Ausencia de Dios

[Omar_Perú]

Querido Hermano EduaRod

No sabes lo importante que es tu presencia en estos momentos de mi vida, pensé que la cosa iría bien, pero va de mal en peor, no veo ninguna salida, salvo terminar todos mis días como hoy, llorando amargamente en mi habitación.

Estoy perdiendo la fe, dejé el rosario y la coronilla, la palabra ni la abro y el miércoles hice de mi vida un día espantoso: No sé que me pasa, por qué estoy yendo tan mal, desde que firmé no tengo paz, solo una ilusión altanera que me incita al pecado.

Es como si la furia contenida en mi encontrara un motivo para despertarse y destruirlo todo, como una venganza contra mi mismo, ya no puedo ni orar, no quiero que nadie me vea, quiero ser invisible en la misa, siento como si apestara, mi maldad se ha desencadenado y vivo todo el día tratando de contenerla.

Si hago algo bueno inmediatamente me insulta, me dice que no hago nada sino buscando mi vanagloria, si voy a rezar al Santísimo me dice que solo lo busco por lo de mi esposa, yo pensé que esto terminaría de otra forma, pero no puedo cegarme y no darme cuenta que voy barranca abajo.

Oh querido hermano, si necesito tu ayuda, porque no veo nada, gracias por darme aliento, sin ese apoyo no podría seguir adelante, hoy necesito una mano, permíteme apoyarme un poco, gracias por no pasar de largo.

Tengo el corazón destrozado, me pregunto por qué ha pasado todo esto y mi maldad empieza a buscar culpables para vengarse, con esa estrategia el mal hace conmigo lo que quiere, me contengo lo más que puedo, vivo en una lucha incesante dentro mío, no tengo un momento de paz, ni siquiera en la misa.

Todo eso agota mi enegía, que antes usaba para rezar, ahora solo sobrevivo, no sé qué hacer ni cómo detener esta avalancha, no quiero caer, por favor, no quiero caer, oren por mi, así como en su momento yo oré por todos ustedes.

Me voy a rezar, por favor pidan por mi, que no me pierda, que no me caiga, que no pierda lo único de valor que tengo: mi pequeña fe.

En verdad siento este viernes, siento la ausencia de Cristo en mi vida, ya lo crucifiqué, tengo las manos sucias de su sangre inocente, tengo verguenza de acercarme, me duele toda el alma sin su consuelo.

Yo creí que lo escuchaba (a Dios), pero a mi me dijo que todo estaría bien, entonces creo que solo lo imaginé, que todo eso que yo sentí como su cariño solo fue una ilusión mía. Yo creí que Dios me oía y que éramos amigos, pero yo soy un malvado y por eso Dios no se puede juntar conmigo.
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Abrazos,

Omar