zaqueo Esporádico
Registrado: 21 Oct 2006 Mensajes: 60
|
Publicado:
Sab Jun 23, 2007 11:56 am Asunto:
SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DE JUAN EL BAUTISTAA
Tema: SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DE JUAN EL BAUTISTAA |
|
|
SOLEMNIDAD DE LA NATIVIDAD DE SAN JUAN BAUTISTA.
DOMINGO 24 DE JUNIO DE 2007.
*PRIMERA LECTURA . ISAÍAS 49, 1-6: “Es poco que seas mi siervo y restablezcas las tribus de Jacob y conviertas a los supervivientes de Israel; te hago luz de las naci9nes, para que mi salvación alcance hasta el confín de la tierra”.
*SALMO 138: Te doy gracias, porque me has escogido portentosamente.
Señor, tú me sondeas y me conoces,
De lejos penetras mis pensamientos;
Distingues mi camino y mi descanso,
Todas mis sendas te son familiares.
*SEGUNDA LECTURA. HECHOS DE LOS APÓSTOLES 13, 22-26: Antes de que llegara Jesús, Juan predicó a todo Israel un bautismo de conversión.
*LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN LUCAS: 1, 57-66.80.
-EVANGELIO: Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y la felicitaban. A los ocho días fueron a circuncidar al niño, y lo llamaba Zacarías, como su padre. La madre intervino diciendo: “ ¡No! Se va a llamar Juan”. Le replicaron: “Ninguno de tus parientes se llama así,” Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: “Juan es su nombre”. Todos se quedaron extrañados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios.
Los vecinos quedaron sobrecogidos, y corrió la noticia por toda la montaña de Judea. Y todos los que lo oían reflexionaban diciendo: “¿Qué va a ser este niño?” Porque la mano del Señor estaba con él. El niño iba creciendo, y su carácter se afianzaba; vivió en el desierto hasta que se presentó a Israel.
*COMENTARIO: La vida de Juan Bautista está marcada toda ella por la mano de Dios. Hijo de una madre estéril, su persona será como un signo profético del amor de Dios que “hace misericordia”. Eso significa en hebreo el nombre Juan. Va a ser el último profeta, antes de la venida del Profeta definitivo, Jesús, al que deberá indicar entre los hombres. La figura de Juan fue tan colosal, que muchos lo tuvieron a él por el Mesías.
Los evangelios presentan un fuerte contraste entre la actuación de Juan y la de Jesús. La preocupación suprema de Juan es el pecado que está corrompiendo al pueblo entero. Por eso se sale de la tierra prometida y marcha al desierto para predicar de allí la conversión a Dios. Para Jesús, por el contrario, la primera preocupación es el sufrimiento de quienes son víctimas de esas injusticias y pecados; por eso deja el desierto y va visitando las aldeas de Galilea anunciando la Buena Noticia de un Dios que quiere una vida más humana.
La tarea de Juan es clara: denunciar los pecados, llamar a los pecadores a penitencia y ofrecer un bautismo de conversión y perdón. Por eso lo llaman <<Bautista>>, el bautizador. El quehacer de Jesús es diferente: cura a los enfermos, acoge a los pecadores y ofrece la salud y el perdón gratuito de Dios sin necesidad de bautizarse en el Jordán; por eso, lo llaman curador y amigo de pecadores.
El lenguaje del Bautista es duro y da miedo; habla de la <<ira>> de >Dios que llega como un leñador blandiendo su hacha para cortar de raíz los árboles estériles; el pueblo ha de vivir preparándose para la llegada del juicio inminente de este Dios. Jesús, por el contrario, narra parábolas que jamás se le hubieran ocurrido al bautista; el que llega es un Padre bueno y cercano, compasivo y perdonador. Su palabra despierta confianza y alegría. El pueblo lo ha de acoger ahora mismo creando una convivencia más justa, fraterna y compasiva.
El Bautista no hace gestos de bondad. No se compadece ante el sufrimiento: no se acerca a curar a los enfermos. No ve marginación de los más desgraciados: no toca a los leprosos ni libera a los endemoniados. No se fija en los débiles: no abraza a los niños de la calla. No come con pecadores: vive encerrado en su vida solitaria del desierto. Jesús, por el contrario, se dedica a curar, liberal del mal, acoger, bendecir, perdonar. Lo suyo es introducir en la vida salud, perdón, paz, amistad, fraternidad.
¿Nuestras vidas a quién se asemeja más a Juan, el Bautista, o a Jesús de Nazaret?. ¿Somos <<Bautistas>> o <<cristianos>>?. ¿Nos hemos quedado en el precusor o vivimos acogiendo a Jesucristo?. ¿Quién de los dos nos produce más alegría y esperanza? ¿Juan o Jesús? ¿Estamos todavía en el camino de la conversión, la penitencia y casi en obscuridad o vamos alegres y contentos hacia la Nueva Jerusalén con un corazón limpio y generoso donde caben todos los marginados y desgraciados? En definitiva ¿Has acogido a Jesús, modelando tu vida a la de él, y a su Buena Nueva para trasmitirla por el mundo entero?.
*ACCIÓN DE GRACIAS Y PETICIÓN: Oh Dios, que suscitaste a san Juan Bautista para que preparase a Cristo, el Señor, un pueblo bien dispuesto, concede a tu familia el din de la alegría espiritual y dirige la voluntad de tus hijos por el camino de la salvación y de la paz. Ojalá que cuando nos pregunten tú quién eres podamos responder como el Bautista: <<”Yo soy la voz que grita en el desierto”>> pero podamos también añadir a continuación: << Pero, por la gracia de Dios, me he convertido en la Palabra, Palabra de Cristo que es eterna e inagotable.
Gracias por conocerte y gracia por habernos enviado como precusor a Juan que nos allanó el camino para la verdadera reconciliación.
;****************************** _________________ quien jamás se desnuda por temor a la verdad, nada sabrá del amor. |
|