Ver tema anterior :: Ver tema siguiente |
Autor |
Mensaje |
Manuel C. Veterano
Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 1001
|
Publicado:
Mar Oct 11, 2005 9:54 pm Asunto:
Y tú..¿No eres digno de castigo?
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Digno de castigo
Por Tomás de Kempis
El Alma:
1. Señor, no soy digno de tu consolación ni de ninguna visita espiritual; y por eso justamente lo haces conmigo cuando me dejas pobre y desconsolado. Porque aunque yo pudiese derramar un mar de lágrimas, aún no merecería tu consuelo. Por eso yo soy digno de ser afligido y castigado; porque te ofendí gravemente y muchas veces, y pequé mucho, y de muchas maneras. Así que, bien mirado, no soy digno de la menor consolación. Mas Tú, Dios clemente y misericordioso, que no quieres que tus obras perezcan, para manifestar las riquezas de tu bondad en los vasos de tu misericordia aun sobre todo merecimiento, tienes por bien de consolar a tu siervo de un modo sobrenatural. Porque tus consolaciones no son ilusorias como las humanas.
2. ¿Qué he hecho, Señor, para que Tú me dieses ninguna consolación celestial? Yo no me acuerdo haber hecho ningún bien; sino que he sido siempre inclinado a vicios, y muy perezoso para enmendarme. Esto es verdad, y no puedo negarlo. Si dijese otra cosa, Tú estarías contra mí, y no habría quien me defendiese. ¿Qué he merecido por mis pecados, sino el infierno y el fuego eterno? Conozco en verdad que soy digno de todo escarnio y menosprecio; ni merezco ser contado entre tus devotos. Y aunque me incomode este lenguaje, no dejaré de acusar mis pecados contra mí, y en favor de la verdad, para que más fácilmente merezca alcanzar tu misericordia.
3. ¿Qué diré yo pecador, y lleno de toda confusión? No tengo boca para hablar sino sola esta palabra: Pequé, Señor, pequé; ten misericordia de mí; perdóname. Déjame un poco para que llore mi dolor, antes que vaya a la tierra tenebrosa y cubierta de obscuridad de muerte. ¿Qué es lo que principalmente exiges del culpable y miserable pecador, sino que se convierta y se humille por sus pecados? De la verdadera contrición y humildad de corazón nace la esperanza de ser perdonado, se reconcilia la conciencia turbada, reparase la gracia perdida, se defiende el hombre de la ira venidera, y se juntan en santa paz Dios y el alma contrita.
4. Señor, el humilde arrepentimiento de los pecados es para Ti sacrificio muy acepto, que huele más suavemente en tu presencia, que el incienso. Este es también el ungüento agradable que Tú quisiste que se derramase sobre tus sagrados pies; porque nunca desechaste el corazón contrito y humillado. Allí está el lugar del refugio para el que huye del enemigo; allí se enmienda y limpia lo que en otro lugar se erró y se manchó.
__
http://www.encuentra.com/includes/imprimelo.php?IdDoc=366&Ayuda=1 _________________ Video SantoSubito:
  |
|
Volver arriba |
|
 |
Albert + Moderador

Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 27940 Ubicación: Puerto Rico
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 12:51 am Asunto:
Me acuso.
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Hermano Manuel:
La frase principal de este escrito, y mira que he leido este libro, es esta:
Cita: | no dejaré de acusar mis pecados contra mí, y en favor de la verdad, para que más fácilmente merezca alcanzar tu misericordia |
Es mi decisión acusarme de mis pecados para alcanzar Misericordia, no es imposición de Dios. Yo me acuso, no me acusa Dios. Creo que se ilustra bastante clara mi postura aquí. Dios te bendiga. _________________

Transfíge, dulcíssime Dómine Jesu
Albert González Villanueva, OFS |
|
Volver arriba |
|
 |
Maite Noguera Asiduo
Registrado: 06 Oct 2005 Mensajes: 136 Ubicación: España
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 10:49 am Asunto:
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Gracias hermano Albert por tu aportación. Estamos necesitados de personas cómo tú que sepan transmitir el amor de Nuestro Señor. Verdaderamente eres un buen obrero de Su viña. |
|
Volver arriba |
|
 |
Manuel C. Veterano
Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 1001
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 11:02 am Asunto:
Re: Me acuso.
