Jesús en la Eucaristía

[Jaimevelbon]

Hola a todos.

Creo firmemente que la Eucaristía es el cuerpo de Dios Vivo, pero esta fe no he podido explicarla a mi hija. Ella ve solo al pan y me ha preguntado si en verdad es la cuerpo de Cristo o solo un símbolo.

Me apena decir que no he podido explicárselo de manera que me entienda y me crea. Incluso sé que ha dado el milagro de que la Eucaristía ha sangrado.

Pido su ayuda a usar las palabras correctas para que mi hija crea con firmeza. Gracias
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MCC 517
Catequista.....yo?????

[María Esther]

Apreciado en Cristo, Jaime:

Explicarle con insistencia y amor es tu deber de padre. Y rezar por que el Señor le muestre, en el silencio del Tabernáculo, la extraordinaria Realidad de la Transubstanciación invisible a nuestros ojos, es lo que debe acompañar toda instrucción.

Dios siempre nos muestra su pPresencia Eucarística aunque no podamos percibirla de manera sensible: nos da el don inmenso de la Fe.

Por otro lado podías apoyarte en los Milagros Eucarísticos, especialmente el Milagro de Lanciano. No hay cómo refutar la evidencia de la Presencia Real de Cristo en Su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad.

[Jaimevelbon]

[María Esther]

Apreciado en Cristo, Jaime:
Tengo dos niñas de seis y medio y cuatro años.

Mi hija María Antonia, la mayorcita, reconoce la Presencia de Cristo en la Eucaristía desde antes de los cuatro años, y Victoria , la menor, también.

Con mi hija mayor mellevé una gran sorpresa: un día una vecina me estaba hablando de apariciones estravagantes (lamentablemente muy de moda por estos tiempos). Mi chiquita (tenía cuatro añitos) jugaba aparentemente ausente de la conversación cuando, de pronto, se paró frente a nosotras y dijo: "¿Sabes? Yo veo a Jesús cada vez que voy a MIsa". La señora, muy interesada, le pidió que le explicara lo que acababa de afirmar. Entonces la niña continuó: "Pues miro muy quietita las manos del sacerdote cuando eleva a Jesús en la HOstia. Éñl está ahí, disfrazado de Pan. Pero Él me ve y yo también lo veo".

Cuando murió s.s. Juan Pablo II, tan pronto escuchamos la noticia, nos acercamos a una Iglesia que estaba abierta. El Párroco caminaba lentamente, vestido con el Alba y llevando a Jesús Eycaristía en una pequeña Custodia. Mis hijas, sin que nadie se los indicara, caminaron en silencio detrás del sacerdote y, cuando éste dejó la Custodia en el altar, las dos niñas apoyaron sus dos rodillas en el piso antes de acomodarse en una banca.

Permanecieron en adoración durante una hora y media!

Créeme, Jaime: los niños comprenden mucho mejor que nosotros los Misterios de la Fe. Ellos son inocentes y están abiertos, sin mayores prevencines, a las manifestaciones de Dios.

Actualmente María Antonia está en Catequesis de Primera Comunión: a pesar de no haber cumplido los siete años su madurez espiritual y su profunda fe le permitieron ser admitida por el Sacerdote quien le practicó un examen verdaderamente profundo. Y ya se ha confesado unas diez veces!!!

[Beatriz]

Te copio un articulo que te puede ayudar a explicarle a tu hija. En www.corazones.org encontrarás "Los milagros eucarísticos" más importantes que te pueden ayudar también.


Jesús se nos entrega:
Transubstansación

Por: Padre Ray Ryland

Traducido por: Rosa Ibáñez

Cortesía de www.chnetwork.org




Una de las oraciones para después de la comunión durante la Liturgia de la Eucaristía hace esta petición: “Señor, al participar del misterio Eucarístico, permite que tu Amor Salvador crezca dentro de nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor”. Pedimos y decimos cosas así tan a menudo en nuestra liturgia que tendemos a no apreciarlas como deberíamos. Veamos desde cerca otra vez lo que hace Jesucristo en este gran misterio de la Eucaristía.

