DEMOS GRACIAS A DIOS POR EL CURSO CONCLUIDO

[Evangelina M. de Terrazas]

Amados hermanos y hermanas en Cristo: Paz en sus corazones!
Espero en Dios hayan pasado una hermosa Navidad, y este año, venga colmado de buenos propósitos.

Y uno de ellos para mí es, invitarlos a dar gracias a Dios por los bienes infinitos recibidos a través del curso "El adolescente y su mundo".

Catholc.net es nuestra casa, nuestro hogar, y no basta extender la mano para recibir todo bien; sino, como hijos que aman a sus padres, sería bonito agradecer por medio de una oración.

Oremos pues, que bibre nuestro corazón. Primero a nuestro Padre Bueno, a Cristo Misericordia Infinita y nuestra Madrecita María Santísima que ha estado intercediendo por todos nosotros durante el curso, y enseguida; a todos los que de alguna manera hicieron posible este curso.

Los invito, pues, a expresar, esas bellas palabras que saben nacer de su bondadoso corazón.
Ya lo he hecho y tal vez muchos de ustedes también; pero quien sepa conmover su corazón, puede hacerlo con gozo. Recibirán muchas gracias.

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Les comparto esta oración que me ha ayudado mucho rezarla ante el Santísimo, antes de ir hacia los grupos.


"PARA OBTENER LA GRACIA DE SER MISERICORDIOSO CON LOS DEMÁS"

Deseo transformarme en Tu misericordia y ser un vivo reflejo de Ti, Oh, Señor.
Que este más grande atributo de Dios, es decir, Su insondable misericordia, pase a través de mi corazón y mi alma, al prójimo.

Ayúdame, Oh, Señor, a que mis ojos sean misericordiosos, para que yo jamás recele o juzgue según las apariencias, sino que busque lo bello en el alma de mi prójimo y acuda a ayudarla.

Ayúdame, Oh, Señor, a que mis oídos sean misericordiosos para que tome en cuenta las necesidades de mi prójimo y no sea indiferente a sus penas y gemidos.

Ayúdame, Oh, Señor, a que mi lengua sea misericordiosa para que jamás hable negativamente de mis prójimos, sino que tenga una palabra de consuelo y perdon para todos.

Ayúdame, Oh, Señor, a que mis manos sean misericordiosas y llenas de buenas obras, para que sepa hacer sólo el bien a mi prójimo y cargue sobre mí, las tareas más difíciles y penosas.

Ayúdame a que mis pies sean misericordiosos para que siempre me apresure a socorrer a mi prójimo, dominando mi propia fatiga y mi cansancio. Mi reposo verdadero está en el servicio a mi prójimo.

Ayúdame, Oh, Señor, a que mi corazón sea misericordioso para que yo sienta todos los sufrimientos de mi prójimo.

A nadie le rehusaré mi corazón.
Seré sincero incluso con aquellos de los cuales sé que abusarán de mi bondad.
Yo mismo me encerraré en el Misericordiosísimo Corazón de Jesús. Soportaré mis propios sufrimientos en el silencio.

Que tu misericordia, Oh, Señor, repose dentro de mí.

Oh, Jesús mío, transfórmame en Ti, porque Tú puedes hacer todo.

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Reciban todo mi amor en Cristo y Dios los bendiga en los Corazones Misericordiosos de Jesús y María.

Evangelina
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En Jesús y María
Evangelina


"JÉZU, UFAM TOBIE"

¡Por su Dolorosa Pasión,
ten misericordia de nosotros
y del mundo entero!

[tatianatapia]

Señor, haznos instrumentos de tu paz a todos los que concluimos el curso y a los que se quedaron en el camino y a los que aunque no participaron en el foro nos han seguido en las conclusiones de cada sesión,
Donde haya odio, discordia, división, envidia, egoísmo pongamos amor,
Danos los dones de tu Santo Espíritu para humillarnos, amarnos, comprendernos, analizarnos y mejorar solo para ti.
Donde haya injuria que pongamos perdón
Donde haya desaliento, pongamos esperanza
Donde haya sombras, pongamos luz.
Oh Divino Maestro ayudanos a nunca buscar sen entendidos, sino entender
ser amados sino amar
Porque dando es como tu nos das, perdonando es como tu nos perdonas y muriendo a nuestros egoísmos no miremos nada en nuestra mente que no sea un "Jesús Confío en Ti" en todo.
Gracias porque tu Obra de Catholic. net y todos sus colaboradores son instrumentos de tu amor.
Gracias a Todos los que recibimos el llamado y abonamos la tierra donde hemos de dar frutos que Consagramos a Dios. SONIA ARELLANOS. Guanajuato, México.

[Evangelina M. de Terrazas]

[Samia Karime]

Comenzar algo siempre nos llena de emoción. Un nuevo trabajo, un nuevo proyecto, una nueva relación trae consigo esperanzas y expectativas. En realidad poner “la primera piedra” de un edificio es relativamente sencillo. Pero poner “la última piedra” no es tan fácil, es un valor que nos enseña la importancia de terminar lo que emprendemos y no dejarlo a medias. Cuando termina un año, se da un doble fenómeno: la alegría de comenzar un nuevo ciclo y la tristeza de ver que no terminamos todo lo que nos propusimos.