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Albert escribió: | Hermano Manuel:
La frase principal de este escrito, y mira que he leido este libro, es esta:
Cita: | no dejaré de acusar mis pecados contra mí, y en favor de la verdad, para que más fácilmente merezca alcanzar tu misericordia |
Es mi decisión acusarme de mis pecados para alcanzar Misericordia, no es imposición de Dios. Yo me acuso, no me acusa Dios. Creo que se ilustra bastante clara mi postura aquí. Dios te bendiga. |
Albert,
La frase "principal" de ese escrito no la decides tú, la decide el autor, y todos sabemos de su influencia en nuestra fe. Él sabe lo que dice y está muy claro todo. Ya antes quisiste corregir a Benedicto XVI en su mensaje de advertencia a Europa. Deja a los santos y a los Papas hablar por ellos mismos, que saben lo que quieren decir y no hace falta que nadie les interprete. Se les lee en actitud orante y se confía en el Espíritu y sus dones.
Bendiciones. _________________ Video SantoSubito:
  |
|
Volver arriba |
|
 |
Rosa M Ibáñez Veterano
Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 3837 Ubicación: Nueva Jersey, USA
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 12:54 pm Asunto:
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Y cual es la frase principal "segun el autor"? _________________ Rosa Eme
"Suéltame, que ha rayado el alba." Jacob respondió: "No te suelto hasta que no me hayas bendecido." ....
Jacob le preguntó: "Dime por favor tu nombre." - "¿ Para qué preguntas por mi nombre?" Y le bendijo |
|
Volver arriba |
|
 |
Manuel C. Veterano
Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 1001
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:13 pm Asunto:
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
¿Poe qué debería haber alguna?. El ha escrito lo que ha escrito y ahí lo dejó. _________________ Video SantoSubito:
  |
|
Volver arriba |
|
 |
Rosa M Ibáñez Veterano
Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 3837 Ubicación: Nueva Jersey, USA
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:24 pm Asunto:
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Te ensenharon analisis de lectura en el cole? _________________ Rosa Eme
"Suéltame, que ha rayado el alba." Jacob respondió: "No te suelto hasta que no me hayas bendecido." ....
Jacob le preguntó: "Dime por favor tu nombre." - "¿ Para qué preguntas por mi nombre?" Y le bendijo |
|
Volver arriba |
|
 |
Manuel C. Veterano
Registrado: 02 Oct 2005 Mensajes: 1001
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:31 pm Asunto:
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Rosa M Ibáñez escribió: | Te ensenharon analisis de lectura en el cole? |
Los jesuitas bastante, sí señora. Y tienen fama universal en ello. ¿A tí no te enseñaron a fijarte particularmente en los títulos que pone el autor. Pues para algo lo pone:
Digno de castigo.
¿Difícil, eh? _________________ Video SantoSubito:
  |
|
Volver arriba |
|
 |
Gabaon Constante
Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 796
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:33 pm Asunto:
La debilidad del Impío.
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Bendiciones en Cristo.
Para mí todo esto tiene solución y fin en La Cruz de Cristo, pero esa Cruz sigue siendo un misterio profundísimo e insondable; no creo que pase un día en el que no esté consciente de mi gran anhelo por adentrarme más y más en ese misterio donde la Justicia y la Paz se besan.
En el Amor de Jesús.