Comencemos por la Encarnación
Reflexiona sobre estas increíbles palabras del prólogo al Cuarto Evangelio: “Al principio existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios…Y la Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros, lleno de gracia y de verdad…” (Juan 1:1, 14a) Las Sagradas Escrituras nos están diciendo que Dios Todopoderoso se ha hecho parte del mundo material. Y todo con el propósito de trabajar por nuestra salvación a través de la naturaleza humana (tanto cuerpo como alma) de su divino Hijo.
Ahora que Cristo resucitó en gloria, a través de su naturaleza humana transfigurada Dios consigue para nosotros la salvación que Cristo ganó para nosotros. Dios actúa en nosotros de una manera íntima, de persona a persona. Nuestro contacto con Dios es una realidad espiritual que se hace posible por medio de la gracia de Dios y por medio de nuestra respuesta a sea gracia en la fe. Por tanto, para toda persona que tiene fe en Cristo, él se hace espiritualmente asequible a ella.
Pero en su amor infinito por nosotros, Jesucristo ha elegido hacer mucho más que ser espiritualmente asequible.
En la Eucaristía, Jesucristo nos otorga un contacto directo con…

Su Naturaleza Humana
Piensa en tus cinco sentidos: auditivo, visual, olfativo, táctil y gustativo. Puedes oír o ver u oler algo, pero nuestro sentido auditivo o visual u olfativo está separado del objeto. No estás en contacto físico directo con lo que oyes o ves o hueles.
El tacto es distinto. Entramos en contacto directo con algo cuando ponemos nuestros dedos o nuestra mano en ese objeto. El gusto en una manera de tocar, pero con una gran diferencia. El gusto - comer - realmente produce una unión entre nosotros y el objeto de nuestro gusto (comer). Lo que comemos literalmente se transforma en nosotros.
Esto tiene un significado muy profundo: el acto central de la religión Católica es un acto de alimentarse de un alimento muy particular. Jesús quiere que estemos unidos a él por medio de la fe, por supuesto. Pero a través de su Iglesia él nos provee de un contacto mucho más intimo consigo mismo. El nos ha dado alimento - la Eucaristía - a través de la cual él nos da su propio ser. En la Última Cena él dijo de los elementos, “esto es mi cuerpo”, “esta es mi sangre”. (Mateo 26:26-2
Jesucristo se nos da a si mismo bajo la forma de pan y vino. En todos los demás sacramentos, Jesús utiliza medios físicos a través de los que nos da su gracia: el agua en el bautismo, el aceite de la unción y así con todos los sacramentos. Pero en la Eucaristía, los medios físicos que Jesús usa se transforman en el mismo Jesucristo.
Solamente Dios mismo podría explicar el milagro de la Eucaristía, pero el Espíritu Santo habilita a su Iglesia para describir el milagro, en su doctrina de la transubstanciación.

Transubstanciación
Para describir lo que sucede en la acción Eucarística, la Iglesia utiliza dos conceptos básicos. El primero es "substancia": la esencia intrínseca de algo: lo que verdaderamente está en su centro, en el corazón de su ser. El segundo es "accidentes" (o podríamos utilizar otra palabra, "apariencias"): las cualidades de una cosa que podemos experimentar por uno o más de nuestros sentidos.
Pongamos un libro como un ejemplo de "accidente". Puedes ver su forma, su peso, su color. Hasta podrías imitar a un niño pequeño y arrancar una página y masticarla para probar su sabor. Lo que puedes sentir o gustar son los "accidentes", las "apariencias" del libro. Pero la esencia de este objeto es el libro mismo.
En la Eucaristía, las apariencias del pan y el vino permanecen sin cambiar. La esencia del pan y del vino cambia totalmente. Su esencia cambia para volverse el verdadero Cuerpo y Sangre, Alma y Divinidad, del Señor Jesucristo. La Iglesia llama este cambio "transubstanciación". El cambio es milagroso y único.
Nosotros los seres humanos podemos cambiar ambas cosas, la esencia intrínseca ("la substancia") de algo y sus apariencias ("los accidentes"). Cuando cocinamos, podemos cambiar el trigo en pan. En su esencia ya no es lo que era; es pan. Tampoco se ve como era: las apariencias ("los accidentes") también cambian.
Nosotros los seres humanos podemos cambiar las apariencias de algo sin cambiar la substancia. Podemos congelar agua de manera que ya no se ve como agua, pero todavía es agua. Podemos convertir agua en vapor de manera que ya no s vea como agua, pero todavía sea agua.
Pero hay algo imposible para nosotros: no podemos cambiar la esencia intrínseca ("la substancia") de algo sin cambiar también sus apariencias ("los accidentes"). Solo Dios puede hacer eso. Eso es exactamente lo que él hace en la consagración de la Eucaristía. Dios cambia la substancia del pan y el vino en el Cuerpo y Sangre, Alma y Divinidad, de Jesucristo. Pero los accidentes, las apariencias de pan y vino permanecen sin cambiar.
Aquí está el milagro, llevado a cabo por Dios en cada altar Católico. El Santísimo Sacramento no nos da una simple presencia espiritual de Nuestro Señor. Este sacramento nos da la carne y sangre reales de Cristo resucitado para ser nuestro alimento, y volverse literalmente parte de nosotros.

