29. Formación para el ministerio pastoral

[Padre Jairo Yate R.]

Sin la formación del celo y el sentido de la misión no hay apóstol. Me parece muy clave esta frase para invitar a formadores y formandos para que vena la realidad de la vida pastoral, como un camino que se va abriendo a lo largo del tiempo de formación del futuro presbítero
La pastoral no es una pequeña colaboración del seminarista con un frente determinado parroquial o diocesano. Desafortunadamente se descarga todo el peso de la formación en los párrocos o instituciones diocesanas, creyendo que el seminarista se está formando porque está asistiendo a dicho apostolado un fin de semana. Y eso no es tan cierto. Porque se hace necesario que desde el mismo seminario se haga un seguimiento al apostolado, al seminarista, para ir determinando el progreso de celo pastoral. Debería existir equipos de trabajo pastoral los cuales cumplirían varias tareas en pro de la formación del pastor: por ejemplo, preparar el apostolado, bibliografía, experiencias, evaluación permanente del trabajo que se está realizando, mirar si el seminarista está madurando en su Fe y su compromiso con el Señor a través del apostolado. Poder determinar en comunión con los párrocos o instituciones diocesanas, si está sirviendo dicho apostolado para la formación del candidato. La tarea no es exclusiva de los párrocos.
Teológicamente se sabe que: Jesús constituyó pastores a los que encargó con la continuación de su misión. Estos deben ser uno con El y permitirle actuar por medio de ellos.
"Tened cuidado de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual os ha puesto el Espíritu Santo como vigilantes para pastorear la Iglesia de Dios, que él se adquirió con la sangre de su propio hijo." -Hechos 20:28 "El mismo (Jesús) «dio» a unos el ser apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelizadores; a otros, pastores y maestros" -Efesios 4:11. El pastor se forma haciendo las cosas en comunión con la comunidad del seminario. No es una persona sola la que se destaca, sino que dichas personas enriquecen a los demás con sus talentos y carismas. Por eso es tan importante que se le eduque al seminarista en el sentido de la comunión pastoral. Somos todos los responsables de la misión, el éxito será del Señor que logró que sus seguidores comprendieran que la misión es exclusiva del Maestro y nosotros sus colaboradores eficaces.
El mismo San Agustín de Hipona, recomendaba a los futuros pastores diciendo: Que nadie busque su interés sino el de Jesucristo. “Ya que hemos hablado de lo que quiere decir beberse la ------, veamos ahora lo que significa cubrirse con su lana. El que ofrece la ------ ofrece el sustento, y el que ofrece la lana ofrece el honor. Éstas son las dos cosas que esperan del pueblo los que se apacientan a sí mismos en vez de apacentar a las ovejas: la satisfacción de sus necesidades con holgura y el favor del honor y la gloria.

Desde luego, el vestido se entiende aquí como signo de honor, porque cubre la desnudez. Un hombre es un ser débil. Y, el que os preside, ¿qué es sino lo mismo que vosotros? Tiene un cuerpo, es mortal, come, duerme, se levanta; ha nacido y tendrá que morir. De manera que, si consideras lo que es en sí mismo, no es más que un hombre. Pero tú, al rodearle de honores, haces como si cubrieras lo que es de por sí bien débil.

Ved qué vestidura de esta índole había recibido el mismo Pablo del buen pueblo de Dios, cuando decía: Me recibisteis como a un mensajero de Dios. Porque hago constar en vuestro honor que, a ser posible, os habríais sacado los ojos por dármelos. Pero, habiéndosele tributado semejante honor, ¿acaso se mostró complaciente con los que andaban equivocados, como si temiera que se lo negaran y le retiraran sus alabanzas si los acusaba? De haberlo hecho así, se hubiera contado entre los que se apacientan a sí mismos en vez de a las ovejas. En ese caso, estaría diciendo para sí: «¿A mí qué me importa? Que haga cada uno lo que quiera; mi sustento está a salvo, lo mismo que mi honor: tengo suficiente leche y lana; que cada un tire por donde pueda». ¿Con que para ti todo está bien, si cada uno tira por donde puede? No seré yo quien te dé responsabilidad alguna, no eres más que uno de tantos. Cuando un miembro sufre, todos sufren con él.

