Paternidad y Maternidad

[Luciana Belén]

Paternidad y maternidad son ante todo, y hasta podría decirse que son exclusivamente, un don. Duhamel lo hacía notar con una llaneza cuya resonancia es singularmente significativa: «Porque tú eres padre —ha escrito—:

No abrirás ya nunca una puerta con prisa: puede haber un hombrecillo agazapado detrás.

Medirás todos tus gestos y contendrás muchos de tus arrebatos. Menos fogosidad y más fuerza.

Verás con menos frecuencia el cielo: tendrás que mirar constantemente a tus pies para no pisar a tus hombrecillos.

No cerrarás nunca los cajones de un rodillazo: las manitas se meten por todas partes. Harás todas las cosas despacio, con todo cuidado.

No dormirás jamás a pierna suelta; te sobresaltará el menor suspiro. No podrás oír un grito sin pre-guntarte, con el corazón palpitante, si no es el grito… el grito que temerás toda tu vida.

No encenderás nunca un fuego sin pensar que el fuego quema. No colocarás tu taza al borde de la mesa. Apagarás tus colillas con especial cuidado…

No dirás ya, con la soberbia seguridad de otro tiempo: “Tal día haré tal cosa”. Prenderás unos “qui-zá” en las alas de todos tus proyectos» .



Paternidad y maternidad son, pues, una exigencia imperativa de generosidad. Ningún egoísta puede ser fiel a su vocación de padre. La llegada del primer hijo requerirá, por consiguiente, de los padres, el ar-te del don.

Extracto de Pablo Eugenio Charbonneau ..

continuará....
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"Aspira a lo celeste que siempre dura, fiel y rico en promesas Dios no se muda."

[R Real]

Hola Luciana;

agrego:

No durará limpia tu mejor ropa
No sabrás cómo va a terminar tu día
o a comenzar

No asistirás a reuniones más allá de la hora
en que tus hijos quieren irse a casa

Dejarás las reuniones de personas que no toleren a los niños

Sólo comerás menús para niños

Sólo verás programas para niños

Tendrás horarios de niño

Compartirás sus dulces y golosinas

Volverás a ir al parque a jugar................

Y dormirás cuando el último de elos cierre sus ojitos....


Lindo tema Gracias!
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¡Ven Señor Jesús!........

[David Quiroa]

[urpi_mariposa]

[R Real]

[R Real]

[Mar Simón]

A parte de todos los momentos bonitos que se pueden vivir con un niño, de lo que me he dado cuenta
es de que sólo ellos tienen respuestas para el dolor, la muerte, las desgracias de la vida.

Su alegría sincera, su plena confianza, su entrega total, su disposición siempre a compartir...

Creo también, para futuros padres, que es necesario hablar sobre el cambio de vida que supone tener hijos,
la responsabilidad que contraes para toda la vida,
hoy que todas las decisiones se toman a corto plazo.

Por otra parte, también hay que tener presente problemas menores
pero que mal tratados pueden suponer gran estrés:
posiblemente, al tener un bebé, en los próximos meses-años no se pueda dormir 6 ó 7 horas seguidas,
las salidas con tu marido/mujer a veces desaparecen....,
cualquier movimiento fuera de casa es poner en funcionamiento un enorme mecanismo...
se acumula el trabajo,
puede haber desencuentros en el matrimonio,
tener a alguien que te eche una mano, aunque sea sólo de vez en cuando, alivia y ayuda a superar estos momentos.

Eso también hay que decirlo, para que cuando los dos padres primerizos lleguen contentos a casa no esperen sólo jajá jijí
y no sepan qué pasa cuando no puedan dormir, esté toda la casa hecha un asco, sólo se oigan lloros...

[Luciana Belén]

Hola a todos!

Por eso mismo, como dice Mar Simón, continuamos con el tema



Al hablar del amor, se podía ya afirmar sin el menor titubeo que el amor vale tanto como la voluntad de sacrificio que lo anima. En esta también, hay que recordar que paternidad y maternidad deben unir a los jóvenes esposos en un profundo olvido de sí mismos. Cuando los hijos aparezcan en el hogar, desaparecerá la facilidad al mismo tiempo. Para una pareja sola, la vida, aunque roída a menudo por un irremediable hastío, es siempre fácil. Se dispone plenamente de su tiempo y se obra por lo general a su capricho, según las inclinaciones del momento. Para unos padres, por el contrario, el hijo fija un ritmo de vida que no depende ni de la fantasía, ni del capricho, sino de las solas necesidades de su ser frágil.