Gabaon. _________________ "Con toda mi alma te anhelo en la noche, y con todo mi espíritu por la mañana te busco." (Isaías 26, 9) |
|
Volver arriba |
|
 |
Rosa M Ibáñez Veterano
Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 3837 Ubicación: Nueva Jersey, USA
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:33 pm Asunto:
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Pues a mi tambien me ensenharon analisis de lectura asi que puedo sacar la idea principal y las secundarias. Y me imagino que Albert tambien. _________________ Rosa Eme
"Suéltame, que ha rayado el alba." Jacob respondió: "No te suelto hasta que no me hayas bendecido." ....
Jacob le preguntó: "Dime por favor tu nombre." - "¿ Para qué preguntas por mi nombre?" Y le bendijo |
|
Volver arriba |
|
 |
Gabaon Constante
Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 796
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:35 pm Asunto:
La debilidad del Impío.
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Con el permiso de Kempis y de Manuel pego esto aquí.
La Debilidad del Impío.
"Todos nosotros como ovejas erramos, cada uno marchó por su camino, y Yahveh descargó sobre él la culpa de todos nosotros." (Isaías 53, 6)
Dios nunca se las ha tomado a la ligera con el pecado, en toda la Revelación Dios siempre ha usado el lenguaje más descriptivo y altisonante para definir su total aborrecimiento en contra del pecado. No sé si usted nota lo dramático que hay en la promesa de Dios de que el alma que peque esa morirá (Ezequiel 18, 4), y Dios no es hombre para decir mentiras, ni hijo de hombre para volverse atrás de lo que dijo (Números 23, 1 . Deténgase un momento y trate de imaginarse lo escandaloso que es para Dios el pecado, que Él no tolera ni el más mínimo de ellos y promete pagarle con MUERTE a todo el que lo cometa... piense... medite. Cada uno de sus pecados infunde en usted un estigma que reza: "reo de muerte"... ¿reconoce usted que ha pecado? ¿sí? Pues lleva usted en su frente un rótulo gigantezco que dice: "reo de muerte"!.
Siempre nos han enseñado aquello de que Dios no aborrece al pecador, pero La Escritura atestigua que los impíos y pecadores son objeto del aborrecimiento de Dios: "y Dios igualmente aborrece al impío y su impiedad." (Sabiduría 14, 9) "Destruiré vuestros altos, abatiré vuestros altares de incienso, amontonaré vuestros cadáveres sobre los cadáveres de vuestros ídolos, y yo mismo os aborreceré." (Levítico 26, 30) Terrible esto! Pues eso, es Dios veraz y todo hombre mentiroso.
Con esto del pecado Dios nunca ha cavilado para su justo castigo, y si Dios en algún momento ha mostrado paciencia con el pecado ha sido sólo para que se amontone el número de ellos hasta desbordar toda su Ira para darle un mayor y más terrible castigo (2 Macabeos 6, 14; Sabiduría 19, 1-4) o esperando que se arrepientan; pero no es suficiente el arrepentimiento para borrar el pecado, Dios no olvida ni se hace de la vista gorda con el pecado porque uno se arrepienta, el pecado exige dos cosas: reparación o castigo. Varias veces volvió Israel arrepentido y Dios aún así terminó corrigiéndole con castigo: "pero contigo no acabaré; aunque sí te corregiré como conviene, ya que impune no te dejaré." (Jeremías 30, 11b).
Me imagino que para este entonces es muy probable que usted esté haciendo una de dos cosas: resistiéndose a la idea de que Dios pueda castigar con Ira asombrosa e inconcebible su pecado, o tratando de autojustificarse creyendo que no merece usted semejante castigo. Pues permítame decirle que La Escritura tiene para usted un título: "Hijo de La Ira de Dios" (Efesios 2, 3) Escalofriante!!!. No amigo, no hay salida para usted en la excusa de que usted peca porque ha nacido pecador, Dios no tiene la culpa de que usted esté débil por su impiedad, muy al contrario, su debilidad es también culpa suya, no se la ha puesto Dios, es su raza y ascendencia la culpable de su situación no Dios, por eso se encuentra usted encerrado y atrapado bajo el poderoso brazo de Dios que no evitará su castigo.