Dos Artículos de Fe Relativos a la Presencia de Nuestro Señor en la Eucaristía
Primeramente, la Iglesia enseña que la presencia corporal de Cristo resucitado y ascendido está en los cielos, donde "él está sentado a la derecha del Padre". Hace más de 1500 años, el Papa León el Grande proclamó, "el Hijo de Dios entro en la humildad de este mundo, descendiendo de su trono celestial pero sin dejar la gloria del Padre". Mientras la Palabra Eterna estuvo en la Tierra en su humanidad - nació de una virgen, enseñando, predicando, sanando, sufriendo y muriendo en la Cruz - la Palabra Eterna en su divinidad estaba al mismo tiempo gobernando el universo con las otras Personas de la Santísima Trinidad.
La Iglesia también enseña que Jesucristo - Cuerpo y Sangre, Alma y Divinidad - está realmente presente en la Eucaristía. Jesucristo está presente en cada una de las muchas hostias en un solo tabernáculo. Un solo tabernáculo puede contener muchas hostias, pero ese tabernáculo contendrá una sola presencia corporal de Cristo. Jesucristo está presente en todos los tabernáculos en todas las iglesias Católicas y Ortodoxas Orientales de todo el mundo. Jesucristo está completamente corporalmente presente en cada parte de cada hostia, en cada partícula visible. No importan cuantas hostias haya, enteras o partidas, en todos ellos, solo hay un único cuerpo del Señor presente.

¿Cómo Podemos Reconciliar estas Dos Verdades?
La Iglesia enseña que Jesucristo está ahora "sentado a la derecha del Padre" en los cielos. La Iglesia enseña que Jesucristo está ahora presente en la Eucaristía, Cuerpo y Sangre, Alma y Divinidad. ¿Cómo puede ser esto?
Comencemos con el hecho de que todas las cosas están sometidas a Cristo en este momento y hasta el fin de los tiempos. "Acercándose, Jesús les dijo: "Yo he recibido todo poder en el cielo y en la tierra" (Mateo 28:1
"Porque debe él reinar hasta que ponga a todos sus enemigos bajo sus pies. El último enemigo en ser destruido será la Muerte. Porque ha sometido todas las cosas bajo sus pies. Mas cuando diga que "todo está sometido", es evidente que se excluye a Aquel que ha sometido a él todas las cosas." (1 Cor. 15:25, 27) "... en él fueron creadas todas las cosas, en los cielos y en la tierra, las visibles y las invisibles, los Tronos, las Dominaciones, los Principados, las Potestades: todo fue creado por él y para él. Él existe con anterioridad a todo, y todo tiene en él su consistencia." (Col. 1:16-17)
Jesucristo dirige a todas las cosas, a todas las personas, sin limitar su libre albedrío, dando forma al futuro Reino de Dios. La manera en la que él ejerce su dominio varia de acuerdo a la naturaleza de sus criaturas, humanas, animales o inanimadas.
En el momento de la consagración en la liturgia, por medio del poder del Espíritu, Cristo el Rey toca directamente la substancia (la esencia intrínseca) de los elementos del pan y del vino. Él toca la substancia de estos elementos de tal manera que él la atrae hacia si.
Un cambio milagroso ocurre al cual llamamos "transubstansación". Pero hay que notar: el Rey de la Gloria no desciende para "entrar" en el pan y vino. No, en cambio de descender, el arrastra la esencia de los elementos hacia si, a la derecha de Padre. El Señor resucitado arrebata la realidad intrínseca del pan y vino en todas las celebraciones de la Misa hacia si y también dentro de si. De esta manera él mantiene la unidad de su cuerpo.
En otras palabras, Jesucristo mismo no cambia en la esencia de los elementos de pan y vino. Más bien, la esencia de esos elementos es cambiada en él.
Considera la Sagrada Hostia y la Preciosa Sangre en un altar Católico. Podemos ver que las Hostias son distribuidas y que la Preciosa Sangre es consumida. Lo que vemos que le pasa a las Hostias y a la Preciosa Sangre le ocurre no a la substancia de esos elementos, pero a los accidentes, las apariencias. Son los accidentes los que vemos consagrados, manipulados, partidos, multiplicados en muchos tabernáculos en muchos altares en iglesias alrededor del mundo. La substancia de todas las Hostias, toda la Preciosa Sangre, en todo el mundo es el único Cuerpo y Sangre, Alma y Divinidad, del único y resucitado Señor Jesucristo.
Recuerda siempre: Jesucristo no desciende del cielo para penetrar la substancia de estos elementos, Jesucristo en el cielo cambia la substancia de estos elementos en si mismo, mientras deja las apariencias igual. Ese es el milagro de la transubstansación.

