Que decirle al Evangelico..!

[Cesar Torres]

Hola a todos y que Dios los bendiga, quiero consultarles que significado tiene y porque se persiga (En el nombre del Padre y del Hijo y del Espiritu Santo) cuando se pasa delante de una imagen ya sea de Virgen o Santo y/o cuando se pasa por un cementerio.

[Castrejón]

YO creo que por costumbre y muchas veces sin pensarlo exactamente.

Pero también es posible que sea simplemente, o así debería ser, porque al pasar ante la representación artística de un siervo de Dios o ante el campo de los que duermen en el Señor, uno va y se acuerda precisamente de Dios.

NO hay nada de mágico en todo esto.

Simplemente uno ve cosas que le hacen acordarse de Dios.
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"Escuché un rumor como el de una gran multitud,, como ruido de aguas torrenciales, como fragor de truenos muy fuertes: ¡Aleluya, ya reina el Señor, nuestro Dios Todopoderoso!"
-Apocalipsis-

[ESTERO]

+--es para entrar en precencia de Dios, y respeto, en el nombre de la santisima Trinidad
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1 Timoteo 2:5 — Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.

Santiago 2:19 — Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.

[Gepeto]

[TITO]

Saludos Cesar:

Mira te pongo esto de defiendetufe.org:

5.- Persignarse haciendo la señal de la Cruz.

En realidad toda la vida diaria del cristiano estaba marcada por la señal o signo de la cruz. Los primeros cristianos se bautizaban persignándose. De hecho, el Santo Apóstol Juan antes de su muerte dibujó una cruz sobre su cabeza con la mano. En las actas de San Afri se relata que cierta vez un pagano le dijo a San Narquis y a su diácono:

"Sé que son cristianos ya que con frecuencia signan su frente con la cruz."

Era de esta manera que de una forma externa transmitían su fe en la salvación obtenida gracias a la muerte de Jesucristo en la cruz. Ya en tiempos de los apóstoles se comenzaba todo acto con la señal de la cruz. Al entrar al templo, los cristianos se persignaban. Hacían lo mismo al comenzar y al finalizar las oraciones. El sacerdote se persignaba al comenzar el sermón. Con la señal de la cruz se comenzaba cualquier oficio de la Iglesia: la bendición, la santificación, etc.



Tertuliano escribe que los cristianos se persignaban durante todas sus ocupaciones, ante cada movimiento: cuando salían o volvían a su casa, cuando se vestían y se calzaban, al entrar al baño, al sentarse a la mesa, al encender las lámparas, al comenzar una conversación, al acostarse, etc. Se signaban siempre con la mano derecha aunque de distinta manera, al principio lo hacían con un dedo signando la frente, la boca y el pecho.

Esto se llamaba la pequeña cruz. Luego se persignaban tocando con la mano la frente, el pecho, el hombro izquierdo y después el derecho. Con el tiempo comenzaron a poner tres dedos juntos al persignarse, con lo que recordaban la Santísima Trinidad, y los dos dedos restantes los apretaban contra la palma como símbolo de las dos naturalezas de Cristo.

Así fue evolucionando hasta nuestro tiempo. Como católicos, estamos totalmente seguros que como el Apóstol Pablo lo dijo: para nosotros la cruz es poder de Dios.


Como ves los catolicos al persignarnos tratamos de bendecir nuestros actos.

Gepeto andas mal el Señor Jesus te manda amar hasta a tus enemigos no el andar echando maldiciones en su nombre...
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¡Ay, los que llaman al mal bien, y al bien mal;
que dan oscuridad por luz, y luz por oscuridad;
que dan amargo por dulce, y dulce por amargo! Isaías 5,20

[Gepeto]

[Kol]

Pues la Cruz es sinónimo de Cristo, osea, Jesús, entonces, al persignarnos nos estamos diferenciando, en el ámbito espiritual, de los que no son cristianos, para que los espíritus malignos no nos ataquen. Ellos, al ver que estamos marcados con la señal de la Cruz (en la frente para proteger la pureza y bienestar de nuestros pensamientos, en el pecho para cuidar nuestro corazón de malos sentimientos, y en nuestros hombros para cuidar nuestras espaldas de todo mal o peligro), no se acercan, ya que Dios nos protege (por eso decimos: en el nombre del Padre, del Hijo, del E.S.). También al persignarnos recordamos el sacrificio de Cristo y nuestra remisión por Él, con Él, y en El.

Al pasar por una Iglesia nos persignamos en señal de respeto, honor, recuerdo, y amor a Jesús Sacramentado, que está en el Sagrario de esa Iglesia. Al pasar por un cementerio es para interceder por esas almas en caso de que todavía no hayan alcanzado el descanso eterno.

Al pasar por lugares donde se practican actos pecaminosos (brujería, prostitución, etc) es necesario hacernos la señal de la Cruz para protegernos, y también hacer una pequeña oración por las personas que están allí y por la purificación de esos sitos, para que encuentren la luz de Cristo.