Ahora a lo existencial, ¿duele verdad? reconocer que usted quiere poner su vida al servicio de la piedad y la religiosidad y su cuerpo entero conspira para lo contrario. Duele ver cuántas veces, cuántos Primero de Enero y cuántos Viernes Santo ha hecho usted el propósito de enderezarse y tomar el camino de la piedad y hoy todavía se encuentra sometido, hundido y humillado en la impiedad. Medite en esa palabra: impiedad. Piedad es todo aquello que Dios quiere, valora, le honra, que Él premia y le alegra, im-piedad es obviamente todo aquello que Dios detesta y aborrece... ¿es usted agente o hacedor de im-piedad? ¿sí? pues es usted un impío... medite en eso... usted es la negación de todo aquello que Dios quiere, acepta y recibe; usted se ha reconocido receptor de toda la Ira de Dios, Ira que sobrepasa lo calamitoso, estruendoso, devorador e implacable de todas las fuerzas de la naturaleza unidas en un solo punto.
La más terrible desolación pesa sobre su alma. Su mente que alcanza a ver la luz, su mente que concibe lo que es la piedad y su cuerpo que le somete a la impiedad; no importa que usted le domine durante unas horas, unos días o semanas, su cuerpo siempre se levanta con más fuerza, reacia y arremetedora y termina venciéndole, siempre... sumergiéndole en la impiedad... vergonzosa y humillante es esta situación. Es más la fuerza de ese cuerpo que la debilidad de su decisión a dirigirse a la piedad, por eso un hombre gritó una vez con terrible realismo: "Miserable de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo que me lleva a la muerte?"... Sí! Porque a ningún otro sitio le lleva la debilidad de su ser impío sino a la MUERTE. No hay escapatoria en sus manos para usted, Dios no se hará de la vista gorda con su pecado, Dios profetizó vigorosamente que Él no justificará la débilidad del impío. (Éxodo 23, 7) _________________ "Con toda mi alma te anhelo en la noche, y con todo mi espíritu por la mañana te busco." (Isaías 26, 9) |
|
Volver arriba |
|
 |
Gabaon Constante
Registrado: 03 Oct 2005 Mensajes: 796
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 4:35 pm Asunto:
La Fuerza de Dios
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
"Todos nosotros como ovejas erramos, cada uno marchó por su camino, y Yahveh descargó sobre él la culpa de todos nosotros." (Isaías 53, 6)
Ahora vuelva y lea ese verso y fíjese cómo Dios ha planeado su salvación: descargando sobre Jesús la culpa suya, la de usted.
Es casi imposible desmontar una creencia que se ha tenido por muchos años, sobre todo cuando se ha traspasado la edad de la madurez y ya nos acosa el miedo al cambio. Pero para Dios no hay imposibles y espero que con la fuerza poderosa del Espíritu Santo, Dios haga correr como un río sobre su alma, la Paz de ver en Jesús a uno que le sustituyó a usted y recibió el castigo que le tocaba recibir a usted. Espero en el Espíritu de Dios que esta Semana Santa vea usted cómo la misericordia de Dios ha vencido en implacabilidad a su Justicia, sin prescindir de ella o eliminarla.
Todos sus pecados reclaman Castigo y/o Reparación y encontrándose usted sumido en la debilidad de su impiedad usted no puede hacer nada para reparar lo que ha roto en el orden de Dios y no puede usted recibir el castigo de Dios y quedar vivo. Este es el drama de su impiedad, y fíjese lo que Dios ha hecho:
"En efecto, cuando todavía estábamos sin fuerzas, en el tiempo señalado, Cristo murió por los impíos;" (Romanos 5, 6)
Espeluznante!!!
