Mayra Novelo Moderador
  
 
  Registrado: 27 Sep 2005 Mensajes: 715 Ubicación: Genova Italia
  | 
		
			
           Publicado:
            Jue Oct 13, 2005 5:53 pm    Asunto:
            Educar 
            Tema: Educar  | 
				     | 
			 
			
				
  | 
			 
			
				Educar en el sentido etimológico del verbo, es como un sacar fuera (e-ducere) de él su verdad, la que tiene en su corazón, incluso lo que no sabe ni conoce de sí mismo: debilidades y aspiraciones, para favorecer la libertad de la respuesta vocacional...
 
http://es.catholic.net/educadorescatolicos/756/2292/articulo.php?id=20833
 
 
Jesús nuestro gran modelo de educador nos muestra como hacerlo en el pasaje de los discípulos de Emaús:
 
 
«Y les dijo: «¿Qué discursos son éstos que vais haciendo entre vosotros mientras camináis?». Ellos se detuvieron entristecidos, y tomando la palabra uno de ellos, por nombre Cleofás, le dijo: «¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no conoce los sucesos en ella ocurridos estos días?». El les dijo: «¿Cuáles?». Contestáronle: «Lo de Jesús Nazareno, varón profeta, poderoso en obras y palabras ante Dios y ante todo el pueblo...». Y El les dijo: «¡Oh hombres sin inteligencia y tardos de corazón para creer todo lo que vaticinaron los profetas! ¿No era preciso que el Mesías padeciese esto y entrase en su gloria?». Y comenzando por Moisés y por todos los profetas, les fue declarando cuanto a El se refería en todas las Escrituras. Se acercaron a la aldea adonde iban, y El fingió seguir adelante. Obligáronle diciendo: «Quédate con nosotros, porque se hace tarde y el día ya declina». Y entró para quedarse con ellos.» (Lc 24,17-29). 
 
 
Porque:
 
- educar en el conocimiento de sí mismo: «Nosotros esperábamos...»;
 
- educar en la aceptación de nuestras debilidades y temores.  Es indispensable que el joven acepte no saber, no poder conocerse hasta el fondo:" ¡Oh hombres sin inteligencia y tardos de corazón para creer todo lo que vaticinaron los profetas!"
 
- educar para leer la vida: Jesús invita a los dos de Emaús, en cierto modo a recordar  los sucesos que habían causado su tristeza, los hechos históricos de Dios con su pueblo y descubrir el lugar que les correspondía dentro de esa historia.
 
- y lo más impresionante: reconocieron a Dios en la fracción del pan. 
 
 
Este tipo de educación verdaderamente lleva a la realización y a la felicidad que tanto añoramos y que a veces olvidamos ofrecer a nuestros alumnos. _________________ “Te amo, Dios mío, y mi único deseo es amarte hasta el último suspiro de mi vida. Te amo, Dios mío infinitamente amable, y prefiero morir amándote a vivir sin amarte. Te amo, Señor, y la única gracia que te pido es amarte eternamente... ”
 
(Cura de Ars) | 
			 
		  |