público. Decimos que el bien común que persigue el Estado es público, por que sólo el Estado toma al hombre en su totalidad temporal, bastando para pertenecer a la sociedad política, la condición humana. Al Estado le cabe armonizar los bienes comunes parciales e individuales, pero también se presenta como la garantía de realización de todos ellos pues produce el orden sin el cuál se malograrían.

El Estado es un ser real, pero accidental, porque su existencia no es independiente de sus habitantes, ni existe por sobre ellos. Porque no es una substancia, su perfección, el bien que está llamado a poseer, está en función de ayuda para crear las mejores condiciones posibles para una buena vida humana. Las necesidades humanas son de tres órdenes:

a) Necesidades de orden material, exigidas por su cuerpo: son las que hacen a la conservación de la salud y de la especie.
b) Necesidades de orden intelectual: son las que hacen al acrecentamiento de su cultura.
c) Necesidades de orden ético y religioso, pues como enseña el P. Suarez, se considera como perteneciente al bien común no sólo aquello que mira a la utilidad temporal, sino también lo que toca a las buenas costumbres y a un modo conveniente de obrar, como es el que los actos se realicen en perfecta libertad.

Por eso, explicaba Pío XII, toda actividad del Estado está sometida a la realización permanente del bien común: “ es decir de aquellas condiciones externas que son necesarias al conjunto de los ciudadanos, para el desarrollo de sus cualidades y de sus oficios, de su vida material, intelectual y religiosa, en cuanto, por una parte, las fuerzas y las energías de la familia y de otros organismos a los cuales corresponde una natural precedencia no basten, y, por otra, la voluntad salvífica de Dios no haya determinado en la Iglesia otra sociedad universal al servicio de la persona humana y de la realización de sus fines religiosos.” (“Con sempre”, 1942, p. 13)


Tema 8.4. Limitación del Estado


El bien común público actúa como una limitación para el Estado. Porque si el Estado debe alcanzar el fin de bien común, tiene objetivamente en él una limitación derivada de su propia naturaleza. Este carácter limitativo se desglosa en tres principios:

i) El Estado debe hacer todo lo que conduce al bien común.
ii) El Estado no debe hacer lo que daña al bien común.
iii) El Estado debe abstenerse de actuar cuando el bien común no está comprometido.

Otro principio rector del orden social que interviene en la limitación del Estado, es el de subsidiariedad, que fue desarrollado por Pío XI, en la Encíclica “Quadragesimo Anno”, donde, sobre el tema en cuestión, enseña:

“Conviene, por tanto, que la suprema autoridad del Estado permita resolver a las asociaciones inferiores aquellos asuntos y cuidados de menor importancia, en los cuales, por lo demás, perdería mucho tiempo, con lo cual lograría realizar más libre, más firme y más eficazmente todo aquello que es de su exclusiva competencia, en cuanto que sólo él puede realizar, dirigiendo, vigilando, urgiendo y castigando, según el caso requiera y la necesidad exija.” (QA, 80)


Tema 8.5. Formas de Estado y de Gobierno

La autoridad responde a un orden fijado por Dios, pero la determinación del régimen y la designación de los gobernantes depende de la libre voluntad de los ciudadanos. La Iglesia no tiene preferencias. “La diversidad de los regímenes políticos es moralmente admisible con tal que promuevan el bien legítimo de la comunidad que los adopta.” (CIC, 1901) En cambio, los regímenes cuya naturaleza es contraria a la ley natural, al orden público y a los derechos fundamentales de las personas, no pueden realizar el bien común.

Las formas de Estado serán las formas de organización del Estado mismo, mientras las formas de gobierno se refieren a las formas de organización del elemento del Estado llamado gobierno. Dicho de otro modo, las formas de gobierno responden a la pregunta: ¿quién manda?, es decir, se ocupa de los titulares del poder. En cambio, las formas de Estado, responden a la pregunta: ¿cómo se manda?. Es decir, se ocupan del modo de ejercer el poder.

Formas de Estado: para conocer cómo se ejerce el poder, hay que relacionar el elemento poder con otros dos elementos del Estado: población y territorio.

a) Con relación al territorio, el poder se puede ejercer en forma centralizada o descentralizada. La forma centralizada, es la forma de Estado unitaria: el Estado es unitario porque su poder se ejerce políticamente centralizado en un lugar del territorio.
La forma descentralizada, es la forma de Estado federal: el Estado es federal porque su poder se ejerce políticamente descentralizado en distintos lugares del territorio.

b) Con relación a la población, el poder se puede ejercer: reconociéndoles su dignidad, libertad y derechos, o restringiéndolos, o negándolos. El reconocimiento implica la forma de Estado democrática; la restricción implica la forma de Estado autoritaria; la negación implica la forma de Estado totalitaria.

Podemos graficar lo expresado, con el siguiente esquema:





La forma de Estado, con relación al territorio, habitualmente se determina por las características del mismo. Los países de gran extensión territorial -como el nuestro- suelen elegir la forma federal; los países de poca superficie -como Uruguay- o de territorio montañoso -como Chile-, suelen preferir la forma unitaria. En ambos casos, por motivos operativos y de comunicación interna.

En cambio, la forma de Estado, con relación a la población, implica un modo o estilo de convivencia política, que responde a los principios filosóficos o pautas ideológicas, de quienes han influido en su conformación. Para una mejor comprensión, conviene comenzar el análisis por el totalitarismo, que es la antítesis de la forma democrática. La fórmula de Mussolini para definir el fascismo, resume adecuadamente la concepción totalitaria: todo en el Estado, todo para el Estado, nada fuera del Estado.

En un régimen totalitario, los más importantes ámbitos de la vida personal y social quedan bajo la jurisdicción absoluta del Estado: la economía, la educación, la cultura, el trabajo, los medios de comunicación.

Otra forma de Estado no democrática, es la autoritaria, que restringe los derechos y la libertad de los ciudadanos, pero no llega a absorber totalmente la vida humana, ni avasallar completamente la dignidad de la persona. Habitualmente, esta forma de Estado es transitoria, pues, o da lugar a un sistema democrático, o deriva en el totalitarismo.

Un ejemplo de Estado autoritario -que hemos conocido en la Argentina-, es el régimen de facto, instituido por un golpe de estado, que suspende la vigencia de la Constitución, y proscribe los partidos políticos. Al cabo de unos años, el mismo gobierno autoritario convoca a elecciones, en base a la Constitución, ya sea con el texto anterior de la misma, o reformada, y entrega el poder a los gobernantes electos.

Con respecto a la forma democrática de Estado, digamos que no debe confundirse con la forma democrática de gobierno, a la que luego nos referiremos. El Estado es democrático, cuando el hombre y los grupos sociales, quedan situados dentro de la sociedad política en una forma de convivencia libre, que asegura su dignidad, su libertad y sus derechos fundamentales.

Esta forma de Estado, es compatible con diversas formas de gobierno. Como aclara Pablo VI, en Carta a la Semana Social de Francia (2-7-1963):

“La democracia que la Iglesia aprueba está menos ligada a un régimen político determinado que a las estructuras de las que dependen las relaciones entre el pueblo y el poder en la búsqueda de la prosperidad común.”

