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Beatriz Veterano
Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 6434
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Publicado:
Mie Abr 23, 2008 3:52 pm Asunto:
La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada?
Tema: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada? |
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Abro este tema por un comentario interesante que leí en el foro:
Un amigo dijo en ese momento una frase que debemos siempre recordar: "Hay cosas que no son de inspiración, sino de voluntad". Sabemos que Dios nos infunde su espíritu siempre que lo invocamos, y nos da sabiduría y todos sus dones, pero hay momentos en que tienen qué entrar en juego las virtudes humanas, las que debemos educar con esfuerzo: prudencia, justicia, templanza y fortaleza.
La Virtud es innata? ¿adquirida? ¿cultivada?
Bendiciones _________________ "Quien no ama, no conoce"
San Agustín |
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venezuela Nuevo
Registrado: 17 Abr 2008 Mensajes: 6 Ubicación: venezuela
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Publicado:
Mie Abr 23, 2008 4:31 pm Asunto:
Re: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada?
Tema: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada? |
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¿Qué es la virtud?
La virtud es un hábito bueno que hace al hombre capaz de cumplir el bien de un modo fácil y gratificante.
¿Cómo se dividen las virtudes?
La distinción fundamental es entre virtudes adquiridas, es decir, que se adquieren con nuestro esfuerzo a través de la repetición de acciones buenas, y virtudes infusas, es decir, recibidas como don de Dios junto con la gracia santificante.
¿Cuáles son las principales virtudes adquiridas?
Las virtudes adquiridas, llamadas también virtudes morales, se reagrupan en torno a cuatro virtudes fundamentales, llamadas cardinales, y que son la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza.
¿Qué es la prudencia?
La prudencia es la virtud que nos dispone para comprender en toda circunstancias lo que hay que hacer.
¿Qué es la justicia?
La justicia es el firma propósito de dar a cada uno lo que le es debido.
¿Qué es la fortaleza?
La fortaleza es la constancia para alcanzar el bien y la capacidad de superar los obstáculos que a ello se oponen.
¿Qué es la templanza?
La templanza es el pleno dominio de sí mismo que nos pone en condición de no dejarnos vencer por los placeres de los sentidos.
¿Cuál es la utilidad de estas virtudes?
Las virtudes cardinales, y en general todas las otras virtudes morales ligadas a ellas, nos permiten cumplir el bien prontamente, con naturalidad y con alegría.
¿Es posible hacer el bien sin las virtudes?
Sin las virtudes el hombre puede hacer alguna acción buena, si quiere, pero la mayoría de las veces puede hacerlo sólo con fatiga y con esfuerzos, por lo cual no puede ser constante en el bien.
¿Cuáles son las principales virtudes infusas?
Las principales virtudes infusas son la fe, la esperanza y la caridad, que toman el nombre de virtudes teologales porque se refieren directamente a Dios.
Esta iinformacion la encontre en aciprensa.com y al igual que tu lo acabo de aprender cuando, dicen que la falta de voluntad ha causado mas fracasos que la falta de inteligencia o habilidad. _________________ ¨¿No es verdad que el corazón nos ardía en el pecho cuando nos venia hablando por el camino y nos explicaba las Escrituras? Lc 24:32 |
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R Real Fan de Jesucristo
Registrado: 27 Mar 2007 Mensajes: 3917 Ubicación: Tierra Azteca
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Publicado:
Mie Abr 23, 2008 10:37 pm Asunto:
Tema: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada? |
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Hola Beatriz;
después del aporte de venezuela y de Miles;
muy buenos;
Pienso que un poco de las tres cosas,
innata, adquirida y cultivada.
Innata si como hijos de Dios, nacemos a su imagen y semejanza.
Pero si no las cultivamos ,se pueden convertir sólo en hablidades "sociales"
Cultivada porque hemos de esforzarnos para mantenerlas en crecimiento,
o corremos el riesgo de estancarnos.
Y ser humildes para no adjudicarnos éstos dones.
saludos! _________________
¡Ven Señor Jesús!........ |
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sr_de_la_torre Veterano
Registrado: 23 Nov 2005 Mensajes: 1100
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Publicado:
Jue Abr 24, 2008 6:28 pm Asunto:
Tema: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada? |
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La palabra “virtud” viene originariamente de “vir” o sea, varón, fortaleza.