Por eso, el mismo Apóstol, al recordarles la manera que tuvieron de portarse con él, y para no dar la impresión de que se olvidaba de los honores que le habían tributado, les aseguraba que lo habían recibido como si fuera un mensajero de Dios y que, si hubiera sido ello posible, se habrían sacado los ojos para ofrecérselos a él. A pesar de lo cual, se acercó a la oveja enferma, a la oveja corrompida, para cauterizar su herida, no para ser complaciente con su corrupción. ¿Y ahora me he convertido en enemigo vuestro por ser sincero con vosotros? De modo que aceptó la ------ de las ovejas y se vistió con su lana, pero no las descuidó. Porque no buscaba su interés, sino el de Jesucristo.” (Sermón 46, 6-7)
El ministro de Dios en este siglo debe estar preparado como un celoso pastor en aras de su misión con la utilización adecuada y perseverante de los nuevos medios de comunicación. Esto no puede pasar desapercibido, al contrario debemos convencernos que la internet no es una opción, es el nuevo ágora de la evangelización. Todo nuevo pastor debe ser consciente de la utilidad del medio y las oportunidades de evangelizar desde otras áreas diferentes: La comunicación interplanetaria en la "aldea global" está ante nuestra mirada y en nuestro camino como una de las más grandiosas e inquietantes creaciones del presente. El hombre y mujer, la sociedad, del mañana dependerá en su mayor parte de la utilización de los mismos: medios escritos y visuales, audiovisuales, etc. “Puestos al servicio del Evangelio, ellos (los medios de comunicación) ofrecen la posibilidad de extender casi sin límites el campo de audición de la Palabra de Dios, haciendo llegar la Buena Nueva a millones de personas. La Iglesia se sentiría culpable ante Dios si no empleara esos poderosos medios, que la inteligencia humana perfecciona cada vez más. Con ellos la Iglesia 'pregona sobre los terrados' el mensaje de la que es depositaria (...) Sin embargo, el empleo de los medios de comunicación social en la evangelización supone casi un desafío: el mensaje evangélico deberá, sí, llegar, a través de ellos, a las muchedumbres, pero con capacidad para penetrar en las conciencias, para posarse en el corazón de cada hombre en particular, con todo lo que éste tiene de singular y personal, y con capacidad para suscitar en favor suyo una adhesión y un compromiso verdaderamente personales” (Evangelii nuntiandi, n. 45).
Padre, jairo Yate. Ibagué. Colombia
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Hacer la voluntad de Dios es fundamental para ser un buen ministro

[MANUEL HERNÁNDEZ PUJADAS]

Formación para el ministerio pastoral

Otros participantes
1) ¿Cuál es su visión de los movimientos eclesiales?

Respuesta: Los movimientos eclesiales son dones del Espíritu Santo a la Iglesia de
nuestros días, suscitando nuevas visiones de adaptación del cristianismo al mundo,
a la sociedad, y a los hombres y mujeres de nuestros días.

2) ¿Participa de alguno de ellos?

Respuesta: Sí, participo.

3) ¿Cree que se va logrando una mayor colaboración entre los movimientos y las parroquias, por ejemplo?

Respuesta: Creo que hay de todo. Algunos movimientos eclesiales van “por libre” y
otros buscan más la colaboración con las parroquias. Ambas cosas son buenas y dan
mayor espontaneidad y difusión a la evangelización.

[paisaschp]

¿Cómo han organizado en su seminario el “año de pastoral”? ¿ha sido, en general, una experiencia fecunda y formativa para los seminaristas? ¿cómo lo han logrado?

En nuestro Seminario no existe como tal, porque está en los años de Teología. Le llamamos el año de experiencia pastoral, y consiste en que durante un año – normalmente cuando ya están cercanos los votos solemnes y el currículum de teología está casi completo – viven una de nuestras comunidades, dedicados principalmente a nuestro ministerio, bajo la guía y el acompañamiento del Superior de esa comunidad y del Formador. Cuando lo terminan, regresan al Juniorato para terminar la Teología y completar su formación.

No todos los jóvenes son partidarios de esta experiencia, y así la han manifestado. Resulta difícil interrumpir los estudios de Teología y dedicarse por completo durante un año a nuestro ministerio, sabiendo que su compromiso es temporal y que prácticamente dedican mucho tiempo a conocer la situación cuando ya tienen que interrumpir su acción. Pero a nosotros nos sirve de gran ayuda para conocer si están bien asimilados los principios formativos que han tenido que hacer suyos.

El resultado de la experiencia depende mucho de las circunstancias. En general, de si el Superior está en condiciones de darle el acompañamiento formativo, del trabajo específico que va a desarrollar, y de los equipos pastorales en los que se va a integrar. La claridad de la misión a la que va destinado, aunque sea por un año, es clave en este aspecto.

[paisaschp]

¿Cómo equilibran en el horario del seminario las actividades comunitarias? ¿cuáles son las que más ayudan a la formación de los seminaristas?
¿Cómo han organizado en su seminario el periodo de vacaciones para que tenga también un valor formativo?