Por su parte, Pío XII, en “Benignitas et humanitas”, advierte que: “la democracia, entendida en un sentido amplio, admite distintas formas y puede tener su realización tanto en las monarquías como en las repúblicas...”.

Se debe advertir que no siempre las formas de Estado -en cuanto al elemento humano o población-, se reflejan en la Constitución vigente, por eso la clasificación de un régimen político determinado no depende únicamente de las formalidades jurídicas, sino de la manera concreta de ejercer el poder.



Formas de gobierno

Aunque existen distintas maneras de clasificar las formas de gobierno, sigue siendo útil -por su sencillez- el criterio numérico para distinguir las formas de gobierno, según que el gobernante sea: uno sólo (monarquía), varios ( aristocracia), o muchos (república).

Aristóteles conjugó esta clasificación cuantitativa, con un criterio cualitativo, atendiendo al fin para el cual el gobernante ejerce el poder. Así, las formas citadas integran la categoría de puras o justas, en las que el gobernante ejerce el poder buscando el bien común.

Cada una de esas tres formas puras, se convierte en impura o injusta, cuando el fin perseguido por el gobernante es un bien particular (propio, de una clase, de un partido). Así, la monarquía se transforma en tiranía, la aristocracia en oligarquía, y la república en democracia.

Podemos ver mejor esta clasificación en un cuadro:




La inclusión de la democracia entre las formas impuras, puede llamar la atención, puesto que habitualmente, incluso por quienes usan esta misma clasificación, suele ser considerada una forma justa -y hasta la única aceptable-, denominando a la forma injusta “demagogia”. Hemos preferido mantener las denominaciones que se usaron hasta el Renacimiento, y son las que figuran en las obras de Aristóteles y de Santo Tomás .


Tema 8.6 Crítica de la democracia como forma de gobierno


Ya mostramos que la Iglesia no tiene objeción que hacer a la democracia, como forma de Estado. Pero la forma democrática de gobierno, tal como la pensaron sus promotores en el mundo moderno -Rousseau, Stuart Mill, Montesquieu- está basada en el mito de la soberanía del pueblo. En el módulo 7 expusimos la crítica científica a dicha concepción, así como la posición negativa de la Iglesia.

Recordemos ahora, la enseñanza de San Pío X, que en “Notre charge apostolique”, nos alerta que la Iglesia:

“Ha condenado una democracia que llega al grado de perversidad que consiste en atribuir en la sociedad la soberanía al pueblo.”

En cambio, la forma republicana de gobierno no merece ninguna objeción, ni desde el punto de vista científico, ni desde el enfoque doctrinario. La caracterización de esta forma de gobierno se describe habitualmente por los siguientes elementos:

a) división de funciones;
b) elección de los gobernantes;
c) periodicidad en el ejercicio del gobierno;
d) publicidad de los actos de gobierno;
e) responsabilidad por dichos actos;
f) igualdad de los ciudadanos ante la ley.

El vocablo “democracia” es ambiguo, pues existen diversidad de opiniones entre los autores, sumado a la confusión en que suele incurrirse entre los conceptos de democracia como forma de Estado, república y forma democrática de gobierno. No obstante, la Iglesia prefiere no rechazar de plano una denominación, que es utilizada habitualmente con sentido positivo, como una tendencia contraria al monopolio del poder.
Por eso, Pío XII, en “Benignitas et humanitas”, detallaba los derechos del ciudadano que caracterizan a una sana democracia:

a) manifestar su propio parecer sobre los deberes y los sacrificios que le son impuestos;
b) no estar obligado a obedecer sin haber sido escuchado.


Medio siglo después, Juan Pablo II, actualizó estas condiciones:

“La Iglesia aprecia el sistema de la democracia, en la medida en que asegura la participación de los ciudadanos en las opciones políticas y garantiza a los gobernados la posibilidad de elegir y controlar a sus propios gobernantes, o bien la de sustituirlos oportunamente de manera pacífica.” (CA, 46)

Además, aclara que una auténtica democracia es posible solamente sobre la base de una recta concepción de la persona humana. Y advierte que:

“Una democracia sin valores se convierte con facilidad en un totalitarismo visible o encubierto, como demuestra la historia.”(CA, idem)


Tema 8.7. La participación política

El aspecto más importante del funcionamiento de la sociedad política, es la selección de quienes ocuparán el gobierno del Estado. En el mundo contemporáneo, en todos los Estados democráticos, la selección mencionada se realiza a través de los partidos políticos. Éstos son agrupaciones de ciudadanos, que buscan apoyo social para competir por el poder y participar en la conducción del Estado.

El Concilio Vaticano II reconoció que:

“Es perfectamente conforme con la naturaleza humana que se constituyan estructuras político-jurídicas que ofrezcan a todos los ciudadanos, sin discriminación alguna y con perfección creciente, posibilidades efectivas de tomar parte libre y activamente en la fijación de los fundamentos jurídicos de la comunidad política, en el gobierno de la cosa pública, en la determinación de los campos de acción y de los límites de las diferentes instituciones y en la elección de los gobernantes.” (GS, 75)

No obstante, la crítica al sistema de partidos es generalizada. Los Obispos argentinos han señalado que: “Los partidos políticos se están desdibujando. No se percibe en ellos una adecuada y clara escala de valores que los rijan. Han dejado de ser escuela de civismo para sus adherentes e instrumento de selección de los mejores y los más aptos para la consecución de los cargos públicos.” (12-5-01)

Lo más grave, en el caso argentino, es que la reforma de la Constitución Nacional, en 1994, les concedió a los partidos el monopolio de la representación política, lo que facilita la partidocracia: situación en que las decisiones estatales se subordinan a la conveniencia circunstancial de los dirigentes de los partidos más influyentes.

Entonces, más que nunca, debe recordarse la obligación moral que señala el Catecismo: “Los ciudadanos deben cuanto sea posible tomar parte activa en la vida pública” (Nº 1915). Pero, quien ha insistido con severidad en dicha obligación, es el Papa Juan Pablo II:

“...los fieles laicos de ningún modo pueden abdicar de la participación en la política...todos y cada uno tienen el derecho y el deber de participar en la política...”. Agrega que, las dificultades y riesgos que puedan existir en la acción política, “no justifican lo más mínimo ni la ausencia ni el escepticismo de los cristianos en relación con la cosa pública.” (CL, 42)

Aun más, la Constitución Gaudium et Spes, señala que: “La Iglesia alaba y estima la labor de quienes, al servicio del hombre, se consagran al bien de la cosa pública y aceptan las cargas de este oficio” (GS, 75)


Tema 8.8. La doctrina del mal menor

La forma de participación en la vida cívica, que compete a todos los ciudadanos, es la de votar en las elecciones para determinar quienes serán los gobernantes. Pues bien, el voto es un derecho y un deber, que obliga en conciencia, como lo señalan el Catecismo (Nº 2240) y la Constitución Gaudium et Spes (Nº 75). Únicamente en casos muy graves y excepcionales, puede justificarse la abstención o el voto en blanco.

