La enfermedad y lo que sigue de ella...

[Orpam Saretnoc Laverz]

Amigos foreros encontrados en tiempos distintos Mol, Mª Antonia, Paulino, El tequila, Felipe Juanes, Rouge3, Alfredo consultor, Palestina, Felipe y Guajiro, René, Miranda, Bruno, Victor Manuel, Daniel H., Jorge Ignatus, Karla y P. Ramón que respondistéis y os escribí, y a todos los que estáis ahí ahora mismo; encontrando un párrafo que habla sobre la enfermedad lo quiero compartir ahora con todos vosotros.
Dice así:
La enfermedad es un camino que nos obliga a realizar un trabajo interior de gran responsabilidad y honestidad que nos lleva a reconocer y comprender cómo actúan nuestros sentimientos más destructivos como la ira, el rencor, el odio, la pérdida del sentido de la vida, la mayoría de veces inconscientes en el ser humano. Estos sentimientos nos hacen perder la armonía de nuestro ser apareciendo la enfermedad, única alternativa que le queda al alma para reclamar nuestra atención y poder así sanar nuestras zonas más heridas.
Antonio Pascual (Barcelona) es el autor de estas líneas.

Naturalmente si quieres añadir, comentar, proponer o comentar lo que dice estaría contenta de escuchar tu opinión, amigo, amiga.

Orpam Saretnoc Laverz

[Tralalá]

Ahora estoy muy apurada y no me parce un tema ligero de relax pero, me interesa. Volveré
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[Rogerus]

Hola Orpam, me parece, personalmente, que hay otra formas de ver la enfermedad que nos llevan inmediatamente a Dios y no a nosotros mismos. Ésa es según mi pobre manera de ver, la enfermedad del hombre actual, que todo lo quiere explicar según su propia y única dimensión, y busca luces artificiales con tal de no ver la luz de Sol divino de Amor que es Dios.

Para mí la enfermedad, cuando la he sufrido, es una forma en que siento más cercano a Dios, que prueba, sí, pero que consuela, que acompaña, que fortalece. Ahí nos damos cuenta de que el hombre no es lo que aparece por fuera, fuerza, belleza, buena forma..., sino que es lo que puede hacer por amor a su Dios.

Mi humilde opinión. Dios te bendiga, hermana.

Rogerus a Iesu.
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"O quam amabilis es, bone Iesu! - Quam delectabilis es, pie Iesu!
O cordis iubilum! Mentis solatium! - O bone Iesu! O bone Iesu!

Rogerus a Iesu

[Tralalá]

AMIGO ROGERUS: Los extremos son malos. Es cierto que todo lo buenos nos viene de Dios (todo bien tiene en Dios su origen) pero, como somos libres es necesario aunque sea un mínimo gesto de nuestra parte para aceptar a veces conseguir arduamente un bien, por ejemplo una mejor salud. No considero que "basta la salud" ni tampoco que sea el máximo bien.
Creo que, como decís, nos puede acercar a Dios (o alejar de El) pero que debemos usar los medios humanos para sanarnos incluyendo la psiquiatría y la psicología (si no yo no estaría acá). Es verdad que son disciplinas que tienden a centrar en uno mismo, me lo advirtió el sacerdote con quien me confieso pero, es una herramienta necesaria.
Sino sería como tener hambre y no procurarse el alimento.
Con cariño
Tralalá
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[Orpam Saretnoc Laverz]

¿Sabéis amigos, los dos, de quién me acuerdo al deciros lo del título de la respuesta?
Pues, ni más ni menos que de mi papá que lo decía así.

Gracias por vuestras aportaciones. Creo que es indispensable que uno se centre en sí mismo en toda circunstancia de la jornada, para ver cómo está, quién es, etc. Pero, ¡claro! si somos discípulos de Cristo hemos de dirigirnos al Señor para invocarle que guíe nuestros pasos "por el camino de la paz" no sólo dentro de nosotros mismos, aún en la enfermedad, sino siempre.
De modo que ¡muchas gracias!
Dios os bendiga y María

Orpam Saretnoc Laverz

[Rogerus]

Gracias por sus respuestas. Sin duda tienen razón, pero sólo hay un extremo que no es malo, Tralalá: el amor auténtico.

La única forma de conseguirlo es meterse tanto en Dios, en Cristo, que todo lo veamos a través de Él, con su luz, incluso a nosotros mismos, de otra forma procuraremos sí los medios que debemos, medicina, psiquiatras, etc., pero buscando no lo que Dios quiera, sino lo que más nos apetece. ¿Y si a Dios no le gustara?

Por eso a mí me parece que antes de centrarse en uno mismo, debemos centrarnos en Dios, si no nos sucede otra vez lo que a Adán y Eva, que tuvieron hambre y se olvidaron de Dios por centrarse en sí mismos. Seguro que no querían ofender a Dios, pero lo hicieron.

Que Dios nos bendiga. Su hermano Rogerus a Iesu.
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"O quam amabilis es, bone Iesu! - Quam delectabilis es, pie Iesu!
O cordis iubilum! Mentis solatium! - O bone Iesu! O bone Iesu!

Rogerus a Iesu

[Tralalá]

Me alegran mucho ROGERUS tu fe y tu devoción tan grandes. Ruego a Dios que siempre perseverés en esa gracia.
A todos los participantes del tema: Es cierto, el primero y mayor de los mandamientos es el AMOR y en eso no hay mal extremo.
Pero, sólo Dios es simple, nosotros los humanos somos complicados, por eso tenemos contradicciones. Por ejemplo: nuestra capacidad de amar reside en nuestra Voluntad, si la ponemos en la de Dios y le permitimos obrar en nosotros como Él quiere, será maravilloso.
A la vez los sentimientos nos juegan malas pasadas. A veces confundimos el mero sentir con el Amor cuando no lo es.
La voluntad es libre, capaz de elegir. El sentimiento no, por lo cual no es meritorio ni pecado. Cuando la voluntad acepta y realiza un sentimiento, cambia la cuestión para bien o para mal.
Pero. cuando uno está enfermo, psiquiátricamente hablando, muchas veces se le debilita y confunde en gran medida la Voluntad (no sabe lo que quiere ni lo que hace ni porqué ni para que). O sea es un estado de mínimaa libertad. Si existen medios para volver a obtener la libertad y con ella la capacidad de amar, aunque estos medios pasen por la introspección, considero que es bueno utilizarlos.
Capaz que estuve muy enredosa, si algo no comprenden me pueden preguntar. Hasta la próxima
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[Rogerus]

Gracias, Tralalá, tienes razón.

A lo que me opongo es a querer solucionar todos nuestros problemas por esos métodos, o explicarlo todo de esa manera, sin la más mínima referencia a Dios. Y decir que tus niveles de agua están bajos, por lo que es más fácil que te enojes, o que tu fecha de nacimiento indica que eres de un cierto temperamento, o otros modos.

Es decir, una ciencia pretendidamente atea. No digo que no debamos usar la inteligencia para curarnos de diversos males (los males psíquicos sé que son problemáticos y complicados de resolver), sino hacerlo, intentarlo, pero sin dejar de lado a quien tiene en su mano nuestra vida, nuestra salud, quien es nuestra felicidad.

Bendiciones. Rogerus a Iesu.
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"O quam amabilis es, bone Iesu! - Quam delectabilis es, pie Iesu!
O cordis iubilum! Mentis solatium! - O bone Iesu! O bone Iesu!

Rogerus a Iesu

[Tralalá]

Totalmente de acuerdo. Dios los bendiga. Tralalá
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