En nuestro caso, la comunidad es un factor decisivo para nosotros, que somos religiosos. La Casa de Formación (Seminario) se organiza sobre la realidad comunitaria que vivimos: los tiempos de oración en común, las comidas juntos, el estudio en la misma sala, el planteamiento comunitario en los compromisos apostólicos, etc. Por tanto las actividades comunitarias son las que tienen prioridad sobre las “personales” (deporte, estudio fuera de determinadas horas, etc.). Y están los turnos para cuidar las cosas de todos: desde la limpieza, hasta la responsabilidad compartida, pasando por todas las tareas de la cocina.

Los seminaristas son considerados como unos religiosos más, en cuanto a sus obligaciones comunitarias. Y la vida fraterna se alimenta con una específica voluntad de hacerlo así como reflejo y consecuencia de nuestra consagración. Por lo tanto, la comunidad forma parte de nuestro ser y así es como se trata.

Las vacaciones son las propias de cualquier religioso: se trata de un periodo de descanso con la propia familia, y normalmente duran unas tres semanas durante el mes de julio. No es tiempo de paseos ni de otras actividades, sino de estar con la propia familia. Cuando ésta no existe, puede pasar ese periodo en otra comunidad nuestra que proponga. Normalmente, el curso va de agosto a mayo, y el mes de junio se utiliza también para adelantar créditos. También ahí, como en Navidad, se intensifica la formación dentro de nuestra Casa

[Alan Josué Saldaña García]

¿Qué campos de pastoral atraen más tu atención? ¿te sientes preparado para estar inmerso en él?
Cada actividad es una entrega real y verdadera, debe ser completa, en lo intelectual, en el servicio, en mi caso en la catequesis, en la casa hogar. Claro que me entrego que me preparo para entrarr de una fiorma completa y lista aunque la practica es distinta, nos ayuda a crecer.
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DIOS es AMOR y ha creado al Hombre por AMOR y para AMAR. He aquí la formula de la PAZ que el MUNDO busca AMAR A DIOS Y AL PROJIMO

www.EducarEsAmar.tk www.Videos-Katholikos.tk

[luis94]

Otros participantes
- ¿Cuál es su visión de los movimientos eclesiales? ¿participa en alguno de ellos? ¿cree que se va logrando una mayor colaboración entre los movimientos y las parroquias, por ejemplo?
Aunque no participo en ningún movimiento eclesial, mi visión acerca de ellos es positiva. Hay que aceptar que el Espíritu Santo “sopla donde quiere”, suscitando movimientos basados en el trabajo de laicos comprometidos con el Evangelio. Creo que la aceptación de estos movimientos se va dando lentamente, a pesar de no pocos prejuicios dentro de la misma Iglesia. A medida que vayan cayendo estos prejuicios, la colaboración mutua entre movimientos y parroquias irá en aumento. Además, hay otra razón práctica que hará crecer a estos movimientos: la falta de sacerdotes hace hoy más indispensable el compromiso de laicos y el trabajo coordinado con el clero, para llegar a lugares y ámbitos a los que no se podría llegar de otro modo. Al mismo tiempo considero muy importante que los sacerdotes encargados de las parroquias acompañen, guíen, vigilen, corrijan, hagan sugerencias a estos movimientos, para evitar desviaciones no deseadas. También el sacerdote debe tener la humildad de reconocer que puede aprender de todo lo bueno que estos movimientos aportan. Soy partidario de que cuando aparece un movimiento de este tipo, mientras no haya nada evidentemente contrario a la Iglesia, hay que dejarlo andar, acompañando su crecimiento, respetando su vocación y carisma esencial, vigilando atentamente su evolución, y profundizando su sentido de pertenencia y colaboración a la Iglesia.

[P. José Estebas Martínez]

La colaboración de los laicos en la labor pastoral la creo necesaria y efectiva. Ahora bien que se realice en forma coordinada u orgánica con la Pastoral de la Iglesia Universal, Diócesis y parroquial.
Tengo una experiencia marvillosa de la zona andina del Perú: Prelatura de Chota, Cajamarca. El sacerdote podría llegar una vez al año a las comundiades campesinas. El laico (Catequista) colabora de una forma muy efeciente. Reune a su comunidad para celebar la Palabra de Dios una vez a la semana. Les prepara para los sacramentos con la catequesis presacramental, organiza y anima espiritulamente a los grupos: Apostolado de la Oración, Legión de María, Jóvenes, ...se especializa en temas como Promotor de Salud, Proyectos de desarrollo con Cáritas...Y se reune una vez al mes en la Parroquia ( a veces un jornada de camino por sendas hasta llegar) donde participa de los sacramentos confesión, eucaristía ( Promesa al Corazón de Jesús), y recibe capacitación y se programan las actividades del mes. A parte una vez al año se capacita en cursos de Teologia.
Todo ello dentro de una pastoral de conjunto y de forma órganica con toda la Diocesis.
Ha sido algo maravilloso.