Debido a la cantidad de partidos existentes en la Argentina, es casi imposible que no se presente ningún partido, que tenga una plataforma compatible con los principios doctrinarios. Mucho más difícil aún es que no haya ningún candidato que reúna condiciones mínimas de capacidad y honestidad. Entonces, aunque no nos satisfaga el panorama de la política nacional, y aunque no encontremos ningún partido y ningún candidato que despierten nuestra adhesión plena, debemos practicar la antigua doctrina cristiana del mal menor, vinculada al tópico de la tolerancia del mal.

La doctrina enseña que, entre dos males, se puede elegir, o permitir, el menor. No quiere decir esto que alguna vez sea lícito “hacer” un mal, considerado menor frente a otro. Quiere decir, que frente a determinadas circunstancias, es lícito “permitir” que otros hagan un mal pues éste se considera menor al que se seguiría con una actitud intolerante (Encíclica “Libertas”, nº 23).

En el caso concreto de una elección presidencial, al votarse por un candidato considerado mal menor, no se está haciendo un mal menor, sino permitiendo el acceso a la Presidencia de alguien que posiblemente, según sus antecedentes y los antecedentes de sus competidores, realizará una gestión menos perjudicial para el bien común.

La tolerancia al mal, es un postulado de la prudencia política. Por eso, no está de más recordar a nuestro patrono Santo Tomás Moro, ejemplo de político prudente, que fue proclamado por Juan Pablo II: “Patrono de los gobernantes y de los políticos”. Precisamente, en su libro “Utopía” nos ha dejado dos consejos a los políticos, que resumen adecuadamente la doctrina del mal menor:

“Si no conseguís todo el bien que os proponéis, vuestros esfuerzos disminuirán por lo menos la intensidad del mal.”

“La imposibilidad de suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados no vale como razón para renunciar a la función pública. El piloto no abandona su nave en la tempestad, porque no puede dominar los vientos.”


8.9. Comunidad internacional

A diferencia del mundo animal que está dividido en numerosas familias y especies, que con frecuencia se persiguen sin compasión, los hombres están metafísicamente unidos, a pesar de sus diferencias de raza y nacionalidad, por la misma naturaleza humana. A la naturaleza humana común a todos los hombres acompaña la ordenación de toda la humanidad a los mismos valores espirituales y morales. La realización de estos valores necesita la colaboración de todos los pueblos y culturas en el plano internacional. Todo el orbe de la tierra, enseña Francisco de Vitoria, es, en cierto modo, una sola comunidad.

Pío XII destacaba que el bien común y el fin esencial de cada Estado “no pueden ni existir ni ser pensados sin su intrínseca relación con la unidad del género humano” (24-12-1951). Puesto que Dios dio originariamente los bienes de la tierra a toda la familia humana y no a determinados pueblos y hombres, la humanidad constituye también una unidad solidaria desde el punto de vista económico.

El bien público internacional se limita a los valores y a los servicios que los Estados aislados no pueden producir por sus propias fuerzas, y comprende los siguientes elementos:

i) La paz entre los Estados, y consiguientemente entre los pueblos. Esta paz no es posible, si no existe un determinado orden internacional, definido en común, y garantizado por procedimientos adecuados.

ii) Cierta coordinación de lo diferentes Estados, de manera que cada pueblo pueda recibir de los otros, a condición de reciprocidad, los productos y servicios que le falten.

iii) Cierta coalición de esfuerzos, con miras a la obtención de determinados fines de interés común: servicios públicos internacionales, combate al delito y al terrorismo, turismo, control de fenómenos naturales, etcétera.

El bien común internacional solamente puede lograrse con la creación de una autoridad pública, establecida con el consentimiento de todos los Estados, y no impuesta por los más poderosos. La Organización de las Naciones Unidas, representa un primer paso para la constitución de una autoridad mundial; precisamente, uno de los factores negativos de esta institución, creada por los vencedores de la II Guerra Mundial, es que las cinco grandes potencias se reservaron el derecho de veto en el Consejo de Seguridad, lo que impide la solución rápida y justa de muchos problemas.

Otra dificultad, que se presenta a menudo, es que la incorrecta interpretación del concepto de soberanía, frena las iniciativas de acción solidaria que implican la injerencia en asuntos originados dentro de un Estado. Al respecto, Juan Pablo II ha advertido que:

“Los principios de la soberanía de los Estados y de la no-injerencia en sus asuntos internos -que conservan todo su valor- no pueden, sin embargo, constituir una pantalla detrás de la cual se tortura y se asesina” (Discurso, 16-1-1993).



Fuentes:

Unión Internacional de Estudios Sociales (Malinas). “Código de moral política”; Santander, Sal Terrae, 1959.
Höffner, Joseph. “Doctrina social cristiana”; Madrid, Rialp, 1964.
Llerena Amadeo, Juan - Ventura, Eduardo. “El orden político”, Buenos Aires, AZ Editora, 1984.
Palacio, Ernesto. “Teoría del Estado”; Buenos Aires, Eudeba, 1973.
Bidart Campos, Germán. “Lecciones elementales de política”; Buenos Aires, EDIAR, 1973.
Palumbo, Carmelo. “Guía para un estudio sistemático de la Doctrina Social de la Iglesia”; Buenos Aires, EDUCA, 1987, pgs. 121/122.

Participación en el foro

Ponga un ejemplo concreto de mal menor


Recuerda que solamente necesitas dar un click en "Publicar Respuesta" para participar en el foro
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Elizabeth Mana
Nuevo


Registrado: 08 Ene 2009
Mensajes: 9
Ubicación: Cancún

MensajePublicado: Lun Mar 02, 2009 9:45 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

La posibilidad de "reducir el mal" o evitar que este se cometa es un llamado a todos los cristianos, sea cual sea el lugar que ocupen en la sociedad.
En el capìtulo anterior nos preguntaban de què manera luchar contra esas formas de violencia por parte de los gobernantes... creo que también es necesario discernir cuándo algo es un mal para la sociedad y si asì es, procurar no tenerlo como prioridad.
Estoy de acuerdo en que hay que participar, y si ningún político está preparado para asumir el cuidado de un pueblo, el mal menor es informarse y elegir al que defienda los principios bàsicos de la dignidad de la persona.
Por ejemplo, si un gobernante en su plataforma politica defiende la pena de muerte, voy a ir por otro que proponga menos ganancias economicas o no sea tan claro en el émbito laboral, pero que sea capaz de cuidar la integridad fisica y moral de los ciudadanos. Ya que la defensa de los pricipios bàsicos me garantiza que ese hombre tratarà de salir adelante con su pueblo sin destruir la vida.
Es una lìnea muy delgada la del "mal menor". Todo mal es un mal, y menor o mayor a la larga tiene consecuencias.
Saludos
Elizabeth Mana
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email MSN Messenger
gatosentado76
Veterano


Registrado: 18 Feb 2006
Mensajes: 2363

MensajePublicado: Lun Mar 02, 2009 11:06 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor

La forma de participación en la vida cívica, que compete a todos los ciudadanos, es la de votar en las elecciones para determinar quienes serán los gobernantes. Pues bien, el voto es un derecho y un deber, que obliga en conciencia, como lo señalan el Catecismo (Nº 2240) y la Constitución Gaudium et Spes (Nº 75). Únicamente en casos muy graves y excepcionales, puede justificarse la abstención o el voto en blanco.