Me parece que la virtud para el común de la gente (ambos géneros, hombre, mujer) es eso, fortaleza: fortaleza para permanecer en la templanza, en la justicia, en el amor, en el perdón.
La virtud cuesta trabajo practicarla; pero cuando se convierte en hábito esa práctica, las cosas contrarias a ella son más fáciles de vencer. |
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Beatriz Veterano
Registrado: 01 Oct 2005 Mensajes: 6434
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Publicado:
Jue Abr 24, 2008 8:10 pm Asunto:
Tema: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada? |
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Gracias a todos por sus respuestas.
Hice la pregunta porque encontré en el catecismo que las virtudes humanas o morales se adquieren mediante las fuerzas humanas, o sea, son adquiridas.
Mi pregunta es: ¿cuáles son esas virtudes humanas o morales que se adquieren con las fuerzas humanas?
Ya sabemos que las virtudes teologales son: fe, esperanza y caridad, y no me refiero a estas virtudes.
Saludos
Cita: | TERCERA PARTE
LA VIDA EN CRISTO
PRIMERA SECCIÓN
LA VOCACIÓN DEL HOMBRE:
LA VIDA EN EL ESPÍRITU
CAPÍTULO PRIMERO
LA DIGNIDAD DE LA PERSONA HUMANA
ARTÍCULO 7
LAS VIRTUDES
1803 “Todo cuanto hay de verdadero, de noble, de justo, de puro, de amable, de honorable, todo cuanto sea virtud y cosa digna de elogio, todo eso tenedlo en cuenta” (Flp 4, .
La virtud es una disposición habitual y firme a hacer el bien. Permite a la persona no sólo realizar actos buenos, sino dar lo mejor de sí misma. Con todas sus fuerzas sensibles y espirituales, la persona virtuosa tiende hacia el bien, lo busca y lo elige a través de acciones concretas.
El objetivo de una vida virtuosa consiste en llegar a ser semejante a Dios. (S. Gregorio de Nisa, beat. 1).
I Las virtudes humanas
1804 Las virtudes humanas son actitudes firmes, disposiciones estables, perfecciones habituales del entendimiento y de la voluntad que regulan nuestros actos, ordenan nuestras pasiones y guían nuestra conducta según la razón y la fe. Proporcionan facilidad, dominio y gozo para llevar una vida moralmente buena. El hombre virtuoso es el que practica libremente el bien.
Las virtudes morales se adquieren mediante las fuerzas humanas. Son los frutos y los gérmenes de los actos moralmente buenos. Disponen todas las potencias del ser humano para armonizarse con el amor divino.
Distinción de las virtudes cardinales
1805 Cuatro virtudes desempeñan un papel fundamental. Por eso se las llama ‘cardinales’; todas las demás se agrupan en torno a ellas. Estas son la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza. ‘¿Amas la justicia? Las virtudes son el fruto de sus esfuerzos, pues ella enseña la templanza y la prudencia, la justicia y la fortaleza’ (Sb 8, 7). Bajo otros nombres, estas virtudes son alabadas en numerosos pasajes de la Escritura.
1806 La prudencia es la virtud que dispone la razón práctica a discernir en toda circunstancia nuestro verdadero bien y a elegir los medios rectos para realizarlo. ‘El hombre cauto medita sus pasos’ (Pr 14, 15). ‘Sed sensatos y sobrios para daros a la oración’ (1 Pe 4, 7). La prudencia es la ‘regla recta de la acción’, escribe santo Tomás (s. th. 2-2, 47, 2), siguiendo a Aristóteles. No se confunde ni con la timidez o el temor, ni con la doblez o la disimulación. Es llamada ‘auriga virtutum’: conduce las otras virtudes indicándoles regla y medida. Es la prudencia quien guía directamente el juicio de conciencia. El hombre prudente decide y ordena su conducta según este juicio. Gracias a esta virtud aplicamos sin error los principios morales a los casos particulares y superamos las dudas sobre el bien que debemos hacer y el mal que debemos evitar.