Es importante sentarse a meditar en qué queremos lograr y hacia donde esperamos ir. Si no tenemos la constancia y la lucha diaria de construir las cosas grandes con pequeños detalles, nos quedaremos colocando primeras piedras, pero no acabaremos nuestras obras. Necesitamos concluir, poner la última piedra para tener paz interior y una conciencia serena. Para esto, hay que conocer nuestras capacidades y nuestros defectos, pero nuestros proyectos siempre deben exigirnos un poco más de lo que podemos hacer. No olvidemos además, que Dios es el ingrediente fundamental y todo es para Su Gloria.

Conviene recordar el Episodio de las Bodas de Caná que nos narra San Juan en su Evangelio, cuando Nuestro Señor Jesucristo hizo su primer milagro: Convirtió el agua en vino, pero hay una nota muy importante que debemos resaltar: antes de convertir el agua en vino, pidió que se llenaran seis tinajas que tenían para las purificaciones de los judíos. El evangelista nos narra que “las llenaron hasta arriba”. Este pasaje debe recordarnos que el Señor podría haber creado el vino por un solo acto de Su voluntad, sin embargo quiso que los hombres llenaran las tinajas. Dios está dispuesto a ayudarnos, y hará lo que nosotros no podemos, pero cuenta con nuestro esfuerzo. Y nosotros debemos llenar las tinajas no hasta la mitad, ni a tres cuartos de su capacidad, sino “hasta los bordes”, es decir, hasta arriba.

Concluye un año y empieza otro, es el momento no solo de hacer propósitos, sino de hacer nuestro esfuerzo humano para “llenar las tinajas” de amor, entusiasmo, entrega, alegría, pero nunca olvidar que si realmente queremos poner la última piedra, debemos pedir la ayuda de Dios y El no nos la negará por su misericordia infinita.

Pidamos al Señor para que este año que está comenzando tenga muchos y muy buenos propósitos, pero que sobretodo tenga muchas “últimas piedras” y que la mejor “última piedra” sea la de vivir como buenos cristianos que amemos a Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con todas nuestras fuerzas, y que amemos al prójimo como a nosotros mismos.

Espero que tu corazón se renueve y que se llene de energía para que superes las pruebas, disfrutes los grandes triunfos que la vida te ha preparado y puedas decir con orgullo al final del año 2007: HE CUMPLIDO...

Esto es lo que yo llamo el “placer de comenzar”.

INCONTABLES BENDICIONES Y UN EXITOSO AÑO 2007
SON LOS SINCEROS DESEOS DE SU SIEMPRE SERVIDORA:
SAMIA KARIME

[Evangelina M. de Terrazas]

[ROSA LUZ]

Deseo compartir este agradecimiento a los hermanos de Catholic.net, con una oracion:

" Dios , Tu que invisiblemente lo proteges todo
pero que para la salvacion de los hombres haces visible Tu poder,
recibe Tu morada y reina en este medio,
y que todos los que aqui se reunan para orar
reciban Tu consuelo y Tu ayuda."

Lo que Dios quiera
Como Dios quiera
Cuando Dios quiera

[Mayra Novelo]

Muchas gracias a todos los que participaron en este curso, como formadores de almas tenemos que tener muy presente a nuestro gran aliado: El Espíritu Santo, que siempre nos dirá lo que debemos decir y hacer...

"Espíritu Santo, inspirame lo que debo decir, lo que debo callar, lo que debo ver y procurar para el bien de mis hermanos amén"

Mayra
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“Te amo, Dios mío, y mi único deseo es amarte hasta el último suspiro de mi vida. Te amo, Dios mío infinitamente amable, y prefiero morir amándote a vivir sin amarte. Te amo, Señor, y la única gracia que te pido es amarte eternamente... ”
(Cura de Ars)

[Evangelina M. de Terrazas]

[Evangelina M. de Terrazas]

[Evangelina M. de Terrazas]

Hola mi Señor, vengo nuevamente a darte gracias por mis compañeros y por mí, que hemos concluido y acreditado este curso de formación.

Que la Benevolencia del Buen Padre Dios, esté siempre en nuestros corazones y se haga realidad cada día en nuestras vidas.
Que podamos ser instrumentos sencillos y nobles en las manos del Buen Dios.
Que su Santo Espíritu nos disponga para vivir haciendo su Voluntad a través de nuestras palabras y obras de caridad.
Que vayamos con gozo eterno al encuentro de nuestros formandos, y llevemos como estandarte, un canto de salvación.

María, Madre de Dios y Madre nuestra: No olvides hablarle al Padre de nuestros muchachos a quienes deseamos formar. Dispón sus corazones a la apertura de la Gracia, y acompáñanos en nuestro caminar.
Te lo rogamos por Jesucristo tu Hijo y nuestro Señor. Amén.
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En Jesús y María
Evangelina


"JÉZU, UFAM TOBIE"

¡Por su Dolorosa Pasión,
ten misericordia de nosotros
y del mundo entero!