Biendo este texto me vine a la memoria el mal menor que se da en la elecciones, durante estas, en relacion a la abstencion, por lo gernerl debida a la falta de interes, pero en determinados casos es por que la oferta politica no ofrece si no falta de valores, de dignidad y respeto por l vida, fomentado el aborto y cuestiones nefastas, por ello pienso, no la abstencion, si no el voto en blanco o anulado en forma de protesta y renocimiento de nuestro desacuerdo y dignidad de Cristinos justifica este hecho....
_________________
SIR CATCELOT EL PRIMER GATOLLERO.
http://www.dominicos-chihuahua.catolico.ws/
http://ordenseglardominica.blogspot.com/

SI BUSCAS UNA MANO QUE TE AYUDE... LA ENCONTRARAS AL FINAL DE TU BRAZO!!!
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email Visitar sitio web del autor MSN Messenger
Guillermo Rodriguez
Esporádico


Registrado: 06 Oct 2007
Mensajes: 44
Ubicación: Reynosa, México

MensajePublicado: Lun Mar 02, 2009 11:52 pm    Asunto: Modulo 8. Organización de la Vida Política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor

'El chofer que atropella a una persona por salvar a los pasajeros'

En este caso, sólo existen dos opciones y las dos son malas, es obligación optar por el mal menor.

Dicho acto (mal menor) se justifica cuando:
- No hay otra opción
- Existe recta intención
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Lilian de Zelada
Esporádico


Registrado: 19 Jun 2008
Mensajes: 33
Ubicación: Bolivia

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 12:52 am    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Saludos y bendiciones

Módulo 8: Organización de la vida política

PONGA UN EJEMPLO CONCRETO DE MAL MENOR

Como ejemplo concreto, considero lo que sucedió en la Argentina cuando se realizó la votación por la presidencia de dicho país y la gente que votó por la actual presidenta, lo hizo pensando que era un mal menor, comparada con otros candidatos. Lo mismo sucedió en otros países vecinos, aunque después se comprobó que dichos males “menores” se volvieron gigantes.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Gladys Hernández Romero
Nuevo


Registrado: 15 Ene 2009
Mensajes: 12

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 1:21 am    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Very Happy CON FRECUENCIA ESCUCHAMOS DECIR "DE LOS MALES, EL MENOR" Y ES QUE PODRÍA HABER SIDO PEOR,UN EJEMPLO ES EL TRIUNFO DEL PAN EN MÉXICO, ESTABAMOS INFLUENCIADOS POR LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN QUE DECIAN "SI GANA EL PRD SE CONVERTIRAN EN REHENES DEL GOBIERNO, SERAN OTROS CUBANOS Mad , ENTONCES EL PUEBLO DECIDIÓ VOTAR POR EL PAN, QUE VERDSADERAMENTE ESTAMOS MAL, PERO, BUENO PENSEMOS QUE PODRIAMOS ESTAR PEOR. GLADYS HERNANDEZ ROMERO Laughing
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Gustavo Montesinos Saá
Nuevo


Registrado: 15 Feb 2009
Mensajes: 4

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 2:03 am    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Un ejemplo de mal menos:

Estoy en el Ecuador y muchos prefieren la Política actual –socialismo del siglo XXI- a otra de derecha. Muchos dicen prefiero el mal menor.

Hay quienes afirman que mejor es malo conocido que mil buenos por conocer. No bueno ni lícito escoger el mal menor. Tenemos que afrontar los retos y buscar siempre lo mejor. Hemos de luchar por las causas justas y no ampararnos en “el mal menor”, pienso que esa es una posición anti católica. El católico es quien enfrenta las dificultades y con la ayuda de Dios es el constructor de una justicia social humana y humanizante.

Saludos Gustavo Montesinos Saá Ecuador.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Yahoo Messenger
jguerras100
Esporádico


Registrado: 13 Jun 2008
Mensajes: 61

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 4:57 am    Asunto: Re: Módulo 8: Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor

En el caso de mi País México se ha pensado en 1988 que era mejor que Salinas de Gortari gobernara en vez de n cambio de partido como el PRD que estaba a cargo del Ing Cárdenas, pues bien se tuvo uno de los presidentes mas rateros de la historia de México que nos devaluó como país y puso las bases para la hegemonía del narcogobierno.
Se repitió la historia cuando se mató incluso al candidato al gobierno Colosio y se impuso a 1984 Cedillo como presidente y se volvió a devaluar la moneda la pérdida de empleso, etc., y además se prestó al fraude más grande de la historia de México al nombrar a Vicente Fox en 2000 ganador antes de terminar la propia elección y quitarle una vez más la oportunidad a un cambio de partido de izquierda, pues bien siempre se pensó que era un mal menor, pero fue uno de los más nefastos presidentes de México, y una vez más por el mal menor se decidió en 2006 se volvió a decidir por otro fraude electoral a tal suerte que no se permitió el conteo de votos como impugnación, aduciendo a que era peligroso el mesías candidato del PRD y una vez más cae México en la peor crisis de la historia ahora con la hegemonía de los narcogobiernos como el de Calderón actualmente en el poder que solamente ataca a ciertos cárteles pero a otros les permite que hagan lo que quieran en estados como Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Quintana Roo, Tabasco, Campeche, etc, actualmente llevamos en este año en apenas 60 días 1630 muertes y sin contar que el año pasado fue mayor que la guerra en Irak y los cárteles siguen dominando los comercios, los secuestros, etc, y nada se dice por miedo al propio gobierno, así que esos MALES MENORES solo tienen a mi país peor que nunca, por lo cual este ejemplo histórico de México es increíble que sigamos pensando en males menores que no tienen nada de menores, así que es tiempo de replantear lo que significa porque ahora es muy complejo el devenir de la política y el estado y están infestados de dineros mal habidos, de corrupciones, de lavado de dineros,, de narcosgobiernos, etc.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
OBS
Nuevo


Registrado: 14 Ene 2009
Mensajes: 16

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 2:25 pm    Asunto: Respuesta Módulo 8
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Saludos a todas y todos.