El fuerte Dios ha decidido ocupar su lugar para que usted venga a salvación! Jesús ha decidido tomar saliva sobre su rostro, espinas en su cabeza, clavos en sus manos, golpes sobre su cuerpo, muerte sobre su vida, y todo esto a manos de impíos, para que usted sea hecho libre, limpiado y justificado a la vista de Dios. Jesús ha decidido derramar toda su sangre y recibir perforación en su corazón para que usted no sea más un esclavo y disfrute ahora la libertad de saberse aceptado y recibido por el Dios que sostenía su brazo amenazante sobre usted. Jesús recibe perforaciones en su cuerpo hasta que la misma muerte lo rasga completo SOLA y EXCLUSIVAMENTE para que usted entre a presencia de Dios y tenga vida!!! Para que usted que era reo de muerte ahora tenga vida, y vida eterna!
Dios no está llamándole a conversión en este momento, Dios le está tocando la puerta de su corazón para que acepte lo que Jesús hizo por usted, para que usted se abandone totalmente y acepte el sacrificio de aquel que ocupó su lugar. La mano que toca su puerta es una mano que ha recibido clavos por usted, no la mano que viene con castigo y petición de reparación. La mano que te llama e invita, es la mano que ha pagado lo que tú debías. La mano que toca es la única mano que podía darle salvación.
Arrójese con vehemencia a los pies de esa Cruz y abrace y bese esos pies perforados y sangrantes y olvídese de su pecado y adore a quien ha pagado su rescate.
¿Puede ser así de sencillo? ¿Qué pasó con aquel Dios airado, ofendido, reclamante de Justicia? ¿dónde está la inexorabilidad de uno que dijo que no justificará al impío ni dejará impune al que peca?
Esto es gratis, pero no barato. Contemple a quien cuelga de ese madero y mire la abundancia de sufrimiento que ha padecido el Único inocente y verá que esto de "sencillo" no tiene nada, contemple cómo el que no conoció pecado es hecho pecado y maldición por usted, contemple y admire cuan altísimo e insustituible precio ha sido pagado en su rescate.
El Dios que reclamaba Justicia ha descargado todo el rigor que reclamaban las atrocidades que usted ha cometido sobre su Hijo. Ese Dios ha excedido su Justicia amándole a usted y ha satisfecho su Justicia haciéndose veraz y cumplidor de lo que dijo, sacando de su Hijo toda la satisfacción, reparación y castigo que reclamaba su pecado. Él ha convertido a Su Hijo en pecado y maldición (2 Corintios 5, 21; Gálatas 3, 13) para que usted sea declarado y hecho libre de lo que debía. Toda la Trinidad ha conspirado para que usted venga a liberación y no se le impute su pecado.
Me imagino que usted se mirará y verá su condición de impiedad que no ha cambiado, pues le invito a que se aferre fuerte a esa verdad que es la única tabla de salvación sobre su vida: "Cristo murió por los impíos"... beba de esa verdad, abreve su alma atormentada por el pecado de esa verdad y encontrará paz. Tenga y beba:
"en verdad, apenas habrá quien muera por un justo; por un hombre de bien tal vez se atrevería uno a morir -; mas la prueba de que Dios nos ama es que Cristo, siendo nosotros todavía pecadores, murió por nosotros. ¡Con cuánta más razón, pues, justificados ahora por su sangre, seremos por él salvos de la cólera!" (Romanos 5, 7-9)
Implore la presencia del Espíritu en este momento y dígale que le grabe con su fuego santo esa verdad en su corazón, que lo lleve al pie de la Cruz a aceptar lo que Jesús ha logrado por y para usted. No mire su impiedad, déjesela a Él, no deje que le atormente la idea de que usted no está haciendo nada ni esforzándose... Estoy seguro, tengo la plena certeza de que allí escuchará esto con incomparable dulzura para su alma:
"en cambio, al que, sin trabajar, cree en aquel que justifica al impío, su fe se le reputa como justicia." (Romanos 4, 5)
El Dios que dijo que no justificará al impío ahora, por lo que ha hecho Su Hijo por usted, le hace justo, lo convierte en Justo si usted se aferra con tesón al pie de la cruz a lo que Su Hijo hizo por usted.