Conclusión
En cualquier iglesia no-Católica, puedes oír a Jesucristo proclamado, a menudo de manera poderosa. En cualquier iglesia no-Católica, puedes ser invitado a entregar tu vida a Jesucristo. En casi cualquier iglesia no-Católica encontraras cálida camaradería. Por supuesto que también deberías conseguir todas estas cosas en cualquier iglesia Católica.
Pero en ninguna iglesia no-Católica (exceptuando las iglesias Orientales Ortodoxas) podrás recibir a Jesucristo mismo, Cuerpo y Sangre, Alma y Divinidad. Debido a la falta de órdenes apostólicas para sus ministros, ninguna de los servicios de comunión no-Católicos es la Eucaristía. Por lo tanto, en ninguna iglesia no-Católica podrás estar literalmente unido con Jesucristo.
Nunca olvidaré la exclamación de un teólogo converso mientras pensaba sobre la Eucaristía y el sacerdocio: "ese hombre", dijo murmurando al referirse a un sacerdote, "¡puede poner a Dios en mi boca!"
Este precioso privilegio, esta intimísima unión de persona-a-Persona, está disponible para ti en la única verdadera Iglesia de Cristo. ¡Regocíjate! Y haz algo más. Ve por la vida, llevando tu apostolado individual, con las palabras de Jesús murmurándote en tus oídos: "De aquel que se le ha dado mucho se esperará mucho"
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"Quien no ama, no conoce"
San Agustín

[Jaimevelbon]

María Esther:

Te digo algo, la próxima vez que tenga dudas de este tipo, te pediré que pongas a tu hija en el teclado, ella ha dicho las palabras que buscaba.

"El está ahí, disfrazado de Pan. Pero Él me ve y yo también lo veo."

Cuanto infinito amor te tiene Cristo, que te dió este regalo, tus hijas

Gracias
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MCC 517
Catequista.....yo?????

[Jaimevelbon]

Gracias Beatriz...
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MCC 517
Catequista.....yo?????

[María Esther]

Gracias por tus palabras, querido Jaime:

Verdaderamente mis hijas son un regalo de Dios.

Victoria me preocupaba. Se portaba horrible en misa, molestaba e imitaba a las señoras piadosas. Más de una vez me hizo poner colorada de la vergüenza.

Un día, desesperada por su comportamiento (esto fue hace un año) le dije: "mira, chiquita: ahí está Jesús, en la Hostia que eleva el Padre". La enanita miró despectivamente y me respondió: "o. ahí no está porque no me habla".

Me acompañó a Comulgar y le rogué a Dios que Él mismo la instruyera... yo ya no podía hacer nada.

Al día siguiente la niña se portó mejor, estuvo alegre, como siempre, pero no importunó a nadie, ni bailó con los cantos litúrgicos, ni hizo ruiditos en los momentos de silencio. Y cuando llegó la hora de la Consagración Eucarçistica se quedó quietecita mirando al Padre y le mandó un beso a la Hostia mientras decía "Jesús, te amo". Cuando salimos de la Iglesia la felicité y traté de indagar a qué se debía su camio. La verdad tenía una curiosidad enorme: ¿Qué habría "visto"?