El ejemplo de un mal menor es pensar que existe un mal menor. Cuando la figura del Estado moderno surge en los escritos de Maquiavelo (El Príncipe y Los discursos de la década de Tito Livio) se concebía como una manera legal de imponer el poder sobre los otros hacia afuera y hacia adentro del territorio. Hobbes veía al Estado como un Leviatán, ser omnipotente que regía la vida de los súbditos, quienes cedieron su voluntad para salir del estado de guerra. Locke lo veía como un pacto y la posibilidad de los civiles de deponer al soberano que tenía vínculos con la Iglesia. Rousseau lo vió como un pacto donde la soberanía recaía en la voluntad general del pueblo. Sin embargo, creer que se necesita un Estado bajo estas figuras y hacernos sentir que surgió y vive para protegernos es el mayor mal disfrazado de cordero. Las teorías marxistas y algunos pensadores "posmodernos" han observado como el Estado sólo protege los intereses de la clases dominantes, la propiedad privada (que cada vez priva a más de ella) y supuestamente, la vida. Estos dos bienes tutelados se conviertieron en formas de control y dominación de una clase económica y una política.
En México es tan sencillo observar como unas cuantas familias obtienen el mayor número de ganancias a través de la explotación del trabajo de hombres, mujeres, niños, ancianos y el Estado (entendido políticamente y no juridicamente) legitima ese orden. La violencia económica que sufre la mayoría pero que los políticos y empresarios viven como reyes en sus casas. Se habla del Estado de Derecho, pero es sabido que el Estado de Derecha neoliberal sólo ha hecho a la gente más pobre, con mayores necesidades y a los ricos los ha beneficiado y se pasean impuenemente avalados por el PAN, el PRI y sectores del PRD.
se nos hace creer de manera ideológica que si hay un gobierno de orientación de izquierda nos van a quitar todo, ¿qué tenemos que no nos hayan quitado los gobiernos priístas y panistas? Se roban las elecciones para frenar al mal. ¡Cuidado de los buenos los malos yo te los mostraré!
Se desaparecen grupos de personas que luchan por un país mejor y se dice que fue para salvar la vida de las mayorías. Son como lobos vestidos de ovejas. ¿No es el Estado un lobo?
Reprimen cualquier manifestación real a favor de los derechos con los que debe contar el total d ela población (educación, salud, vivienda, trabajo, alimentación) de descontento social y la tachan de vagos, indecentes, acarreados como con el Consejo General de Huelga, el Movimiento de Atenco, el EZLN.
Por ello, pensar que hay males menores es olvidar que estos no existen y que quien cree que la mayoría de la población somos un mal menor.

OBS
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
pablo77
Nuevo


Registrado: 01 Ene 2009
Mensajes: 15

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 2:50 pm    Asunto: respuesta del modulo 8 del curso de DSI
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

EJEMPLO CONCRETO DE MAL MENOR

Por ejemplo cuando un hombre roba comida para darle a su familia alimento que puede conseguir de otro modo, primero dice que “no es tan malo”, luego “valorándolo” a partir de la explicación de que “hay cosas peores” y, finalmente , considerándolo “bueno”, aunque nunca se explicite de ese modo.
(En el caso del padre que roba se trata de una acto moralmente malo), surge la confusión y la oscuridad se expande. Al no señalar el mal como tal, lo mismo que el bien, se llama a lo bueno, malo, y a lo malo, bueno

Saludos
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
hno. celso garcia
Nuevo


Registrado: 16 Ene 2009
Mensajes: 9
Ubicación: ESPAÑA

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 4:44 pm    Asunto: respuestas tema 8
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Surprised un ejemplo muy claro es el siguiente,
:arrow:esto sucedio en un lugar de colombia: en un municipio de colombia se presentaron dos candidatos y uno de ellos solo les importaba llegar al poder independiente la hoja de vida que tenia, por ello formo un equipo el cual se encaga de organizar todo el tema de la campaña, y de vender la gran imagen de un candidato bueno comprometido con su pueblo y que busca el bienestar de sus ciudadanos. los mas gracioso es que este candidato no tiene ni idea de que la problematica social de su ciudad, el solo se basa por lo que le dicen sus acesores. hacia mucha propaganda, llegaba el Helicoptero a la veredas y regalaba muchos mercados a las personas, pero sus discursos eran sin fundamento.
el otro candidato era una persona que llevaba una hoja de vida intachable y que mucha experiencia era un profesional titulado que habia traido algunos proyectos a este pueblo generando empleo y calidad de vida a sus cuidadaos., su campaña fue austera y muy clara con un equipo profesional. un movimiento civico mostro las hojas de vida los candidatos y mostraron que el candidato que llenaba los requisitos al cargo de alcalde era el que no hacia tanta propaganda y tenia un buen perfil politico, sin embargo el pueblo no hizo caso de eso y eligio al politico que tenia ese gran equipo de trabajo. y sucedio que este alcalde fue a los 2 años destituido por la corrupcion que realizo con contratos ,este pueblo retrocedio mas de 5 años y sus ciudadanos se dieron cuenta que no aquel que mas festejo y regalos y habla bonito es el mejor gobernante si no es aquel que tenga mejor experiencia politica y sobretodo que vele por la calidad de vida de sus ciudadanos
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email MSN Messenger
Lic. Nicanor Morales C
Nuevo


Registrado: 30 Ene 2009
Mensajes: 8

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 6:13 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Me parece que NO HAY MAL MENOR. Un acto por pequeño que se y si es malo SIEMPRE sera malo. La democracia adolece de defectos posiblemente menos que los demas sistemas politicos que hemos conocido historicamente, pero eso no la hace ajena a que prevalezcan defectos en ella. Creo firmemente en un sistema democratico porque de aun prevaleciendo en el defectos es la mejor manera de sacar adelante los problemas a los que se puede someter un pais o un Estado. Decia Winston Churchill "la democracia es el menos malos de los sistemas" o mas bien" La democracia es el mas malo de los sistemas exepto de los demas".

Juan Pablo II decia que la politica era un medio del hombre para servir al hombre simpre y cuando se llevara en conjuncion con Dios, reflexion que se complementa con la lectura biblica que dice:

"Maldito el hombre que confia en el hombre y no en el señor su Dios"
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
NELSON DAVID
Nuevo


Registrado: 29 Dic 2008
Mensajes: 9

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 9:26 pm    Asunto: Respuesta al modulo 8
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

"Es lícito persuadir a uno que haga un mal menor si ya está determinado a cometer un mal mayor. Y la razón es que, quien tal aconseja no pretende un mal sino un bien, es decir, que se elija un mal menor
(San Alfonso María de Ligorio, Theologia moralis, volumen I, libro II, tratado III, número 57 p. 353).


Ponga un ejemplo concreto de mal menor

Con respecto a este tema quisiera compartir con ustedes, en primer lugar, algunos comentarios de lo que en la Iglesia hablaron tanto los santos como el magisterio, acerca de la “doctrina del mal menor”, para luego poder proponer algunos ejemplos prácticos de nuestro tiempo:

La doctrina enseña que, entre dos males, se puede elegir, o permitir, el menor. No quiere decir esto que alguna vez sea lícito hacer un mal, considerado menor frente a otro. Quiere decir, que frente a determinadas circunstancias, es lícito permitir que otros hagan un mal pues éste se considera menor al que se seguiría con una actitud intolerante (Enc. Libertas, nº 23). Ya lo decía Santo Tomás Moro, en su libro Utopía: -“La imposibilidad de suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados no vale como razón para renunciar a la función pública. El piloto no abandona su nave en la tempestad, porque no puede dominar los vientos.” O cuando escribió: “Si no conseguís todo el bien que os proponéis, vuestros esfuerzos disminuirán por lo menos la intensidad del mal”.

A su vez Santo Tomás de Aquino, señaló que es propio del sabio legislador permitir transgresiones menores para evitar las mayores. Los que gobiernan, toleran razonablemente algunos males para que no sean impedidos otros bienes importantes, o para evitar males mayores.

Como ejemplo, cabría citar el caso de un juez que decide en una ocasión concreta no castigar determinado delito – y por tanto, tolerarlo, – después de haber comprobado que las pruebas de la culpabilidad se han obtenido de un modo ilícito (por ejemplo, mediante tortura, o a través de una escucha telefónica ilegal). Actuando así, el juez puede dejar impune un mal comprobado, pero evitar que su decisión fomente que en adelante otras muchas personas usen de ese tipo de prácticas ilícitas para obtener pruebas, por considerarlo un mal mayor.