Cultivar, desde el período del noviazgo, el espíritu de renuncia, y aprender a salir de sí mismo para pensar en los otros, éste será el primer medio de prepararse a ser padre y madre. Sobre todo, en los primeros meses de matrimonio no ceder a la tentación de abatimiento. Sucede con frecuencia, en efecto, que esos primeros tiempos de vida común se presentan como el momento por excelencia para «gozar de la vida». Se disfruta de todas las libertades, es uno dueño de sí mismo, no está obligado a rendir cuentas a nadie; y eso se aprovecha para organizarse una «buena vida» y para divertirse de un modo desenfrenado. Pues bien, hay que gritar en seguida: ¡cuidado! Tanta más cuanto que se lleva a menudo el afán de independencia hasta retrasar, sin otro motivo que el egoísmo, el eventual nacimiento del primer hijo. No puede haber una actitud más triste, ni más peligrosa para el amor. Ciertamente, puede ocurrir, por excepción, que unas condiciones especiales vengan a legitimar una sana regulación de los nacimientos, desde esa época. Pero esto, repitámoslo, será excepcional, y se puede decir que, de una manera general, no habrá nunca tiempo más propicio para la llegada del hijo que ése. Hay jóvenes esposos que, impulsados por el solo afán de gozar egoístamente de esos primeros meses de libertad, rechazan el hijo, falseando así, desde el comienzo, toda la orientación de su amor y de su matrimonio. Sin contar con que, bajo el influjo de una crisis pasional más violenta, rara vez consiguen controlar los impulsos de su juvenil sexualidad y, por consiguiente, se hunden en la inmoralidad. Este es ya un malísimo punto de partida.
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"Aspira a lo celeste que siempre dura, fiel y rico en promesas Dios no se muda."

[Luciana Belén]

Luego, tarde o temprano, aparece el hijo. No ya un pequeño ser deseado, anhelado con ardor como la encarnación del «sí» intercambiado la mañana de la boda, sino un desagradable aguafiestas que surge de manera imprevista para impedir el placer que se cultivaba con tanto cuidado. Y se llora, se protesta y se trina contra el… azar que ha querido que pese a todas las precauciones mezquinas y a despecho de todas las prudencias condenables con que se rodeaban, el amor haya sido fecundo.
Ante semejante estado de cosas nacido del egoísmo, ¿quién no ve que el hijo apenas concebido, está ya al borde de una triste vida? Y la pareja… a la puerta de la desgracia. Porque cuando una pareja deja que triunfe en ella el egoísmo, cualquiera que sea su forma, debe esperar a que éste se vuelva contra el amor y provoque el fracaso conyugal.
Por eso importa que unos novios que van a contraer matrimonio, entren en él bajo el signo de la generosidad más total, y que en prenda de ésta, acojan al hijo como la prueba misma de la autenticidad de su amor. Al recibirle con alegría y amor, se despojan del egoísmo, para hacerse dignos de su maternidad y de su paternidad.
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"Aspira a lo celeste que siempre dura, fiel y rico en promesas Dios no se muda."

[Ceci*]

Luciana!
en realidad si dos personas se unen en matrimonio y no quieren concebir hijos, para que se unen?
Acaso uno de los fines del matrimonio no son los hijos?

Concuerdo que es en el noviazgo donde uno pone las bases necesarias para que todo camine mejor en el matrimonio

Aquellos que aspiramos formar familia debemos casarnos abiertos a la vida! Dios bendice a los matrimonios con los hijos, por que entonces rechazar esa bendicion, la bendición de la fecundidad?

Buen tema Lu!
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"El Amor es lo único que se multiplica cuando se reparte"

[Mª Paqui]

Además, de los hijos, hemos de ser Padres, Madres, no colegas, ni amigos, porque de estos, tendrán muchos a lo largo de su vida, pero uno o una que ejerza de padre, de madre... esto ya es otro cantar.
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Un abrazo en el Señor

[Luciana Belén]

[Luciana Belén]

[monika]

Yo pienso que un hijo se debe pensar. Aunque Dios los manda en el matrimonio. Pero considero que se debe tener un hijo cuando se puede atender y se tengan los recursos. Es un ser humano y necesita atención. Esto se debe discutir en el noviazgo. Para hablar y conocerse es el noviazgo.
Se que un hijo cambia radicalmente la vida de un matrimonio. Este se debe concebir dentro del matrimonio. Y debe nacer del amor.

[monika]