1807 La justicia es la virtud moral que consiste en la constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo que les es debido. La justicia para con Dios es llamada ‘la virtud de la religión’. Para con los hombres, la justicia dispone a respetar los derechos de cada uno y a establecer en las relaciones humanas la armonía que promueve la equidad respecto a las personas y al bien común. El hombre justo, evocado con frecuencia en las Sagradas Escrituras, se distingue por la rectitud habitual de sus pensamientos y de su conducta con el prójimo. ‘Siendo juez no hagas injusticia, ni por favor del pobre, ni por respeto al grande: con justicia juzgarás a tu prójimo’ (Lv 19, 15). ‘Amos, dad a vuestros esclavos lo que es justo y equitativo, teniendo presente que también vosotros tenéis un Amo en el cielo’ (Col 4, 1).
1808 La fortaleza es la virtud moral que asegura en las dificultades la firmeza y la constancia en la búsqueda del bien. Reafirma la resolución de resistir a las tentaciones y de superar los obstáculos en la vida moral. La virtud de la fortaleza hace capaz de vencer el temor, incluso a la muerte, y de hacer frente a las pruebas y a las persecuciones. Capacita para ir hasta la renuncia y el sacrificio de la propia vida por defender una causa justa. ‘Mi fuerza y mi cántico es el Señor’ (Sal 118, 14). ‘En el mundo tendréis tribulación. Pero ¡ánimo!: Yo he vencido al mundo’ (Jn 16, 33).
1809 La templanza es la virtud moral que modera la atracción de los placeres y procura el equilibrio en el uso de los bienes creados. Asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos y mantiene los deseos en los límites de la honestidad. La persona moderada orienta hacia el bien sus apetitos sensibles, guarda una sana discreción y no se deja arrastrar ‘para seguir la pasión de su corazón’ (Si 5,2; cf 37, 27-31). La templanza es a menudo alabada en el Antiguo Testamento: ‘No vayas detrás de tus pasiones, tus deseos refrena’ (Si 18, 30). En el Nuevo Testamento es llamada ‘moderación’ o ‘sobriedad’. Debemos ‘vivir con moderación, justicia y piedad en el siglo presente’ (Tt 2, 12).
Vivir bien no es otra cosa que amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma y con todo el obrar. Quien no obedece más que a El (lo cual pertenece a la justicia), quien vela para discernir todas las cosas por miedo a dejarse sorprender por la astucia y la mentira (lo cual pertenece a la prudencia), le entrega un amor entero (por la templanza), que ninguna desgracia puede derribar (lo cual pertenece a la fortaleza). (S. Agustín, mor. eccl. 1, 25, 46).
Las virtudes y la gracia
1810 Las virtudes humanas adquiridas mediante la educación, mediante actos deliberados, y una perseverancia, mantenida siempre en el esfuerzo, son purificadas y elevadas por la gracia divina. Con la ayuda de Dios forjan el carácter y dan soltura en la práctica del bien. El hombre virtuoso es feliz al practicarlas.
1811 Para el hombre herido por el pecado no es fácil guardar el equilibrio moral. El don de la salvación por Cristo nos otorga la gracia necesaria para perseverar en la búsqueda de las virtudes. Cada cual debe pedir siempre esta gracia de luz y de fortaleza, recurrir a los sacramentos, cooperar con el Espíritu Santo, seguir sus invitaciones a amar el bien y guardarse del mal.
II Las virtudes teologales
1812 Las virtudes humanas se arraigan en las virtudes teologales que adaptan las facultades del hombre a la participación de la naturaleza divina (cf 2 P 1, 4). Las virtudes teologales se refieren directamente a Dios. Disponen a los cristianos a vivir en relación con la Santísima Trinidad. Tienen como origen, motivo y objeto a Dios Uno y Trino.
1813 Las virtudes teologales fundan, animan y caracterizan el obrar moral del cristiano. Informan y vivifican todas las virtudes morales. Son infundidas por Dios en el alma de los fieles para hacerlos capaces de obrar como hijos suyos y merecer la vida eterna. Son la garantía de la presencia y la acción del Espíritu Santo en las facultades del ser humano. Tres son las virtudes teologales: la fe, la esperanza y la caridad (cf 1 Co 13, 13). |
_________________ "Quien no ama, no conoce"
San Agustín |
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Josè Luis Jimènez Moreno Veterano
Registrado: 22 Feb 2007 Mensajes: 1048
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Publicado:
Vie Abr 25, 2008 7:18 am Asunto:
Tema: La Virtud ¿innata? ¿adquirida? ¿cultivada? |
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Pienso que nacemos con ciertas cualidades y carencias y que con la voluntad debemos descubrir estas cualidades y transformarlas en virtudes |
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