Otro ejemplo del tema analizado en este modulo, es el caso de la ley seca decretada en los Estados Unidos durante los años veinte (y que incluso algunos condados mantienen actualmente). Se quiso luchar contra el alcoholismo y solo se consiguió crear una enorme industria y una sangrienta mafia en torno al negocio clandestino del alcohol.

Efectivamente, hay ocasiones en que perseguir un mal puede ser contraproducente, y por eso a veces el bien común exige tolerancia con el mal. En aquella ocasión comprobaron que perseguir el alcohol era peor que tolerarlo Pero al suprimir la ley seca no se autorizaba positivamente un mal, sino que simplemente se toleraba que algunas personas hicieran un uso irresponsable del alcohol. Autorizar un mal, en este caso, sería que una ley reconociera expresamente el derecho de todo ciudadano a emborracharse hasta perder el sentido.

En mi país Colombia, actualmente se discute en el ámbito político una propuesta para aprobar el negocio de la droga, con el ánimo de evitar que el pueblo se siga desangrando en la violencia. Ante lo anterior nuestro actual Presidente responde que aprobar la droga seria deslegitimizar todo el esfuerzo y sacrificio que por años se viene haciendo en contra de ese flagelo. Yo agrego a esa posición una pregunta, en consonancia con el tema que analizamos: ¿Legalizar la droga no puede a la larga ser un mal mayor? Esto por las consecuencias que pueda generar en tantos jóvenes, que teniendo libre acceso a ella, se conviertan en adictos.

Para responder mi cuestionamiento, retomo las palabras del Papa Juan Pablo II, cuando dijo que “La observancia de la ley de Dios en determinadas situaciones puede ser difícil, muy difícil: sin embargo, jamás es imposible. Esta es una enseñanza constante de la tradición de la Iglesia, expresada así por el Concilio de Trento: "Nadie puede considerarse desligado de la observancia de los mandamientos, por muy justificado que esté; nadie puede apoyarse en aquel dicho temerario y condenado por los Padres: que los mandamientos de Dios son imposibles de cumplir por el hombre justificado. 'Porque Dios no manda cosas imposibles, sino que, al mandar lo que manda, te invita a hacer lo que puedas y pedir lo que no puedas' y te ayuda para que puedas" ("Veritatis Splendor". Capítulo III, 102).

Finalmente, puedo entender que la doctrina del mal menor no busca ser una “patente de corso” para convertir en ley positiva una practica delincuencial, y que esta tampoco desea ser una conciencia permisiva (o progresista) con respecto a la actitud moral de las personas.

Tal y como lo analizamos en módulos anteriores, oponerse a una ley injusta, o ejercer resistencia a un gobierno tirano, así esté debidamente reconocido por las instituciones jurídicas y constitucionales de su respectiva nación, para la doctrina social de la Iglesia no es un delito, ya que en este caso se actúa en favor de la defensa de la colectividad. En este caso particular esa desobediencia civil, es también un ejemplo que bien podría estar contemplado dentro de la teoría del mal menor, porque al infringir el ordenamiento jurídico, se impide el ejercicio mismo del despotismo, es decir, del mal mayor.

NEMINEM NISI JESUM
_________________
NELSON DAVID MUÑOZ OSORIO
Pontifical College Josephinum
Columbus - Ohio - USA
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Ernesto Castro
Nuevo


Registrado: 05 Sep 2008
Mensajes: 20

MensajePublicado: Mar Mar 03, 2009 11:47 pm    Asunto: Doctrina Scial de la Iglesia
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto del mal menor.

Un ejemplo concreto del mal menor toma lugar en la s elecciones para elegir a un nuevo presidente o governante en el pais.
El voto es un derecho y un deber nos dice el Catecismo de la Iglesia Catolica y la Constitucion Gaudium et Spes. A menos de que sea un caso muy grave o excepcional que los candidatos sean extremadamente inmorales, se nos justifica el no votar. Pero no siendo este el caso, estamos obligados a tomar parte en la vida civica de nuestros paises.
La doctrina del mal menor nos enseña que, entre dos males, se puede elegir, o permitir, el menor. Una cosa que tenemos que poner muy claro en esta doctrina del mal menor, es que no, nos esta diciendo que el mal esta bien. No nos dice eso; el mal siempre sera mal y el bien siempre sera bien. Lo que nos dice esta doctrina es que de dos males, escojer el menor mal.
Asi es que aplicando este concepto a las elecciones presidenciales: de dos candidatos a la presidencia o al govierno debemos votar o elegir el que sea menos mal o el que vaya a hacer menos mal de los dos. Para esto debemos de discernir bien las propuestas de los dos candidatos.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
xavitemoltzin
Nuevo


Registrado: 29 Dic 2008
Mensajes: 11
Ubicación: Tlaxcala

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 1:28 am    Asunto: Módulo 8: Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor

Un ejemplo es el de las elecciones, se tienen diversos candidatos que, por humanidad, no tienen las condiciones o requisitos que los hagan siempre los candidatos ideales, por dicha razón se elige el idóneo, esa elección es la elección de un mal menor.
_________________
Xavi Temoltzin
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Visitar sitio web del autor Yahoo Messenger MSN Messenger
Monica L. Moreno y G.
Asiduo


Registrado: 18 Feb 2007
Mensajes: 194
Ubicación: Mexico D.F.

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 2:12 am    Asunto: Comentario respuesta
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

1.- Ponga un ejemplo concreto de mal menor.

Concreto de que lo pasa en la vida.

Cuando fue el terremoto de ochenta y cinco en México. Mis hermanos fueron a ayudar a sacar gente del Centro Médico, y uno estaba ayudando en Pediatría y me contó éstos.

Había una loza encima de un Médico de un lado y del otro 3 enfermeras y dos niños.

Estaba el hermano del Medico intentando sacarlo. Pero si lo sacaban a él morirían las enfermeras y los niños. Si sacaban a las enfermeras y a los niños moriría él.

Entonces el medico le grito a su hermano.

- Dile a mi Mamá que la amo mucho, soy medico y lo único que quiero es salvar vidas, así que salva a las enfermeras y a los niños.

Y así lo hicieron. Donde murió el médico existe una placa recordando a todos los que murieron en el terremoto de 85.