Dios los bendiga, Karol
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Nada hay mejor en el mundo que estar en gracia de Dios

[A. Ma. Betania]

[Kol]

A. María. Betania, estoy totalmente de acuerdo contigo.

Gepeto, hermano, es como cuando alguien observa la foto de su madre ya fallecida. La observa con cariño, porque le recuerda a su madre. Le trae a la mente los recuerdos más hermosos que vivió con ella, le recuerdan las facetas de su personalidad. ¿pero, está adorando ese pedazo de papel en que está impresa la imagen de su mamá? no, simplemente está observando la imagen de aquélla que le dio la vida, lo amó y cuidó durante su vida. Así mismo hacemos los católicos con las imágenes. No adoramos imágenes de Jesús, sino que nos complace verlas ya que nos recuerdan a Nuestro Señor. No adoramos imágenes de María Santísima, sino que nos recuerda a aquélla que es la Madre del Señor (Lc 1,43: "¿Quién soy yo para merecer que la MADRE de mi SEÑOR venga a verme?). No adoramos imágenes de santos, sino que el observarlas nos hace tener presentes que todos podemos llegar a un grado alto de santidad, si, como ellos hicieron, seguimos los mandatos de Cristo.

"con la misma vara con que medís, seréis medidos"

Los protestantes nos acusan de adoradores, ellos serán juzgados por Dios como adoradores. Cualquier católico podría decir que entonces los protestantes son adoradores de la Biblia, no la leen completa sino a medias, y mucho hablan, pero es poco lo que practican.

LEAMOS la Biblia COMPLETA:

En la Biblia se habla de una Iglesia apostólica (Jn 15, 16; 20, 21; Lc 22, 29-30; Mt 16, 18; Jn 10, 16; Lc 22, 32 [Jn 21, 17]; Ef 4, 11; 1 Ti 3, 1.8; 5, 17),
CON AUTORIDAD (Mt 28, 18-20; Jn 20, 23; Lc 10, 16; Mt 28, 20)

PERPETUA (Is 9, 6-7; Dan 2, 44; 7, 14; Lc 1, 32-33; Mt 7, 24; 13, 24-30; 16, 18; Jn 14, 16; Mt 28, 19-20,

INFALIBLE (Jn 16, 13; 14, 26; 1 Ti 3, 15; 1 Jn 2, 27; Hch 15, 28; Mt 16, 19). (cada protestante interpreta la Biblia a su manera)

Unidad completa (espiritual y visible) de esa Iglesia (Jn 10, 16; 17, 17-23; Ef 4, 3-6 [cf 3, 21; 4, 14]; Rm 16, 17; 1 Co 1, 10; Flp 2, 2; Rm 12, 5; Col 3, 15). El protestantismo tan divido no puede ser la Iglesia que remitió Cristo para que diera a conocer su Verdad (¡en singular!, no tantas verdades como creyentes hayan).

LA EUCARISTÍA: (cf, 6, 2-3. 14. 22-23. 60.): “yo soy el pan vivo bajado del cielo”, “quien come de este pan vivirá para siempre”, “y el pan que voy a dar es mi carne, la cual entregaré por la vida del mundo”, “mi carne es verdadera comida… mi sangre es verdadera bebida”, “el que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él”, “el que me coma vivirá por mí”, “si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre no tenéis vida en vosotros”, “el que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna”

Esta obstinación, reiterada y con tanta fuerza, no sólo desde el punto de vista de la interacción de los personajes en cuestión, sino también desde la óptica del lenguaje tenaz, gráfico, directo y sin ambigüedad de ningún tipo, se hace patente aquí en Jn 6; no hay precedente que pueda sugerir que una narrativa y diálogo como estos aludan a un entendimiento exclusivamente simbólico.

Junto a este sentido natural y demandante que anuncia la significación literal del pasaje en cuestión, y que por lo tanto lo señala como evidencia de la presencia real de Cristo en la Santa Comunión, tenemos el hecho de que Jesús no corrige la interpretación literal de sus oyentes. Esto es importantísimo porque es harto conocido y aceptado que una característica de este evangelio es que cuando, o cada vez que el Señor es mal interpretado o mal entendido, Él siempre corrige. Siempre: 3, 5; 4,34; 7, 38-39; 21, 21-23 (y hasta en Mt 16, 6ss). Pero aquí, de manera atípica, y por lo tanto desconcertante, El Jefe no corrigió, no se echó para atrás, no lo echó a votación ni les dijo que cada cual podía tener su propia idea o interpretación porque, total, somos hijos de un mismo Padre y le servimos a un mismo Dios.

ESTÁ CLARO: hay que comérselo, y bebérselo!

bueno, ya me tengo que ir, Dios los bendiga, y cuidemos nuestra FE!

Karol
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Nada hay mejor en el mundo que estar en gracia de Dios

[A. Ma. Betania]

Buena aclaración Kol.

Ahora mi pregunta es para Gepeto, ESTERO, y todos los demás protestantes Evangélicos...


¿Por qué en sus iglesias tienen imágenes de la Cruz?

Bendiciones
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