Antonio Asiduo
Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 231 Ubicación: Bogota-Colombia
|
Publicado:
Dom Nov 06, 2005 3:10 pm Asunto:
Muy buen predicador habéis salido, pero no buen religoso
Tema: Muy buen predicador habéis salido, pero no buen religoso |
|
|
saludos a todos
Este aporte de otro foro, me gusto, y creo que es bueno evaluarlo pues vemos que muchas veces se predica y poco se practica. a mi un profesor de matematica decia No todo el que domina las matematicas es un buen profesor de matematicas.
antonio
REGOCIJAOS PORQUE VUESTROS NOMBRES ESTAN ESCRITOS EN EL CIELO
Había enviado Cristo nuestro Redentor a sus discípulos a predicar, y dice el Sagrado Evangelio (Lc. 10,17) que volvieron muy contentos y ufanos, diciendo: "Señor, habemos hecho maravillas y milagros; aun hasta los demonios se nos sujetaban y nos bendecían en vuestro nombre". Respóndeles el Redentor del mundo : "No pongáis vuestro contento y gozo en que hacéis maravillas y milagros, y mandáis a los demonios y os obedecen, sino gozaos y regocijaos porque vuestros nombres están escritos en el Cielo". En adquirir y ganar el reino de los Cielos habemos de poner nuestro contento y nuestro gozo; que esotro sin esto no nos aprovechará nada (Mt. 16, 26) : ¿Qué le aprovecha al hombre que gane todo el mundo, si es con detrimento de su alma?
7. Pues si esto decimos, y lo dice el mismo Cristo, de las ocupaciones y ministerios espirituales de ganar y convertir almas, que no por eso nos habemos de olvidar de nosotros, porque no nos aprovechará nada, aunque convirtamos todo el mundo, ¿qué será de las demás ocupaciones? No es razón que el religioso ande tan absorto y embebecido en los estudios, ni que se deje llevar tanto de las ocupaciones exteriores, que se olvide de su propio aprovechamiento, de su oración, del examen de su conciencia, del ejercicio de la mortificación y penitencia, y que el postrer lugar tengan las cosas espirituales, y el peor tiempo sea para ellas, y que si algo se ha de dejar, sean ellas; porque eso sería vivir sin espíritu, y no como religioso.
Cuenta San Doroteo que había hecho enfermero a su discípulo Dositeo, y él era muy diligente en su oficio; tenía mucho cuidado de los enfermos, las camas muy bien hechas, los aposentos muy bien aderezados, todo muy limpio y aseado. Yendo a visitar San Doroteo la enfermería, díjole Dositeo: "Padre, viéneme un pensamiento de vanagloria que me dice ¡Cuán bueno lo tienes todo! ¡Cómo se contentará de ti tu superior!" Respondióle San Doroteo una cosa con la que le quitó bien la vanagloria: "Muy buen servicial has salido, Dositeo; muy buen enfermero has salido, y muy diligente; empero no has salido buen religioso".
Pues procure cada uno que no se pueda decir esto de él: Muy buen enfermero o muy buen portero habéis salido, pero no habéis salido buen religioso; muy buen estudiante o muy buen letrado o buen predicador habéis salido, pero no buen religoso: que no venimos acá a eso, sino a ser buenos religiosos. Esto es lo que habemos de estimar y procurar y tener siempre delante de los ojos, y todas las demás cosas las habemos de tomar como accesorias y como por añadidura respecto de nuestro aprovechamiento, conforme a aquellas palabras de Cristo (Mt. 6,33) : "Buscad primero el reino de Dios y su justicia, y todas las demás cosas se os darán por añadidura". |
|