Es algo real y verdadero, ambas eleciones eran malas, alguen moriria, así que se sacrificó uno por el bien de los demás, lo mismo que Jesús.
_________________
¡En la Voluntad de Dios!
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado MSN Messenger
Mariluisa
Esporádico


Registrado: 05 Jun 2008
Mensajes: 70

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 2:30 pm    Asunto: Módulo 8 , Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor
Hace un tiempo, en una institución educativa todo era un verdadero caos, los grupos de porros (alumnos que son delincuentes) pagados por ciertos grupos políticos, hacían y deshacían en la institución: golpeando a los estudiantes y profesores, destruyendo el material y equipo de la institución, etc.
El director en turno renunció por lo que era necesario sustituir la autoridad que rige la institución, el director general envió un nuevo profesor para que dirigiera los destinos de la institución, pero este a su vez renunció después de una serie de hechos violentos. En ese momento el director general tomó la decisión de nombrar a una persona ajena a la escuela, pero que conocía bien los manejos porriles que se tenían en ese momento, por lo que eligió el “mal menor”, una persona que no conocía bien la situación interna de la escuela pero que podía corregir los ataques del exterior contra ella, usando tácticas semejantes a las de los porros.
Gracisas y que Dios les bendiga. Mariluisa
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Jaime A. Mejía Rosales
Esporádico


Registrado: 27 Sep 2006
Mensajes: 88
Ubicación: Irapuato, Guanajuato

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 3:09 pm    Asunto: Módulo 8: Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Participación en el foro

Ponga un ejemplo concreto de mal menor



R.- Sobre los actos intrínsecamente malos y refiriéndose a las prácticas contraceptivas mediante las cuales el acto conyugal es realizado intencionalmente infecundo, Pablo VI enseña: «En verdad, si es lícito alguna vez tolerar un mal menor a fin de evitar un mal mayor o de promover un bien más grande, no es lícito, ni aun por razones gravísimas, hacer el mal para conseguir el bien (cf. Rm 3, Cool, es decir, hacer objeto de un acto positivo de voluntad lo que es intrínsecamente desordenado y por lo mismo indigno de la persona humana, aunque con ello se quisiese salvaguardar o promover el bien individual, familiar o social» (Carta enc. Humanae vitae (25 julio 1968))
_________________
Jaime A. Mejia
LOGOS Irapuato
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
Raul A. del Campo
Nuevo


Registrado: 20 Mar 2007
Mensajes: 18
Ubicación: Puerto Rico

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 3:30 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

En el momento de las elecciones tenemos una disyuntiva de conciencia que se tiene que dilucidar por el mal menor Qué político va a actuar mejor en cada cargo? y/o Es productivo tener un gobierno compartido entre políticos de dos o más partidos? Lo malo es que no siempre estamos informado del quehacer de los políticos y las campañas son tan denigrantes que llegamos a pensar que no existe el menos malos. Se diseñan campañas orientadas a que se escoja al menos malo, haciendo creer que no hay bueno, porque el que presento todos saben que es pésimo.
Solo se puede mejorar esa cituación si nos esforzamos en predicar el amor al projimo con palabras y hechos a todos los niveles y en todas las circunstancias, luchando por reconquistar los valores cristianos que han perdido nuestras sociedades y que los políticos tratan de mantener bien escondidos.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
ArielDF
Nuevo


Registrado: 12 Ene 2009
Mensajes: 10
Ubicación: Calchaquí. Santa fe. Argentina

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 4:56 pm    Asunto: Respuesta modulo 8
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Entiendo perfectamente que cuando una persona tiene ante sí dos males debe hacer el menos malo. Si tengo ante mí un ciclista en mi carril y en el contrario un colectivo, además viajo con toda mi familia y no alcanzo a desviar al ciclista por la velocidad que llevo, es evidente que debo decidir por intentar hacer el menor daño posible que es atropellar al ciclista a la menor velocidad.
Pero es bueno destacar que uno elige libremente cuando conoce. ¿Cómo sabemos cual es el mal menor en una elección en la que nos meinten el perfil real del candidato?
Sin ir mas lejos una legisladora argentina estuvo en un foro de laicos hablando de su condición de política cristiana y luego voto en contra de la vida en la cámara.
Podemos estar seguros de cual es el mal menor.
Muchas veces en política el menor no existe.
_________________
Quien ama quiere concer al Amado.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado MSN Messenger
Luis Miguel Corral Fernan
Nuevo


Registrado: 24 Oct 2005
Mensajes: 21

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 5:59 pm    Asunto: M8 ORGANIZACIÓN DE LA VIDA POLÍTICA.
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor.
Un ejemplo concreto de mal menor se vivió en México en las elecciones presidenciales de 2006. Sin el afán de suscitar una polémica de tipo político partidista y electoral, creo que el que el actual presidente haya ganado las elecciones fue una clara muestra de mal menor, porque si bien él no reúne todas las características para ser el presidente óptimo, es quien, a mi juicio, más se podría acercar al concepto de bien común en comparación con los demás candidatos. Lo digo con todo respeto a las convicciones de los demás.

Un abrazo para todos.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Rafito
Nuevo


Registrado: 18 Ene 2009
Mensajes: 16

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 8:56 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

El mal no hay que aceptarlo ni cohonestarlo. El mal siempre existirá.
Pero en el campo de la política, que obliga al laico a intervenir, hay que elegir entre el mal, el menor. Es tolerancia que no aceptación.
Hay circunstancias que obligan a elegir un candidato, o un partido, o colaborar con un gobierno, que no son de nuestro total agrado, pero que llevan a la actuación.
Tomás Moro, ejemplo de político prudente, que fue proclamado por Juan Pablo II, ¨Patrono de los gobernantes y de los políticos ¨, nos da dos consejos: ¨Si no consigues todo el bien que propones, que nuestros esfuerzos se dirijan a disminuir su intensidad ¨, la del mal.
El otro consejo, que la imposibilidad de suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados¨no se debe tomar como excusa para no intervenir o renunciar a la función pública. El piloto no abandona la nave en la tempestad, porque no puede dominar los vientos´.
Yo quisiera referirme a políticos, que les tocó ser funcionarios de alto nível en gobiernos dictatoriales y autocráticos. Pienso en uno de ellos, en República Dominicana , Joaquín Balaguer, que era cristiano católico.
Estoy seguro que, ese líder, su presencia en ese gobierno, disminuyó por lo menos, la intensidad del mal. Podría ser un ejemplo concreto de un hombre que no dejó de actuar políticamente por no poder suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados.
Como laicos debemos elegir la doctrina del mal menor y no dejar de participar en política.
Rafael Inciarte Bracho
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
Rafito
Nuevo


Registrado: 18 Ene 2009
Mensajes: 16

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 8:56 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

El mal no hay que aceptarlo ni cohonestarlo. El mal siempre existirá.
Pero en el campo de la política, que obliga al laico a intervenir, hay que elegir entre el mal, el menor. Es tolerancia que no aceptación.
Hay circunstancias que obligan a elegir un candidato, o un partido, o colaborar con un gobierno, que no son de nuestro total agrado, pero que llevan a la actuación.
Tomás Moro, ejemplo de político prudente, que fue proclamado por Juan Pablo II, ¨Patrono de los gobernantes y de los políticos ¨, nos da dos consejos: ¨Si no consigues todo el bien que propones, que nuestros esfuerzos se dirijan a disminuir su intensidad ¨, la del mal.
El otro consejo, que la imposibilidad de suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados¨no se debe tomar como excusa para no intervenir o renunciar a la función pública. El piloto no abandona la nave en la tempestad, porque no puede dominar los vientos´.
Yo quisiera referirme a políticos, que les tocó ser funcionarios de alto nível en gobiernos dictatoriales y autocráticos. Pienso en uno de ellos, en República Dominicana , Joaquín Balaguer, que era cristiano católico.
Estoy seguro que, ese líder, su presencia en ese gobierno, disminuyó por lo menos, la intensidad del mal. Podría ser un ejemplo concreto de un hombre que no dejó de actuar políticamente por no poder suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados.
Como laicos debemos elegir la doctrina del mal menor y no dejar de participar en política.
Rafael Inciarte Bracho
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
MALLY
Esporádico