Beba de esta verdad con inmensa sed y ya no tendrá más sed jamás: Pero Dios, rico en misericordia, por el grande amor con que nos amo, estando muertos a causa de nuestros delitos, nos vivificó juntamente con Cristo - por gracia habéis sido salvados (Efesios 2, 4-5)
Me imagino que le sigue preocupando qué pasará con su impiedad, ya llegará el momento de La Resurrección cuando le hablaré de la fuerza poderosa que no sólo perdona y borra el pecado, sino que le libera de su atadura y lo hace vivir en las obras del Espíritu. Pero en esta Semana Santa le invito a que se quede al pie de la cruz, buscando la paz de su alma, ahora sólo: "Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios para que, llegada la ocasión, os ensalce" (1 Pedro 5, 6) Reconozca que usted nada puede hacer y recíbalo todo de Él "pues la predicación de la cruz es una necedad para los que se pierden; mas para los que se salvan para nosotros es fuerza de Dios." (1 Corintios 1, 1 a la debilidad de su impiedad preséntele ahora la Fuerza de Dios manifestada en la Cruz de Cristo Jesús quien ha venido a salvarle, a salvarle, no a nada más, a salvarle... y cuando traspase su corazón la dulzura de esta Sustitución en la Cruz gritará junto con aquel hombre que se sentía miserable por la debilidad de su cuerpo: "¡Gracias sean dadas a Dios por Jesucristo nuestro Señor!". _________________ "Con toda mi alma te anhelo en la noche, y con todo mi espíritu por la mañana te busco." (Isaías 26, 9) |
|
Volver arriba |
|
 |
Fabrem Veterano
Registrado: 05 Oct 2005 Mensajes: 1226
|
Publicado:
Mie Oct 12, 2005 5:09 pm Asunto:
Interesante - Hay que huir de los reduccionismos
Tema: Y tú..¿No eres digno de castigo? |
|
|
Los dos textos que ha pegado Gabaón ilustran el peligro de reducir. Tan plausible y basado en la Escritura es un mensaje como el otro, por lo tanto no se debe reducir la Escritura ni sólo a uno ni sólo a otro. Tan error es fijarse sólo en el primero como fijarse sólo en el segundo. Los dos son válidos al mismo tiempo, porque los versículos de la Escritura no se excluyen según el momento y el interés del hablante, sino que se suman siempre, como dimensiones de uno y el mismo asunto.
Decir que Jesús ya sustituyó y que yo no tengo que hacer nada, sino que sólo "aceptar" esa sustitución es tan erróneo, como decir que yo tengo que pagar por la totalidad de mi culpa. Ni sólo una cosa ni sólo la otra.
Jesús nos tiene a todos en presente en el calvario, y necesita nuestra ayuda y consuelo, pero por amor.
De lo contrario no se entendería tanto sufrimiento de tanto santo, algunas veces pedido expresamente por Jesús, como se nos cuenta expresamente en sus biografías.
Santa Faustina cuenta en su diario que Jesús de repente le mandaba por tres horas exactas unos sufrimientos tan espantosos que si no moría del dolor sólo podía ser por milagro de Dios.
Y es que, sin lugar a dudas, Jesús le ha pedido a muchos otros -y lo sigue haciendo- que también "sustituyan" por otros. De esto no cabe ni la más mínima duda, si es que vamos a darle créidito a nuestros santos. ¿A quien, si no a ellos?
Esos textos sí ilustran el peligro de reducir y manipular las Escrituras para "comprobar" ciertas tesis reduccionistas del mensaje.
Interesante y útil la aportación. |
|
Volver arriba |
|
 |
|