Ella, simplemente me dijo: "es que ahí estaba Jesús pero sin ojos, ni pelo, ni barba..."

Sigue siendo inquieta, a diferencia de María Antonia que es muy contemplativa. Pero da muestras clarísimas de reconocer a Jesús en la Eucaristía.

Yo las encomiendo frecuentemente a sus Ángeles de la Gusrda, a Nuestra Santísima Madre y a todos los santos eucarísticos, especialmente a san Tarsicio.

[Jaimevelbon]

María Esther:

Pues te diré que mi hija es todo lo contrario.........es tremenda!!!

Es excelente manejando la computadora, jugando futbol, se pelea con sus amigas, tortura al perro, no se come sus verduras, se acuesta tarde, se levanta tarde, es contestona, renegada, traviesa, etc. etc. etc...

Pero es ella quien me pone agua bendita en la frente cada vez que vamos a misa.
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MCC 517
Catequista.....yo?????

[vonkleist]

[Jaimevelbon]

[marina]

hola, creo que si tu niña tortura al perro, algo no estabien!, pero nose que se hace en esos casos..

ami me gustaba ver y abrir alos animales! pero insectos, ranas, sapos etc... l
os perros eran para jugar con ellos y los pollitos. entre otros
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El que llegue primero es un feto. (Los espermatozoides)

[Maria de Lourdes]

Cuando los niños van a hacer su primera comunión, es necesario decirles que van a ver a Jesus con los ojos de su corazón. Con los 'ojos' del cuerpo van a ver la Sagrada Hostia consagrada y si les dan a beber la preciosísima sangre de Jesus tambien, probaran el Vino consagrado. Pero es importante que sepan que con los 'ojos del corazón', que son los ojos de la fe, es como se ve a Jesus.

Cuántos adultos necesitan tambien ver con los ojos del corazón.

[Beatriz]

[Beatriz]

Me pregunto que tal seria abrir un tema con anécdotas de nuestros hijos en misa, o fuera de misa pero relacionados con la religión. Je, yo tengo varias...
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"Quien no ama, no conoce"
San Agustín

[María Esther]

Querida Beatriz:

Me parece estupenda tu propuesta y el honor te corresponde ya que la idea surgió de ti. ¡Adelante!

Dios te bendiga.

[EduaRod]

[RENE GONZALEZ ALTAMIRANO]

que tal .


bueno antes que nada quisiera decirte que los niños tienen fe sobrenatural por su estasdo de vida, cuando tu le expliques pienza como niño a su nivel, platicale con palabras que ellas le entiendad. solamente asi te comprenderan y reciviran este mensaje sobrenatural
humildemete te explico vrevemente como le explicarias a tu hija, la existencia transustancial de Dios en la eucaristia.
LOS SIGNOS SACRAMENTALES.



“La consagración no se ve, se ven los signos”



Por lo tanto debemos estudiar los signos.


¿Que es un signo? + - ¿? ¡!

R= Son una realidad que demuestra otra realidad


Y se clasifican según su significado:



1.- NATURAL: su significado nace con el signo. Ejemplo (humo-fuego)



2.- CONVENCIONAL: su significado es impuesto: signo de peso $.


Jesús escoge elementos de la creación para sus signos por que respeta la creación de su padre.


a).- agua
b).- aceite
c).- imposición de manos.
d).- pan y vino. Etc.



Jesús da el significado a sus signos.

¿Que es un sacramento?


R= Es un signo sensible e indeleble que expresa algo que no se ve. C.I.C 1084













¿Qué es sensible?

R= Que podemos conocer por medio de los sentidos.


1.- vista.
2.- oído.
3.- tacto.
4.- olfato.
5.- gusto.


Yo lo puedo ver, oír, tocar, oler y gustar. Estos son los signos de los sacramentos.


¿Qué es indeleble?

R= Es indeleble por que Dios me configura el alma con un sello de pertenencia.
Ejemplo: como cuando un pastor sella a su vaca en la piel para que no se pierda.
A si Dios nos sella pero en el alma infinitamente. (No se puede borrar).


fraternalmete: tu hermano: Renè.