Registrado: 29 Sep 2007
Mensajes: 60

MensajePublicado: Mie Mar 04, 2009 11:46 pm    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor.
Cuando en unas elecciones, esta contendiendo un candidato que traeria muchas desgracias para todos como es el comunismo, y hacen trampa para que gane otro que aunque no es lo correcto es un mal menor porque este otro no comulga con el comunismo.
_________________
¡Venga tu Reino!
Jesús y María vivan por siempre en nuestros corazones.
Su afectisima en Cristo y el Movimiento:
Mally.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
Serbio Tulio
Nuevo


Registrado: 13 Ene 2009
Mensajes: 12
Ubicación: Honduras,C.A. Santa Rosa de Copan

MensajePublicado: Jue Mar 05, 2009 1:45 am    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Pienso que la doctrina del mal menor es la opcion de peor es nada, que podemos aplicar en nuestros paises, porque, que sucede si uno no vota, ellos siempre se eligen y toman el poder politico, y uno queda solo con el deseo de ver mejores derroteros para el pais y el pueblo,comparto que los cristianos debemos participar en la politica, aunque siempre se tilde de ser sucia, pero es la ciencia de gobernar los pueblos, y no sabia que la constitucion Gaudium ets spes nos daba el visto bueno por asi decirlo, como catolicos a participar, debemos orar mucho y tambien abrir espacios para que politicos cristianos asuman puestos de eleccion popular, pienso que si son verdaderos cristianos, por lo menos seran mas justos y correctos al tomar desciciones trascendentales. Rolling Eyes
_________________
DIOS LOS BENDIGA Y LOS GUARDE.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Yahoo Messenger
MA. GUADALUPE MONARES V
Esporádico


Registrado: 18 Jun 2008
Mensajes: 32

MensajePublicado: Jue Mar 05, 2009 2:04 am    Asunto: RESPUESTAS
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

En México sucedió en las elecciones del 2006 al votar por Felipe Calderón talvez no sea lo que México necesita pero de todos era el menos malo. o también pasa esto en los estados con los gobernadores y en los municipios .
_________________
LA VIDA ES HERMOSA
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado MSN Messenger
René Héctor Martíinez Mez
Esporádico


Registrado: 01 Sep 2008
Mensajes: 67

MensajePublicado: Jue Mar 05, 2009 9:24 pm    Asunto: Módulo 8: Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ponga un ejemplo concreto de mal menor
Entre un estado autoritario con tendencia a convertirse en democracia y un estado autoritario con tendencia convertirse en totalitario, se prefiere optar por él primero.
Pero sobre todo estar consientes y no perder de vista nuestra actitud y valores como cristianos al momento de escoger, para ello se debe de tener una muy fuerte o despierta conciencia de Cristianos y Ciudadanos.
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Yahoo Messenger MSN Messenger
juana Ruiz
Esporádico


Registrado: 26 May 2008
Mensajes: 35

MensajePublicado: Jue Mar 05, 2009 11:55 pm    Asunto: Modulo 8 Autoridad y Poder.
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

PONGA UN EJEMPLO CONCRETO DEL MAL MENOR:
La tolerancia al mal, es un postulado de la prudencia politica. Por eso, no está de mas recordar a nuestro patrono Santo Tomas Moro, ejemplo de politico prudente, que fué proclamado por Juan Pablo II:"Patrono de los gobernantes y politicos". Precisamente en su libro"Utopía" nos ha dejado dos consejos a los politicos, que resumen adecuadamente la doctrina del mal menor:
-"Si no conseguís todo el bien que os proponeís, vuestros esfuerzos disminuiran por lo menos la intensidad del mal."
-"La imposibilidad de suprimir enseguida prácticas inmorales y corregir defectos inveterados no vale como razón para anunciar a la funcion publica. El piloto no abandona su nave en la tempestad, porque no puede dominar los vientos."
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado
nicosalinas
Nuevo


Registrado: 17 Ene 2009
Mensajes: 6

MensajePublicado: Vie Mar 06, 2009 2:01 am    Asunto:
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Ejemplo de mal menor..cuentan que un dia salieron a navegar un papa su hijo y el amigo de este...el barco en el que navegavan se volteo..el papa tenia siempre un chaleco salvavidas extra..pero le faltaba uno para el amigo...el papa conocia cuan entregado a Dios su hijo era y cuanto este queria que su amigo se acercara a Dios..para elegir a quien daba el salvavidas tuvo que elegir por el mal menor..o en este caso seria el bien mayor...pues cuando el papa lanzo el chaleco al amigo ...al mismo tiempo le decia a su hijo ....hijo te amo tanto.....y ve con Dios....gracias a esta eleccion el amigo se convirtio en un sacerdote...y es el mismo que cuenta este testimonio....
Que Dios les bendiga y les guarde y nuestra madre Santisima les acompañe siempre/
En Cristo y Maria.
Nicolas
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
Mónica Elizabeth
Esporádico


Registrado: 12 Jun 2008
Mensajes: 44

MensajePublicado: Vie Mar 06, 2009 9:16 am    Asunto: Tema #8 - Organización de la vida política
Tema: Módulo 8: Organización de la vida política
Responder citando

Un ejemplo de mal menor sería cuando en un proceso electoral, los candidatos a diputados para el poder legislativo por parte del “Partido X” no son satisfactorios, pero resultan ser la opción “menos mala”, porque votar por los del “Partido Y” implicaría otorgar al Organismo Ejecutivo mayoría en el Congreso, provocando así que no haya oposición ni equilibrio en el ejercicio del poder, sobre todo cuando se sabe que indudablemente el candidato del “Partido Y” accederá a la presidencia aún cuando no es una buena opción, y cuando se conoce que su plan de gobierno es mediocre, que sus antecedentes de capacidad y/u honestidad no son buenos, y que escasamente intentará cumplir alguna de sus ofertas de campaña.

Adicionalmente, tengo un comentario sobre el contenido de la lectura. Considero que hace falta mencionar al orden jurídico como el quinto elemento de un Estado, puesto que éste es el que rige al territorio, a la población, al ejercicio del poder y sobre todo, a la actuación del gobierno, para que dicho Estado, sea un Estado de Derecho.
_________________
Mónica Elizabeth
Volver arriba
Ver perfil de usuario Enviar mensaje privado Enviar email
Mostrar mensajes de anteriores:   
Este foro está cerrado y no puede publicar, responder o editar temas   Este tema está cerrado y no puede editar mensajes o responder    Foros de discusión -> Curso: Doctrina Social de la Iglesia Todas las horas son GMT
Ir a página 1, 2, 3, 4  Siguiente
Página 1 de 4

 
Cambiar a:  
Puede publicar nuevos temas en este foro
No puede responder a temas en este foro
No puede editar sus mensajes en este foro
No puede borrar sus mensajes en este foro
No puede votar en encuestas en este foro


Powered by phpBB © 2001, 2007 phpBB Group
© 2007 Catholic.net Inc. - Todos los derechos reservados